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Capítulo 21: "Celos"


—Esta es mi PlaytimeStation 2, pero  ya no sirve, se me descompuso hace años.

—Oh, una FAT eh, si que será difícil  componerla.

—Estos son mis videojuegos que creo igual, ya no tienen la mejor salud.

—Vaya, La colina de los susurros 2, El mal reside en mí 4, y El fragmento Zero 1, 2 y 3. Terror del bueno.

—Me faltan más que no pude conseguir, además que no pude vencer El mal reside en mí 4

Silver había decidido confiar en Sonic, mostrándole su verdadera forma de ser y sus gustos. Abrío una caja, llena de cosas y aficiones que la erizo renunció con tal de conseguir un matrimonio y un bebé.

Sonic estaba emocionado, no podía ocultarlo, Silver tenía una muy buena colección que avivó su amor por ese pasatiempo, que ya había olvidado, debido a su vida adulta.

—Yo si vencí el juego, es muy bueno.

—¡¿En serio?!

Silver sonrió emocionada, sus ojos dorados brillaron tan intenso como para dejar a Sonic impresionado.

—S-sí... lo he vencido como unas 142 veces, me lo sé de memoria.

Sonic inchaba el pecho, orgulloso de su habilidad, Silver se tapó la boca tratando de no reír ante tanta confianza.

—¿No me crees?— Sonrió burlón—, voy a demostrártelo, solo dame unos días.

Silver incrédula, se cruzó de brazos.

—Bien, eso lo quiero ver.

—Bueno, ya es noche— Dijo Sonic, mirando su celular, sin darse cuenta ya era de madrugada y debía trabajar en unas horas—. Tienes bastantes cosas que nunca me mostraste.

—Lo siento— Expresó con algo de vergüenza Silver, bajó la mirada encogiéndose de hombros—, las malas experiencias... me hicieron tomar esta decisión.

Sonic sopeso esas palabras, recordando al erizo negro.

—Y... ¿Shadow? Con tu gran amor si tienes esa confianza ¿no? Él sabe tus gustos.

Silver levantó la mirada, sus ojos se entristecieron.

—Él... sabe pero, no comparte mis gustos.

—¿En serio?— Sonic guardó las cosas en la caja, deseando saber más sobre el tema—, ¿Y entonces, cómo fue que se enamoraron? ¿Qué hacían juntos, para conocerse, compartir?

Silver dudo un momento en contestar, pero la pregunta no parecio llevar doble intención, tomó sus demás juegos y los guardó en la caja.

—Pues, teníamos algo en común, nos gustaba ver series de anime, las veíamos a escondidas porque también su padre no le gustaba que viera esas cosas.

—Mmm pues a mí también me gusta ver anime.— Respondió sentándose en el sofá— También las películas de terror.

—A él le gustan las de acción—Respondió sentándose igualmente, en una distancia prudente—, pero es más sobre ciencia ficción, romance y esas cosas.

Sonic no pudo evitar la carcajada.

—¿Romance? ¿Ese cara de "inalcanzable" le gusta el romance?

Silver frunció el ceño, erizando las púas.

—¡Por supuesto! ¡Es muy sensible! Romántico y detallista.

—Ah... ya salió el peine— Dijo Sonic, deslizándose un poco, casi imperceptible hacia Silver— Así que te conquistó con regalos y detalles, que seguramente un simple obrero como yo, no podría ofrecerte.

Silver suspiró, recordando esos días.

—Sí, fue muy detallista, no me pudo llevar a lugares, no donde lo reconocieran, nuestras aventuras fueron en sitios desolados, nada de ensueño, pero, podía entregarme joyas, joyas y ropa, comprarme comida cara y enviarla a mi casa, supongo que viví una vida... muy en las sombras.

Sonic pudo ver las lágrimas que luchaba Silver por contener, dolía, dolía que quién aún es su esposa por ley, lloré frente a él por otro hombre.

—... Y será siempre así— Dijo resignada, mirando a la nada—, Shadow... espera nuestro divorcio, sólo para terminar siendo...

No pudo terminar la frase, sus lágrimas salieron desbordantes, que tuvo que ocultarlas con sus manos a la cara.

—Hey— Dijo Sonic suavemente, acercándose un poco más—, estarán juntos, ¿no es suficiente?

—Su padre le ha dicho que... solo me aceptará como amante.

Sonic lo sabía, no era como si hubiera cenicientas en la vida real.

—Silver... si Shadow no renuncia a su apellido, es lo máximo que puede ofrecerte, pero estarás bien, sé que él te tratará como una espos-

—¡Va a casarse!— Interrumpió Silver enderezándose bruscamente — Como la otra vez, y dijo que lo hacía por sacrificio pero sí se enamoró, ¡amaba a María!

—¿María?

—Sí, ya sabes, murió... y mientras ella estuvo viva me ignoró.

Sonic se enteraba de bastantes cosas, empezar a fingir ser el ex, del que puede confiar Silver, le estaba trayendo ventajas, información que usaría para molestar a ese erizo negro, y sobre todo, acercarse a Silver.

—Sí es así... ¿Por qué vuelves a creer en él?

Los minutos después de esa pregunta marcaron las 4am, Silver no podía responder, su amor ciego y la pregunta razonable de Sonic, se enfrentaron en su cabeza siendo imposible la victoria de alguno.

—Bueno— Se levantó Sonic, estirándo sus brazos y soltando un largo y sonoro bostezo— En serio ya es tarde Silver, es mejor dormir.

Silver se secó las lagrimas con sus propias manos, levantándose enseguida de Sonic.

—...Sí.

Ambos erizos fueron a dormir a sus respectivas habitaciones, Silver entró en silencio, guardando sus emociones en su pecho acongojado, su hija dormía en su cuna plácidamente. Con extrema delicadeza, Silver se recostó en su cama, cerrando los ojos.

Sonic por su parte, entraba a la cama pensativo, aunque ahora sentía no tener sentimientos por Silver, verla llorar le causaba una serie de emociones contradictorias, por un lado, verla sonreír, tener algo en común después de tener una vida marital tan vacía, le llenó de felicidad. Verla llorar por ese erizo, le hacía sentir alegría, alegría de ver que ese amor que destruyó su matrimonio es tan frágil como un papel, ve en Silver el amor a ese erizo, pero también ve la duda y el resentimiento. Un papel lleno de palabras de amor en tinta, será difícil de borrar, pero si las lágrimas lo alcanzan, si la traición y el odio lo arrugan, tarde o temprano ese papel, puede romperse. Pero también, duele verla llorar, sufrir por el contexto de su amor, sufrir por un hombre así, uno que nunca podrá darle su lugar, por que hay más  cosas delante, que parecen ser más  importantes para Shadow.

◇♡◇♡◇♡◇♡◇♡◇♡

—¿Qué vas a comprar qué?

—Lo que oíste, una consola de videojuegos, una PlaytimeStation 4, claro, de segunda.

Knuckles, como era costumbre, comía en el trabajo con Sonic, lo que escuchaba solo le hacía comenzar a sospechar que, Sonic no soltaría tan fácil a su esposa.

—Desde ese domingo, en la plaza comercial, tú has cambiado. Y no intentes negarlo, ¡que Rouge también lo piensa!.

Sonic sonrió, despreocupado.

—Jaja, sólo estoy tratando de llevar la convivencia con mi compañera de hogar lo mejor posible, ¿Quién les entiende? Primero me regañan por aplicarle "la ley del hielo" y ahora, que quiero convivir con ella en un buen ambiente para Sunny, igual me critican.

—Lo que estoy pensando es que, realmente te agrada tu esposa.

—Me agrada, últimamente es una persona muy interesante, ¿sabías que ella venció los 3 Fragmento zero? Yo a eso si les tengo miedo.

Knuckles observó a su primo, la mirada de éste había cambiado, se veía más alegre, y eso, le daba cierto miedo.

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Las semanas nuevamente caminaban, Sonic había logrado comprar esa consola de videojuegos y las noches, al llegar a casa, comenzaron a ser noches de juego con Silver.

—¡Eres un hambreado!— Acusó Silver a Sonic, levantándose de su asiento— ¡Somos equipo y aún  así hiciste de todo para ganar el primer lugar que ya era mío!

Sonic cruzó las piernas y se recargó en el respaldo del sofá, burlón disfrutaba de la cara de furia de Silver.

—Soy el más rápido simplemente,  que me es imposible no pasarte incluso a ti, no te lo tomes personal.

—¡Hmm!— Silver volvió al sofá, de sentón con una mueca de mala gana—.Caes gordo así.

—Vamos Silver— se acercó, guardando cierta distancia—, ¿Ya no vamos a jugar? Sunny se está portando bien y-

El sonido del celular de Silver interrumpió abruptamente, la erizo dejaba a un lado el mando de la consola y contestaba a la llamada, era Shadow.

—Oh, ¡Shadow! ¿Ya llegaste? Mmm sí, sí ya voy.

Sonic cerró la sesión, entrando a otro juego, mientras veía como Silver se ponía nerviosa y tropezaba con todo buscando su suéter.

—Oye, lo dejaste en la cuna con Sunny, se durmió cobijada con él.

—Ah... cierto, ni modo, no la vaya a despertar, me voy así.

—No— Dijo Sonic, levantándose y quitándose su chamarra— Hace frío esta noche, llévate esto.

Silver se quedó pensando, llevaba prisa pero, usar esa prenda...

—Sé que siempre te gustó, igual te la regalo, solo no le digas a tu novio que era mía.

Silver no le vio el problema, así  que la tomó y agradeció con una reverencia.

—¡Gracias Sonic! ¡Eres el mejor!

Sonic sonrió sonrojándose un poco.

—Solo ve, que ya oí al Hollín dándole al claxon con todo, va despertar a nuestra niña.

Silver estaba por salir,  abrió la puerta unos centímetros, pero todo su cuerpo se detuvo, al notar una palabra que no era verdad.

—Y... —Miró hasta Sonic que le prestaba atención—... Shadow no es mi novio, y-ya ya sabes...— Se intentó explicar, pero los nervios le traicionaban— que-quedamos que...

—Sí, sí, lo sé— Dijo Sonic, sonriendo— Que mientras seas mi esposa legalmente, no van a tener una relación carnal, pero hey, no lo hagas por mí,  después de todo, sé que se desean, y... además  ya me fuiste infiel jajá.

Silver cerró la puerta de portazo, portazo que claramente vio Shadow, que esperaba afuera, los gritos de su Luna se escuchaban fuerte y claro a pesar de todo.

—¡¡¡Ahh!!!— Gritó como una niña, sonrojada y evidenciada— ¡Sonic!

Sonic se rio a carcajada, ver esa reacción le daba 1000 años de vida.

—No es reclamo, ya lo superé, pero la verdad no peca, solo incómoda jaja.

Silver cambió su semblante, claro que aún se sentía "sucia" por haber sucumbido a sus emociones.

—Bien— Sonic se aclaró la garganta, adoptando seriedad—, olvídalo, está perdonado, por eso me burlo, pero en serio, yo no te detengo a que disfrutes tus citas con Shadow, no me debes respeto, ya no somos nada, y eso ambos lo sabemos, no te detengas por un papelito.

Lo decía de verdad.

Silver se puso la chamarra lentamente, aún no sabía como responder a esas palabras, era verdad, se detenía por él,  por la culpa y la sensación de deberle tanto a Sonic.

—Gracias... pero prefiero de verdad Sonic, esperar a que podamos divorciarnos.

—Mmm tienes razón,  no vaya ser que cambie de opinión y a la primera que tenga pruebas de adulterio... te demante y te destroce— Dijo, entrecerrando los ojos dramáticamente.

—¡¡Sonic!! ¡Grr! ¡olvídalo! Te encanta burlarte ¡caes gordo!

Silver tomó el pomo de la puerta y se fue dando un portazo, para luego gritar asustada y pedir perdón por el ruido. Sonic solo sonrió regresando a la pantalla de juego, era divertido hacer enojar a esa erizo, era divertido verla gritar y explotar en un dramático ademán infantil, sus mejillas blancas se sonrosaban de inmediato así como su pelaje se erizaba. Esos ojos dorados, ese delineado en ellos, eran cine verlos furiosos de impotencia ante sus burlas, verlos expresando algo, que aún recordaba en su mente, como esos ojos dorados parecían dos soles muertos, sin vida y brillo, ahora, que por fin están con Shadow... son radiantes y felices.

—Mmm...

Sonic pasó por la lista de juegos, sus ganas de jugar se habían mermado, el sueño le alcanzaba.

—Mejor me voy a dormir.

Shadow esperaba fuera del auto, un auto discreto, por no decir que ajeno, era de Nine, el cual le había prestado para sus citas discretas con Silver. Justamente ella salía corriendo de su casa, chapeada y acelerada, se veía hermosa, radiante, pero algo, a Shadow le hizo torcer la nariz.

Silver le saludo sonriente, mostrándole esa dulce mirada que siempre le ha gustado, pero ese olor, ese maldito olor...

—¿Qué traes puesto?

—¿Eh?

Silver no lo entendía, pero Shadow no dejaba de mirar esa chamarra blanco, con azul y rojo.

—No te había visto esa chamarra ¿es nueva?

Silver de inmediato, se evidenció, nerviosa tartamudeó, mirando hacia otro lado.

—Eh... bueno, algo, d-di-digo ¡sí!—mintió, recordando la recomendación de Sonic.— A qué está super bonita ¿verdad?

Shadow la conocía, ya la había  visto, se la había visto a ese erizo y además  el olor...

—¿Te gusta mucho?— Preguntó conteniendo los celos—. Se te ve bien.

—Sí, ¡gracias!

Ambos subieron al auto, y Shadow, esperando que Silver se acomodara, rápidamente le abrazó con fuerza.

—Te extrañé, Silver...

Silver correspondió al abrazo, cerrando los ojos.

—Yo también, Shadow...

Ese olor no le permitía concentrarse, Shadow rompió el abrazo, tomando el cierre de esa chamarra deslizándolo con firmeza.

—¡Eh! ¿QUÉ HACES?

—Aquí dentro no hace frío,  además... quiero verte Silver, mi luna.

Silver se resistió, se alejó de Shadow por instinto, pero esas manos celosas arrebataron de sus hombros aquella prenda que de verdad le gustaba mucho.

La figura de Silver, cubierta por un delgado suéter de botones y una blusa de tirantes, se vio expuesta ante su depredador, ansiaba ese olor, el olor de su Luna, Shadow quería borrar de ella ese olor, ese maldito olor.

Lo haces a propósito Sonic, lo sé

Pensó el erizo negro, mientras clavaba su nariz en el cuello de su amada.

Cada vez que salgo con ella, buscas la manera de recordarme que eres aún su dueño

Silver imploraba con palabras suaves que se detuviera, que ese no era el trato, pero Shadow no atendía a nada, solo a sus celos.

Me odias ¿verdad? Pero no importa que hagas, ella es mía

—¡¡¡SHADOW!!!

Aquel empujón y grito furioso lo hizo volver en sí.
Silver tenía la ropa abajo del hombro, casi mostrando su pecho, gruñía furiosa, agraviada por el proceder de su amado, claro que lo deseaba, deseaba aparearse con él,  pero no de esa forma, no mientras Sonic fuese su esposo legalmente.

—Ya te dije Shadow— Dijo con una firme voz— Que mientras siga casada con él, no pienso volver a faltarle al respeto, él  ha sido muy bueno conmigo, un buen padre y compañero de hogar que, no me siento cómoda siendo más descarada de lo que ya me siento saliendo contigo; por favor amor, sólo deja que el año se termine, y así podré ser libre.

Shadow no dijo nada, furioso, arrancó el auto y retomó su cita.

Continuará...

Gracias por leer.

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