Nine tuvo que usar no solo sus brazos, incluso sus colas para detener a Shadow; el iracundo erizo negro estaba a punto de tirarse encima del erizo azul, las palabras de este último, habían roto cualquier comportamiento decente en Shadow.

—¡¡Eres un maldito!!—Le reprocho—¡¿Cómo te atreves a pedir semejante locura?!

Sonic impávido, terminó de tomarse su café, para luego mirar su celular y verificar la hora.

—Lo considero justo, señor The Dark—Sonrió, mientras se levantaba de su asiento—. Usted se queda con mi ex, y yo con mi hija, ustedes viven su gran amor eterno feliz de novela, mientras yo soy feliz sin Silver, y con lo único bueno que me dejó haberle conocido.

Nine ya se estaba rindiendo ante la fuerza de su jefe. Los presentes ya no pudieron ignorar la escena, los erizos, tenían toda la atención de la cafetería.

—¡Suéltame!

—¡No Shadow! Recuerda que debes estar bajo perfil o tu padre...

—Ah~—Exclamó burlón Sonic, acercándose a su enemigo— con que papi ya te tiene en la raya eh—sonrió en una mueca larga y exagerada— Ahora entiendo porque no rondabas por aquí, yo diría que... tu mejor opción es no llamar más la atención, o esto lo podría saber tu papi.

Sonic señaló con la mirada a la gente que han atraído con su escena, siendo por fin que, Shadow recuperó los estribos.

—Voy de vuelta con mi esposa, por ser su único familiar tengo el derecho de estar con ella, pero, ve tú.

Shadow notó ese cambio en el tono de voz de Sonic, no parecía estarse burlando.

—Anda, ve— insistió —, apuesto a que Silver se muere de ganas por verte, pasó por mucho.

□■□■□■■■□□□■□■□■□■■■□□□

Silver despertaba lentamente, aún sintiéndose sedada como efecto de los medicamentos que ha recibido. Estaba sola, con su bebé aún dormida en la cuna hospitalaria que le brindaron para su comodidad. La bebé ha crecido bastante, y esas púas azules, cada vez son más parecidas a las de su padre, excepto de la frente por las orejas, las púas parecen a las de su madre.

Aunque está con más pacientes recuperándose, las cortinas que la separan de sus vecinos, están completamente cerradas; ese debió ser Sonic, no estaba, se imaginaba que había ido a comer algo, a relajarse, después de todo Rouge y Blaze, han sido muy rudas con él y el tema de cambiar un pañal.

Sonic pareció volverle a hablar normal, o al menos, frente a los demás se está obligando a hacerlo. Duele, para Silver todo este tiempo ha dolido esa actitud, pero tampoco puede hacerse la mártir, todo es su culpa, sabe perfectamente que ella fue quién destruyó la sonrisa amable y amorosa, con la que alguna vez Sonic le miró.

Cansada, inhalo lentamente, cerró los ojos y soltó el aire contenido en su pecho. ¡cómo duele el arrepentimiento!: con esa calma que no es calma, sino una tortura disfrazada de paz, con ese silencio que no es silencio, sino el sonido de su pecado, gritándole al oído sus faltas. La culpa no se detiene, que como un bulto de piedra sobre su pecho, la ahoga conforme ve los días terminar y, su suplicio interno no hace nada más que empezar.

Aún con los ojos cerrados, escuchó el recorrer de las cortinas, nerviosa, abrió los ojos mientras al mismo tiempo pronunciaba el nombre de su esposo:

—¡Soni-!—El aliento se le iba, ante su presencia estaba Shadow, su nerviosismo, no hizo más que aumentar— ¿Qu-qué haces aquí?— tartamuda, buscó con la mirada a su esposo— ¿Có-cómo?...

—Tu esposo me dejó estar aquí.— Contestó seriamente, en el fondo le dolía ser ayudado por ese erizo.

Silver no le creyó.

—Ahora no es un buen momento, ya hablaremos cuando salga. Sonic podría molestarse si te ve aquí, no quiero enojarlo más... esa noche ustedes...

—Sí, nos peleamos por ti—afirmó acercándose más, no sin antes cerrar las cortinas tras él— De ahí, mi padre se enteró de todo lo que he estado haciendo para estar cerca de ti, me llevó con él para presentarme en el mundo de los negocios empresariales y je— sonrió molesto mirando a la nada—, ponerme como posible producto de adquisición para los hombres que tuvieran hijas casaderas, es decir, quiere volverme a casar.

Silver no quiso escuchar, se aferraba a su cama con la cabeza gacha, no quería agrandar más este problema, en ese momento, la culpa era más fuerte que su amor por Shadow.

—Ya te lo dije, ese erizo me dejó entrar.

Silver siguió sin creerle.

—Bien, no me creas entonces, pero quiero que sepas que me alegra verte. Temí por tu vida, pues no ha habido ni un día que no estés en mis pensamientos, y... de verdad, necesito hablar contigo. Cuando te recuperes, vendré a buscarte.

Silver no se movió de su sitio y postura, solo quería que su amado se marchase.

—Lamento... no haber podido estar... cuando me necesitabas.

Shadow no recibió respuesta, lo entendía, cada que intentaba hacer las cosas bien, todo salía mal, cada que trataba de proteger a su Luna, terminaba lastimándola más que a cualquiera. Mientras lleve en su cuello la cadena de su apellido, no podrá hacer feliz a Silver. Se retiró en silencio, cerrando la cortina.

Silver levantó la vista justo en el momento que las púas negras de su amor desaparecieron tras la tela color sepia.
Silver giro su vista hacia su bebé, la pequeña respiraba un sueño tranquilo, recuperando su salud. Su madre se debatía entre el corazón y la razón, entre la culpa y el deseo:
Su corazón latía por Shadow, se sentía morir sin él. Si la vida le borrase de su día a día, en cada mañana, tarde o noche, le recordaría como una pequeña chispa, imperceptible para todos, excepto para ella. Era su deseo, nunca dejar de soñar con el día en que ambos fuesen felices juntos, lo ha soñado despierta varias veces, como un cuento de hadas, en cambio; al dormir, un cuento distinto se presenta: una relación tormentosa, donde ninguno es feliz a lado del otro. El odio que ha sentido desde hace tiempo por él parece ser lo único que sus sueños vívidos interpretan: un amor venenoso, mortal, que solo está para desgastar su vida, dejando la sensación al despertar, de que ha perdido un día más soñando con falsas ilusiones, que ya no tienen ningún sitio al cual llevar, más  que a la destrucción.

Pero por otro lado, está la razón, su  mente piensa en los meses que ha vivido con Sonic, días donde se sintió protegida, amada y valorada, era verdad que eso cambió con el tiempo, y gran parte fue su culpa. En Sonic ve a un hombre que le hubiera encantado haberse enamorado de él, haberlo conocido antes, mucho antes, cuando Shadow no significaba nada y seguramente ahora, en esa cama de hospital, tal vez estuviera teniendo la visita de su esposo y unos 3 o 5 niños, siendo la familia que siempre quiso.
La culpa le hace sentir que le debe a Sonic una vida dedicada a él, redimir sus errores y hacerlo feliz, la culpa enciende en ella, una chispa parecida al amor, al deseo de ver a Sonic y que en sus labios haya una sonrisa, una que calme a su corazón,  que pesa lleno de culpa y castigo moral. Sabe que no le ama, pero también sabe, que el erizo es más importante de lo que alguna vez pensó.

En sus sueños, cada noche, sueña con el perdón de Sonic, anhela esa sonrisa y esos chistes tontos con los que cada día le buscaba hacer reír. Shadow va borrando su presencia en sus sueños, y en su lugar, suele soñar con Sonic, momentos felices, momentos de su tiempo junto a él,  instantes que siempre vio indiferente y en sueños añora.

◇♡◇♡◇♡◇♡◇♡◇♡

La luna en el cielo iluminaba con fuerza, Sonic estaba afuera, recargado en el barandal de la entrada al hospital, masticaba un palillo dental divagando en sus pensamientos.

¿Celos? No, no sentía eso, pero si una profunda tristeza. Hubiera deseado que su matrimonio funcionase, que tuviese una familia bonita y mucho mejor que la que él  tuvo, pero, eso ha vuelto a fallar.

Era de esperarse, lo sabía desde el fondo, era imposible que las palabras de ese erizo fueran reales:

"Me gustas"

Recuerda bien, cuando esos ojos dorados le miraron fijamente a los suyos y desarmaron su corazón. Volver a pensar en esos días le trae una sonrisa nostálgica; Silver mintió y él también, sabe que esos latidos de su corazón, sólo fueron por la belleza de ese erizo.

Recuerda bien, cómo deseaba llevarle a la cama, como deseaba tenerle y sentirse realizado.

Pero aún así... duele, duele tanto.

—Mentiste, ¿cierto? Sonic The Hedgehog.

El erizo volvía en sí, al escuchar la voz del zorro rubio.

—Mentiste— insistió —, referente a querer la custodia total de la niña. No te veo haciendo ese daño tan grande a una madre y su hija.

Sonic no respondió pronto, observó  detenidamente a su inesperado acompañante, ahora parecía tratarlo con más familiaridad.

—Je— sonrió, retirándose el palillo dental de la boca— ¿Crees conocerme zorro? Mejor dime, ¿Tú jefecito qué planea una vez me divorcie de Silver? Dudo mucho que papi le consienta el capricho.

—Silv no es un capricho— respondió Nine, ofreciéndole una mentita al erizo— Shadow le ama... aunque a veces el amor... no es suficiente.

Sonic aceptó la mentita y llevándosela a la boca la hizo trizas con los dientes, el sonido molestó a Nine, quién le dedicó una mirada disgustada.

—Lo siento, me gusta tronar el dulce— se encogió de hombros dedicándole una sonrisa despreocupada al zorro—. Y ¿Qué quieres decir con eso?

El zorro suspiró, mirando hacia la puerta del hospital, Shadow volvía.

—Ahh... hablaremos luego, ya regresó mi jefe.

Sonic giro hacia él, sorprendido.

—Hey, no les puse cronómetro, ¿por qué tan temprano?

Shadow no respondió, tomaba del brazo a su asistente y casi lo arrastró hasta el auto.

—Huy, qué  genio...

Sonic observó la escena de abuso de autoridad: Shadow obligaba al zorro a entrar al auto conteniendo apenas su furia, el zorro obedecía pero con las colas esponjadas sin dejar de protestar a los cuatro vientos:

—¡¡¿Y yo qué culpa tengo que te mandaran a la mierda?!!

Le  gritó a la cara al erizo, para luego cerrar la puerta del auto él mismo, acción que hizo reír a Sonic.

—Así que... Silver te rechazó eh...

A Sonic una pequeña travesura se le ideaba en la mente.

Continuará...

Bueno, este capítulo abordó los pensamientos de los protagonistas, sus sentimientos y deseos, así como  sus propios juicios a sí mismos.

Espero que hayan disfrutado del capítulo y feliz san valentin atrasado, soy un desastre este año.