La verdad es que pocas veces me he tomado el tiempo de prestarle atención a la belleza de Olimpia, supongo que por eso verla así...maquillada, vestida para una fiesta y con esa sonrisa que no pone muy seguido me ha resultado algo impactante, sin duda es una chica realmente impresionante...poseedora de una mente magnífica y de muchas virtudes que recién estoy empezando a conocer.

¿Estás bien? -pregunto divertida-

Eh...si -respondí nerviosa- ¿Por qué lo preguntas?

Parecias perdida en tu mente -sonrió un poco-

Si, lo siento -rei ligeramente-

Unos minutos después Mat detuvo el auto afuera de la casa donde sería la fiesta, los cuatro bajamos de el auto, Laia y Mat se adelantaron a entrar a la fiesta, yo tomé la mano de Olimpia para así entrar a el lugar; entramos y la música de inmediato empezó a resonar por encima de todo lo demás, los chicos empezaron a saludarme de inmediato mirando a Olimpia con sorpresa por verla, en algunos casos la miraban como si fuera un bicho raro, pero yo trate de hacerla sentir mejor; de pronto me quedé saludando a unas chicas de el equipo de porristas y Olimpia desapareció de mi campo de visión, empecé a buscarla pero no aparecía por ningún lado...

¿No has visto a Oli? -le pregunte a Laia tratando de que me escuchara por encima de la música-

No, dile a Mat -dijo sonriente-

Suspire y empecé a buscar a Mat, lo encontré hablando con un chico que toma algunas clases con el; me acerqué a él y le pregunté por Olimpia.

Creo que la ví salir -afirmo y luego regreso a su plática-

Me dirigí a la salida de la casa viendo de inmediato a Olimpia pues es la única que está aquí afuera y no adentro disfrutando de la fiesta, me acerque a ella lentamente y de inmediato su mirada cayó en mi.

Te desapareciste -suspire-

Lo siento...es que había mucho ruido -sonrio, pero era evidente que esa no era una sonrisa auténtica-

Supongo que ella se sintió fuera de lugar, es obvio que ese no es su ambiente y se siente extraña de estar en una situación que no conocía...no se como no pensé en eso antes de traerla aquí.

No pensé en que te sentirías fuera de lugar aquí...-admití avergonzada- lo siento...

No te preocupes -sonrio- no es tu culpa...la verdad es que yo nunca quise venir a una fiesta y es lógico que no conozca a nadie o que no esté acostumbrada a la música que me rompe los tímpanos -afirmo despreocupada-

¿Quieres que nos vayamos? -pregunte sonriente-

¿Irnos? -asenti- ¿Y tus amigos?

No creo que les importe si me voy -me encogí de hombros-

Y...¿A ti no te importa irte conmigo en vez de quedarte en la fiesta? -pregunto curiosa-

No, he ido a muchas fiestas y está no está tan buena así que es mejor que me vaya contigo -afirme divertida-

De acuerdo -empezo a caminar mientras yo iba detrás de ella- ¿A dónde iremos? -se detuvo abruptamente-

Eh...podemos ir a mi casa, mi hermana está de fiesta y mis padres no están -me miró seria-

Está bien -siguio caminando-

Tardamos poco tiempo en ver un taxi, lo detuvimos, subimos en el y empezamos nuestro camino a mi casa; es curioso que la vaya a llevar a mi casa...normalmente eso es lo que hacen las parejas, pero nosotras no somos una pareja como tal y me resulta un poco extraño, aunque supongo que está visita es solo en plan de amigas. Me atreví a voltear a verla, la verdad aún me sorprende lo hermosa que se ve el día de hoy...sus labios brillantes por el gloss, sus espesas pestañas, su cabello liso, sus preciosas orbes azules y su piel clara...es como si todo estuviera hecho con la simple intención de crear una armonía perfecta y si, se que estoy sonando como toda la enamorada que no soy, pero llega a ser difícil o más bien imposible ignorar la belleza de esta chica...

De nuevo estar perdida en tus pensamos -dijo moviendo su mano frente a mi rostro-

Si, lo siento -dije nerviosa-

¿En qué tanto piensas? Claro...si puedo saber -rio ligeramente-

¡Mierda! ¿Que le digo? ¿«Estaba pensando en lo bonita que eres»? Definitivamente no...eso podría malinterpretarse.

Estaba pensando en lo poco que se de ti...-me miró curiosa- nos conocemos desde hace mucho tiempo y la verdad no sé muchas cosas de ti

¿Y que quieres saber? -enarco una ceja-

No sé...-lo pensé un poco- ¿Por qué me pediste a mi que te ayudará con esto? ¿No te gusta nadie en el colegio para pedirle que fuera tu novia? -juro que apesar de la poca luz pude notar como su color se esfumó- ¿Que pasa? Te pusiste pálida...

Es que...si me gusta alguien -rio nerviosa- pero ella no me corresponde y pues se supone que no debía decirle a nadie quien es así que...no puedo decirte

Oh, está bien -sonrei- ¿Tu quieres saber algo de mi?

Si, ¿Por qué sigues enamorada de Emma si sabes que eso no sucederá? -pregunto confundida-

Bueno, no puedo mandar a mi corazón...y desde que ví a Emma el decidió que quería tenerla para el -suspire- la verdad no es algo que yo quiera...es simplemente lo que es y ya, ¿Comprendes? -asintió-

La amas...-sonrio- sabes que no será para ti, que tal vez nunca logres que te vea como tú quieres, sabes que ama a alguien más y que a ti solo te ve como una chica más en el mundo o como su amiga, pero ella es tan malditamente perfecta que te resulta difícil dejar de mirarla por más de un segundo, te hipnotiza su sonrisa y deseas ser quien la ponga en sus labios todos los días, cuando te habla sientes...que nada más importa, no puedes dejar de ver sus bellísimos ojos y pensar en cómo sería si te mirará con el mismo amor con el que tú la miras, piensas en cómo sería si ella pensara tanto en ti como tú piensas en ella, incluso de forma inconsiente esperas que cada mensaje que llega a tu móvil sea suyo -sonrio triste- y...cada vez que reparas en sus labios piensas...¿Cómo sería si ella me besara? Y te duele pensar que jamás pasará, pero aún así lo imaginas y...sientes que es real aunque no lo sea