Caminábamos por el centro de la ciudad, veía a Crypto mirando las cosas con curiosidad. Espero que no le esté afectando la gente que hay, pues está muy lleno.

-- ¡Oh Loba! ¡Mira eso! --gritó Valk.

Tomó la mano de la nombrada, y se alejaron un poco de nosotros para acercarse a un puesto.

-- Eh... Supongo que debemos esperarlas ¿verdad? --pregunté, mirando a Fuse.

-- Por mí bien, será mejor para el niño bonito.

-- ¿No encuentras grosero decirle bonito a alguien con su novio al lado? --pregunté, denotando molestia, aunque fue más de broma.

-- No, para nada. Sólo soy sincero --sonrió, burlándose.

-- Con que sólo llegues a eso supongo que está bie-

-- ¡No la toques! --Escuchamos a Valk.

Miramos hacia ellas, Valk estaba adelante de Loba, encarando a dos hombres.

-- Creo que están en problemas --dije.

Empezamos a acercarnos hacia la escena.

-- Te dije que fue sin querer --decía uno de los hombres, con desinterés.

-- Voy a darte la golpiza de tu vida y también será sin querer ¿te parece? --amenazó Valkyrie.

-- Son nenas agresivas ¿no? --habló el otro.

En ese momento Fuse se puso entremedio, apartando a Valk hacia atrás, y él estando frente a los hombres.

-- ¿Tienen algún problema con las chicas, payasos? --preguntó, con el ceño fruncido.

-- ¿Ah? ¿Y tú quién eres?

Ahora venía mi entrada, y debía actuar cool frente a Crypto y los demás. Me acerqué y me puse al lado de Fuse, Crypto se quedó un poco alejado de mí, supongo que por miedo a los tipos.

-- Estamos con las chicas, por eso les preguntamos ¿tienen algún problema con ellas? --pregunté, denotando enojo.

Los tipos al vernos a ambos fruncieron su ceño, ya lo teníamos hecho, se iban a ir.

-- No debemos perder el tiempo con ustedes --dijo uno.

Luego empezaron a caminar, alejándose de nosotros, pero al tener a Crypto enfrente, lo empujaron con agresión, para seguir caminando normalmente. Eso me enfureció.

-- ¡Oigan! --grité, acercándome con amenaza.

Ellos se voltearon a verme, impacientes.

-- ¿Y ahora qué demonios quieres? Ya dijimos que no queremos nada con las chicas.

-- Tienes que pedirle perdón, lo empujaste sin razón --dije, apuntando a Crypto.

Crypto se sorprendió notoriamente.

-- N-no es necesa- --empezó a hablar, pero fue interrumpido.

-- ¿Y si no quiero? --sonrió, desafiándome.

Pasaron unos pocos segundos, y no pude evitar darle el primer golpe. El otro tipo iba unirse, pero el afectado lo detuvo.

-- Este es mío --dijo.

Y así es como terminé en una pelea. Fuse también quiso intervenir, pero lo detuve. Yo iba a vencer a este hijo de puta por mí mismo. No me importó ni las miradas curiosas en nosotros. En un golpe lo guié hacia atrás, pero se recompuso al instante. Se acercó decidido a devolvermela, pero un cuerpo se interpuso entre nosotros. La mano de Crypto detuvo a el otro, y con su otra mano me detuvo a mí.

-- ¡Dejen su absurda pelea! ¡Ustedes son adultos ¿no?!

Miré con sorpresa a Crypto, me miraba con enojo. Yo me opté por detener, pacifiqué mi postura. Pero al mirar al tipo, supe que él no se iba a detener. Miró algo en Crypto, y tan rápido como un relámpago, tomó algo de dentro de su chamarra. Crypto en una fracción de segundo, volteó su cabeza con preocupación. Ahí vi que el tipo apuntó con un arma blanca, y acercó el objeto a mí. No podía hacer nada para evitarlo, mi posición defensora se debilitó cuando sentí el toque y enojo de Crypto, ahora no podía hacer nada.

En ese instante vi la espalda de mi enamorado. Todo se quedó en silencio. El compañero de mi enemigo, se acercó lentamente a él, algo shockeado.

-- T-te pasaste mucho, hay que irnos --dijo, preocupado, tomando del brazo al otro.

Se levantó, y noté que el arma en su mano estaba llena de sangre. No entendí qué estaba pasando, y no podía mover ningún músculo. Ellos empezaron a correr, dejando caer el arma de Crypto.

-- ¡Hey! ¡No escaparán! --gritó Fuse.

Ahí lo vi corriendo hacia ellos, con sumo enojo. Otros pasos se acercaron rápidamente.

-- ¡Loba, ve a la nave a buscarme los propulsores! ¡Rápido! --gritó Valkyrie.

Escuché el ruido del brazalete de Loba. Ahí vi a la peliblanca acercarse a Crypto. Cuando lo acostó en el suelo con cuidado, lo miré, aturdido, y supe lo que estaba pasando. Por el sector de de costillas, brotaba gran cantidad de sangre, sin parar. Miré su rostro, estaba llorando, y mirándome con terror, su mente estaba pensando lo peor.

-- Okey, okey. Ha-haré algo al respecto. S-sólo déjame --Valk acercó sus manos a la herida--. Ehhh...

Detuvo sus manos, no sabía mucho qué hacer, o estaba nerviosa. Yo tampoco tenía mucho que hacer, el cuerpo no me responde. Valk optó por voltear la cabeza de Crypto hacia un lado, al notar que sangre empezaba a salir de su boca. Luego siguió mirando la herida, pensando, algo desesperada, lo noté por su respiración acelerada.

Yo no podía reaccionar. Miré a mi alrededor, la gente mirando la escena sorprendidas, con preocupación, otra gente grabando. ¿Para qué necesitan grabar?

-- Mirage...

Escuché su voz. Eso fue suficiente para hacerme reaccionar. Lo miré y me acerqué, poniéndome de rodillas a su costado, al igual que Valk estaba del otro lado.

-- Estoy contigo, Crypto, estoy aquí --dije, pero me salió de una forma patéticamente preocupada.

No podía desviar mis ojos de los suyos, que me miraban asustados, desesperados, me pedía ayuda. ¿Pero qué mierda podía hacer por él si no sé nada de cosas médicas?

-- Esto me duele... --dijo, apenas podía mantener sus ojos abiertos.

-- Se está desangrando mucho. Mierda, Loba llega por favor --suplicó Valkyrie.

Se sacó la delgada chaqueta que tenía, y la dobló hasta un tamaño mediano, para así ponerla encima de la herida y apretar con fuerza, con intención de parar un poco el sangrado. Crypto lanzó gritos ante eso, cerrando con fuerza sus ojos, le dolía mucho, y yo no podía hacer nada por él. Su mano buscó la mía, por lo que la tomé con ambas manos. Me apretaba con fuerza, por la agonía que sentía. El chaleco estuvo empapado de sangre en poco tiempo. Unos cortos segundos después, vimos la pulsera de Loba llegar a nosotros. Apareció la nombrada, cargando con los propulsores de Valkyrie.

La peliblanca dejó el trabajo que hacía, se levantó, y se acomodó sus propulsores lo más rápido que pudo. Luego se acercó a Crypto, y con algo de brusquedad, por la prisa, lo levantó entre sus brazos, por su espalda y piernas. Esta vez Crypto sólo lanzó un pequeño quejido, pues ya no tenía fuerzas, estaba apunto de caer desmayado. Las manos de Valk se posicionaron en sus interruptores, así que cargaba a Crypto con los puros brazos.

-- Lo llevaré al hospital, apenas lo ingresen les mandaré la dirección.

No esperó respuesta, activó su maquinaria, para volar con rapidez, alejándose. En un impulso, intenté seguirla corriendo, pero Loba me alcanzó y me detuvo. La miré, con suma preocupación.

-- No sabemos dónde está el hospital --explicó--. Confía en Valk, ella lo llevará y luego cuando nos envíe la dirección podremos ir.

-- ... ¿Por qué le tuvo que pasar esto? --bajé la mirada, pues no quería que observara mi triste rostro--. ¿Viste lo... feliz que estaba cuando vio el cielo? ¿Por qué tuvo que pasarle una tragedia de nuevo?

Levanté la mirada, y Loba simplemente me estaba escuchando, inspeccionándome con sus ojos.

-- ¿F-fue mi culpa? --pregunté, al punto de las lágrimas--. Si no hubiera empezado esa pelea él no se hubiera entrometido y nada hubiera pasado. ¡Siempre debo arruinarlo! ¡¿Y si se muere?! ¡Sería todo mi maldita culpa! ¡¿Qué hago si pierde la vida, Loba?! ¡¿Dime qué haría?!

Mi respiración aumentó, respiraba con fuerza, mirando a Loba, esperando alguna respuesta.

-- ¿Terminaste de decir idioteces? --preguntó, con tono serio.

-- ... ¿Qué?

-- Son idioteces lo que estás diciendo. Tú no ibas a saber que el estúpido tomaría el arma de Crypto, y que él se pondría entremedio. ¿O había una forma en la que lo supieras?

-- ... No, per-

-- Ya está, con eso respondes que no fue tu culpa. Y en vez de andar deseando la muerte de tu novio, deberías quizás rezarle a algún dios, no sé en qué crees. O simplemente pedirle al cielo, el punto es hacer algo que te mantenga esperanzado.

-- ...

-- Escucha, dudo mucho que llegue a perder la vida, pero si llega a pasar, te sentirás peor al darte cuenta que perdiste tu tiempo pensando en su muerte más que pensando en que podrá vivir. Puedes pensar en la muerte en una situación mucho más crítica, no en esta.

Nos quedamos en un gran silencio cuando ella terminó de hablar. Luego escuchamos a alguien carraspear su garganta. Miramos al sonido, y era Fuse, un poco golpeado, que venía con ambos tipos, tirándolos de sus pies, uno en cada mano. Se acercó por completo a nosotros, y soltó a los hombres.

-- Alguien debe llamar a los policías antes de que despierten, y todos aquí son testigos de que apuñalaron a un niño de veintidós años --dijo, mirando alrededor.

-- Yo los llamaré --dijo una mujer del público.

Así sacó su celular y empezó a hacer lo suyo. Me sorprende que nadie había llamado antes, y que sólo se hayan dedicado a ver y grabar.

-- ¿Qué pasó con Crypto? --preguntó Fuse.

-- Valk lo llevó volando al hospital, estamos esperando a que nos envíe la dirección --respondió Loba.

-- ¿Volando? ¿Aquí no hay autos? --preguntó, con confusión.

-- ¿Has visto alguno? Valk me dijo que sólo para los policías y ambulancias eran permitido los autos.

Decidí dejar de escucharlos, y miré el cielo, y si es que de casualidad había un dios escuchándome, empecé a rogar que Crypto estuviera bien.