Seokjin iba directo a la oficina que tenía cerca de los cultivos pues debía buscar a Jackson, ese despistado alfa seguro le ayudaría a enmendar su error, pues su lobo se sentía humillado por aquel joven alfa de nombre Taeyang.

—Jackson ¿ dónde diablos estas? — gritaba fuertemente pues por más que iba de un lugar a otro no lograba encontrarlo.

—Aquí estoy Seokjin, no tienes que gritar tanto ¿para qué me necesitas? — decía con poco interés.

—Debes ayudarme hice algo muy estúpido o más bien olvidé algo y eso me hace estúpido, en mi defensa no tenia idea de la fecha, pero ahora debes ayudarme.

—No te entiendo Seokjin, aunque viendo tu cara de culpabilidad puedo apostar que olvidaste el cumpleaños de tu esposo— su sonrisa creció cuando vio la sorpresa en los ojos del Alfa.

—¿Tu lo sabías? — vio como este asentia —¿Y por qué diablos no me dijiste? Acabo de quedar como un idiota insensible que no sabe cuando su esposo cumple años.

—No es mi culpa que tu no lo supieras, es tu esposo tu debes saber eso, yo me entere por Hoseok pues llevaba días planeando una sorpresa y comida para tu omega.

—Yo no tenia la más mínima idea, jamas hablamos de esto y no debería importarme pero dios santo me importa y más porque el imbecil de Taeyang llegó haciéndose el maravilloso alfa al regalarle flores y estúpidos globos, es un idiota que quiere conquistar a Namjoon, ¿puedes creerlo? Quiere conquistar a mi Nam osea mi esposo, no se porque no entiende que es mi omega, Namjoon es simplemente mio. — decía mientras estaba muy molesto y gruñia por ese alfilla.

—No tendría por qué molestarte Jin, en primera el idiota fuiste tu al no recordar o si quiera preguntar cuando cumplía años, en segunda el omega no es tuyo, tu mismo lo dejaste muy en claro que lo querías "solo como amigo", pero ahora estas aquí muriendote de celos, porque ese alfa te esta robando al que consideras tu omega.

—Yo no estoy celoso Jackson, no se de donde sacas eso, lo que me molesta es lo cínico que es, al llegar con obsequios con un omega casado.

—Tu le haz dado obsequios a Hobi y no me molesta.

—No es lo mismo Jackson yo veo a Hoseok como parte de la familia pero Taeyang quiere algo con Namjoon, él mismo me lo dijo, el muy desgraciado quiere algo con mi omega y justo hoy llegó luciendose, por eso debes ayudarme, debo prepararle algo a Nam, algo lindo. — decía esto último con un notable puchero.

—Seokjin no te entiendo, dices que Nam no te interesa pero mirate, aunque lo niegues te mueres de celos, el omega te importa más de lo que quieres admitir, incluso ahora estás molesto por una tontería.

—Namjoon no me interesa más que como amigos— se defendió el alfa.

—Entonces si así es, dejalo que disfrute de un Alfa que realmente lo quiere y que estoy seguro esta dispuesto a cortejarlo adecuadamente.

—Namjoon esta casado conmigo, no puede aceptar un tonto cortejo de ese.

—Entonces dale el divorcio y contratalo como su nana, pueden llegar a un acuerdo de que te cuide a los niños hasta que al menos Rose tenga 2 o 3 años, pero no tienes que atarlo a una vida sin amor, Nam es joven y merece disfrutar de eso, no seas como el idiota de su padre que toda la vida lo tuvo limitado hasta que logró vendertelo. — gritaba exasperado pues Seokjin no reaccionaba, era obvio que se moría de celos pero no quería admitirlo.

—No le daré el divorcio, estoy seguro que Nam tampoco quiere eso y no soy como su padre, es solo que.... Que no se que me pasa, todo esta pasando muy rápido Félix en un mes cumplirá su primer aniversario de que falleció y yo.... yo no puedo hacerlo esto no lo merece, no puedo involucrarme con alguien más, no todavía. — su semblante había cambiado a una aura de tristeza.

—Félix quería tu felicidad Seokjin, no te escudes en él para ocultar lo que sientes por ese omega, Nam te gusta pero hasta que no lo admitas seguirás sufriendo pero.....te ayudaré — jin lo miro fijamente sin saber a que se refería— voy ayudarte a prepararle una linda sorpresa a tu omega.

—Gracias Jackson, de verdad pero no tengo la más mínima idea de que darle.— decía algo afligido.

—Yo si tengo una idea y creo que le gustara. — decía mientras subía y baja sus cejas con picardia.

—Eres un idiota Jackson, no se como Hobi te soporta. — decía con burla.

—Muy fácil mi querido Patrón, soy muy bueno complaciendolo, en TODO.

La tarde había pasado Namjoon disfruto de una linda comida acompañado de sus pequeños, jimin y también Taeyang se había quedado.

El omega había notado en este tiempo el interés que el alfa tenía hacia su persona y para que negarlo algo de él también le atraía, pero existía un problema de nombre Seokjin, ese alfa que no podía sacarse de la cabeza, no sabía si era porque su celo estaba cerca o que, pero últimamente no dejaba de pensar en el, incluso lo soñaba y no eran sueños románticos siempre, aveces incluso alguno que otro candente. El Alfa le parecía tan atractivo y sexy sobre todo cuando se enojaba pues su rostro se endurecida y su quijada se marcaba, amaba verlo así, siempre y cuando no fuera contra él la molestia.

Pero aún así también pensaba en Taeyang pues en su cabecita existia esa duda de lo que se sentiria tener una pareja, besarla y que esta le correspondiera con el mismo cariño, porque apesar de haber besado a Jin sabía que el sentimiento no era compartido.

Quizás si hablara con Jin de nuevo, este le permitiria salir con Tae, lo intentaría al otro día, pues el alfa había sido muy claro que no regresaría, le dolía eso y sobre todo que no supiera de su cumpleaños, pero bueno lo dejaría pasar al fin y al cabo era amigos y aveces los amigos olvidan esas fechas o eso quería pensar.

Justo cuando estaba en la puerta para despedir a Taeyang, un joven repartidor llegó, en sus manos traía un hermoso ramo de flores todas en color rosa, pues era el favorito del omega, a su lado también traía un enorme oso de peluche blanco que en su pecho decía feliz cumpleaños.

—Joven Namjoon me podría firmar por favor.

El omega estaba asombrado pues todo era hermoso, mientras Taeyang volteaba los ojos, pues era obvio de quien era el regalo nada original a su parecer.

—Debes leer la nota Nam, para ver quien te lo envío — decía emocionado Hobi quien había llegado al escuchar la puerta ser tocada.

Omega feliz cumpleaños, disculpame por olvidar una fecha tan importante como la es tu nacimiento, fui un idiota pero quiero remediarlo, por favor ponte más lindo de lo que siempre estás, esta noche te llevare a cenar, sólo nosotros dos.

Con cariño tu esposo Kim Seokjin.

El omega no pudo evitar gritar emocionado pues su alfa se estaba disculpando y además lo había invitado a cenar, debía arreglarse y ponerse muy bonito, comenzó a subir a su habitación pero recordó que Tae aún estaba en la entrada.

—Taeyang muchas gracias por los obsequios y la compañía, me la pase muy bien... yo debo subir pero nos vemos luego. — se notaba la emoción en el omega al igual que sus nervios, cosa que no pasó desapercibida por el Alfa, quien se retiro pues debía ir a su trabajo.

—Pero cuanta emoción Namie, dejame adivinar ese regalo te lo dio Seokjin— decía con diversión el omega y al ver como este se sonrojaba no pudo evitar sonreír.

—Si Hobi, además me invito a cenar, sólo nosotros dos, debo ponerme bonito, mmmm ¿dónde están los cachorros por cierto? — su cara comenzó a notarse preocupada.

—Eres muy distraído Namjoon los pequeños se fueron a casa de Jimin, hoy es viernes así que van hacer pijamada con él, tendremos la noche libre y sabes que esas oportunidades deben aprovecharse muy bien— decía entre risas con una mirada pícara.

—Basta Hobi, dudo que Jin quiera algo así, además nosotros tenemos a la pequeña Rose.

—Vamos le diré a Lisa que por órdenes de Jin debe cuidarla, y no te hagas Seokjin claro que lo quiere, sino porque te invito a cenar y no ha comer o algo diferente, él sabe muy bien que hoy los niños duermen fuera, así que ve preparándote Namjoon, hoy un omega más pierde su virginidad en el mundo— Hoseok se fue riéndose al ver la cara de espanto del omega, obviamente era broma y esperaba que Nam así lo hubiera tomado.

Cuan errado estaba pues ahora Namjoon estaba más nervioso buscando entre sus ropas que ponerse, no quería lucir muy lanzado, pero tampoco mojigato, debía buscar algo sexy pero a la vez serio.

Las horas pasaron volando y Namjoon se baño y maquilló poniendo mayor esmero, su pelo lo puso hacia un lado, en cuanto a su vestir optó por un pantalón de piel negro y de camisa llevaba una blusa blanca satinada con un escote muy marcado, adornando sus cuello y orejas con joyeria dorada, realmente se veía muy lindo y sensual.

Cuando Seokjin llegó rápido subió a su cuarto pues también debía alistarse, se dio un baño y optó por algo más sencillo vaqueros y camisa de manga larga, todo en color negro, su frente la dejo al descubierto y aplicó solo un poco de loción para oler bien, se puso su reloj y por primavera vez se puso su anillo de casado aquel que le dio Namjoon el día de la boda.

Después de estar listo bajo con Hoseok pues quería confirmar si Lisa cuidaría a la pequeña, pues sabía muy bien que sus cachorros mayores estaban en casa de Jimin, pero al entrar a la cocina no pudo evitar molestarse, pues Jackson tenían arrinconado al pobre omega besandolo con pasión mientras manoseaba su pequeño cuerpo, y el omega sólo se dejaba hacer sin protestar disfrutando de aquellos besos y caricias.

—No pueden hacer esto en la cocina, para eso tienen habitación — ambos se separaron de inmediato, muy sonrojados sobre todo Hobi. —Hoseok ¿sabes si Lisa cuidara a mi pequeña?.

—Si Jin, ella la cuidara toda la noche, no te preocupes.

—Aprovecha Seokjin tienes al omega para ti solo toda la noche — decía coquetamente el alfa.

—Ustedes son los que deberían aprovechar par de hormonales. —hobi tenía vergüenza pues no era un tema que le gustara compartir con otros alfas.

—Tienes razón, patrón nos vamos que pase una muy placentera noche, y si se lo pregunta, nosotros claro que la tendremos— Jackson tomó a su omega de la mano y juntos partieron rumbo a la habitación donde se entregaron toda la noche, pues querían aprovechar que estaban solos y que podían hacer ruido.

Seokjin subió a la habitación de su esposo, pues quería preguntar si estaba listo, por lo que tocó hasta que Nam le dio la indicación de entrar.

—Te ves hermoso omega— fue lo primero que salió de sus labios al ver a su lindo esposo.

—Gracias Jin, tu también te ves muy guapo. — ambos estaban nerviosos y no entendían la razón.

—¿Ya estas listo? — al ver como afirmaba lo tomo de la mano y juntos salieron rumbo a la sorpresa del omega.

Nam pensaba que irían a un restaurante, pero conforme iba pasando el tiempo más se alejaban del pueblo.

—¿A donde vamos Seokjin? — preguntaba con algo de duda.

—Te prepare una sorpresa, vamos a una cabaña que tengo a las afueras del pueblo, veras que el lugar te encantará.

Y tenia razon después de media hora habían llegado, pero el lugar era hermoso había mucha vegetación, en lo que era el jardín había muchas luces que lo decoraba y juegos para cachorros.

—Vamos Nam debemos entrar — siguiendo al alfa entraron y oh sorpresa la que se llevó, adentro estaba aún más bonito con muebles rústicos, plantas y muchas luces cálidas, caminaron juntos hasta el comedor donde un enorme ramo de rosas lo recibía, con un vino y velas iluminaban el lugar, todo era muy romántico y aunque se dudara esta había sido idea de Seokjin pues quería enmendar su error.

—Todo es hermoso Seokjin, muchas gracias, no tenias porque esforzarte tanto, con las flores y el oso quede encantado.

–Te mereces todo esto omega, así que siéntate que hoy te consentire.

Ambos cenaron y bebieron la botella de vino que había traído el alfa, siendo Nam quien más lo hizo pues estaba nervioso, no se sacaba de la cabeza que tal vez Hobi tenía razón y Jin quería algo más, pues el lugar era bonito y romántico.

—Te compre algo más, dejame ir por el— el omega vio como el alfa se adentraba en la cocina, para después salir con un pequeño pastel y una velita, cantándole un feliz cumpleaños.

—Muchas gracias alfa, todo, todo esta perfecto, jamas había pasado un cumpleaños tan lindo y hoy gracias a Hoseok, los niños y usted lo pude disfrutar oh bueno y también Taeyang. — al escuchar aquel nombre el alfa cambio su semblante, no le gustaba que su omega hablara de ese.

—Es lo que te mereces omega, ahora partamos el pastel, mientras abro otra botella.

Por decisión del omega se llevaron la botella y copas junto con el pastel a la pequeña sala pues el ambiente era fresco y la chimenea los cubriría del frío.

Comieron y siguieron bebiendo, gracias al vino se animaban más hablar.

—Quiero conocerte más Namjoon, no solemos conversar mucho, tenemos dos meses de casados y no se casi nada de ti. — decía más animado el alfa.

—Bueno no hay muchas cosas interesantes sobre mi, pero me gusta leer, cuidar la vegetación, me encantan las plantas, la pintura y escuchar música ¿y usted? que me puede decir.

—Bueno disfruto de cuidar mis tierras y mis animales, llevo toda mi vida haciendo eso, amo a mis hijos me encanta pasar tiempo con ellos, cuando Félix vivía todos los fines de semana íbamos al lago para hacer picnic, los amo, amo estar en contacto con la naturaleza, disfruto la música aunque más la viejita que la actual, me encanta comer y me encanta consentir a mis seres queridos — esto último lo dijo mirando al omega — y me encantas tu Namjoon.

No supo de donde salieron esas palabras quizás fue el alcohol, quizás su lobo o incluso él mismo, pero debía decirlo, debía admitir que el omega lo volvía loco.

—Tu también me encantas Seokjin— las mejillas rojas del omega no tardaron en aparecer.

—Eres tan bonito Namjoon, me vuelves loco, quisiera darte el mundo entero omega— el alfa cada vez se acercaba más al omega.

—Señor Kim, si hay algo que quiero aunque sea solo por esta noche. — el alfa lo miraba con duda pero aun así le prestaba toda la atención que merecía.

—Dime omega ¿qué es lo que quieres y yo como tú alfa te lo daré? — decía cada vez más perdido en esos lindos labios de Nam.

—Quiero que.... que usted y yo... — el omega estaba muy nervioso la presencia de Seokjin lo intimidaba, su físico aún más pues era muy guapo, pero debía ser fuerte si quería obtener lo que deseaba. — quería pedirle que.... Que usted sea mi... Prime....queria pedirle que me deje salir con Taeyang— y se acobardo, no pudo con esa mirada sería de Seokjin, no pudo decirle que lo que realmente deseaba era que fuera su primera vez, quería entregarse aunque fuera por una noche a su alfa, más no pudo hacerlo.

La cara de Seokjin cambió de un momento a otro, ahora se notaba molesto muy muy muy molesto.

—¿De qué diablos hablas Namjoon? Tu eres mio — sin nada de esfuerzo cargo al omega encima suyo, pues ambos estaban sentados en el sillón. — todo tu eres mio, qué acaso no lo entiendes.

—Usted dijo que seríamos amigos y jamás volvimos hablar de mis salidas con otros alfas— al decir eso Jin se pegó más el cuerpo del omega a su hombría pues por la posición se le facilitaba la cercanía.

—¿Te gusta ese idiota? ¿Taeyang te atrae? Contesta omega, ese alfa inexperto te gusta más que yo.... Yo un Alfa que puedo complacerte en todo lo que me pidas omega—mientras decía esto sus manos no dejaban de acariciar su cintura por encima de la ropa, mientras llevaba su nariz a su cuello, olfateando y marcandolo, primero con eso y después con sus labios y lengua.

Ambos estaban de frente pues el omega estaba a horcajadas, por lo que el alfa no se perdía ninguna reacción de su cuerpo, viendo como mordía su labio inferior para que no salieran aquellos suspiros que producía su cuerpo gracias a la excitacion.

—No voy a mentirte Seokjin, Taeyang me atrae— al decir eso el alfa no pudo evitar sentir celos, su lobo le exigía que le demostrarán que él era mejor alfa y así lo hizo, sus manos se colaron por debajo de la camisa del omega, lo acariciaba de manera suave, mientras sus labios chupaban y besaban aquel esquisito cuello que el omega no dudaba en mostrar a su alfa.

—Vamos Omega, yo puedo ser mejor que ese idiota, dejame que te demuestre que nosotros podemos complacerte en todo lo que nos pidas, peemiteme hacer algo para que lo olvides. — su lobo había tomando un poco el control pues temia que el humano se arrepintiera.

—Alfaaaa— suspiraba pues las manos del jin habían comenzado a mover sus caderas, haciendo que el omega comenzará a sentir sutilmente placer.

—Te deseo tanto mi omega, quiero hacerte mio, dejame que te demuestre lo buen alfa que puedo ser con tal de complacerte, te daré el mejor regalo de cumpleaños. — Y lo besó, el alfa por fin beso esos apetitosos labios que se moría por probar desde que llegaron.

—Hazme tuyo alfa, quiero que tu.... Quiero que tu seas mi primera vez— y al oír aquello el control del lobo regreso al humano, mirándose intensamente alfa y omega.