Capítulo 11
Separo el oso de mi cuerpo y suspiro.
—¿Y ese suspiro? —pregunta mi mamá asustándome.
—Eh... Nada —digo y miro a otro lado.
Me hace un ademán y subimos a mi habitación, una vez allí, dejo el oso en mi cama y sonrío.
—Uno no suspira por nada —me volteo y mi mamá está sonriendo.
—¡Sam me pidió ser su novia! —grito emocionada y ella se ríe.
—Me alegra mucho que seas feliz mi amor, y pensar que un día tuve miedo de perderte —me dice tocando mi mejilla.
Se le cristalizan los ojos, y yo la miro confundida.
—¿Qué quisiste decir mamá? —pregunto y ella niega con la cabeza separándose de mí.
—Nada, descansa —intenta irse, pero la tomo del brazo.
—Mamá, sobre el paseo de la escuela... —ella me mira.
Su mirada me transmite miedo.
—No lo sé, no he hablado con tu papá. Me da miedo dejarte ir a ese viaje, siento que no vas a volver como te fuiste —dice con una mueca asustándome, pero no lo demuestro, en vez de eso le sonrío.
—Nada me va a pasar —ella me mira con miedo.
—Descansa Victoria, te amo —besa mi frente y sale del cuarto.
Cierra la puerta y suspiro; eso fue muy extraño. Mi mamá actuó muy raro, además la nota que me tiraron esta mañana me tiene asustada. Estoy dudando en ir a ese viaje.
Con un poco de miedo me pongo la pijama y me acuesto a dormir. Abrazo al oso y me tranquilizo un poco. Poco a poco caigo en los brazos de morfeo.
* * *
—ABORTO DE SIMIO MAL ECHO DESPIERTA —escucho decir.
Que lindo es despertar con tu hermano gritando en tu oído y haciéndote caer de tu cómoda y calentita cama.
—ERES UN IMBÉCIL ME LAS PAGARÁS ENGENDRO DEL DEMONIO —le respondo levantandome del piso.
—MAMÁ, PAPÁ, VICTORIA LES DIJO DEMONIOS —grita y yo lo miro alzando una ceja.
—Sabes que eres adoptado, ¿cierto? —él se hace el indignado y yo me río.
—Claro, como ahora tiene novio, niega al hermano —dice quitando una lágrima invisible de sus ojos, me río más fuerte.
—Vete que voy a llegar tarde por tu culpa —lo saco de mi cuarto y sigo riendome sola.
Después de eso me baño. Al salir me pongo un short talle alto, una blusa ombliguera negra, y mis vans negras. Tomo mi mochila y bajo las escaleras.
—Hija, toma el permiso, tu papá me convenció —dice y yo sonrío.
Lo tomo y beso su mejilla.
—Gracias mamá —dicho esto salgo directo a la escuela.
Al llegar, voy a mi casillero y alguien me tapa los ojos.
—¿Adivina quien soy? —dice una voz aguda.
Sé que es Sam por su perfume, así que me río.
—Mi hermoso novio —respondo y se escucha su risa.
Me quita sus manos de mis ojos y con un movimiento, quedo frente a él.
—¿Escuché bien? —pregunta Kathe y la miramos.
—¿Qué? —pregunto.
—¿Son novios? —pregunta nuevamente y yo asiento.
Ella se queda en shock y cuando reacciona se me tira encima separándome de Sam.
—Mi niña está creciendo —dice quitándose una lágrima imaginaria de su ojo y yo me río.
—Exagerada —le digo y veo que Will se acerca y saluda a Sam.
—O sea, es tu primer novio —dice y yo me sonrojo ya que Sam y Will la escuchan, aunque Will ya lo sabía.
—¿Es cierto? —pregunta Sam y yo asiento, sé que estoy roja.
Me toma del mentón obligándome a verlo a los ojos.
—No te tienes que avergonzar, me encanta saber que soy el primero —dice y mis amigos dicen un "Awwww".
Yo sonrío y él me besa muy lento y tierno. Todo es lindo hasta que me separan de él.
—¿¡Qué te pasa!?—le pregunto a Lauren.
—¿Quién te crees para besar a alguien que es mío? —me dice y yo la miro incrédula.
—No me di cuenta a que hora lo compraste y para tu información tampoco dice tu nombre —digo y se escucha el típico "Uhhh".
—No escarmientas ¿verdad? Parece que no te bastó la golpisa que te di —sonríe y yo la miro mal.
—Déjala en paz Lauren —dice Sam.
—No, déjala Sam, ella es una pobre zorra ignorante —digo y me abofetea.
—Cuida tus palabras niña —le doy un golpe en su nariz, y cae al piso inconsciente.
Hasta hoy dejo que esta estúpida me moleste.
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