Destino… esta palabra tiene muchos significados o definiciones que la hacen única, tal vez se puede describir como el punto a donde un objeto llega después de moverse de otro punto, pero en el caso de las personas se trata de la vida que uno quiere llevar, a donde quiere llegar o una vida que ya está escrita desde hace mucho tiempo atrás… por su parte, él no quería este destino tan horrible…

…

Suspiró de manera pesada, estaba viendo con sus ojos carmesí como su reflejo se mantenía en el espejo, con sus manos se acomodaba el traje azabache, un traje negro como la noche pero muy elegante, mientras un candelabro con velas encendidas iluminaba la habitación en un tono azulado, los pliegues de su traje estaban completamente limpios, presentables, una tela fina y muy costosa, su camisa interior, blanca, pura de toda mancha, estaba planchada con delicadeza, la corbata roja estaba limpia y se notaba nueva, por su parte las botas de cuero negras y lustrosas estaban brillando con el destello de las velas, el pantalón no tenía nada de malo, el reloj de bolsillo, hecho de oro fino estaba haciendo "tic tac" por los segundos, cada vez la noche se acercaba más a su cúspide…

-Me queda… me queda muy bien…- dijo él mientras veía su reflejo, estaba sorprendido de eso, con sumo cuidado se puso el anillo rojo sangre que tenía enfrente, lo miró con detenimiento antes que nada y solo terminó de alistarse, miraba otra vez su reflejo, reflejo que se desvanecía mientras miraba sus recuerdos…

-Vayamos a ver el eclipse, Mina- exclamó el joven mientras veía a su amiga de la infancia.

-¿Dónde podríamos verlo?- preguntó ella.

-¿Qué tal en el templo Hakuba?- preguntó él en respuesta.

-Estaría bien… ¿Seguro que quieres ir?- cuestionó.

-Sí, estoy seguro, ¿Acaso pasa algo?-.

-Tengo un mal presentimiento, siento como si ésta noche algo malo podría pasar…- dijo ella preocupada, algo asustada.

-Ahora que lo dices… tienes razón, siento como si el ambiente estuviera lugubre, apagado…- dijo él con preocupación.

-¿Y por qué dijiste entonces que era buena idea ir a ver el eclipse?-.

-Siento como si el eclipse me llamara… como si debo estar ahí…- movió la cabeza borrando esa idea de su cabeza -Creo que estoy exagerando, aún así, ¿Quieres ir a ver el eclipse?-.

-Solo… solo y únicamente si me prometes que nada malo pasará…- dijo ella.

-Lo prometo, te prometo que nada malo pasará- respondió él mientras le sonreía.

Mirando su reflejo el joven miraba a la nada, terminando de recordar esa mañana donde él prometió eso, estaba sonriendo levemente, luego recordó dónde estaba, porque estaba ahí, que pasaría si no salía de ese lugar junto a sus amigos, con valor apretó su puño y viendo su rostro en el espejo vió sus ojos, mala idea… recuerdos de vidas y cuerpos pasados inundaron su mente, como destellos de oscuridad lo atacaron por toda su conciencia, cayó al suelo, arrodillado mientras sujetaba su cabeza y gritaba por la jaqueca, mientras sus recuerdos fluían más y más entre la neblina del olvido él se recomponía, levantándose de a poco del suelo, su dolor se mantenía un poco, después de unos segundos de esa sensación que se sintió como minutos él logró ver a su reflejo, aterrado veía como su propio reflejo parpadeó, se desvanecía poco a poco, su mismo reflejo comenzó a mostrar a otra persona en su lugar, alguien que no era él, abrió levemente la boca por el susto, grande fue su sorpresa al ver que sus caninos fueron reemplazados por unos colmillos alargados y filosos, llenos de sed de sangre, su piel blanca se tornaba pálida y su aura se volvía oscura, malévola, estaba a nada de convertirse en el monstruo de la leyenda, paralelo a eso su corazón comenzó a latir con fuerza con su oído logró escuchar como los engranajes de la torre del reloj impulsados por un terror mortal comenzaron a girar más rápido, el corazón del castillo estaba sincronizado con el suyo, por la desesperación golpeó el candelabro que estaba en la habitación, un brillo azul lo golpeó y se introdujo en él, había absorbido otra habilidad, habilidad que solo aceleraba su metamorfosis, más rápido que el rayo salió de la habitación, pasando la sala del trono adornada con una alfombra hecha de sangre de personas inocentes, un rastro que se dirigía al mismo trono, impulsado flotando a gran velocidad se dirigía a la sala secreta del castillo, ese infernal Castillo Demonio que con su misma conciencia malévola deseaba que su amo volviera a controlar su lugar, anhelaba recuperar su otra parte perdida, incluso si eso significaba dejar a su amo sin la vida que ya había deseado vivir inconsciente, Castlevania buscaba restaurar el poder del Caos y la Oscuridad, por su parte Soma Cruz deseaba evitar a toda costa convertirse en el Rey de la Oscuridad, Vlad Tepes, mejor conocido como Drácula…

//Este pequeño relato de Castlevania ya sido uno de los más rápidos que he hecho, es el más corto de todos mis relatos siendo que no hay mucho que tomar (teniendo en cuenta el contexto), además de que nunca se terminó la trilogía de Soma, si desean que haga una historia de Julius que narre la guerra del Castillo Demonio de 1999 entonces con gusto lo haría, espero que les haya gustado el relato corto, muchas gracias a todos por llegar hasta aquí, muchas gracias también por sus votos, espero que pasen buen día, nos vemos hasta la próxima ^°^//.