23.
-tú...-
-¿Ah?-
-¿Cómo pudiste?-interrogó aquel hombre acercándose con la intención de propinarle un tremendo golpearlo
El chico de ojos rojos le dió la libertad por lo que se dejó golpear y tirar al pulido piso de su departamento.
-¡¿Tanto escándalo por una mujer!?-dijo sobando su mejilla y sintió la sangre deslizarse por su nariz
-¡UNA MUJER QUE RESULTÓ SER TU PROPIA HERMANA!-gritó Manten manteniendo su rabia y decepción hacia el moreno
Retrocedió unos pasos y miro a todos lados de manera desesperada, como si buscara algo que lo tranquilizara por lo que llevo sus manos a su cabeza y trato de meditar lo que estaba pasando.
-¿Por qué...? Hiten, te estás excediendo de los límites... Está vez te haz sobrepasado-murmuró y giro a verlo, el muy psicópata solo se sentó en el piso observando-no tenías por qué... Bien sabías que no era necesario-
-¿Mm? Tenía que callarla ¿No?-
-¿¡Matandola!?-
-¿Había otro método?-preguntó él "inocente"
Manten lo miro incrédulo y gruño furioso por el simple descaro que tenía en preguntar, ¿Acaso ya perdió la cabeza? ¿En qué momento?.
-tu... Miserable...-
-ey ey-detuvo el chico y se levanto del piso, se acercó a su hermano menor donde de manera impredecible sacó un revólver tras de si apuntando su cabeza, echo que asustó y alertó al hombre-escúchame bien Manten... La próxima vez que vengas a reprocharme una cosa tan insignificante o si llegas abrir esa boca por lo que sucedió, te mataré...¿Está bien?-
El hombre tragó duro, no cabía dudas... Hiten necesitaba ayuda, y no una de colaboración en sus planes.
-b-bien...-asintió con lentitud, el moreno sonrió por haber cumplido un capricho necesario
Manten retrocedió poco a poco y giró para salir de ese lugar, abrió la puerta y la cerró con cuidado. Empezó a caminar directo a su salida con los ojos y mente llenos de determinación, no le importaba arriesgar su vida con tal de acabarla, y todo por aquel echo en la niñez de su hermano, por lo cual es simplemente una estupidez.
....*....
-cielos...-murmuró el chico guardando el arma tras de sí, giró sobre sus talones y se posicionó frente del ventanal observando el bello paisaje nocturno-.... Supongo que habrá que empezar a mover las cartas-
....*....
-¡¡¡INUYASHAAAAA!!!-
Desde su puerta llamaban, parecía ser Shippo que tocaba, pero ¿Por qué? Miro la hora de su celular y eran casi las 7 de la mañana ¿Que hacía ese chaparro tan temprano en su casa? ¿Una emergencia? ¿,Le pasó algo a Kagome? Con este último pensamiento salió disparado de su suave cama y corrió abrir la puerta.
-¿¡Que pasa, le sucedió algo a...!?-
Shippo se abalanzó y guindo en el cuerpo del pelinegro con lágrimas en los ojos, más atrás entraron Koga y Bankotsu.
-no es que le haya pasado algo, suficiente tuvimos al saber lo que le está pasando-habló suspirando el moreno de trenzas
-bestia ¿Se puede saber por qué no fuiste a verla?-interrogó Koga arqueando una ceja, el chico desvío su mirada a un punto fijo
Bankotsu cerró la puerta del hogar e indico ir al sofá a entablar lo que tenían decir al final pues, Shippo no quería separarse de Inuyasha por lo que Koga tuvo que apartarlo obligatoriamente y sentarlo en el sofá, el ojidorado tomo una silla y al mismo tiempo le ofreció un pañuelo a su compañero para que secara sus lágrimas.
-¿Y bien? ¿Que provocó el lloriqueo de Shippo está vez?-interrogó él
-¿Por qué no fuiste a verla después de lo que pasó en la comisaría?-
-no me respondas con preguntas Bankotsu-
-no me alces la voz Inuyasha-contraataco
Ambos compañeros tuvieron una batalla de intensas miradas mientras que Koga suspiraba y Shippo se casó recostaba en su asiento con la vista ida en el techo del lugar.
-no sabía que decirle...-comentó-después de todo no iba a ganar nada golpeando a los causantes, ni mucho menos podría hacer que volviera a caminar...-hablaba en voz baja
Sentía un nudo en la garganta por tan solo pensar en los hechos, siendo las piernas inmóviles de la azabache el centro de todo. Koga se cruzó de brazos tras de su cabeza y lo miró.
-puedes desahogarte ¿Sabes?-
-ni que fuera una relación fallida-dijo Bankotsu de reojo, acto seguido cerro los ojos suspirando-solo te sientes culpable por verla de ese estado, no es tu culpa ni la de nosotros... Solo que fue..-
-¿Destino?-interrogó Koga-¿En serio crees en esas bobadas?-
-no iba a decir eso idiota-
-solo fue acontecimientos de lo que hoy llamamos Vida-interrumpió Shippo aún con la vista ida
-eso-señaló Bankotsu
El silencio se apoderó de la sala donde estaban sentados, Inuyasha no tenía más nada que decir con respecto al tema; la rabia y la angustia se presentaron ante sus ojos al oír las palabras de su azabache.
No puedo moverlas...
Por tan solo haberlo escuchado lo único que pensó fue ir a la comisaría y caer a golpes con los causantes que, lastimosamente, por más que le preguntaban no quisieron decir el nombre del principal responsable de los hechos. Si tan solo esos miserables tuvieran las cuerda floja para hacerlos hablar...
-en fin... a lo que vinimos-carraspeó el moreno de trenzas
-¿Ah? ¿Hay algo más? No me quisieron decir el por qué Shippo vino llorando-dijo
-precisamente es eso, bueno verás....-
-¡la entrenadora renunciará!-nuevamente estallo en llanto el más pequeño de todos, el ojidorado abrió los ojos-¡¡No sabemos que está pasando, primero nuestro estadio se incendio, después vino el accidente, la entrenadora ya no camina, asesinaron a Soten y ahora Kagome renunciará, es el fin de Yokai's!!-
A medida que aclaraba los hechos, Shippo lloraba a más no poder, Koga- acaricio su cabeza mientras que Bankotsu suspiraba sin decir nada, el pequeño dió a conocer todo y razones tenía, por otra parte Inuyasha aún procesaba sus palabras, ¿En serio renunciará? ¿A estas alturas dónde ya llegaron a la final? ¿Se dará por vencida así nada más?.
Era algo que no podía permitir, y menos justo ahora que estaban cerca.
....*....
Se sentía mareada, las ganas de vomitar se presentaba cada vez más, aparte de sus piernas su cuerpo no le respondía, solo escuchaba a Kikyo y parte de sus jugadores hablarle.
Se sentía mal... Muy mal desde que le colocaron el suero muy temprano.
....
-... Entonces, ¿Vienes de parte del doctor Renkotsu?-
-eh.. ¡Si claro!-
¿Acaso estaba dudando? Lo observó detenidamente, era un sujeto con piel pálida y cabello con tonalidad rosa pálida. No veía bien el color de sus ojos juraría que eran un azul muy pero muy oscuro.
-como aprendiz y asistente del doctor me envió a colocarle este medicamento en el suero, dijo que... Es para que... Tuviera fuerza-
Kagome parpadeó, ¿Fuerza? Si ahora tenía la fuerza necesaria... Bueno, si es por parte del doctor no sería nada malo, o eso pensaba.
....
¿Que fuerza? En ves de obtenerla lo que hizo fue arrebatarla. Si el doctor Renkotsu estuviera ahí ya le habría preguntado, desafortunadamente estaba en una junta de la clínica en estos momentos, Sukiyomi y Hoshiyomi estaban en las mismas.
-toc toc estamos aqui-escuchó a Myoga
Con dificultad se levantó sentándose en la cama, vio que el hombre vino acompañado con otra persona, suponía que era el que realizaba los papeles de contratos y la renuncia.
-Kagome, traje justo lo que me pediste-se acercó-¿Estás segura? El Señor Taisho está al tanto de todo por si quieres retroce..-
-n-no, está bien, gracias Myoga-habló con voz temblorosa
-¡¡ES EL FIN MUCHACHOS!! ¡ya no tendremos entrenador, nadie nos soporta!-exclamó Ginta abrazando a un deprimido Hakkaku
-no es cuestión de soportar, es cuestión de... De.... ¡¡Aaahhhggg!!-llorando, Hoyo abrazó al dúo y entre los tres fueron consolados por Naraku y Rin
Le dolía, le dolía verlos así de tristes, le dolía tener que tomar está decisión, sea por el bien de ellos, de su familia y amigas, de Inuyasha y de ella misma. Si hay algo que tenía que hacer, sería eso. Tal vez su sueño de que las mujeres puedan ser entrenadoras de algún equipo masculino, se haya ido a la bancarrota.
-por favor, firme aquí-señaló el señor
La entrenadora suspiro y tomo el bolígrafo que este ofreció y empezó a escribir.
-a Inuyasha no le gustará esto-le hizo saber Sesshomaru, la azabache paró en seco justo de terminar de firmar
-tal vez... Pero... No puedo más-susurró esto último para si misma
Antes que el peliplateado comentara algo más, la puerta de la habitación se abrió de golpe dando paso a su hermano y los tres que faltaban del equipo.
-¡KAGOME, NI SE TE OCURRA FIRMAR ESE PAPEL!-
-¿Eh?-arqueó una ceja, el mareo se empeoraba cada vez más
-muy tarde joven, la chica lo firmo por lo que ya no es entrenadora oficial de Yokai's...-le informó mientras le enseñaba el material
El chico le arrebató la hoja y la hizo en pedazos, recibiendo la mirada atónita de los presentes, dónde les sacó una enorme sonrisa al trío de llorones.
-¿¡PERO QUE HACES!?-
-¡¡SII ANULÓ LA RENUNCIA!!-
Hoyo, Ginta y Hakkaku saltaron de felicidad por el atrevimiento de Inuyasha.
-tú... Muchacho insolente-gruñó el hombre
El chico lo empujó hacia la salida.
-insolente, agresivo, malhumorado pero mis fanáticas me aman-espetó y termino de sacarlo de la habitación
-¡No me importa si eres el hijo del Sr. Taisho, haré que te saquen del equipo por tu falta de....!-
-si adiós-cerró las puerta en su cara
Giró sobre sus talones y se acercó a la cama donde reposaba la chica, acto seguido se cruzó de brazos mirándola fijamente. Kagome parpadeó y frunció el seño, si, estaba a punto de recibir un tremendo regaño.
-¿Por qué lo hiciste?-su voz sonaba dura y temblorosa
-tenia que hacerlo ¿No? Nosotros no vamos a aceptar otro entrenador, nos basta conti...-
-¡¡Idiota!!-gritó la chica, esto hizo que el jugador saltará del susto incrédulo-¡No sabes la carga que me acabas de dar, yo simplemente quería estar tranquila!-
-Kagome cálmate...-Rin se acercó seguida de Kikyo
-yo solo quería... Solo quería... Que dejaran de preocuparse, que ya era momento de que yo ya no asumiera este cargo, solo tenían que dejarlo así y buscar a alguien que me sustituya... ¡Pero no lo entienden!-giró su vista hacia él, de repente empezó a faltarle su respiración y sudar frío-te juro que... Si no estuviera... En esta cama... Te... T-e...-
-estas pálida-Kikyó tocó su frente, tenía una temperatura más fría de lo normal
-estoy bien...-su respiración era entrecortada cada vez más y su pulso estaba empezando alentar, llevó su mano a su pecho y cuello ¿Que le estaba pasando? Poco a poco iba agotándose
-¿Kagome?-llamó Inuyasha dando un paso, ¿Era su imaginación o se estaba empeorando? ¿Que estaba sucediendo?
-¿Entrenadora....? ¿Kagome?-Shippo se acercó
Justo cuando se posicionó a su lado, la chica se desplomó hacia atrás con la mirada dilatada, sudando frío y sintiéndose apretada por falta de oxígeno.
-¡Ey Kagome! ¿¡Que pasa!? ¡Ey!-trató de llamarla Inuyasha, los jugadores y Myoga se acercaron y trataron de animarla por lo que fue inútil
-Kagome... Chica ¿¡Te encuentras bien!?-
-n-no... No puedo... R-respirar...-tartamudeó ella
-alguien... ¡Alguien busque a un doctor!-espetó Kikyo entre lágrimas-alguien...-
-¡¡RENKOTSUUUU!!-salio disparado Bankotsu de la habitación, más atrás lo seguía Miroku
-¡Busquemos a la pareja de doctores también Bankotsu!-
Su vista estaba completamente nublosa, se sentía muy agotada. Lo único que pensó fue la persona que le aplicó el tratamiento, ¿Que fue ese líquido transparente que inyectó en el suero?.
No tenía más nada que pensar, de echo su mente estaba quedando en blanco, y poco a poco cerraba sus ojos, seguido del llamado lejano de auxilio y su nombre.
¿Acaso iba a... morir?
....*....
-¿Le dices éxito a eso?-interrogó él
-bueno, eso es lo que presiento en las próximas horas, señor-explicó-mañana en la mañana puede recibir noticias que le alegrará el día-
El chico lo miró y luego giro su vista hacia sus jugadores, vio que uno cayó de manera bruta al pulido piso de la cancha, eso es lo que tenían que tener ese equipo; fuerza y brutalidad. Para poder ganar necesitaban algo de violencia con el fin de derribar a sus enemigos.
-mm... Tal vez... O incluso haría una fiesta-
-exactamente señor-asintió él
Ambos quedaron en silencio por un momento, lo único que se escuchaban eran los pasos y las corridas de los jugadores al frente de ellos.
-Kageromaru-llamó después de un rato
-diga-
-si eso no resulta nada, juro...-giró a verlo, el hombre percibió una llama ardiente en sus ojos-juro que yo mismo me encargaré de ponerle fin-comentó sin más y se marchó
Kageromaru presentía que ese sujeto puede hacer un escándalo más adelante, esperaba que su hermano menor no haya fallado en su tarea, por qué si es así, tendría que presenciar las cosas horribles que pronto se aproximaría
Esperaba.. que esa obsesión no se convirtiera en una completa locura.
****
Perdón por la tardanza aquí el cap, ¿Que creen que pase? 🥲 Nos leemos!! 💝
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro