Karamatsu-niisan, ¿tú me amas?
Al llegar a casa lo único que quería era recostarme y descansar, chatear con unos amigos y tal vez quedar de salir con alguna chica, la misma rutina de todos los días de la que sinceramente ya estoy aburrido. Me tiro en el sillón de la habitación que comparto con los vagos de mis hermanos que por cierto no están en casa. Debieron irse al Pachinko, por supuesto, es lo más obvio, por lo menos estoy solo en casa y puedo relajarme sin que ninguno de ellos me moleste, a veces los odio, a veces me da vergüenza que sean mis hermanos y finjo no conocerlos, pero supongo... Que después de todo son mis hermanos y... ¿Los quiero?, claro que tengo una lista de mis favoritos y quien me cae mejor de todos ellos es Karamatsu nii-san, es mi segundo hermano mayor y para mí es el mejor, tiene mucho estilo, es bueno escuchando y... Simplemente es perfecto... O por lo menos a mí me lo parece.
Cualquiera diría que siento algo más por mi hermano si me oyera hablar así, pero la realidad es que no, es solo mi hermano mayor y lo amo como tal... Aunque a veces llega a ser muy doloroso.
"Eres un mentiroso".
Lo sé, gracias por echarme de cabeza, consciencia.
He estado confundido últimamente, cada vez que Karamatsu nii-san está cerca mío, cada vez que él me llama Totty, cada vez que él me mira con esa sonrisa tan bonita me sonrojo, mi corazón late como loco y solo puedo pensar en él, estas conductas no son para nada normales y no sabía a que se debían. Me alejé por algún tiempo, lo ignoraba como lo hacían los demás, lo golpeaba, lo insultaba y hacía todo lo posible para que pareciera que no me importaba en lo mas mínimo. Me sentía mal cada vez que lo hacía, al alejarme solo sentía que lo necesitaba conmigo, me ponía celoso cuando lo veía parado en ese estúpido puente para buscar Karamatsu girl's y eso sólo me hizo darme cuenta de que yo en realidad sentía algo más que un amor de hermanos por Karamatsu... ¿Por qué tuve que enamorarme de mi hermano habiendo tantas personas en el mundo?, habiendo tantas chicas a las que les atraigo. Me aferré a enamorarme de un hombre, pero no cualquier hombre, si no de mi hermano mayor.
Estoy mal de la cabeza.
Cierro mis ojos de forma lenta, tanto pensar me ha hecho cansarme más de lo que ya estaba, mi respiración estaba más calmada y empecé a sentir mi cuerpo pesado, estaba quedándome dormido mientras pensaba en Karamatsu.
"Veo a Karamatsu nii-san entrar en la habitación, está hablando con Osomatsu nii-san pero no logro escuchar nada y yo me siento un poco celoso, decido ignorarlo y sigo con mi revista, ambos se dan un abrazo mientras se ríen.
¡¿Por qué se abrazan?!
Arrugo un poco las páginas y en mi cara claramente se ve el enfado, respiro profundo para calmarme hasta que siento unas manos en mis hombros, las ignoro pensando que es cualquiera de mis hermanos pero me susurra algo al oído.
—No te pongas celoso, my little Totty.— Me estremezco por la sensación que me provoca su aliento en mi oreja, pero intento mantenerme tranquilo.
—No estoy celoso, tú y nii-san pueden hacer lo que quieran.— Sé fingir muy mal, en mi voz se oían los celos, metí la pata. Karamatsu se ríe y me vuelvo a sonrojar, su risa me parece sexy.
—I'm yours ,my dear Todomatsu, a Osomatsu solo lo veo como my big brother solamente.— Comienza a morder mi oreja y besar mi cuello de la nada, cierro mis ojos y suelto un leve suspiro.
¿Desde cuando Karamatsu-niisan se porta así conmigo?
—Ka-Karamatsu nii-san...— Me sigue besando el cuello y mete sus manos debajo de mi suéter y acaricia mi abdomen, suelto un ligero gemido, recargo la cabeza en su hombro y él sonríe con morbo.
—I love you, my little brother.— Besa mis labios y yo le sigo el beso con mucha emoción y nervios mezclados, baja su mano a mi entrepierna y comienzo a gemir en su boca, se siente tan bien..."
—¡Todomatsu!— Despierto jadeante y algo agitado. ¿Qué demonios había sido ese sueño?... Giro mi cabeza para ver al propietario de esa voz y veo que sólo es Jyushimatsu, tallo mis ojos y exhalo fuertemente.
—¿Qué pasa, Jyushimatsu nii-san?— Señala mis pantalones con su típica sonrisa y su cara de estúpido, lo miro confundido y después miro mis pantalones, ¡tengo una erección! Demonios, debo de dejar de soñar esas cosas. —¡¿Qué andas viendo, Jyushimatsu nii-san?!— Le grité y él con algo de nervios alzó las manos.
—¡Nada! Esque entré a la habitación, estabas gimiendo y diciendo un nombre que no alcancé a escuchar.— Mierda... Por lo menos no escuchó el nombre. —¡Era obvio que la tenías tiesa, Totty!— Me sonrojé por su comentario, que vergüenza que uno de mis hermanos me haya oído gemir por uno de mis sueños, por lo menos no fue el susodicho, me muero si él me descubre.
—Vaya, debería dejar de soñar estas cosas.— Me rasco la cabeza mientras me río con nerviosismo, Jyushimatsu me mira confundido y se encoge de hombros.
—En fin, solo quería preguntarte si nos acompañas a lo de Chibita, ¡Choromatsu nii-san ganó mucho dinero en el Pachinko y dijo que nos invitará algo! ¡Hustle, hustle! ¡Muscle, muscle!— Gritó entusiasmado, me parecía buena idea pero no tenía ganas de salir, además que debía bajar la erección que tenía.
—Gracias por la invitación, Jyushimatsu nii-san, pero creo que paso.— Mi hermano iba a protestar pero coloqué mi mano frente a él. —Tengo que quitarme esta cosa, además de que estoy muy cansado, diviértanse sin mí.
—¡Como ordenes! ¡Hustle, hustle! ¡Muscle, muscle! —Salió corriendo de la habitación y gritando su "mantra", lo oí cerrar la puerta y esperé algunos minutos por si no se había ido
—¿Jyushimatsu nii-san? —Lo llamé, no hubo respuesta, así que exhalé para calmar mis nervios, estoy a punto de... Masturbarme, hace mucho que no lo hago y no quería hacerlo, está mal, pero no por el acto en sí, sino por la persona en quién pensaré para hacerlo...
Bajo mis pantalones con cuidado y acaricio mi erección por sobre la ropa interior, me estremezco por la sensación, me imagino que Karamatsu nii-san es quién lo hace y me estremezco aún más sin empezar a gemir todavía, bajo mi ropa interior sin quitármela por si me la tengo que poner de emergencia y tomo mi erección con una mano. Comienzo a tocarme y mis gemidos comienzan a salir solos, son leves pero constantes, cierro mis ojos otra vez y comienzo a pensar en mi hermano, en su bella sonrisa, en su hermoso rostro, en su pose, en sus fuertes brazos, en sus manos... Tocándome.
—Ka-Karamatsu nii-san...— Mascullo entre dientes gimiendo cada vez más audible, mi mano se mueve más rápido, arqueo mi espalda y mis gemidos se hacen más fuertes, un poco más y mi semen ensucia mi mano, recargo mi cuerpo en el sillón jadeando. —Aunque solo me haya masturbado... Me siento bien.— Me digo a mi mismo y después de unos minutos me vuelvo a poner mi ropa y limpio ese líquido blanquecino.
-Now you'll never know.— Le escucho cantar en voz baja mientras entra en la casa, al instante sé que es Karamatsu, nadie canta ni habla ingles como él, me pongo un poco nervioso mientras tiro a la basura el trapo con el que me limpié, y me siento rápidamente en el suelo con una revista entre mis manos. La puerta corrediza se abre y lo puedo ver entrar con esa perfecta sonrisa que tiene. —Ah~ Totty, my little and beautiful brother, ¿cómo estás?— Hago como que no lo escucho y mis mejillas se sonrojan de sólo recordar lo que acabo de hacer. —¿Totty?
—Ah... Sí, hola.— Es lo único que sale de mi boca y sale de manera temblorosa, demonios, no es buena idea ver a tu hermano del que estas enamorado y en el que pensaste para masturbarte... Que enfermo suena eso. —Quiero decir, bien, estoy bien, ¿y tú, Karamatsu-niisan?
—Heh... I'm great, Choromatsu ganó en el Pachinko y nos invitó algo a todos, It was amazing.— Se sienta a mi lado y pasa un brazo por sobre mis hombros, comienzo a temblar un poco por su acción pero me mantengo lo más tranquilo que puedo. —Le iba a aceptar algo con Chibita o en el bar, pero cuando Jyushimatsu me dijo que no vendrías decidí hacerte compañía, brother.— Y entonces mi cara llega a su nivel máximo de color rojo, ¿escuché bien? Se ríe, supongo que por mi cara y yo lo miro mal.
—¿Qu-qué es tan gracioso?— Perfecto, ahora estoy tartamudeando, trágame tierra.
—Nothing, es sólo que tu cara sonrojada it's really cute, my brother.— Mi corazón está más acelerado que nunca y eso me enoja, Karamatsu no sabe lo que provoca en mi, a veces me gustaría gritárselo. —Are you cold?... Estás temblando.— Me abraza un poco mas fuerte y yo me acurruco en él, cierro mis ojos e inhalo su fragancia... Podría quedarme así por siempre.
—S-sí, tengo mucho frío, abrázame muy fuerte, Karamatsu nii-san.— Él suspira y rodea mi cintura con los brazos, yo dejo mis manos en su pecho y continúo olfateándolo. Estamos solos... Es mi oportunidad para decirle todo y descansar mi mente de una vez... Aunque la respuesta me destroce. —Karamatsu nii-san, ¿tú me amas?— Lo siento dar un pequeño salto y tensarse, es obvio, es una pregunta muy rara y soltarla de la nada es peor.
—Eh... Claro que lo hago, Todomatsu, you are my little brother after all.— Mi corazón se rompe un poco, sabía que él no sentía lo mismo que yo pero no quería que fuera tan directo.
—Tu hermanito menor...— Me lo susurro y aprieto mis puños en su chaqueta de cuero.
—Totty, ¿qué pasa?, ¿por qué lloras?— Levanta mi cara con su mano tomándome de la barbilla, demonios, ¿cuando me puse a llorar?... Su cara refleja preocupación y al ver que no contesto seca mis lagrimas y besa mi frente. —Todomatsu, you know you can trust in me.
—Yo...— Mi voz sale quebrada y baja, trago saliva y me armo de valor para por fin decírselo, no me interesa lo mucho que llore después por su rechazo. —Karamatsu-niisan, yo te amo... Más que como mi hermano mayor...— Bajo nuevamente la mirada y aprieto la tela de mis pantalones cual niño pequeño siendo regañado por su madre, su cara de confusión y sorpresa me hacen sentirme aún más nervioso e inseguro.
—Wait, wait, wait... You... You mean it?— Me pregunta nervioso, ¿es buena o mala señal?
—Sí... ¡Karamatsu nii-san, estoy enamorado de ti!— Suelto de una y casi a los gritos aún sin mirarlo, tengo miedo, tengo mucho miedo, mis manos tiemblan y respiro hondo para intentar calmarme pero no resulta, aún estoy temblando mucho. Siento que pone sus manos sobre las mías y doy un pequeño salto, alzo mis ojos para mirarlo y él tiene la cara sonrojada también, no sabía lo irresistible que se veía así...
—Todomatsu... ¿Lo dices de verdad?— Asiento lentamente sin decir nada y sin mirarle bien todavía, exhala un poco como para calmarse y asimilar la sorpresa, retira una de sus manos y se la coloca en la frente, esto no me huele bien, sabía que nunca me vería de esa manera...— My dear...
—No digas nada.— Lo interrumpo aún con la voz quebrada, sé la respuesta pero no quiero oírla salir de su boca, me dolería mucho... —Ya sé que es enfermizo, ya sé que no me correspondes, pero... Solo quería decírtelo y...— Mis palabras son interrumpidas por unos labios que cubren los míos, mis ojos se abren como platos y apenas puedo respirar.
Sin esperar mucho tiempo me aferro a su cuello con mis brazos, me siento en su regazo rodeando su cadera con mis piernas, cierro mis ojos y mis lagrimas comienzan a llenar mi cara, son de alegría, no puedo creer que mi hermano corresponda estos sentimientos tan asquerosos.
Su lengua empieza a abrirse paso por mi boca y yo con algo de nervios la dejo pasar, yo la busco con la mía y cuando la encuentro comienzo a jugar con ella, las entrelazamos, sólo puedo sentirme aún más feliz y completo. La falta de aire y las ganas de hablar hacen que nuestro beso tenga que romperse, pegamos nuestras frentes y nos miramos unos minutos aún sin decir nada. Karamatsu es el primero en hablar.
—Todomatsu... ¿Por qué crees que estoy aquí?— No tiene sentido su pregunta así que solo me encojo de hombros. —Yo... También estoy enamorado de ti, desde hace mucho, jamás dije nada porque a parte de que esto está mal creí que yo no te atraía en lo más mínimo, siempre molestándome, ignorándome, saliendo con millones de chicas... Jamás creí que de verdad sintieras esto por mí.
—Karamatsu nii-san, te trataba de esa manera y salía con chicas para olvidarme de ti, para convencerme a mi mismo de que no sentía nada por ti, pero el hacerlo solo me dejó en claro que de verdad te quería de otra forma... Y me sentí tan asqueado de mi mismo que decidí callarme...— Suspiró y me miró nuevamente, me dio un beso corto en los labios y habló.
Me sorprende que haya dejado su estúpido inglés de lado.
—Lo sé, sé que te sientes asqueado, que te preocupa qué digan los demás, te pone nervioso lo que nuestros demás hermanos puedan hacer y nuestros padres peor...— Describió exactamente como me sentía y eso me asustó un poco, pero sé que lo sabe porque se siente igual. —Pero... sólo por hoy mandemos a la sociedad, a nuestros padres, a nuestros hermanos y a la gente a la mierda, démonos la oportunidad de amarnos... Solo por hoy.— Supe que hablaba en serio, suspiré con decisión y lo miré fijamente.
—Hagámoslo... Amémonos por hoy, será nuestro secreto.— Sonrió ampliamente y me tomó por el cuello, me atrajo hacia él y me besó profundamente, yo correspondí el beso de la misma manera, con mucha pasión y deseo hacia mi segundo hermano mayor.
Bajó sus manos hasta mi cintura y me pegó aún más a él, como si quisiera fundir su cuerpo con mi cuerpo, todo se sentía increíble... Metió sus manos bajo mi suéter y me estremecí un poco por su tacto, era como lo había soñado hace un rato... Acaricié su cabello enredando mis dedos en él, me apegué aún más apretando mis piernas a su cadera sintiendo su virilidad rozar con la mía, gemí un poco y él también, ambos lo deseábamos, nos sentíamos de la misma manera y eso sólo me hacía sentir mas pleno. Me recostó en el suelo con delicadeza y quedó encima mío, me miró con preocupación, ternura y lascividad combinadas y le sonreí.
—Lo haré con cuidado.— Dijo acercándose a mi oído, lo mordió un poco y yo me estremecí. —Y con todo mi amor.—Bajó sus besos a mi cuello y lo besó con mucho cuidado, con suavidad, sólo podía suspirar por la sensación tan indescriptible...
Quitó mi suéter y mi camiseta dejándome desnudo del torso, besó mi pecho y lamió mis tetillas, sentí una corriente eléctrica y sólo solté un pequeño gemido, parece que le gustó el sonido porque siguió haciéndolo, una de sus manos fue bajando hasta mis pantalones y acarició mi miembro suavemente, gemí más fuerte y arqueé levemente mi espalda, sonrió y se dedicó sólo a rozar su mano en esa parte, mis gemidos se hacían mas constantes y eso que ni siquiera habíamos empezado.
—Quiero oír mi nombre salir de tus preciosos labios entre gemidos.— Musitó en un gruñido con la voz ronca, me sonrojé, asentí y otro pequeño gemido salió de mi boca.
Quitó mis pantalones y mi ropa interior rápidamente, casi con desesperación, miró con una sonrisa maliciosa mi miembro y mi cara se sonrojó más de lo que estaba, acarició con uno de sus dedos mi miembro y me hizo estremecer, gemí delicadamente y sin ningún tipo de aviso su boca ya estaba contra mi pene, casi grito de lo placentero que se sentía aquello, a él le gustó y lo metió lo más que pudo en su húmeda boca ayudándose con su mano a darme placer.
—¡Ah!... ¡Karamatsu nii-san, si-sigue!— Reclamé y arqueé más mi espalda moviendo mis caderas de forma involuntaria.
Sentí una corriente eléctrica subir por todo mi cuerpo y sabía que iba a correrme, mis gemidos subieron aún más y de manera más constante, Karamatsu nii-san lo sabía así que aumentó la velocidad en la que movía su cabeza hasta que me corrí en su boca, jadeé, mi respiración agitada y oí como se lo tragaba, eso me excitó de sobre manera y me hizo sentir avergonzado.
—Lo siguiente... Lo siguiente seguro te dolerá... Pero lo haré con cuidado.— Entrelazó los dedos de una de mis manos con los suyos, asentí con una pequeña sonrisa, sabía que esto me dolería, pero por amor soportaré lo que sea.
Se despojó de toda su ropa y tomó su miembro entre sus manos, masturbándose rápidamente para cubrir su miembro de líquido pre-seminal, solo lo miré ansioso mordiéndome el labio. Se posó sobre mí besando mis labios y comenzó a entrar lentamente en mi, me aferré a su cuello sintiendo un dolor desgarrador, me dolía, me dolía mucho, derramé algunas lágrimas y solté un fuerte gemido de dolor dentro de su boca y él lo notó, se metió aún más lento intentando que me doliera lo menos posible lo cual le agradecía. Después de un tiempo se quedó allí quieto esperando que me acostumbrara a tener algo dentro de mí, sentía mi parte trasera palpitar pero poco a poco el dolor se iba y me sentía cada vez mejor.
—Mu-muevete... Ngh...— Ordené débilmente retorciéndome un poco de manera involuntaria, Karamatsu sonrió y comenzó a moverse despacio.
Aún me dolía, pero sentía placer también, me sentía horrible y lleno a la vez. Mis gemidos y los suyos comenzaron a inundar la habitación, volví a aferrar mis piernas a su cadera obligándolo a meterse más en mi y moverse más rápido ayudándole moviendo mis caderas, él entendió el mensaje así que se movía cada vez mas rápido, cada vez con más lujuria y sin parar en ningún momento de gemir, estábamos dejando de ser vírgenes y lo estábamos haciendo con amor.
—Todomatsu... Me vengo...— Sentenció entre dientes aumentando la velocidad.
—Yo... Yo también... Ha-hazlo dentro mío.— Supliqué y eso fue suficiente para que él gruñiera al llegar al orgasmo, también eso fue lo único que faltó para correrme y manchar su pecho y el mío de mi semen, creo que no le importó porque se dejó caer sobre mí sin salir aún.
Su corazón estaba acelerado y jadeaba rápidamente intentando regular su respiración, también yo jadeaba y sonreía a la vez aún con lagrimas en mis ojos por el dolor y el placer de antes, ahora me siento lleno, ahora me siento amado. Karamatsu sale lentamente de mí y mi ano palpita, tal vez de dolor, pero sé que a pesar de eso no cambiaría lo que acaba de pasar por nada del mundo.
—Karamatsu nii-san, ¿tu me amas?— Repito la pregunta que le había hecho antes de confesarle todo, se ríe un poco en mi oído y cierro mis ojos con cansancio.
—Te amo más que a nada en este mundo, Totty.— Sonrío ampliamente sin decir nada, siento como voy quedando dormido y mi hermano mayor me acaricia la cabeza. —Descansa, my little Todomatsu.— Me susurra y se tira a mi lado tapándonos con la sabana que está encima del futon.
Definitivamente amo a Karamatsu nii-san y nadie me lo impedirá y menos ahora que sé... Que el también me ama...
Mi hermano mayor me ama...
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Y y y y y y hasta aquí!! Espero que el lemon no haya estado tan caca :v y espero que les haya gustado (en especial a ti, Liz, te amo!! <3)
Gracias por leer!! Hasta la otra! ;)
Historia también publicada en fanfiction con un pseudónimo parecido
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro