Pov Darick

Últimamente veo como Mei luce más cansada, además de lucir un cabello rosa, eso de esconder sus emociones se le da muy bien, en vez de parecer asustada que sé que está o cansada solo da la imagen de chica enamorada, me preocupa tanto, trato de darle sangré para que se reconforte, pero solo la reconforta un poco luego vuelve y duerme, los chicos andan molestos por eso a cada rato preguntan si está enferma o embarazada.

Suspiro otra vez mientras vigilo su sueño, la veo y me siento mal por no poder ayudarla como quisiera.

- Déjala pareces acosador. –Aparece Luke por su puerta.

- Solo la cuido. -le acaricio la mejilla ella solo se remueve.

- ¡Estás enamoradísimo! Me da gusto por los dos. –sonríe palpando mi espalda- Cuídala muy bien Darick porque si me llego a enterar que sufre por tú culpa te juro que yo mismo hago todo en mi poder para que jamás la vuelvas a tener, ella podrá ser mi prima, pero la quiero y respeto como si fuera mi hermana. –escucho la sinceridad en cada palabra.

- Jamás le hare daño al amor de mi vida. -me sincero besándole la mano.

- Eso espero, pero enserio vámonos nos llaman. –Me voy con él al cuarto de computación encontrando a los chicos muy serios, incluido al que menos quería ver, Filarion.

- ¿Qué pasa? –les pregunto irritado.

- Eso queremos saber nosotros notamos que Mei lleva casi un mes así ¿Qué tiene? Y no vengas con eso de que está cansada. –Habla Oss como todo un líder, definitivamente lo heredo de su padre.

- Pero si ya te dijo ella misma que está cansada, ¿qué más quieres saber?

- Es que no me estoy creyendo eso de que solo está cansada, ¿no será qué más bien está embarazada?

- Si eso fuera cierto no nos estaríamos casando en 5 meses, solo está cansada. -me levanto para ir a buscarla esto no nos lleva a ningún lado, justo cuando me volteo ella está despierta y de pie en la puerta.

– Cielo. -Le digo sorprendido en eso veo cómo coloca el cabello de color negro, está molesta.

- No estoy embarazada, dejen de decir tonterías y más bien pónganse a trabajar. -Ladra cada palabra, así ha sido desde que empezó los hechizos duerme poco y siempre está molesta y cansada.

- A bueno pues, no se le puede decir nada a la princesa. -Habla Ciro juguetonamente.

- Ya déjenla, manos a la obra. -la apoyo sino van a seguir, y si sigue será peor, hay veces que ni yo la soporto se pone muy intensa.

Nos colocamos cada uno en nuestros puestos y empezamos con nuestro trabajo, ella está seria tanto que ni me mira, no me gusta cuando está así, pero ¿qué más? Empiezan a sonar las alarmas, es para ella, contesta el teléfono cuando suena.

- Si, si, lo estoy viendo, rodeen la zona, está bien ya voy. –se levanta teclea unas cosas y alista para irse.

- Te acompañamos, seguro necesitas apoyo. -No dice nada, pero igual la seguimos abre un portal y nos adentramos salimos a la parte norte de su reino se ve que realmente necesitan ayuda, varios de la guardia real tratan de apagar el fuego de las casas, pero solo logran intensificarlo más.

- Alteza, tratamos de hacer todo lo posible pero no damos abasto. –llega uno de los guardias respirando agitadamente y lleno de hollín.

- Encárguense de llevar a las personas a un lugar seguro, chicos ayúdenlos, yo me encargo del fuego. -nos ordena a lo que hacemos lo que nos pide, con uso de su super velocidad agarro a varias personas y las alejo lo más rápido posible al igual que el resto de los chicos.

- Ya esos son los últimos. -habla el mismo guardia informándonos.

- ¿Dónde está Mei? –pregunta Oss.

- Encargándose del fuego. -Responde Luke preocupado como todos.

Pov Mei

Veo el mejor ángulo para hacer un cortafuegos tomando en cuenta el viento, es primordial si quiero que salga bien, con ayuda de mis poderes remuevo la tierra creando una zanja de poca profundidad, para al acercarse se extinga.

Espero y veo que no funciona es raro, es la mejor manera, tiene que haber algo más, ni el agua, ni fuego contra fuego, debe de ser un hechizo eso solo se ataca con otro hechizo más poderoso.

Agradezco que estemos cerca de un río, corro a buscar a Ciro para que me ayude, se alarman cuando me ven llegar agitada.

- Ven necesito de tu ayuda. -le digo a Ciro, corriendo de vuelta.

- ¿Qué hago?

- Invocar un elemental de agua. –Se sorprende muchísimo.

- Mei yo nunca he invocado uno, no sé si pueda controlarlo.

- Yo tampoco, pero lo vamos hacer entre los dos. -Estiro las manos hacia el rio, el me imita. -repite junto conmigo.

- ¡Espera! ¿si sabes hacerlo? Porque yo no. –suspiro.

- Solo mantén las manos en alto, no te asustes ni mucho menos faltes el respeto, ellos son sensibles se puede volver a nuestra contra.

- Creo que es mejor que lo hagas sola, yo te ayudo si trata de ahogarte. -lo miro mal.

- Mejor ve con los chicos Ciro ya no me sirves de ayuda. –Veo como solo se sitúa detrás de mí, ruedo los ojos y tomo posición, trato de entenderlo nunca lo ha hecho es normal sentir miedo, pero solo quería su ayuda, despejo mi mente y me preparo para lanzar el hechizo necesito máxima concentración o en vez de ayudar solo empeorare todo, veo como el fuego crece y crece más hasta casi rodearnos, respiro nuevamente y cierro mis ojos, al abrirlos me elevo del suelo unos metros empezando a recitar la invocación.

"Water is leven

Het is de bron van alle dingen.

Het is wat ons compleet maakt

En zonder dat zouden we niets zijn

is de gever van het leven

En de nemer van het leven

Het kan kalm en sereen zijn.

Of het kan woedend en wild zijn Het is de drager van hoop.

En de vernietiger van dromen

Het kan een vriend of een vijand zijn

Maar het is er altijd voor ons.

Wat we ook doen

Het water is er altijd

Het is het enige waar we niet zonder kunnen.

En we moeten het nooit als vanzelfsprekend beschouwen,

Daarom roep ik u aan, hoor alstublieft mijn roep kom mij helpen of grote heer"

Poco a poco el agua empieza a moverse en círculos dándome a entender que lo he hecho bien, empiezo a bajar y tocar el suelo, respiro agitada el elemental se lleva parte de mi energía, por eso quería la ayuda de Ciro, no estoy en condiciones de un hechizo de esta magnitud pero es esto a perder todo el pueblo norte, termina de aparecer y se va contra el fuego apenas lo señalo, veo cómo se va contra el fuego inundando la zona apagando todo a su paso dejando solo cenizas, tierra mojada y casas destruidas a su totalidad, caigo de rodillas Ciro me socorre trata de levantarme pero no siento mis piernas, con su ayuda me levanto mientras trato de seguir controlándolo, me apoyo de su cuerpo mientras le ordeno regresar al agua, lo hace tranquilamente, pero antes de deshacerse hace una reverencia y desaparece dejándome agitada, mareada y con muchas ganas de vomitar, siento como la sangre brota de mi nariz y oídos. Ciro se alarma y trata de ayudarme, por mi parte solo veo a cuatro Ciro.

- Ven hay que llevarte a la clínica. -escucho voces a mi alrededor y solo veo más personas, muchas más.

- ¿Qué paso? –escucho creo que ¿Luke o Darick?

- Al palacio.

- No, al mio está más cerca, ustedes vallan infórmenle al Rey lo que a sucedió, el resto quédense a resguardar el lugar y ubiquen a las personas en refugios.

Alguien me carga en brazos, reconozco el aroma es de Darick, pero por primera vez me repudia su fragancia, quiero vomitar, volteo el rostro y siento como me baja en lo que creo es una cama.

- ¿Dónde estamos? -logro preguntar sintiendo como me duele todo.

- Estas en mi cuarto nena, tranquila ya viene el doctor, te excediste amor.

- ¿Qué le paso? ¿Por qué está así? –logro abrir los ojos encontrándome al Rey D'arcy.

- Está en su límite, ha agotado toda su energía en un hechizo.

- Dale un poco de sangre eso evitara que siga sangrando. –a los segundos siento cómo me sienta colocando sangre en mis labios lo paso por mi garganta reconociendo el sabor metálico, siento como todo deja de dar vueltas, reconfortándome de a poco.

- ¿Mejor? –asiento terminando con la bolsa de sangre.

- Si ya no tengo ganas de vomitar, ni mareos. –En eso llega mis padres con un doctor, Darick se hace va junto con los chicos que no sabía que estaba aquí junto a su padre y el mio, dejándome solo con mi madre.

El doctor empieza a revisarme, me da unos remedios lo cuales saben horrible, pero de todas maneras me lo tomo bajo amenazas de mi madre, al final me mandan reposo absoluto.

- Lo mejor es que solo camine para el baño, yo recomiendo dejarla aquí por lo menos 15 días. –habla el doctor recogiendo sus cosas, se va dejándome sola con mi madre a la cual miro mal.

- Te dije que te fueras a rusia, con mis hermanos. -susurro para que no nos escuchen.

- Solo vine de visita, vinimos apenas nos enteremos, además no pienso irme y dejarte en la situación en la que estas. -me acaricia la mejilla.

- Por favor vete madre, mis hermanos te necesitan, vete el que estes aquí solo me preocupa más.

- No y no insistas además tus hermanos están aquí. –me siento de golpe

- ¿¡Estás loca!? Regresen inmediatamente. –en eso entran todos al cuarto.

- ¿¿Qué haces sentada?? El doctor dijo reposo. –nos habla mi padre.

- Solo hablábamos. - respondo recostándome en el respaldar de la cama.

- Bueno dejemos eso para después necesitas descansar, D'arcy si me lo permites quisiera llevarme a mi hija. –habla mi padre.

- No el doctor dijo que no se puede mover, ella debe estar acostada totalmente, solo se puede levantar para el baño. -habla mi madre.

- Bueno siendo así podemos habitar está habitación para ella. –interviene D'arcy.

- Si es lo mejor. –Habla mi madre.

- A mí no me parece buena idea. -mi padre se pone con sus dudas.

- Yo me quedo con ella y ya está. –interviene nuevamente mi madre.

- Si, no se preocupe Wolfgang ella va a estar bien aquí y por supuesto puede venir cuantas veces quieran. –mi padre duda, pero al final asiente sabe que es lo mejor para mí en estos momentos.

Yo solo puedo estar molesta, el último mes me la pase realizando conjuros de clonación agotándome hasta el límite dejándome en está cama atada por quien sabe cuánto tiempo ¿para que ella solo venga y se regrese porque sí? Si pudiera destruyo todo a mi paso, de verdad que es el colmo, yo tratando de salvarlos y ellos lo desechan como si no fuera nada, ¿es que no ven en el peligro que están? ¿no les importa sus vidas? ¿no los importa mi esfuerzo?

- Creo que mejor hablo con algunas personas de la cocina para que preparen alimentos para las dos. -dice D'arcy retirándose.

- Espera te acompaño. -mi madre se va con D'arcy dejándome con mi padre y mucho sueño, sé que se va para no darme la cara.

- Apenas podamos moverte te llevo a casa ¿ok? -asiento- Me retiro debo estar al pendiente de tus hermanos.

Se va dejándome con los chicos, me coloco incomoda cuando veo a Filarion, después de lo que paso hace un mes no me gusta tenerlo cerca mucho menos cuando estamos solos por algunas guardias.

- Esperemos que estes bien rubia, todos vamos a cuidar de ti. -habla Ciro.

- Si no te preocupes por nada nosotros nos encargaremos de todo perfectamente ¿verdad? –asienten como muñequitos luego de las palabas de Luke.

- Bueno nos vamos, te notas cansada. -ahora habla Oss, Filarion se mantiene callado y distante- Vamos -le repiten cuando ven que no se mueve de su lugar solo me mira.

- Preferiría quedarme un momento debo hablar con Mei. -nos miramos un rato al final asiento dándole a entender que está bien- A solas- menciona cuando Darick se queda en la habitación, asiento para que nos deje solos, una vez solos se acerca a la cama dudoso.

- Lamento mis palabras de la otra noche, realmente estaba molesto, celoso sabes que te amo y verte feliz preparando una boda como no lo hiciste conmigo me pudo más. –suena sincero, trato de ponerme en su lugar, pero sus palabras fueron muy rudas.

- Te excediste de muchas maneras Filarion ya no puedo confiar en ti, disculparte si, pero ya no es igual preferiría que mantuvieras tu distancia conmigo justamente como tú mismo dices me amas y claramente yo no, es mejor que te mantengas alejado de nosotros, realmente no me gusta decirte esto ya que realmente te tengo mucho cariño Fil por ser el hermano de mi amiga y cuñada, porque en conjunto somos tíos de una hermosa niña, sin contar que tú fuiste uno de los primeros en recibirme con los brazos abiertos, te quiero pero es solo eso cariño fraternal, no espero que lo entiendas ni lo aceptes, pero sí que lo respetes.

- No puedo, ni lo hare, te demostrare que él no te merece.

- Es a quien amo. –se siente la tensión entre ambos.

- Me voy, descansa necesitas estar bien. -se va dejándome sola en la habitación, no demora mucho hasta que Darick entra.

- ¿De que hablaron? -se nota molesto, pero trata de disimular.

- Eres malo para disimular.

- No intento disimular nada, solo no quiero ser grosero ¿Qué te dijo?

- Solo me dijo lo mismo de siempre, déjalo para mí no tiene importancia. –él solo pasa la mano por su rostro caminando de un lugar a otro.

- ¡¡No vuelvas a quedarte a solas con él, te lo prohíbo, no te quiero cerca de él, nunca!! –me grita dejándome impactada sorprendiéndome jamás en todo este tiempo me había gritado, bueno una vez y ambos gritamos, pero ahora mi grita y ordena tan fríamente- Espero quede claro Mei, no juego. -Se va dejándome impactada.

Me quedo sola en la habitación pensando en sus palabras sé que está molesto, pero fue muy rudo conmigo no tenía por qué gritarme yo no tengo la culpa de nada, si más bien trato de alejarme de él, con mil cosas en la mente me termino durmiendo.

Me despierto más tarde encontrando a mi madre leyendo uno de sus tanos libros sentada cerca de la ventana.

- Que bueno que despertaste. –habla dulcemente.

- Por favor vete, quiero que regresen, puedo decirle a Merialeth que este a mi pendiente o a Volkodlak, pero tú y mis hermanos deben regresar inmediatamente. -le hablo muy preocupada el que este aquí postrada en cama solo le da ventaja a él.

- Merialeth está ocupada con su bebé, tú hermano es el segundo al mando y tú padre está al pendiente de todo, déjame quedarme hija sé que estas preocupada, pero soy la única opción y no pienso dejarte sola.

- Madre me has dejado sola desde pequeña y cuando de verdad quiero que lo hagas no lo haces, váyanse. -niega.

- No me hagas molestar Mei Arasari, ya dije que no y punto. -No encuentro maneras de refutar ante eso, a dicho las palabras mágicas... mis dos nombres, me quedo callada y en eso tocan la puerta dando paso a el Rey D'arcy con comida para las dos la miro extrañada el no debería hacer eso para eso hay empleados.

- No debiste molestarte en traerlas tú, ya bastante es con tenernos a mi hija y a mi acá en tu palacio.

- Que va si es un honor tener a las mujeres más hermosas de todos los seis reinos, reprimo una risa por su coqueteo tan visible, definitivamente ya se dé dónde lo saco Darick, pensando en el ¿Dónde estará? Carraspeo llamando su atención, ya que mi madre está muy pendiente de la comida mientras D'arcy solo la mira con adoración.

- Disculpe, pero ¿dónde está Darick?

- Salió me dejo dicho que te cuidara muy bien, sino me equivoco debe estar por llegar. -asiento empezando a comer.

- Bueno yo los dejo me voy a recostar ¿estas bien con eso Mei? –Nos habla mi madre a los dos, claramente con una advertencia disfrazada.

- Sí todo bien. –Lo poco que estoy 100% segura en la vida es jamás de los jámaces debes hacer molestar a mi madre, ella nunca se molesta solo advierte, y créanme es una de las cosas que no quiero llegar a conocer, se retira dejándome con mi suegro.

- Sabe una foto le dura más. –me mira apenado yo solo sonrió- Perdón, pero es que usted no es nada discreto, eso los meterá en problemas a ambos y no, no me mal entienda sé que nunca le faltaría el respeto, pero su actitud demuestra otra cosa recuerde que su esposa vive aquí y mi padre puede llegar en cualquier momento.

- Lo sé, pero cuando uno ama de verdad por más que se quiera ocultar el sentimiento siempre prevalecerá. –menciona triste como recordando el pasado.

- Lo sé créame que lo sé. -Yo misma viví eso cuando me comprometieron con Filarion.

En eso llega Darick saludando pidiéndole a su padre salir, cuando lo hace veo como empieza a buscar algo sin mirarme ni decirme nada, agarra unas cosas y se mete al baño, yo termino mi comida y me siento en la cama tratando de estirar mi cuerpo.

-No deberías estar sentada. -me habla yo decido ignorarlo como él a mí, no solo me grita, sino también se va y ahora regresa y me ignora- Te estoy hablando Mei. -alzo mis hombros restándole importancia.

Me levanto despacio rayos si me duele todo hasta el cabello ¿Cómo puede dolerte el cabello? Agarro una de sus camisas y me meto al baño cerrando con llave recostándome en la puerta suspirando, como puedo llego a la ducha dónde tomo una lo mejor posible, al salir me coloco su camisa que me queda a mitad de muslo y salgo encontrándolo sentado en la cama, paso de largo y me siento en el sofá donde mi madre leía.

- Acuéstate. –me ladra mirándome furioso, por mi lado solo lo ignoro subiendo mis piernas al sofá– Mei te doy tres segundos para...

- ¿O qué? ¿vas a gritarme otra vez? ¿o a desaparecer como si nada dejándome al cuidado de nuestros padres? -ni si quiera lo miro quiero que piense que estoy molesta, pero solo quiero llorar ni siquiera soy consciente de cuando él me levanta en sus brazos sino hasta que me deja en la cama con cuidado sobre su regazo por lo rápido que fue.

- Perdóname mi hermosa, estoy preocupado por ti y que te quedes a solas con el no ayuda. –me refugio en su pecho, el me abraza con un poco de fuerza reconfortando cada rincón de mi alma.

- No vuelvas a gritarme. -escondo mi cara en su cuello llorando, ni siquiera sé porque, pero me siento muy sensible.

- Lo lamento mi vida, no volverá a pasar lo prometo. –besa mi cabeza abrazándome más a él como si fuera posible, siento como se mueve quedando los dos acostados sobre su cama.

Las siguientes horas nos quedamos en silencio apreciando nuestros cuerpos y es que a pesar de estar a su espalda puedo sentir a la perfección cada caricia mejor que la anterior, cada beso como una escalera que llega a mi alma a lo más profundo de ella y el hecho que susurre a mi oído que me ama solo me desestabiliza logrando robarme un gemido, siento como sonríe contra mi mejilla.

- Eso es jugar muy sucio, ¿si recuerdas que mi madre duerme en la habitación continua y que los vampiros tienen excelente oído?

- Mi habitación es insonora ¿sabes lo que significa? –me acuesta completamente sobre la cama ya que estaba de medio lado subiéndose sobre mí, niego mordiendo mis labios, él sonríe pervertida mente– Significa que si me dejas puedo bajarte el cielo a tus pies.

- Eso sería muy... perfecto. -suspiro la última palabra cuando siento su lengua recorre mis pliegues robándome el aliento acompañado de una pequeña mordida que solo me hace arquear mi espalda.

Lo miro desde mi posición tiene sus colmillos afuera y sus ojos rojos, sube lenta y torturosamente mirándome con lujuria y pasión, veo como baja solo un poco su pantalón de dormir dejándome ver su erección entrando de una sola estocada privándome el aliento, agarro las sábanas con fuerza y ladeo mi cabeza por la intensidad de sus embistes, él aprovecha eso para morder mi cuello succionando un poco de sangré excitándome más, me lleva al borde del placer, abandona mi cuello para atacar mis labios lo recibo gustosa probando el sabor de mi sangre de ellos.

-Te amo Mei, no sabes las veces que soñé tenerte aquí en mi cama. -me habla al oído y sonrió por inercia, que te digan que sueñas contigo es bien, que te digan que te aman también, pero que el hombre que amas te diga que te ama y que ha soñado tenerte en la misma cama que estas abierta de piernas recibiéndolo como un animal, ya es otro nivel.

- Tú me vuelves loca y me encanta, también te amo. -nos besamos con más ganas, yo aprovecho para aferrarme a su espalda llenándome de placer.

-Oh Darick... ya...no... puedo más. –le digo al borde del clímax entre gemidos, él solo gruñe mordiendo mi lóbulo, arqueo mi espalda sintiendo lo que prometió el cielo a mis pies, me embiste unas veces más y llega escondiendo su rostro en mi cuello como siempre.

- Eres lo mejor que cualquiera pueda desear, y yo soy el más afortunado al tenerte. –me besa dulcemente saliendo de mi interior dejando una sensación de vacío.

Terminamos abrazados uno al otro, metidos entre sus sabanas así con dentro del corazón de cada uno.

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Por acá les dejo la traducción del hechizo:

"El agua es vida
Es la fuente de todas las cosas.
Es lo que nos hace completos
Y sin ella, no seríamos nada

es el dador de vida
Y el tomador de la vida
Puede ser tranquilo y sereno
o puede ser furioso y salvaje

Es el portador de la esperanza y el destructor de sueños
Puede ser un amigo o un enemigo
Pero siempre está ahí para nosotros.
Hagamos lo que hagamos
El agua siempre está ahí
Es lo único sin lo que no podemos vivir.
Y nunca debemos darlo por sentado,
Por lo tanto, te invoco, por favor, escucha mi llamado, ven y ayúdame o gran señor".