Apenas llego todos están comiendo, me siento con ellos en la mesa y hay un silencio sepulcral hasta que no aguanto más y les digo:

— ¡Ya basta! Chicos realmente se pasaron...—me interrumpen

— ¿Lo vas a defender? ¿Es enserio? —pregunta Darick más que molesto.

— No lo estoy defendiendo chicos... —me vuelven a interrumpir.

— Eso no es lo que parece —ahora Luke— ¡Perfecto, eh! Nosotros partiéndonos la madre por ti y tú defendiéndolo. —ya me cansaron.

— ¡Que no lo estoy defendiendo mierda! Solo que no pienso que la violencia sea la solución, ustedes se conocen desde hace años y no es justo que por mí se peleen.

— Lo que no es justo es que te maltrate. —Ahora es Ciro.

— Y estoy de acuerdo, ¿pero cuatro contra uno?... no me parece justo, mucho menos encerrarme en tu cuarto cuando mi hermanito estaba en la otra habitación, necesitándome. —lo acuso.

— ¡Bueno!, puede que me haya pasado ahí, pero nada más un poco. —Luke y sus ocurrencias.

— Mejor coman tengo hambre. —les hago señas para que sigan tranquilamente.

— ¿Y tu comida? —esta vez es Oss él que habla.

— Tengo sed. —les confieso un poco apenada.

— Pues hay agua, ¿no? – Luke siempre tan directo.

— Hoy hay luna llena y como tengo tiempo sin alimentarme... pues tengo sed de sangre y quiero es carne cruda, ¿entienden? —justo Darick me pasa su copa que por cierto está llena de sangre, no dudo en tomarla toda de un solo golpe haciendo que todos me miren— Si siguen mirándome me voy, me incomoda que me miren siento que me están juzgando. —los señalo con mi dedo.

— Es que realmente tienes sed, ¿desde cuándo no tomas? —Darick y sus preguntas ocurrentes últimamente quiere saber todo.

— Hace un mes, solo cuando es luna llena lo hago, del resto me alimento normal, cuando hay luna llena realmente me da mucha, mucha hambre y sed. —les explico.

Luego de comer seguimos hablando hasta que poco a poco se van retirando, dejándonos solos a Darick y a mí.

— ¿Y qué va a hacer la mujer más hermosa? —me pregunta, apenas cierran la puerta atrayéndome hacia él.

— Voy a bañarme, tengo mucho calor. —y no mentía, realmente sentía como estaba toda pegajosa, hoy en especial ha hecho mucho calor.

— Bueno, entonces a bañarnos. —me agarra entre sus brazos cargándome.

— ¿Qué haces? —le pregunto entre risas

— Tomaremos un baño en mi tina. —me informa bajándome en su habitación, dejándome desconcertada.

— Pero... Yo nunca... Y... además... mis cosas no están aquí. —le digo más que nerviosa, él me sujeta de la cara.

— Mi vida, no va a pasar nada que tú no quieras, solo será un baño relajante, y si es por ropa te puedes poner una de mis camisas se te ven muy sexy, además tu habitación queda al lado. —lo beso para evitar los nervios.

— Tomaré eso como un sí, te amo. —sonríe ampliamente.

— Yo también te amo, amore mio. —volvemos a besarnos hasta que chocamos con la cama.

— Mejor preparo el baño. —eso hace mientras yo solo me quito la ropa y agarró una toalla que anteriormente me paso, me la coloco en mi cuerpo tapándome.

— ¿Ya está lista mi vida? —me pregunta con solo una toalla en su cintura haciendo que me sonroje y muerda mis labios, solo asiento mirando el piso. Él aprovecha para acercarse y llevarme de la mano al baño dónde está la tina llena de agua tibia, veo como se quita la toalla quedando desnudo entrando en ella.

— Ja, ja, ja... estás rojisima, solo ven mi vida. —me extiende su mano mientras siento arder todo mi cuerpo.

— No te burles, me pones peor... porfa cierra los ojos. — le pido y lo hace, en eso, dejó caer la toalla y me meto en la bañera dándole la espalda, quedando bastante retirada de él.

— Nunca me cansaré de decirte que eres hermosa. —me jala hacia él y empieza acariciar mi piel de arriba abajo, tocándome por todos lados, solo puedo cerrar los ojos y morder mis labios.

— ¡No, quiero escucharte! —me susurra al oído a la vez que muerde mi lóbulo.

— Darick ¿qué crees que haces? ... Ahhh. —no puedo evitar gemir, pues, con una mano me pellizca el pezón derecho y con la otra mi clítoris.

— Solo te relajo, te noto muy tensa. —Sigue con tu trabajo.

— Para... ahhh... para... por favor. —le suplico— Si sigues... ahh... Yo... Darick. —y sin ningún reparo me volteo queriendo sus labios, los cuales reclamo con ferocidad, mientras le jalo el cabello y me froto contra él una y otra vez.

— Oh nena, si sigues así, voy a... mierda Mei. —sin escucharlo sigo besándolo mientras me froto una y otra vez, bajando mis besos a su cuello, regando el agua de la bañera por los movimientos tan rápidos.

— Espera, espera o puedo, lastimarte. —me detiene agarrándome de la cintura, me carga y me lleva a la cama donde me deja tendida subiéndose arriba de mí, para seguir besándonos sin frenesí.

— Puedo detenerme cuando quieras. —me mira a los ojos esperando mi respuesta.

— Sigue... yo quiero. —lo beso buscando su cercanía.

Hasta que empieza a sonar la alarma avisándonos de un peligro.

— Mierda. —se levanta y empieza a vestirse rápidamente, por otro lado, yo agarro sus sábanas y voy a mi habitación para vestirme rápidamente, una vez ya lista solo bajó corriendo a ver qué pasa, él está tecleando rápidamente, mientras yo agarro los controles revisando las cámaras.

— Nos atacan por dos lados diferentes. —efectivamente, por un lado, están unos hombres armados secuestrando a unas chicas y por otro un robo.

— Ve al robo, yo voy con las chicas, ¿ok? —me ordena.

— Si está bien, cuídate por favor. —le digo preocupada.

— Sí, y tú también. —me besa antes de irse.

Sin más agarramos armas y salimos cada uno por caminos separados, apenas llegó a la casa que estaba al sur de donde nos encontrábamos, veo que la puerta está abierta, escucho llantos y gritos, entro y veo a unos niños amarrados en la sala, le hago señas para que guarden silencio.

— Tranquilos, los voy a ayudar, no teman. —les digo mientras los desató rápidamente— ¿Quién está arriba?

— Mi mamá y mi hermana se las llevaron. —me responde el más grande.

— Llévalos al sótano y no salgas hasta que vaya por ustedes. —se van en silencio, yo aprovecho para subir las escaleras mientras escucho golpes.

— ¡Cállate! ¿Dónde está el dinero? ¿Dónde? —más golpes.

— Creo que va a ser por las malas, entonces, llévatela, haz lo que quieras con ella. — escuchó que uno le dice al otro, mientras me acerco sigilosamente.

— ¡No! ... ¡Mamá! ... ¡Suéltenme! —escucho como una chica grita, veo como la sacan arrastrándola por el cabello entre dos sujetos, me asomo en la otra puerta y veo 2 más.

Mierda

Entró en la habitación donde se encuentra la madre y los ataco con mi navaja a uno, lo lastimó en el hombro, pero el otro se abalanza sobre mí, lo golpeó en el estómago haciendo que me suelte, mientras su compañero se me abalanza con la misma navaja con que lo herí cortándome el brazo, yo saco mi arma y le disparó en la pierna, el que había golpeado también me dispara de vuelta rozando mi brazo izquierdo, a su vez le disparó en la cabeza.

— ¡Escóndase debajo de la cama! – le grito a la señora justo a tiempo, ya que entra el otro chico disparando sin parar, yo me cubro detrás de la puerta agarrándolo desprevenido quitándole el arma, pero siento que me jalan del cabello y es el otro se levantó a ayudarlo.

Mierda y más mierda.

Yo aprovecho que está herido y lo golpeó al costado haciendo que me suelte, pero es en vano el que tenía enfrente se me tiró encima golpeándome, yo aprovecho y hago uso de mi poder de levitar, lanzándolo lejos de mí, agarró el arma y le disparó en la otra pierna inmovilizándolo, el otro quedó inconsciente por el golpe.

Me dirijo a la otra habitación y el tipo sujeta a la chica con una llave mientras le apunta con un arma en la cabeza, yo hago utilización de mi supervelocidad y me acerco justo a su cuello tomando toda su sangre, solo lo dejo tirado y muerto, la chica me mira con horror, en eso llega la policía y sube, hacen su respectiva labor, toman mi declaración, mientras estoy en una ambulancia, pues tratan de coser mis heridas.

— ¡Déjelo, eso no funciona conmigo, con la limpieza basta, gracias! —le digo al paramédico, el cual solo asiente y se va.

— ¿Pero qué pasó? ¿Quién te hizo esto? —llega Darick preocupado a donde estoy.

— Tranquilo, solo son rasguños, estoy bien. —le digo abrazándolo— Llévame de regreso. —le pido aferrada a su cuello.

— Si vamos.

Una vez de regreso subo directo a mi habitación, me sacó la ropa y me meto al baño, estoy impactada, yo nunca había tomado sangre de una persona y mucho menos matado de esa manera, solo puedo pensar en cómo me miró como si yo fuera un monstruo.

Yo solo quería ayudar, sin poder evitarlo lloro ¿soy un monstruo? Solo dejo correr el agua durante no sé cuánto tiempo, salgo cuando creo oportuno y al hacerlo encuentro a Darick sentado en mi cama con mis pantis en mano.

— ¡Son muy sexys! De encaje, me tomé el atrevimiento de escoger tu ropa.

— Pero solo veo... mi panti. —le digo un poco extrañada.

— No necesitas nada más. —me jala a su lado haciendo que me siente sobre él.

— Solo necesitas recordar quién eres... y no olvidar que tú eres fuerte... bella e inigualable. — me reparte besos en mis hombros a la vez que me habla.

— Me siento fatal yo nunca... es que de repente me dio mucha sed y perdí el control... yo no quería... —me interrumpe colocando su dedo sobre mis labios.

— Shh, es normal perder el control de vez en cuando... además yo te voy a ayudar con tu sed, recuerda que soy vampiro y que mejor que yo para enseñarte. —me acuesta en la cama con él sobre mí— Ahora déjame consentirte y hacerte olvidar todo, ¿sí?

En eso me pasa mi panti y una bata de dormir, me deja sola un momento para que me vista, al regresar nos acostamos en la cama abrazados mientras me acariciaba el cabello, me reparte besos y así dormimos juntos confortándonos uno al otro.

Los días van pasando poco a poco y como me prometió me ayuda con mi sed, además nos hemos unido más cada vez, respecto a mi compromiso Filarion y yo enfrentamos a la prensa y sobre todo a nuestros padres, solo que los de él fueron más comprensivos, de mi parte bueno, mis padres están furiosos, no me hablan dicen que defraude a la familia, me prohibieron hasta acercarme a mis hermanos, lo cual eso si me afectó sobre todo a Lupu según me contó Hankis está muy triste, casi ni juega, ni habla con nadie, de mi parte le mando cartas diciéndole que lo amo y que pronto buscaré la manera de compartir tiempo juntos.

Por otro lado, la gran boda entre Dhalleeah y Oceanidouss cada vez está más cerca, solo quedan tres semanas, ¡listo el fiestón del año! Y si preguntan por el compromiso de Darick y Mara, pues... él me dijo que ya casi está todo listo, que ya habló con sus padres, solo falta ella y su familia, para deshacer el compromiso.

— ¿A dónde vas? —ruedo los ojos fastidiada.

— ¿Luke no te han dicho que eres fastidioso?

— ¿Estás en tus días primita? ¡Digo es que últimamente te cargas un genio! —me volteo encarándolo.

— ¡Idiota, eres un idiota! —le digo fastidiada de su actitud— Solo haces esto porque te mandaron a vigilarme, si no ni pendiente. —le confieso que sé la verdad, él solo se sorprende.

— Solo quiero ayudar, ellos quieren que estés bien.

— Sí y la mejor manera es dejándome sola y dándome la espalda.

— Ya chicos llevan días en lo mismo. —Ese es Oss apareciendo en escena.

— Ya Luke déjala, si es tanto yo la llevo a donde sea que vaya. —Se ofrece Darick fastidiado, todos están en la sala ya cansados del drama del día a día entre mi primo y yo.

— ¡Me voy, adiós! —sin más me voy, solo que Darick me sigue, subiéndose después de mí al auto.

— ¿A dónde vamos?

— Al palacio, por favor Hankis. —este solo asiente tomando el rumbo pedido.

— Necesito de tu ayuda, yo me voy a esconder en el maletero y tú vas por mi hermano Lupu, dices que es para una expedición o cualquier cosa que se te ocurra, solo tráelo por favor. —le pido haciéndole ojitos para que no se niegue.

— ¿Cuándo te he dicho que no? Solo que esto me lo cobró.

— Dinero es lo que me sobra, las inversiones van de maravilla y las obras están en su mejor momento hasta creo que terminaremos antes.

— De ti no me sorprende nada, eres fantástica mi vida. —nos besamos.

— Hankis perdón, siempre te meto en apuros con mis cosas. —me disculpo, pues él es cómplice de nuestro romance.

— Usted esté tranquila, que mientras esté bien y sea feliz con esos me basta. —me sonríe a través del retrovisor.

Una vez en el palacio como habíamos quedado yo estoy atrás mientras Darick subió por mi hermano, espero esto salga bien, al rato escucho como suben todos incluido mi hermano, manejan de regreso ya a una distancia prudente hasta que detienen el auto y me abren para que me baje al hacerlo rápidamente Lupu salta a mis brazos.

— Enano, te extrañé. —le digo besándolo sin parar.

— ¿Un momento, si me van a llevar al parque? ¡Porque eso dijiste y si me mientes te lanzo a mi hermana! —amenaza a Darick con su dedito a lo que nosotros reímos.

— ¿Qué pasó campeón? Cuando yo digo algo lo cumplo, así que prepárate vamos de paseo como te dije, ¿verdad nena? —se levanta plantándome un beso, pues se había agachado a su altura, solo que lo apartó rápidamente señalándole al niño él no sabe, se supone tenemos una relación en secreto solo Hankis, Oss, Dally y ahora mi hermano saben.

— Tranquila, ¿nos guardas el secreto campeón? —le pregunta sonriente.

— ¡Solo si la tratas bien! Mi hermana merece alguien que la ponga en primer lugar, no que la tenga a escondidas. —esa frase nos deja reflexionando a los dos, más a mí, pues él es el que siempre va a destruir su compromiso, pero no lo hace, en cambio, yo ya lo hice.

— Mejor vámonos, ¿no? —pregunto rompiendo el momento incómodo.

Nos vamos a las afueras del reino y nos trasladamos al mundo humano, si nuestro mundo está aparte del humano, ellos saben que existimos y saben que también gobernamos sobre Presidentes y Reyes que hay en cada país, al ser los más poderosos. El sistema como me gusta llamarlo un sistema donde nosotros los ''sobrenaturales'' tenemos el control, unos nos odian, pero los mantenemos al margen, gracias a nosotros el margen del delito está restringido. No está extinto porque cada día nace un nuevo mal, por eso hay guardias que montamos nosotros, donde tratamos de evitar cosas como la de hace días dónde me hirieron.

Por lo menos en el caso de Oceanidouss el próximo gobernante del Reino de Magia y Hechicería, ellos controlan todo el continente Africano, Darick del Imperio Vampiro controla Europa, Filarion del Reino elfo controla Asia, Ciro del Reino Sirena controla Oceanía, Luke mi primo que pertenece al reino Hada controla la Antártida, y por último no menos importante yo del Reino Lycan controlamos toda América.

Anteriormente, no se mezclaban especies, eran años y años de linaje puro, hasta que mis padres rompieron la regla, un Lycan mi padre con una Hada, mi madre, de allí una nueva generación de híbridos, pues con ellos más matrimonios así se realizaron, al principio eran los repudiados y ni decir cuando se mezclaron con humanos, casi se empezó una guerra por eso, pero mis padres los mantuvo al margen usándome a mí como trampolín, por eso me mandaron a la academia a demostrar que era igual que los demás (los herederos al trono).

Me enteré de eso estando allá, por eso me molesto tanto que quisieran arreglar mi matrimonio, ellos se casaron por amor ¿Por qué no desean eso para mí? Junto con esas más preguntas, pero no solo eso, sino también lo que dijo mi hermanito de tan solo seis años, me puso a pensar ¿de verdad me ama? Y si es así ¿Por qué tantas largas para romper un compromiso?

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Arriba les deje una idea del reino Mitia o hada, donde gobierna Luke Crystalmist el primo de Mei, gobernantes de Antártida.

El reino elfo o Dreare gobernado por Filarion Dazorwyn

Reino sirena o Raidne gobernado por Ciro Vitevil.

Reino Vutteterra o vampiro gobernado por Darick Deathtoe.

Reino Mahc o de Magia y hechicería gobernado por Oceanidouss, gobernante de África.

Reino Lasare o Hibrido gobernando por Wolfgang Woodenclaw padre de Mei, gobernantes de América