Era una tarde muy lluviosa en la ciudad donde vivías. Eran tiempos difíciles ya que tú escuela estaba en temporada de exámenes y tenías que estudiar mucho.

Estabas en una biblioteca leyendo libros de la materia que tenías que estudiar. Era algo aburrido, pero tenías que hacerlo.

Cuando estabas muy concentradamente leyendo aquel aburrido insípido libro, la alarma de tu reloj sonó. "Beep!" Marcaban exactamente las 6 de la tarde y tenías que llegar a casa rápido.

T/N: AHHHHHHHHHHHH!!!!!! LLEGARÉ TARDE PARA CENAR OTRA VEZ!!!!! MI MADRE ME MATARA!!! AHHHHHH!!!!!

Rápidamente guardaste tus libros y cuadernos, te pusiste tu abrigo y saliste corriendo de la biblioteca dejando un tremendo desorden. Los papales volaban por todos lados y la gente se te quedaba viendo con una mirada muy extraña.

Cuando saliste de la biblioteca, cielos que tu cara se había puesto pálida. Llovía perros y gatos y tú no habías traído un paraguas.

T/N: Ah...uhhh...no traje mi paraguas...sin duda me matara mi mamá! Me dará un resfriado! Vaya que suerte! Pero tengo que ir a casa.

No tenías opción más que salir en la plena lluvia. Hacía frío y llevabas puesto una falda corta y solo un abrigo con unas botitas negras.

T/N: Brrrr...!! Que frío!

Eras una chica bastante soñadora y realmente torpe en ocasiones. Vivías con tu madre y tu padre, y con un hermanito menor que siempre te molestaba. Tu vida era tranquila, pero de vez en cuando era una pachanga. Tus amigos te invitaban hacer cosas de adolescentes, y cuando tú madre te descubría te iba realmente mal, pero eras una buena chica con una noble corazón. Amabas a los animales! En especial los gatos, pero no tenías uno porque tu padre no lo permitía.

T/N: Ahh! Debí haberme traído un paraguas o mejor aún un abrigo que tuviera capucha! Me voy a enfermar! WAAAAA!!!!

Llorabas mientras caminabas por las calles en la horrible lluvia que caía, pero de repente escuchaste un ruido que venía de un callejón.

El ruido te había llamado mucho la atención así que dejaste de caminar y prestaste atención.

T/N: Huh?!? Que fue ese ruido!!? Un monstruo!!? Un malandro?!!?

Te dio miedo pensar en la cosa que puedo haber sido, pero luego volviste escuchar el sonido un poco mejor que el anterior y te diste cuenta que era un maullido. "Meow..."

T/N: ESPERA! Ese ruido es de un gato!

Te llenaste de desesperación en tan solo pensar an aquel gato que podía estar en cualquier lado. Te preocupaba que estuviera lastimado o con hambre así que fuiste al callejón a buscarlo.

El callejón era pequeño pero horriblemente asqueroso. Había mucha basura por todos lados y cajas de cartón.

T/N: Gatito! Voy a salvarte!

Buscabas por el callejón para ver si era un gato o no, y entre todas las cajas de cartón y basura que había ahí. Viste un gato adentro de una de las cajas. Estaba completamente empapado de la lluvia y se veía asustado y con hambre. Sentías mucha lástima por el gato, así que decidiste cargarlo, pero lo siguiente te sorprendería.

T/N: Te voy a ayudar gatito.

Le sonreías al gato, pero al verlo fijamente, casi se te sale el corazón.

El gato salió de la caja y dio un gran salto. Aquel gato era de un enorme tamaño. Era de un color oscuro con varios pelos rojizos, estaba muy peludo, pero lo que te sorprendió más es que tenía en total 6 ojos rojizos con pupilas amarillas. En el par de ojos de en medio tenía el kanji de la primera creciente. Ese gato era realmente extraño.

T/N: 'Se parece mucho a ese personaje de anime, Kimetsu no Yaiba. Tiene los mismos ojos...'

Pensabas mientas el gato te miraba fijamente. Sentías miedo de que el gato te fuera a atacar, pero como era un gato decidiste ser valiente.

T/N: Estas bien?!? Tienes hogar!? Hace frío, quieres venir conmigo?

Seguías sonriéndole al gato, quien estaba sentado arriba de una torre de cajas viajes y te miraba con sus seis ojos. El gato maulló y te mostró una de sus patitas.

T/N: AHHHHH!!!! ESTAS HERIDO!!!!!

El felino tenía una patita lastimada. No era tan grave, pero tenía rasguños, mordidas y sangraba. "Meow..."

T/N: Voy a llevarte a mi casa y ahí te ayudaré gatito.

Lo cargaste en tus brazos y batallabas mucho para balancearte. Como el gato era enorme, era muy pesado y muy apenas podías con el.

T/N: Vaya! Si que pesas mucho, pero ven vamos a mi casita y ojalá mis padres te acepten y dejen que te quedes.

"Meow."

Seguía lloviendo y corrías por las calles con el gato en tus brazos. Como no querías que se mojara más, le habías puesto tu abrigo encima para taparlo de la lluvia. Asta parecía que el gato entendía muy bien, porque cuando lo llevabas en tus brazos muy bien tapado con tu abrigo, el ronroneaba.

T/N: Tranquilo gatito, yo me aseguraré de que estés bien y nunca jamás te vuelva a pasar algo. Lucharé para que te quedes en mi casa y ahí nunca te faltara comida, agua y refugio.

Le hablabas con mucho cariño a aquel gato que iba en tus brazos. Te comenzó a lamer la mano y ronroneaba mucho más al sentir tus cálidas manos en el. "Meow."

Al llegar a tu casa, abriste la puerta y te quitaste los zapatos para subir directamente a tu habitación. Justamente cuando corrías en las escaleras tú madre te llamo.

Nombre/madre: T/N? Ya llegaste? Hija ven a cenar.

Te dio escalofríos escuchar a tu mamá así de la nada y asta se te pusieron los pelos de punta.

T/N: Mamá! Ummmm....fíjate que....ummm pues...

Batallabas para hablar porque no sabías cómo explicarle a tu familia que habías traído un gato a la casa con seis ojos y de un tamaño enorme.

Nombre/madre: Hija! Que llevas ahí?

Te diste la vuelta y tú madre gritó.

Nombre/madre: AHHHHHHHHH!!!!!! T/N [APELLIDO]!!!!! COMO ES QUE TRAJISTE UN GATO TAN GRANDE A LA CASA SIN PERMISO!!!!!!!?????

El escándalo que pasaba llamó la atención de tu padre y tu hermano menor y decidieron ir a ver que pasaba.

T/N: MAMÁ!!! PERDÓN PERO ES QUE ESTABA HERIDO!

En eso tu padre se acercó y observo todo lo que pasaba.

Nombre/padre: Porque tanto escándalo? T/N que paso?!??

Nombre/Hermano Menor: Si que ocurre? Porque gritas tanto hermana?

Dijo aquel niño con una mirada burlona hacia ti.

Nombre/madre: Tú hija trajo un gato a la casa, y no cualquier gato, sino uno enorme con seis ojos.

Nombre/padre: Haber T/N déjame ver?

Tu familia te miraba con curiosidad y ya te estabas pendiendo más nerviosa, pero al gato no le parecía importar las reacciones de los demás.

Cargaste al gato y se los enseñaste.

Al ver al felino con más claridad sus miradas se pusieron pálidas y no sabían que decir.

Nombre/padre: Que.....gato...tan extraño....

Nombre/Hermano menor: Se parece a Kokushibo al personaje de anime.

Nombre/madre: Ven. Les dije!

T/N: Pero está herido! Miren su patita!

Tus padres observaron la pata del gato y notaron que si estaba herido. Sangraba y tenía rasguños.

Nombre/padre: Vaya si se ve herido. Mira vamos a curarle su patita, mañana lo llevamos al veterinario para ver que ese bien y hablaremos más sobre esto. Por esta noche puede quedarse.

Tu padre te miraba con una cálida sonrisa, pero ocultaba la curiosidad en porque el gato tenía seis ojos.

Tu madre suspiró y te tocó el hombro.

Nombre/madre: Dale un baño al gato T/N si quieres que se duerma en tu habitación. Ahora vamos a cenar que se enfría la comida.

Cuando se aclararon las cosas tú madre te ayudo a limpiarle la herida al gato y le dieron de comer pollito. Como no tenían comida para gatos, comió de su cena. Obviamente en el suelo. Como postre le diste un pequeño tazón de leche caliente para que bebiera, y si parecía disfrutarla porque ronroneaba al beberla.