Cap 39
Los rayos del sol iluminaban levemente la habitación, en una cama cubierta por las sábanas se encontraban dos lobos cuya tarde del domingo se habían divertido y mucho. Ahora que era lunes por la mañana debían levantarse, uno por que tenía que ir al colegio y el otro para limpiar la casa.
Fran: Mark, despierta, hay que levantarse.
Mark: mm, Fran, cinco minutos más...
Fran: son las ocho y media.
Mark: -despierta- que?! Como no me has despertado antes?!
Fran: jaja, todavía son las siete.
Mark: estúpido lobo.
Fran: pero tú amas a este estúpido lobo.
Nada más levantarse de la cama un dolor agudo atacó sus partes bajas traseras.
Mark: auch!
Fran: te duele?
Mark: sí, creo que me llevare un cojín para sentarme más cómodo.
Fran: quizás fui algo brusco contigo.
Mark: claro, no tiene nada que ver que tengas un pene de 22cm, no, para nada.
Fran: es cierto, no fui nada brusco ayer. Seguro que mi tamaño junto con que fuera tu primera vez es el causante de tu malestar.
Mark: en fin, me voy al cole; hasta luego cariño.
Fran: adiós amor.
Se despidieron con un beso que por mucho que intentaban separarse, no lo hacían. La falta de tiempo hizo que finalizaran el beso definitivamente.
Carlos: hey que tal estas?
Mark: bien, bien. Como te fue tu segunda semana de celo?
Carlos: bueno, estuve a punto de pedirte que me hicieras un oral.
Mark: dime que no es cierto.
Carlos: lo siento, pero dije "casi" porque al final apareció otro que... Alvin me hizo el oral.
Mark: espera, Alvin? Pero si le pedí uno tres semanas antes de terminar y me puso caras raras. Lo que hace el celo.
Carlos: ya ves.
Muchos de los alumnos se fueron al salón de actos para una advertencia. En la clase de Mark únicamente estaba él, no le importo estar solo por media hora, se había sentado en el cojín que llevó al colegio y cerró los ojos imaginándose que estaba sentado sobre Fran, pudo sentir como le ponía una mano en la cara y le... un momento, esa mano se siente muy real.
Mark: -abre los ojos- PERO QUE!?
Fran: shhh! No grites que me van a pillar.
Mark: que estás haciendo aquí?
Fran: solo llevas cinco minutos fuera y me parecen horas.
Mark: no por eso tienes que venir a mi clase!
El lobo se sienta en la silla y sobre él sienta al joven, cara a cara, igual que cuando terminaron el acto el día anterior.
Fran: no puedo estar separado de ti.
Mark: ni yo, p-pero no es motivo para llegar a estar aquí.
Ambos se besaron, con cada beso Fran quitaba ropa del contrario y este hizo lo mismo una vez que no le quedó ropa por quitar, de cintura para arriba claro. Mark dejó el formado pecho de su novio al descubierto y lo exploraba con sus manos, ya se conocía casi cada centímetro de esa parte del cuerpo.
Mark: -jadeando- has sido un lobo muy malo, tendré que castigarte cuando vuelva a casa.
Fran: -ansioso- y por qué no aquí y ahora? no hay nadie.
Mark: te digo que no haré nada más de lo que ya estamos haciendo.
Siguieron sumidos en su burbuja de placer hasta que sonó la campana dando, ahora sí, inicio a las clases.
Mark: -vistiéndose- se acabó la diversión, espérame en casa.
Fran: -le da un beso- lo haré.
Nada más salir de la clase cierto lobo curioso entró en ella, con una mirada de asco y seriedad se dirigió a su compañero.
Oliver: eres un asqueroso y repugnante animal! No entiendo la razón por la que te invité a mi casa.
Mark: ???, creo que el sentimiento es mutuo ahora.
Oliver: no sé cómo hay gente como tú con amigos, malditos maricones.
Mark: -serio y enfadado- lo que haga en mi intimidad no te importa; igual que no me importa lo que tú hagas.
Oliver: no te iras de rositas desviado.
Mark: acaso no lo sabias ya? Pensaba que sí por lo que dijeron dos semanas atrás, además -le enseña el dedo de en medio- monta y pedalea.
Furioso intentó seguir discutiéndole mas los demás compañeros llegaron y ahora tendría que guardarse su opinión.
Fran caminaba de regreso al coche, muchos alumnos de mayor edad lo miraban sorprendido, nunca antes habían visto a un lobo tan grande, ni lindo.
Zorra: Hola guapo, cómo te llamas?
La zorra que estaba coqueteando era Sam, una chica que tenía pechos como melones. Muchos tíos babeaban cada que ella pasaba por delante de ellos, otras chicas solamente podían pensar en que tal vez fuera bisexual para tener alguna oportunidad.
Fran: me llamo Fran, para que quieres saber eso?
Sam: oh, cosas sin importancia; ya que parece que no nos conocemos que tal si esta tarde quedamos en algún lugar para tomar algo, y nos conocemos mejor.
Fran: -serio- no me interesas.
La respuesta le cayó como un jarro de agua helada a la chica.
Sam: te haces el duro eh? Bueno, no serás el último que acepta algo así.
Fran: te he dicho que no me interesas, ahora apártate por favor.
El lobo caminaba en dirección a la salida dejando atrás a las atónitas amigas de la zorra y a ella misma. Nunca antes había sido rechazada, menos por alguien tan guapo como muchos otros de la escuela.
Sam: estas rechazando a estos bebés? –mueve los pechos.
Fran: sí y este amigo –se baja los pantalones y calzoncillos dejando su miembro al descubierto- ya tiene dueño!
Todos en el pasillo se quedaron mirando el miembro del lobo, muchos se sonrojaron al verlo, otros se sorprendieron por lo que acababa de hacer. Como no podía ser de otra manera, muchos de los que se habían fijado en él se imaginaron que "eso" lo tenían más cerca.
Fran: maldita sea, si te digo que no es NO!
Enfurecido regresó a casa, esperando con ansias la llegada de su amado que le tenía que "castigar" por haber aparecido en su clase sin avisar.
Carlos: -curioso- porque tienes un cojín en el asiento, espera no me digas que...
Mark: sip, si estás pensando eso, sí.
Carlos: que se siente al haber perdido la virginidad?
Mark: -sonrojado- un poco adolorido, se siente increíblemente bien, como si estuvieras en el cielo.
Carlos: jeje, cada uno lo siente a su manera.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro