El tanque llegó a casa, los tres bajaron del vehículo para disfrutar que, al final, habían encontrado y rescatado a Fran.

Fran: que bien estar de vuelta en casa tras casi una semana.

Mark: ya tenía ganas de que estuvieras conmigo otra vez.

Carlos: ejem, que aún seguimos aquí.

Fran: seguís?

Alvin: Mark! Pensé que te había perdido, no respondías a mis llamadas!

Mark: se me debió de caer el auricular y por eso no contestaba.

Fran: -celoso- quien es él?

Mark: es Alvin, era mi novio, volvió para que le perdonara y le diera otra oportunidad, ya destruí todas sus posibilidades.

Alvin pudo ver definitivamente al grandullón, un lobo de metro noventa, mucho musculo y cuerpo, nada que ver con él que a pesar de estar decentemente, estaba viendo un cuerpo que únicamente podía soñarlo.

Alvin: -nervioso- t-tú e-eres F-Fran?

Fran: -serio- sí. Algún problema, amigo?

Mark: estas nervioso porque no te imaginabas a Fran de este tamaño? Jaja, y tú estás celoso!? Vaya dos patas para un banco.

La pantera tuvo que guardarse su opinión, pensaba dejarle claro que pese a que estuviera viviendo con Mark, él era suyo y que se apartara del camino porque le iba a reconquistar. Pero viéndolo ahora... es mucho más intimidante de lo que pudo imaginarse. En verdad le daba mil vueltas, ahora entendía porque ya no le amaba.

Alvin: bien, entonces ya no pinto nada, un placer haberte ayudado.

Mark: el placer es todo mío.

Alvin: -en el oído de Fran- cuídalo, no lo dejes ir como hice yo.

Luego de despedirse se marchó del lugar dejando a los tres en la entrada de la casa.

Mark: hogar dulce hogar.

Fran: ya puedo provocarte de nuevo! –en su cuello- no sabes lo que he añorado estos momentos, quiero volverme tu macho ya!

Mark: puedes esperar un rato? Yo también quiero pero ya te dije lo que...

Fran: no en ese sentido, en el otro sentido.

Mark –sorprendido- .......

Carlos: a alguien le ha comido la lengua el gato, o mejor dicho el lobo.

Mark: -sonrojado- ca-callate!

Dos semanas habían pasado desde el rescate, Mark enseño a conducir a Fran y por las mañanas se iba a dar una vuelta con el Thiger después de haberle llevado al colegio a Mark. De esta manera se aseguraba de que no le volvía a pasar lo mismo.

Un agente de la C.I.E. se acercaba a un edificio de cinco plantas, entró en el portal y tras mirar los buzones para encontrar al objetivo, fue derecho a su casa.

Ding-dong

Alvin: un momento!

La puerta se abrió y pudo ver como el perro policía se quitaba las gafas para poder verle con más claridad.

John: buenos días, soy el agente John, de la C.I.E. hace poco que hemos sufrido un ataque informático y aparentemente todas las pistas nos llevan a usted.

Alvin: no sé de qué me hablan, yo no soy informático.

John: no pero le encanta la informática y la practica en su tiempo libre, verdad Alvin?

Alvin: no entiendo de donde han sacado esa información, pero le digo que está equivocado en eso, buenos días.

Intentó cerrar la puerta pero antes de eso el perro puso el pie para evitar que se cerrara. La pantera se sorprendió y se puso algo nervioso, que se hacía en momentos así? Intentó convencerlo de que se fuera, pero no parecía tener intención de irse.

Alvin: no me gustaría ser grosero con usted, pero podría quitar su pie de la puerta para que pueda cerrarla? Gracias.

John: no, esto no funciona así, usted es el sospechoso y yo la autoridad que vengo a por pruebas más exactas; habla, ayudaste a escapar a Fran Díaz?

Alvin: no sé quién es.

John: tal vez esto te ayude, Mark González? Ha creado a una máquina de matar, un monstruo por así decirlo y creemos que pueda usarlo en un futuro. Nosotros queremos evitar eso.

Alvin: me suena Mark, fui su novio durante un tiempo, luego lo dejé por un idiota. Armas? Mark? Por favor, si no haría daño ni a una mosca! Deben de estar confundidos, o alguien les está tendiendo una trampa.

John: mira, pedazo de idiota morado, o me dices como han conseguido entrar al cuartel de Moky-Desl o acabo contigo aquí y ahora –le apunta con una pistola.

Alvin: y-yo no sé de qué me estás hablando.

John: enserio –baja el arma- una pena para muchos.

Alvin se dio la vuelta para ir a por un vaso de agua.

John: más para ti –apunta y dispara dos veces- por no colaborar, imbécil.

El policía se marchó del lugar dejando que la pantera empezara a perder sangre. A los pocos minutos en las noticias se daba el homicidio.

TV: (noticias) un joven de 21 años ha sido encontrado en su casa desangrándose después de que recibiera dos disparos en la espalda, una vecina ha alertado a los servicios de emergencia...

Carlos: es Alvin!

Mark: hay que ir a su casa, deprisa.

Los dos se subieron en el coche del lobo y condujeron lo más rápido para llegar al edificio antes de que los agentes, sanitarios y bomberos pudieran intervenir.

Mark: Alvin! Mírame, me ves? Sabes quién soy?

La pantera abrió los ojos para poder ver quien le estaba sujetando y llevando en volandas.

Alvin: Mark! Has venido! A pesar de todo lo malo que te hice sigues siendo el dulce Mark que sonríe y es amable cuando tú no lo has sido con él.

Lo metieron en el coche mientras se aseguraban de que aún no estaban los sanitarios.

Mark: ya estás en mi coche, ahora nos vamos a casa.

Alvin: t-te estaba esperando para irme.

Mark: irte? Y a donde sin la mitad de tu sangre, idiota.

Alvin: al infierno, ahí se va cuando uno juega con los sentimientos de alguien tan bueno como tú, que desperdicia a la fursona más importante por un gilipollas que luego te da la espalda a la primera de cambio.

Mark: Carlos, písale!

Carlos: te recuerdo que no tengo carné y que no llevo seguro de coche!

Mark: no importa, ya pagare yo las multas y desperfectos; tranquilo Alvin, te pondrás bien.

Alvin: no Mark, llévame a un hospital, no quiero morirme en tu casa, no quiero mancharte la alfombra de mi sangre, no después de lo que pasó.

Mark: deja ese momento y ahora piensa en que te voy a salvar.

Alvin: no seas tonto, los dos sabemos que no eres médico, poco vas a conseguir llevándome a tu casa, lo mejor es que vaya a un hospital.

Mark: no tenemos tiempo, si pusiéramos rumbo al hospital te vas a morir sin siquiera llegar.

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Vaya, John no para de causar problemas, logrará Mark salvar a Alvin?