Mark es un joven de 18 años, que no se puede decir que sea normal. Tiene una gran capacidad para inventar lo que sea y lleva a cabo todos sus experimentos de forma exitosa pero de poco le puede servir si nunca publica ni da a conocer sus logros. Hay otra realidad, pese a su gran inteligencia casi no tiene amigos y todas las veces que ha tenido pareja le han engañado desde que comenzaron, lo que en muchas ocasiones lo lleva a una depresión de cerca de dos meses, aunque muchas de ellas apenas llegan al mes pero la tristeza y la falta de ganas le puede durar varias semanas más.

Mark estaba sentado en el banco del parque donde había quedado con su novio, hacia unos días que no se veían debido a que estaba de exámenes finales. El tiempo pasaba y parecía no llegar hasta que pudo verlo correr al lugar.

Pantera: -cansado- ya...he...llegado.

Mark: te tardaste, ha pasado algo?

Pantera: no, solamente no me di cuenta de la hora.

Mark: como estas?

Pantera: bien, gracias por preguntar.

Mark: he estado pensando en que esta tarde-noche podríamos ir a mi casa y estarnos un rato con...

Pantera: oye Mark acerca de eso.

Mark: qué?

Pantera: ya sabes que te quiero y tal pero me parece que esto no puede seguir ahora mismo.

Mark: eh?

Pantera: que no puedo estar en una relación contigo ahora, y no quiero que te lo tomes a mal.

Mark: claro, estas con otro no?

Pantera: como lo sabes?

Mark: no hace falta ser tan inteligente para estas cosas además de haberlas sufrido todas y cada una de las veces que has tenido pareja; durante cuánto tiempo más me van a tener que seguir tomando el pelo?

Pantera: pe-pero yo no he jugado contigo, bueno salvo al final.

Mark: -llorando- vete, no quiero volver a verte! En mi vida inútil!

El lobo se fue corriendo lejos del banco dejando a su ex en el lugar.

Tigre: la pifiaste, te dije que no deberías de hacer algo así.

Pantera: ya pero ya ha sufrido bastante, no quería ser el siguiente.

Tigre: pues buen intento, porque te has convertido en el siguiente de la lista.

Ambos chicos se fueron del parque, mientras que Mark seguía corriendo hacia su casa. No era un piso como muchos otros de sus compañeros de clase, sino que era una casa con dos pisos y un gran almacén en la parte trasera de ella que tenía su taller e inventos. Se metió en su habitación cerrando la puerta con gran fuerza, al fin de cuentas sus padres no vivían con él asique podía gritar todo lo que quisiera que nadie lo escucharía.

La casa en sí era de su abuelo que había fallecido cuatro años atrás y ahora la usaba él, muchos de sus inventos los consiguió a partir de las notas dejadas de Brayan, su abuelo, que había conseguido investigar acerca de todos sus proyectos aunque Mark aún no había encontrado el proyecto estrella de su abuelo, por más que buscara no había nada de información.

Mark se entretuvo buscando, nuevamente, los documentos que le revelarían finalmente el proyecto. Buscaba por toda la habitación, cocina, baños y hasta se puso con un detector de metales por el jardín por si las moscas.

Mark: debería de estar por aquí, pero que estoy haciendo? Como se le hubiera ocurrido a mi abuelo encerrar lo que fuera en una caja y enterrarla en –el detector de metales da una señal- el jardín?

Rápidamente Mark dejó una marca en el lugar y se fue a por una pala para cavar, al medio metro de haber cavado se encontró con una caja que, a su parecer era un maletín, después de sacarlo del agujero pudo verificar que efectivamente era un maletín.

Mark: enserio abuelo? No tenías mejor cosa que un maletín? –Tapando el agujero- hay cajas llamadas capsulas del tiempo que son ideales para estas cosas, no me creo que hayas sido tan "cursi" con esto, aunque pensándolo bien, si no has tenido tiempo para guardarlos es normal que usaras lo primero que encontraste a tu alcance.

Limpio el maletín de tierra y después de eso prosiguió a sacar los documentos, era el proyecto especial como lo decía en la portada de la carpeta "Proyecto Ressurrection". Mark no le dio importancia en un principio al título y sacó todos los papeles. Había un montón de apuntes y de datos interesantes que solo unos pocos, por no decir nadie, entendía.

Mark: parece que a mi abuelo se le acabaron los nombres interesantes para sus investigaciones.

Desganado se subió a la habitación y se tumbó en la cama hasta que se durmió mientras ojeaba los documentos de su abuelo intentando descifrar sobre que trataba el "Proyecto R". Durmió por el resto de la tarde y toda la noche hasta que el despertador lo hizo darse cuenta de que ya era hora de irse a la escuela, encima ese día recibía las notas finales.

Profesora: bueno chicos estoy seguro de que muchos están muy contentos por haber aprobado y los que no pues os veremos aquí el año que viene, que tengan un buen verano!

Mark había repetido, no es que no hubiera estudiado, que también era por eso, sino que ese año dio más importancia a sus inventos que a sus estudios.

Paul: qué coño haces hijo! Se suponía que tenías que estudiar y mira estas notas!

Mark: no recuerdo que las tuyas fueran diferentes, tengo que recordarte que repetiste dos veces el mismo curso y con las mismas asignaturas?

Alya: cariño, quiero que en este curso no pase lo mismo, me has entendido?

Mark: si mama.

Alya: bien, pues ya sabes, nos vamos que tus hermanos están por llegar a casa.

Ambos padres se fueron del lugar, dejando nuevamente a su hijo con la soledad de la casa. Ahora solo podía hacer una cosa y es descansar, no se encontraba nada bien y parecía que empezaba a tener fiebre.

Mark: es hora de probar el "Veneno H".

El "veneno H" es un tipo de anticuerpos capaz de curar el 80% de todas las enfermedades conocidas de forma rápida y eficaz, sin efectos secundarios, invención de su abuelo, perfeccionado por él. Aunque no lo había probado en su cuerpo con esa intención antes, esperaba obtener el efecto observado durante su investigación y anteriores usos. Y resultó que fue así.

Mark: EUREKA! Ha vuelto a funcionar y mejor de lo que esperaba.