El timbre del teléfono hizo que se despertara de su sueño, con ambas manos, restregó sus ojos, para poder acostumbrarse a la luz, bostezo y se levantó de la cama. Tomo el aparato que estaba encima de la mesa, desbloqueo la pantalla y miro el mensaje con el nombre de "Sakura".

"Necesito que mañana nos veamos en Coffe Paradise, quiero hablar contigo a solas, por favor :(, te espero a las 7 de la mañana."

"Deberías de invitarla a salir" la voz de Naruto inundo su mente.

-Esta bien, la voy a ver para dejar las cosas en claro – dijo Sasuke en voz alta.

Sasuke aparto la vista del celular y miro hacia el despertador, eran las 6:00 am, era muy temprano a lo que estaba acostumbrado. La hora de trabajo eran a las 9:30, ya había faltado mucho al trabajo con el pretexto de estar enfermo, si seguía así iba a ver sospechas, preparo mentalmente una agenda, podía ver a Sakura a la hora indicada e ir así juntos al trabajo, era necesario ya asistir.

Camino hacia el ropero, saco una camisa negra y un pantalón azul. Se quito el pijama y se vistió rápidamente.

El azabache bajo de las escaleras, tarareando una canción y se detuvo en medio del pasillo para buscar al rubio. Solo unos ronquidos bastaron para que se acercara a la sala con una sonrisa, al llegar se topó con el cuerpo de Naruto tirado en el sillón, con su tamaño de adolescente, cosa que le resultó extraño.

Su rostro dormido era hermoso, los cabellos dorados, se posaban en su rostro con rebeldía, un hilo de saliva escurría por su boca. Sasuke sonrió y acerco su mano para apartar los mechones que caían en su frente - Naruto... despierta - susurro.

Naruto se removió.

- Despierta – Sasuke beso su mejilla - tengo que salir –

Solo eso basto para que Naruto abriera los ojos, sus ojos azules se conectaron con su mirada azabache, Sasuke solo sonrió a pesar de que sabía que Naruto estaba incomodó por su cercanía. Su cuerpo tenso lo delataba, pero no quería apartarse de él, poso sus labios en su frente y acaricio sus cabellos - Tengo que salir a trabajar -

Naruto cerro sus ojos, disfrutando de la caricia del Uchiha - ¿Por qué tiene que ser hoy? -

-Ya he faltado tres días, ya es necesario que asista -

-Sasuke - susurro, no quería quedarse solo, no le gustaba - ¿No puedo ir contigo? -

Sasuke se apartó, solo para mirar el rostro de Naruto - Me encantaría llevarte, pero está prohibido llevar a personas que no son de la compañía -

Naruto frunció los labios -La otra vez me llevaste -

- Eso fue una emergencia, todavía no sabias cosas del mundo - Sasuke se sintió culpable - Si quieres algo, no dudes de llamar a la recepción - tomo las llaves del auto que se encontraban en la mesa - el número está pegado en el refrigerador, ¿Sabes utilizar el teléfono? -

Naruto se sentó en el sillón - Tantas veces que te he visto usarlo, ya me lo sé del derecho y al revés -

-Estupendo, entonces no hay ningún problema. No olvides, que eres alguien importante para mí -

Naruto se sonrojo al escuchar esas palabras – Yo...- bajo la mirada, no sabía que contestar, se sentía patético, al no poder corresponder lo que él le estaba otorgando.

-No tardare, te lo prometo - Sasuke se separó y camino hacia la puerta, no esperaba ninguna respuesta, solo quería que Naruto supiera que para él, es alguien importante. Abrió la puerta y miro de reojo a Naruto, este estaba en la misma posición, solo suspiro y salió del departamento, cerrando la puerta detrás de si.

Naruto agarro el cojín y lo estrello en la puerta. Se sentía mal, pero el miedo no le dejaba expresar lo que sentía realmente, miedo a no ser correspondido a pesar de que Sasuke demostraba que también sentía algo por él, tal vez era ¿Amistad?, ¿hermandad?, no lo sabía, pero si seguía así, algún día de estos iba a explotar y dar su brazo a torcer y sufrir como lo hizo Fugaku.

Necesitaba algún consejo y sabía a quién recurrir o esta vez a quienes recurrir, alzo sus manos dispuesto a llamarlos, hasta que varios golpes en la puerta lo interrumpieron. Se le hacía raro que alguien viniera a estas horas, por su mente paso la figura de Sasuke, se levantó del sillón y camino hacia la puerta, tomo la manija y abrió.

Se topo con una joven de cabellos amarillos opacos y ojos azules, su vestimenta consistía en una blusa morada, con una falda roja, ella alzo una ceja y lo miro de arriba a abajo, como analizando a la persona y buscando algún defecto en él.

Naruto se rasco la cabeza algo incomodó – Sasuke no se encuentra en casa -

La joven se cruzó de brazos y sonrió - Eso lo sé perfectamente, solo vine a verte a ti -

Naruto alzo una ceja - ¿A mí? No te he visto nunca en mi vida y no sé cómo te llamas -

-No te preocupes, yo tampoco se cómo te llamas y no te he visto en persona, solo me han hablado de ti, pero tengo modales, ¿Sabes?... Mi nombre es Ino Yamanaka y ¿tu? - tendió su mano hacia él.

Naruto sonrió y correspondió el saludo - Naruto Uzumaki -

Ino asintió y aparto su mano rápidamente - Naruto, ¿No me vas a invitar a pasar? Mi amiga acaba de cancelar nuestra cita y me quede con ganas de café-

El rubio asintió, la chica no llevaba nada bueno en su corazón, pero no quería ser grosero y menos con una mujer - Claro, adelante - se hizo un lado, para permitirle el paso.

-Gracias - Ino entro al departamento, miro por todos lados, buscando algo interesante de que platicar - Bonito departamento - miro de reojo a Naruto.

-No es mío, Sasuke se encarga de limpiarla y de acomodar las cosas en su lugar - cerró la puerta.

-Entonces ¿Qué haces viviendo con el Uchiha? - se acercó al sillón y se sentó - ¿Son compañeros de cuarto o algo así? -

Naruto asintió, tratando de comprender las palabras de Ino - Compañeros de cuarto - sonaba mejor como descripción de su estadía con el Uchiha.

-Interesante ¿De dónde vienes Naruto? -

-¿Eh? yo... soy de Tokio -

Ino frunció el ceño, no tenía nada interesante de que platicar con él, pero cambio su expresión y sonrió - Sakura ahora mismo debe estar con Sasuke, comiendo pastel, ¿No lo crees? –

- ¿Qué? -

Ino se hizo la sorprendida - ¿O no lo sabias?, Sakura me cancelo, porque Sasuke la invito a tomar un café -

Naruto sintió como su corazón se partía en dos, había creído en las palabras de Sasuke, pensó que en realidad si era importante, pero al parecer no "Sabia que esto era un juego, solo me trata como un amigo" - No... lo sabía - susurro, sentía que se iba a desmoronar, pero no quería hacerlo frente a ella, sus piernas empezaron a temblar.

-Uh, que mal amigo, pero no te preocupes, tal vez no te lo dijo porque era algo personal, ya sabes ¿Podrías prepararme una taza de café? Por favor -

Naruto asintió lentamente, camino hacia la cocina, con la cabeza gacha, después tendría la oportunidad de llorar y de animarse a sí mismo de regresar a la caja, si Sasuke ya encontró su felicidad, no servía de nada estar aquí, volvería estar solo, durmiendo en la oscuridad, sin ningún ruido.

Ino no aparto su vista del rubio, hasta que desapareció en la cocina.

Se levantó del sillón y empezó a buscar algo que delatara algún tipo de romance con Naruto, busco en cajones y miro las fotografías de la familia del Uchiha, estaban los tres hermanos, Itachi Uchiha y Sai Uchiha, el chico que desapareció por estar buscando fama había compartido varias palabras con él, pero no daba ningún indicio de romance, "¿Dónde estarás Sai?", suspiro y guardo las fotos en su lugar.

"Ino"

Un susurro, hizo que se detuviera en su búsqueda, miro por todos lados, buscando el dueño de la voz. "Ino", la voz sonaba como el de un hombre.

"Ino"

Ino miro la caja de pandora, esta se movía con desesperación, humo negro empezó a salir de la orilla, cualquier persona que viera eso, hubiera corrido, pero una persona curiosa, no.

"Ino", cada vez que se acercaba, la voz sonaba más fuerte y claro, sus manos tocaron la tapa de la caja y este se dejó de mover, puso una mano en la cerradura para poder abrirlo.

-¡No abras eso! - La voz de Naruto, se escuchó lejano para ella, se sentía hechizada, el estruendo de las tazas al caerse, no la despertaba de la ensoñación.

-¡Ino, detente! -

Ino destapo la caja, de ella salió nubes negras, que oscurecieron la habitación, no solo en el departamento, también el cielo y Naruto supo que todo estaba perdido.