(Este poema es parte del libro Letras de Mujer)

Quiero ser una sonrisa en los labios de aquel que me tenga en su mente.
Una caricia suave que recuerde ternura.
Una carcajada emotiva cuando recuerden mis locuras.
Un libro escrito contando mil aventuras;
Una lagrima llena de felicidad,
Un aplauso a la imaginación.

Quiero, cuando ya no esté.
Que sea un recuerdo grato en los que me conocieron.
Haber tocado de manera positiva
Las vidas que encontré en el camino.
Que haya sido inspiración de armonía,
Que recuerden mi nombre en una melodía.
Que recuerden que el amor lo sana todo,
Aún hasta la más desgarradora herida.

Quiero ser susurro suave en el viento.
Un paisaje de atardecer en el firmamento.
Un arpegio de emociones,
Un tornado de canciones,
Un trino que repica gracia,
Y se une al cantar de las aves.

Quiero ser recuerdo imborrable
De experiencias vividas,
Que alegren el alma
Y cambien para bien vidas.
Quiero, cuando ya no esté.
Que mi vida no haya sido solo mía.
Porque mi corazón fui repartiendo
Al que conocía.
Y espero que ese pedazo mío siga latiendo,
Provocando una sonrisa,
Una tierna mirada,
Un sinfín de emociones,
Amor, alegría y canciones.
Cuando ya no esté.

Por Gloria I. González Agosto