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Capítulo 28: Mi Novia

—Gracias.—Dije tomando la bolsa con las cosas que acababa de comprar, unas gafas de sol, chicles y una soda de cola.

—¿Crees que me quede bien uno de esos sombreros de vaqueros, Charlie?—Leah estaba recostada en el mostrador con su barbilla apoyada en su palma. Achinó sus ojos a la sección de sombreros—. Ya vuelvo.—Se excusó y se dirigió a probarse uno.

Leo nos prestó su camioneta para cargar combustible a la gasolinera más próxima. Y por supuesto, no pudimos resistirnos a curiosear en esta tienda.

—Hola.—Después de tres segundos caí en cuenta de que el chico estaba hablándome. Su pelo era castaño oscuro, igual que sus ojos. Tenía una sonrisa de lado y sus cejas alzadas—. Soy Jayden. No creo haberte visto en el condado Travis.

—Soy Ch...—Esperen, un chico estaba hablando conmigo de la nada. ¿Era coqueteo, no? Estaba a punto de presentarme y retirarme de esta situación pero de pronto Leah apareció.

—¡Chasie!—Exclamó, llamándome por otro nombre. Yo me mostré confundida pero no dije nada—. Mi mamá está ansiosa de verte, luego de estas tres largas semanas...—Leah paró de hablar cuando Jayden tosió intencionalmente y ella se volteó a encararlo—. Oh, lo siento. Soy Lisa. No sabía que conocías a mi novia...

—¿Novia?—Él dijo atragantado. Me miró y luego volvió su vista a Lisa. Ya empecé a entender la broma y juego de Leah y no pensaba impedirlo.

—Pues, sí. Chasie es mi novia. Oh, pensé que se conocían y por eso se hablaban...¡¿Qué es esto, Chasie Morgan?!

—Yo no...—Empecé lentamente a decir.

—¡¿Me estás metiendo los cuernos?! ¡Y con un chico! Le prometiste a mi mamá que eras cien por ciento lesbiana, ¡tú ya sabes el daño que me hizo cuando descubrí que mi ex-novia era bisexual!—Me apuntó con su dedo índice en mi pecho, acusándome. No sabía si reír o llorar. Estaba más cerca de la primera—. Y ahora estás aquí, engañándome con tu amante...¡masculino! Que asco, ¿acaso no sabes los cerdos que son los hombres? ¡Son todos unos sexistas, machistas y unos malditos infieles...!

—Oye, eh, Lisa. Tranquila, yo solo le preguntaba si sabía dónde estaba el baño, nada más, lo juro.—Él dice un poco desconcertado y tratando de salvarse de la situación. Estaba muriendo de risa por dentro—. Tú, solo tranquila, ¿sí? Estoy seguro que tú, eh, novia, te es totalmente fiel. Y también es totalmente, eh, lesbiana.—Hizo una mueca como si lo que acaba de decir fuera lo último que pensaría que diría alguna vez. En actitud incómoda, se marchó. No sin antes darnos una mirada que mostraba terror a la situación más bizarra de la historia.

—Okey.—Dije sin saber qué decir exactamente.

—Lo siento, Chasie. Estaba aburrida y molesta, ¿puedes creer que esos malditos sombreros me hacen ver cómo una verdadera vaca? Es decir, sé que son sombreros vaqueros pero no pensé que era tan literal.—Masculló enfada y frunciendo su boca.

—Esta bien.—Me encogí de hombros—. Solo esta vez no descargues tu tensión con Leo, quiero dormir esta noche.—Bromeé. Leah soltó una estruendosa carcajada y dobló su estómago.

—Perdón por eso, pero bueno, ya sabes. Es difícil controlarlo.—Torció una sonrisa—. No es como si tú y Dylan no lo hicieran.—Dijo y me quedé callada, mirando hacia un lado.

—¡Oh Dios mío!—Exclamó como si de Jeanice de Friends se tratase.

—Leah.—Farfullé para que hable más bajo.

—¿No lo hicieron?—Susurró acercándose más hacia mí. Yo no contaba hacerlo estar totalmente borrachos y no recordar nada, así que, en pocas palabras, no.—¿Por qué? ¿Eres...? Ya sabes...
—No, no es por eso.—Negué con la cabeza sobre el tema de mi virginidad—. Pasará pronto, solo esperamos. Tal vez esta noche.

—Por supuesto que sí. Es más...—Dijo sin finalizar y se dirigió al mostrador y al hombre gordo detrás de él—. Llevo estos.—Agarró dos cajas de condones que estaban en un estante—. ¿Sabe qué? Llevaré todos.

Él hombre regordete abrió muchísimo sus ojos pero no dijo nada y cobró los diez paquetes. Leah sonrió satisfecha y me tendió la bolsa con los preservativos.

Volteé mis ojos y fruncí mi boca en una línea recta y tomé la bolsa. Podía seguir notando la mirada de asombro del cajero.

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Hola, me reí mucho con este capítulo, amo a Leah, o debo decir, "Lisa". Comenten su opinión o voten, nos vemos, gracias por todo :)
Mitch.

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