Charlie POV

Reí ante al mal chiste de Dylan y él fingió enfurruñarse.

—¡Vamos, es divertido!—Él exclamó.

Estábamos sentados en el suelo de mi habitación. Dylan apoyaba su cabeza en mi cama y yo me encontraba entre sus piernas. Él me abrazaba desde atrás, juntando nuestras manos.

—No es gracioso. Espero que sigas estudiando, por qué te morirás de hambre si quieres ser comediante.—Dije en broma.

—¿No lo entiendes? ¡El gato era egipcio!—Él volvió a insistir.

—El chiste no es gracioso, supéralo.—Con mi mano di unas palmadas en su brazo en señal de confortación.

Nos quedamos callados. Completo y absoluto silencio. No era para nada incómodo y eso era genial. Mi mente empezó a divagar, sobre cualquier cosa. Y lo recordé...eso.

Mi mente ya había hecho este famoso click que me permitió recordar, y me confundió más que aclararme algo. Me atreví a preguntarlo aunque de algún modo me ponía nerviosa.

—Dylan...—Empecé lentamente a decir.

—¿Sí, Charlie?—Besó mi cien y mi piel se erizó ante su tacto.

—¿Recuerdas...?—Aclaré mi garganta—. ¿Recuerdas ese día en el que te pregunté si habías ido al cine? Ese día...el día que teníamos que ver esa película vieja.

—Si, lo recuerdo. Era un capítulo.—Dyaln río—. Casi muero de aburrimiento.

—Si, y también habíamos hablado. Y te pregunté eso. Lo del cine.—Proseguí.

—Sí, no sé cómo lo supiste. Me acuerdo, fuimos con Leo y Leah a ver Shared Lips. Leah literalmente nos arrastró hacia allí.

No dije nada. ¿Leo y Leah? Sabanna me dijo...

—Sabanna me dijo que ustedes fueron al cine. Es decir, tú y ella.—Terminé de exponer mi duda. Sabanna tal vez me mintió, o tal vez Dylan no quería hablar de su ex-novia.

—¿Sabanna?—Dylan preguntó en tono confundido. Yo asentí.—Sabanna...Leo no estaba equivocado al final.

—¿Cómo es eso?—Pregunté frunciendo el ceño.

—Leo nos dijo que le pareció haber visto a Sabanna cuando fue a comprar las palomitas. Supongo que sí era ella.

—No creí que iba a ser tan mentirosa. Cuando apareció en la puerta de mi casa solo pareció una chica inocente preocupada de perder su novio.—Dije recordando y Dylan suspiró.

—Yo tampoco creía que era de las que besan a chicos frente a su novio pero supongo que uno nunca lo sabe con seguridad, ¿verdad?

Me volteé a ver a Dylan, a esos preciosos ojos mieles. Con mi dedo índice empecé a acariciar su mejilla suavemente.

—Nunca haría eso. Me importas, Dylan. Mucho.—Lo miré directo a los ojos.

—Lo sé.—Una sonrisa fantasma bailó en su boca—. Tú también me importas, Charlotte Taylor Sheridan. Me alegra haberme acostado contigo estando borracho y sin saber tu nombre.—Dijo bromeando, con cara de esperar mi reacción. Y eso es lo que tuvo, un puñetazo en su hombro.

–¡Auch! Uno no lastima a alguien que le importa.—Fingió dolor.

—Cállate.—Dije antes de unir nuestros labios. Y eso duró apenas un segundo ya que el celular de Dylan empezó a sonar. Rodé los ojos fastidiada.

—Lo siento, tengo que contestar. Es Leo.—Dijo y apretó el botón para aceptar la llamada.

Hablaron durante un minuto, apenas presté atención. Pero con él tono que empleaba Dylan, supuse que había un problema. Él corto la llamada, luego de despedirse de su amigo y me miró.

—Tenemos que hacer algo importante, ¿te apuntas?—Preguntó en tono travieso.

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Hola:) feliz año nuevo para todos. Aquí les dejo este pequeño capítulo. Dylott ❤️❤️❤️
Mitch.