El club de Basketball.
El dia amanecia y mi despertador sonando a todo volumen.
Hoy no tenia muchas ganas de ir a la escuela pero no devia darle problemas a mi padre faltando. Me levante casi arrastrando mi cuerpo, tome una ducha rápida y me puse mi uniforme rápidamente.
Salí de casa con mi bolso en mano, no corría pero si daba pasos algo largos y rápidos.
Ayer me había quedado despierta hasta muy entrada la noche gracias a que estaban pasando un partido de la NBA, el partido fue muy reñido. Había estado fascinada por completo.
Llegue pronto a la escuela, camine hasta mi casillero y deje algunas cosas, hoy tendríamos educación física según el horario que me habían entregado, así que había traído la ropa de educación física para cambiarme aquí.
Me dirigí hacia mis clases, pero mi sorpresa al llegar fue no encontrar a Akashi sentado, su lugar estaba vacío, dentro de mi sentí un sentimieto de decepción, eso me confundió, menie mi cabeza y me dirigi a mi asiento.
Las clases pasaron rápido y el timbre del almuerzo sonó, salí dirigiéndome al comedor, hoy no se me antojaba nada en especial así que solo comí una manzana y un poco de agua.
Después del almuerzo tocaba educación física así que nos quedaríamos afuera, aproveche el tiempo que tenia, salí para buscar el edificio donde jugaban los chicos de basket.
Camine por el patio hasta encontrarlo, quede sorprendida tan solo llegar, estaban teniendo un partido de practica, entre ellos estaban los mismos de ayer, eran sorprendentes.
Me quede en la entrada observando, así no seria una molestia.
-Ah, ese pase quedo mal, esa jugada no esta bien- susurre.
-Vaya, el echo de que te percataras de ese pequeño error es interesante- hablaron detrás de mi.
Voltee la cabeza asustada al sentir también el aliento en mi oído, poniéndome roja de la vergüenza.
-Akashi- dije sin pensarlo.
-Oh, sabes mi nombre, bueno es inevitable-
Lo mire mejor, no traía su uniforme y traía ropa informal, su cabello algo despeinado y su mirada sin expresión, al menos no tanta como ayer, detrás de el había un chico, era el mismo de ayer que fue al salón.
-Lo siento- me disculpe y trate de irme.
-Ven, quiero confirmar algo-
-Ah- me arrastro dentro del edificio haciendo que varios que se encontraban jugando nos miraran.
Nos paramos a observar el juego que tenían, estaban en el segundo cuarto, aun faltaba para que terminaran.
-Quiero que observes bien cada jugada que hagan, los movimientos y el ritmo- sentenció Akashi.
No sabia lo que estaba tramando pero así lo hice, mire cada pasada, cada dribleo y cada rebote, observe a cada jugador detalladamente.
El sonido de un silbato me hizo despertar de mi concentracion, se había acabado el segundo cuarto, tengan un descanso.
-Y bien? Encontraste algo?- me pregunto Akashi preguntándome serio. Asentí.
-Si, dos jugadores que están allá hacían las mismas manías, algunos hacen pases innecesarios, si el y el marcan a ese otro y después uno de ellos roba y driblea puede anotar sin ningún problema- hable, me sentí como si estuviese en mi lugar de confort.
-Maravilloso- dijo Akashi sonriendo.
El volteo hacia donde estaba el chico de cabello verde y le dijo algo, este camino a donde estaban sentados los chicos del equipo que estaba perdiendo.
El silbato volvió a sonar y los chicos salieron de nuevo, se lo llevaron con calma, pero me sorprendí cuando hicieron la jugada que sugerí.
Unos minutos después el equipo que estaba perdiendo salio ganador, estaba sorprendida.
-Tus cálculos fueron realmente acertados, hicieron lo que tu dijiste y salieron ganadores, tienes la habilidad de armar una jugada tan solo observar unos minutos, maravilloso-
-No, no fue nada- aun estaba sorprendida.
-Te gustaría unirte al club de basket como estratega?-
Lo mire sorprendida, era en serio lo que me decía? Estaba feliz.
-Si, si puedo ayudar en algo estara bien- conteste.
-Te presentare a los titulares para que te familiarices-
Akashi llamo a unos chicos, eran los mismos de ayer, eran enormes, pero a lo que vi ellos eran unos genios en el basket.
-Los presentare, el es Kise Ryota, Aomine Daiki, Murasakibara Atsushi, Kuroko Tetsuya y yo, Akashi Seijuro, ellos serán tus compañeros de ahora en adelante, chicos, ella es Izumi Chizuru, sera la nueva estratega-
-Wa, genial, es un placer, llevemonos bien- se acerco a mi un chico de cabello amarillo, Kise Ryota, a lo que había dicho.
-Bienvenida- me dijo Kuroko.
-Gracias- dije, no pude evitar sonreir.
- Por cierto, donde esta Momoi?-pregunto Akashi.
-Ella esta recaudando datos para el próximo partido- hablo el peliverde, a el no lo había presentado, se dio cuenta cuando me le quede mirando.
-Soy Midorima Shintaro- se presento el.
-De acuerdo, Chizuru a partir de mañana estafas presente en cada entrenamiento y partido, hablare con el entrenador, cuando llegue Momoi nos reuniremos para deliverar-
Yo solo asentí, al principio pensé que eso jamas sucedería pero estaba feliz, no podía evitarlo.
Los chicos empezaron a hablar animada mente, empezaron a jugar con el balon un poco, yo solo los miraba.
-Chizuru-chan, por que no juegas con nosotros?- me pregunto Kise sonriendo.
-Ah no, esta bien si solo juegan ustedes- me negué sonriendo un poco.
-Vamos ven, te dejaremos unas pasadas-
-Hum bueno, pero no soy nada buena que digamos- avise.
Sonreí para ir con ellos, Akashi y Midorima estaban a un lado, ellos solo observaban.
Kise y Aomine me daban algunas explicaciones, al menos no era tan novata. Kuroko fue tan amable de ayudarme también, trate de driblear y encestar, perorcomo pensaba, no era muy buena, aunque algunas sonrisas y risas suaves se escuchaban de repente.
En un dribleo que hice la pelota se fue de mi alcance, fui por ella pero al hacerlo choque con un cuerpo, eso me hizo perder el equilibrio y caer de espaldas, fue vergonzoso y terrorífico.
Al levantar un poco la mirada me encontré con un chico alto, con ojos amenazadores y una mueca en sus labios, su cabello era de un gris pálido y tenia algunas perforaciones en sus orejas.
-Ahh- exclamo quejándose y sumano trato de tocar mi rostro, mi mano sé movió por instinto golpeandole.
Lo mire asustada, su.mirada y sus gestos me asustaban, el bajo su mano para en vez de tocar mi rostro me sujeto de mis brazos y me levanto.
No pude evitar soltar un grito de susto, el chico sonreía maliciosamente.
-Haizaki- la voz de Akashi se escucho, pero en ese momento no sabia en realidad quien daba mas miedo, Akashi o el chico llamado Haizaki.
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