Pov Karol

—Déjame analizarlo, te acostaste con tu jefe ¿Y no te ha llamado? Debiste ser muy mala querida. —Dijo Valu mientras me pasaba el helado de chocolate.

—Quizá...

—Espera ¿Qué paso después del restaurante? —Dijo la rubia abriendo sus ojos como platos.

Flashback

Ruggero me llevó a casa. Me sentía rara. Quizá se hubiera acabado todo. Quizá no le gustó el sexo y volvería con Candelario.

Me llevó hasta la puerta de mi apartamento y justo cuando creía que nada iba a pasar, me tomó del brazo con suavidad.

—No te vayas —Me dijo y acto seguido me besó con dulzura.

—Es mi casa, más bien no te vayas tú. —Le pedí.

—Por supuesto que no, pequeña.

Abrí la puerta del apartamento y puse mi bolso en la cocina. Ruggero cerró la puerta y después me abrazó lentamente de las caderas apegándome a su estructurado cuerpo.

—¿Si te das cuenta de que acabamos de tener sexo, cierto? —Reí y me giré quedando frente a frente.

—¿Y si no quedé satisfecho? —Me tomó de la cintura para luego subirme a la barra.

—¿Qué es lo que intentas hacer? —Levanté una ceja.

—Que disfrutes. —Me dio un corto beso en los labios.

Abrió mis piernas lentamente mientras las acariciaba de arriba a abajo, de un lado a otro. Poco a poco fue acercando sus dedos a mi vagina, lentamente.

Introdujo el primer dedo.

—¡Ah! —Gemí.

—¿Te gusta? —Dijo e introdujo el segundo. Solté un pequeño gemido.

—Sí —Dije tímidamente.

—Eso quería escuchar.

Introdujo el tercer dedo y arqué la espalda. Ese hombre me estaba volviendo loca. Introdujo el cuarto y comenzó a masajear mi clítoris. Estaba apunto de llegar al orgasmo.

—No pequeña, aún no.

Quitó mi vestido, dejándome completamente desnuda.

—¿Tienes algo de miel? —Preguntó y me desconcertó un poco.

—Sí, está arriba del microondas.

—Gracias hermosa —tomó la miel y se acercó a mí.

Abrió el envase. Tomó algo de miel con su mano y comenzó a ponérmela en ambos senos.

—¿Nunca lo has hecho? —Preguntó y negué con la cabeza.— bueno, siempre hay una primera vez. —Sonreí.

Metió uno de mis senos a su boca y comenzó a chupar la miel que había en él. Desabotoné su camisa y acto seguido se la quité. Sacó mi seno de su boca e hizo lo mismo con el otro mientras masajeaba mi vagina.

Bajé su pantalón y su bóxer al mismo tiempo. Sentía a su amiguito listo y comencé a masajearlo. Quitó mi seno de su boca.

—Mmmhh karol, quiero estar dentro de ti ahora.

Me tomó de las caderas y apegó su miembro al mío. Gemí. Me penetró con fuerza y comenzó a hacer embestidas ligeras.

—Más —Supliqué y sonrió.

Tomó mis senos con ambas manos y comenzó a penetrarle con fuerza.

—Ah —Gemía.

Dios, Ruggero era todo un Dios en la cama.

Llegamos al orgasmo al mismo tiempo y nos quedamos dormidos.

Fin del flashback

Gracias por los 60k !!!