Narra Darien.

Me arrepentí de las palabras que dije cuando me quedé solo en la habitación, si deseaba estar con ella. Sabía ya desde hace unos días que era Serena pero continúe su absurdo juego y la forma en como me exprese ahorita estuvo mal al parecer ella entendió que si no era Usagi no quería estar con ella.

Me quede pensando sentado en la cama, debí haberla afrontado decirle que sabía la verdad desde el día en que lo comprobé no continuar con mis absurdos juegos para demostrar quién era quién.
De entrada si quería estar con ella no debí fingir que estaba borracho, realmente no tome solo hice gárgaras con la cerveza para tener el aliento de alcohólico y finalmente actúe.

Salí de la habitación para dirigirme a la de ella, toqué despacio alcanzaba a escuchar sollozos ahora estaba molesto conmigo mismo por no haber hablado y provocarle esa tristeza Serena.

-se que me escuchas, por favor abre- no existió respuesta alguna. Más que unos gritos ahogados en algo quise imaginar que en una almohada

Me quede en silencio un momento, espere un poco los sollozos fueron disminuyendo poco a poco me causaba intriga

-Serenaaa- ella no contestó - Usagi, Serena no se chica responde por favor-

Pero a pesar de mis intentos no lo logré, me resigné entonces me senté junto a la puerta primero lo hice de forma que mi espalda se recargara en la pared y mis piernas formarán un 4.
Los sollozos pasaron a ser suspiros cortados, como ese ahogamiento cuando lloras mucho.

Me sentía culpable pero me mantenía en silencio, después escuché como ella se dejó caer en la cama lo supe por el ruido que provocó en la base y el colchón, quise reírme pero no lo hice.
Pronto escuché que algo se estrelló contra la puerta, supongo que aventó alguna almohada o peluche.

Perdí la noción del tiempo haciendo círculos imaginarios en el suelo con mi dedo, pronto cualquier ruido cesó y el lugar estaba en completa calma.
Me levanté de mi lugar con piernas y pies adormecidos, toque y pronuncie su nombre despacio pero no hubo nada que me indicara que seguía despierta.

De una forma suave y cautelosa abrí la puerta, todo para ver el desastre de su cuarto varios peluches no sabía que existían estaban tirados y desordenados por toda la habitación, levanté los peluches para acomodarlos sobre su buró.

Me acerque hasta ella, me arrodille a la altura de su cara, dormida con muchos suspiros, se nota que lloró mucho, le arregle un poco el cabello. Intentando darle otro aspecto a lo desarreglado que lo tenía. Pase mi dedo índice sobre sus mejillas, se sentían húmedas.

-perdoname pequeña- deposité un beso en su frente y sonreí, busque en el armario algunas mantas, despacio y con cuidado regresé con ella, suavemente la moví pero costaba un poco, logré acomodarla el una postura cómoda, estaba por taparla cuando con su cuerpo me atrapó quedando debajo de ella, con un poco de esfuerzo con mis manos alcancé a taparnos con las mantas.

Su cuerpo transmitía una linda calidez que pronto me hizo quedarme dormido.

Abrí los ojos, un poco desorientado me di cuenta que no era mi habitación, me levanté pero ella no estaba, salí a buscarla pero tampoco la encontré. Busque en todo el departamento pero no había señal de Serena.

Tuve que prepararme para ir al trabajo, me arreglé y me dirigí al lugar.

En el camino le llamé a Serena varías veces pero ninguna tuvo éxito, llegué a la empresa y con un poco de trampa pude ver qué ella ya había entrado a trabajar. Intenté buscarla pero no la encontré en el lugar de siempre.

De hecho ni a sus amigas las vi, gran parte de mi día lo dedique a buscar a Serena pero siempre fue sin éxito.

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Al igual que la primera vez he logrado obtener información acerca de que ella si a estado viniendo a trabajar aún ahora me gustaría saber dónde se la pasa si no es en su lugar de trabajo.

Le he dejado algunas notas en su escritorio, algunas decían
"Responde mi llamada por favor Serena"
"Por favor vuelve"
"Necesito hablar contigo"
"Solo quiero que recuerdes que te quiero "

También le he escrito muchos mensajes pero al parecer ninguno lo ha querido ver. 

A la única de sus amigas que ví fue a Amy pero ella al verme reaccionó como su hubiera visto un fantasma salió corriendo  con dirección al elevador y no pude pregúntarle por Serena.
En las noches me daba cuenta que en algún momento del día ella había venido pues había algunas cosas movidas en su habitación y la puerta de su habitación yo siempre la dejaba abierta. Y cuando regresaba del trabajo estaba cerrada.

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Había perdido lógicamente cualquier signo de esperanza en que Serena volviera, el cargo de culpa y lo mal que me sentí por escucharla llorar no se han ido desde hace semanas. No tengo la cuenta exacta pero parecen meses.
Ella me parece que sigue llendo al trabajo, hace poco me pareció verla a lo lejos aunque dudo que sea ella ya que  llevaba cierta vestimenta que no va con ella.

A la rubia que vi pude apreciar que llevaba una blusa ajustada que le definía muy bien su cuerpo, una falda ceñida al cuerpo que realmente dejaba apreciar sus curvas y unos zapatos de tacón demasiado altos. Me parecía increíble la forma en como se manejaba esa chica sobre esos zapatos y la sensualidad que utilizaba al caminar.

Por ello me parecía poco cierto que fuera Serena, pero no me atreví a acercarme  por el hecho de que sentí sería cierto tipo de acoso hacía ella.

También he notado un extraño comportamiento en Amy es como si  ella buscará la forma de decirme algo pero no encuentra la forma correcta para hacerlo.

-nos vemos el lunes- me despedí de mis compañeros de área

-¿no vendrás mañana?- cuestionó un compañero

-acumule un día más de descanso así que bueno tengo más días aparte del fin de semana-

Nos despedimos y luego me dirigí al elevador, me preguntaba cómo pasar tres días en casa solo sin tener que sentirme aburrido. El elevador llegó, y luego de pulsar algunos botones llegué abajo.
Tomé un taxi y me dirigí al departamento.  En el trayecto varias veces mire mi celular con la esperanza de que ella hubiera contestado o tan solo viera mis mensajes

Llegué hasta el departamento, aventé mis pocas pertenencias al sofá para luego irme al baño. Acababa justo de empezar a mojarme el cuerpo cuando el timbre sonó, pensé en salir así pero honestamente no esperaba a nadie en especial, así que continúe con mi baño tranquilamente.
Pasaron algunos minutos pero parecía ser importante ya que esa persona insistió no una ni dos veces perdí la cuenta luego de la quita vez.

Me apresure para poder ir a abrir la puerta, me vestí apresuradamente para luego correr a abrir.
Cuando abrí la puerta me lleve una gran sorpresa

-darien ya no aguanto- dijo ella

☆꧁hasta aquí el capítulo꧂☆