Royal Woods Michigan - Residencia Loud - 5:00 a.m.

En el jardín de la casa Loud. Se podía apreciar a un joven de cabello blanco. El cual se encontraba en el suelo, haciendo varias flexiones, mientras utilizaba su clásico traje militar. Al mismo tiempo que el sudor de su frente, caía al suelo.

Lincoln: 232, 233, 234, 235... Aaaah, 236, 237, 238, 239, 240. Dios - cae al suelo. - Bien, ese es mi límite de flexiones sin descanso, 240. Es un poco cansado, pero vale la pena. - dice el peliblanco en un tono serio, mientras apuntaba su puntaje en una libreta, para luego mirar al espectador. - Si, se que se preguntan, el por qué estoy entrenado a estas horas. Y la pregunta es fácil de responder. Simplemente... Me gusta entrenar, es todo. Quiero volverme más fuerte, para combatir a futuras amenazas. Y por eso, no pienso dejar de entrenar.

El peliblanco con una respiración agitada. Comenzó a levantarse del suelo. Para luego comenzar a lanzar varios golpes y patadas al aire. Los cuales tenían una gran fuerza y velocidad, sobrehumanos.

El albino en un rápido movimiento, toma su cuchillo. Y comienza a activar sus ojos amarillos, para luego comenzar a atacar a una gran velocidad, con su cuchillo. Logrando hacer varios cortes en el aire, pero cuando estaba por atacar directamente. El albino se detiene en seco, apuntando justo a la frente de Lily, la cual se encontraba bastante sorprendida.

Lincoln: Lily. - desactiva sus ojos. - ¿Qué demonios haces aquí?, por poco y te atravieso la frente. - dice el peliblanco algo enojado, mientras guardaba su cuchillo, para luego comenzar a caminar. - Y bien, me vas a responder o no.

Lily: Bueno... Es que yo... Quería ver qué estabas haciendo. Es todo. No te quería molestar. - dice la rubia algo nerviosa, mientras veía como el peliblanco, deja salir un suspiro.

Lincoln: Escucha Lily. Yo quiero estar solo. Me gusta entrenar por mi cuenta, y sin que nadie me vea. Así que vete de aquí, a jugar o haz lo que quieras. No me importa. Solo déjame solo. - dice el peliblanco en un tono serio, mientras tomaba nuevamente su cuchillo.

Lily: Eh, hermano... Yo... Eh... Yo... - dice la rubia bastante nerviosa, haciendo que Lincoln se comience a molestar un poco. - Yo quería decirte algo.

Lincoln Beta: ¡Si me vienes a decir otro estúpido intento de tus disculpas, ya sabes lo que te eh dicho mocosa!, así que déjame en paz y lárgate, que no entiendes. - dice el peliblanco bastante enojado, haciendo que Lily salga corriendo de allí. Mientras que los ojos del albino, volvían a ser azules.

Lincoln: Oye, oye... Que fue eso. Cómo tomaste posesión de mi cuerpo. Si se supone que solo puedes hacerlo, cuando estoy dormido. - dice el albino con seriedad, mientras se cruzaba de brazos.

Lincoln Beta: Jaja si claro. También hay otras formas, en las que puedo tomar posesión de tu cuerpo. Cómo cuando estás cansado o exhausto, luego de trabajar tanto. Incluso ahora. Estás cansado, por tanto entrenamiento y por eso, puedo tomar posesión de tú cuerpo. Aunque no por mucho tiempo. - dice el peliblanco desde la mente del albino. El cual se sorprende un poco al oír eso.

Lincoln: ¿Y lo que dijo Lily?, acaso ella ya se había disculpado conmigo antes. Cuando fue eso. - dice el albino con seriedad, mientras se cruzaba de brazos. - Dime, cuando fue que el se disculpó.

Lincoln Beta: Ah, la pequeña enana hipócrita. Hizo el absurdo intento de querer disculparse contigo. Pero yo estaba usando tú y pues bueno. Al final le grité, la mandé al carajo y creo que le di algo de miedo, ya que la hice llorar. Fue algo satisfactorio para mí - dice el peliblanco en los pensamientos de Lincoln, el cual pone una mirada seria. - ¿Qué?.

Lincoln: Gritarle, no es la solución. Y mucho menos hacer llorar a una niña de 8 años. Eso es cruel, incluso para ti. No quiero que Lily, me termine viendo como un monstruo. Mis planes, no son odiarlas para siempre. Tampoco voy a estar enojado con ellas, toda la vida. Aunque eso sí... No estoy justificando sus acciones, lo que ellas me hicieron es imperdonable. Pero adoctrinaron a Lily, para que ella me odiara como las demás. Tengo que ir a hablar con ella. Y no vuelvas a tomar posesión de mi cuerpo, por qué si lo haces otra vez. Te juro que voy a matarte. - dice el peliblanco con seriedad, mientras comenzaba a caminar.

Lincoln Beta: Jaja, como digas. Aunque olvidas algo. Si tú mueres, yo me muero. Lo mismo pasa al revés. Así que ve de una vez, con esa mocosa antes de que arrepienta. Yo me echaré un sueño, por mientras. No quiero oír sus cursilerías. - dice el peliblanco en la cabeza del albino. Para luego desaparecer.

Unos minutos después. En las escaleras de la puerta principal, se podía ver a Lily, la cual se encontraba sentada allí. Mientras se limpiaba sus ojos, los cuales estaban cubiertos de lágrimas. Pero al mirar a un lado, está se asusta al ver a Lincoln, el cual se encontraba allí parado.

Lincoln: Hmm... Lily escucha yo... - el peliblanco no termina de hablar, debido a que este observa, como Lily se comienza a alejar de él. - Oye que te sucede, por qué te vas así. ¿Qué te ocurre?.

Lily: Tú... Tú querías que te dejará solo. Y yo... No quiero que te enojes otra vez, conmigo. Esos ojos me dan mucho miedo. - dice la rubia bastante asustada, mientras se cubría con Bun Bun, el cual deja muy sorprendido al peliblanco, quien se acerca a Lily con cuidado, para luego ver a Bun Bun.

Lincoln: Yo pensaba que... Mis hermanas lo habían destruido. ¿Cómo es que está vivo, Lily?. - dice el peliblanco en un tono serio, mientras veía fijamente a Lily, la cual se encontraba temblando del miedo.

Lily: Yo... Yo decidí conservarlo. Ya que... Algo dentro de mi, me dijo que lo guardará. Paso mucho tiempo, bajo el armario. Pero hace unos pocos días, decidí sacarlo y lavarlo. Y ahora, está justo como estaba. - dice la rubia bastante asustada, mientras se crujía con el conejo de peluche.

Lincoln: Hmm... Yo... Vaya, yo pensaba que mi conejo de la infancia, había sido destruido por ellas, pero... al final decidiste quedártelo. Pero... por que ahora decidiste sacarlo. - dice el albino en un tono serio, mientras veía como Lily bajaba su mirada.

Lily: Es que... Cuando me di cuenta del daño, que te hice. Decidí sacarlo... de mi armario. Para que... pudiera devolvértelo. Yo se lo especial, que es para ti, este peluche. Y por eso... quiero que lo tomes... Al menos quiero hacer una buena acción, luego de tantas cosas malas que eh hecho contigo. En verdad fui una tonta... Y se que ahora, fue un error el haberte traicionado. Creyéndole a mis hermanas, sobre una gran tontería. Y ahora me siento muy culpable... Por eso hermano... te pido que me perdones. Por favor, perdóname hermano. - dice la rubia en un tono de tristeza, mientras abrazaba al peliblanco, el cual poco a poco, comenzó a corresponder el abrazo. Mientras acariciaba la cabeza de la rubia. Sintiendo un gran sentimiento en su corazón.

Lori: ¡Lily, Aléjate de el!. Tú sabes la clase de monstruo, que es él. - dice la rubia en un tono de molestia, mientras veía como Lincoln, se pone enfrente de Lily para protegerla. - Aléjate de ella, maldito idiota. Y tú Lily, tira ese maldito peluche asqueroso.

Lily: ¡N-No!... ¡No pienso dejar, que vuelvan a lastimar a mi hermano mayor!. Ustedes me manipularon. Y me hicieron, menospreciar a Lincoln... pero ahora, yo no pienso dejar que ustedes lo lastimen. Yo lo quiero mucho y no quiero que le hagan más daño. - dice la rubia en un tono serio, mientras se ponía al frente de Lincoln, el cual toma sus hombros, para calmarla.

Lincoln: Lily, quédate atrás por favor. Déjame arreglar esto a mi. Tú ve con Luna, por favor y quédate con ella. - dice el peliblanco en un tono serio, mientras veía como Lily, asiente con la cabeza. Para luego salir corriendo, hacia la casa. - Lori... deja a Lily en paz.

Lori: Tú no te hagas el santo, Lincoln. Si tú hace poco la despreciabas. Ahora por que dices que la dejemos en paz. Si tú no la aceptabas. Así que déjate de estupideces. - dice la rubia en un tono serio, mientras se cruzaba de brazos.

Lincoln: No es ninguna estupidez, como tú dices, Lori. Se que Lily ha cometido errores. Y que ella ahora, se siente muy mal por ellos. Y por eso, con esta acción que acaba de hacer... Creo que hay una posibilidad, de que se gane mi perdón, como Lucy. - dice el peliblanco con seriedad, mientras veía como sus hermanas se quedan algo sorprendidas.

Mientras tanto en el ático. Luna se encontraba parada, por encima de una caja, con un vestido medio cocido en su cuerpo, al mismo tiempo que Lemy, se encontraba tomando algunas medidas, para luego tomar su aguja.

Luna: Por favor Leni, ten cuidado con la aguja. Ya me has pinchado como 3 veces y a pesar de que ahora soy una mutante, no significa que sea inmune al dolor. - dice la peliblanca algo nerviosa, mientras veía como Leni calculaba como metería la aguja al vestido.

Leni: Tranquila Luna, solo necesito darle un par de toques. Y ya cuando acabe, le daré los últimos detalles y así te lo podrás poner, por si sales nuevamente con Robert. - dice la rubia con una sonrisa, mientras comenzaba a coser el vestido.

Luna: Vaya, pues si sería genial, volver a salir con el. Y más con este vestido, que conserva un poco de mi yo anterior. - dice la peliblanca con una sonrisa, hasta que de pronto, ambas observan cómo Lily entra al ático muy agitada y con un par de lágrimas en sus ojos. - Lily, ¿Qué te pasa, estás bien?.

Lily: Las... Las chicas, están afuera con Lincoln. Y no se que vaya a pasar... Tengo miedo que lastimen otra vez a mi hermano, por favor vayan a ayudarlo. - dice la rubia muy asustada, haciendo que ambas chicas comiencen a caminar, hacia abajo.

Mientras tanto con nuestro protagonista, este se encontraba con una mirada seria. Mientras veía a sus hermanas, las cuales estaban dispuestas a cualquier cosa, con tal de que Lincoln no se acercará a Lily.

El albino con una mirada fría y sin brillo. Comenzó poco a poco, a sacar su cuchillo de combate. El cual asusta un poco a algunas hermanas, las cuales intentaban mantenerse firmes ante la situación. Pues todas tenían en mente, que Lincoln no estaba jugando y menos cuando sacaba un arma blanca. Además de contar, que esté ya tenía entrenamiento militar.

Lincoln: Cuando fui a esa academia, por más de 3 años, por la culpa de ustedes. No saben las ansias, que tenía de regresar, para poder hacerlas pedazos. Pero gracias a mis amigas, logré volver a recuperar la confianza en las personas. Pero no en ustedes. Todas me han roto el alma. Por culpa de su desprecio y todo por ese maldito protocolo, que solo me trajo problemas. Ustedes... Me convirtieron en lo que soy ahora. El mundo ya no necesita a un héroe... El mundo lo que necesita... Es un monstruo. - dice el peliblanco en un tono serio, mientras que sus ojos se comenzaba a poner amarillos. Al mismo tiempo, que una gran sonrisa, comenzaba a aparecer en su rostro. - Yo... Soy... Locura.

Justo cuando el peliblanco, estaba por lanzarse contra sus hermanas. Este sería detenido por Luna, la cual toma sus brazos con mucha fuerza, mientras lo miraba a los ojos. Viendo aquellos mismos ojos amarillos, que vio esa noche.

Luna: Lincoln, mírame. No lo hagas. Ellas no merecen la pena. Lo único que buscan, es fastidiar y arruinarle la vida a los demás. Tú déjalas y no les hagas daño, por favor. - dice la peliblanca en un tono serio, mientras tomaba las manos del albino, el cual comenzó a calmarse un poco. Mientras que sus ojos, volvían a la normalidad.

Lincoln: Hmm. Que me pasó... Maldición. - dice el peliblanco algo confundido, mientras sacaba su frasco de medicina, para luego tomarse una pastilla. - Hmm... Pero... Luna, que hacen aquí. Lily te dije que te fueras con Luna. Yo me puedo encargar de esto.

Lily: Hermano por favor, no. Ya no quiero que te lastimen más y que todos terminemos mal. Ya no quiero ver más dolor, por favor hermano. Ya no más. - dice la rubia en un tono de tristeza, mientras se apoyaba en el peliblanco. El cual comenzó a calmarse un poco.

Luna: En verdad que ustedes, no tienen cerebro. Son unas basuras que solo quieren hacer daño. Por qué no pueden dejar a Lincoln en paz, para que todo esto terminé. - dice la peliblanca en un tono serio, mientras se cruzaba de brazos.

Lori: Como si eso fuera a pasar. Ese bastardo, jamás debió volver. Por qué desde que volvió. No ha causado más que problemas. Y todo, por qué el se metía en nuestro protocolo. Ese imbécil, al que llamas hermano, no es más que una escoria. Y tú... Solo estás de alcahueta con el, junto con esta tonta y esa mocosa, que no sabe hacer otra cosa, más que llorar. - dice la rubia en un tono de molestia, a lo que Luna se acerca a ella y le propina una fuerte cachetada, dejando al albino y a ambas rubias, bastante sorprendidos.

Luna: Te prohíbo, que les hables así. Ellos son tu familia, te guste o no. Y si tanto te molesta su presencia, entonces vete. Consíguete una vida y lárgate de una vez de esta casa. Por qué aquí, ya no te soportamos Lori. - dice la peliblanca en un tono serio, mientras se iba de allí. Dejando a todos bastante sorprendidos, al mismo tiempo que Lincoln, Leni y Lily, se marchaban con Luna.

Unos minutos después. En el ático. Nuestro protagonista se encontraba sentado en una silla, mientras miraba al suelo, al mismo tiempo que Leni, usaba su máquina de coser, para terminar el vestido de Luna, la cual se encontraba en su cama, abrazando sus piernas.

Luna: Ella fue quien se lo buscó. No me gustó la forma en la que les hablo, chicos. Por eso lo hice. - dice la peliblanca en un tono serio, mientras se cruzaba de brazos.

Lincoln: Se que soy el menos indicado, para decir esto, pero no era necesario hacer eso, Luna. Además... Es cierto. Ellas no valen la pena. No tengo por qué manchar mi uniforme, con su horrible sangre. Sería una pérdida de mi tiempo.

Leni: Por cierto, Lincoln... Con el tema respecto a Lily. Has pensando en perdonarla. Digo... A mí todavía me está costando, conseguir tu perdón, pero... Ella... Ella es la que más ha sufrido, para conseguir tú perdón. No hay día ni noche, en la que no la vea arrepentida, por todo lo que pasó. Y me siento igual que ella, pero se... Que no es fácil perdonar. - dice la rubia en un tono bajo, mientras cocía el vestido.

Lincoln: Hmm. No te miento, Leni. Si lo eh pensado mucho, y se que varias de ustedes, se esfuerzan por qué las perdone. Aunque dudo mucho que las demás se arrepientan, pero bueno... Con respecto a Lily. Iré a hablar con ella. - dice el albino en un tono serio, mientras se paraba de la silla, para luego caminar a la puerta.

Pero justo cuando la estaba por abrir. La puerta se abre de repente y se muestra a un joven pelinegro. El cual entra al ático, con una bolsa en sus manos, para luego dirigirse a dónde estaba Luna.

Robert: Ah, disculpa la tardanza, Luna. Se me acabó la gasolina, pero pude irme en la camioneta de mamá. Conduje media ciudad, pero conseguí el helado que querías. - dice el pelinegro con una sonrisa, mientras le entregaba la bolsa a Luna, mientras que los demas la miraban algo confundidos.

Luna: A veces, un poco de helado, me ayuda a relajarme. Y tenía antojo de uno, es todo. - dice la albina un poco avergonzada, mientras abría el bote, para luego comenzar a comer, con una cuchara.

Lincoln: Ah, como sea. Iré a hablar con Lily. Pero para que se sientan más tranquilas, Robert piensa rápido. - dice el albino en un tono serio, mientras le arroja su cuchillo a Robert, el cual lo atrapa con algo de dificultad.

Robert: Uy, eso estuvo cerca. Por poco y me rebano el dedo, aunque creo que me corte un poco. - dice el pelinegro algo adolorido, mientras veía una pequeña cortada en su dedo. Pero está poco a poco, comenzó a cerrarse. Hasta finalmente desaparecer. Cosa que llama la atención del pelinegro, el cual se queda un poco pensativo.

Mientras tanto en el pasillo. Nuestro protagonista se encontraba caminando hacia la habitación de Lily, la cual se encontraba cerrada. Por lo que esté con algo de cuidado, abre la puerta. Y observa a la pequeña rubia, la cual se encontraba sentada en su cama. Mientras que Lisa, estaba en su escritorio, con unos audífonos en sus orejas.

Lily: Lincoln, eh... ¿Ocurre algo?, o, ¿Por qué estás aquí?. - dice la rubia en un tono de curiosidad, mientras veía como el albino, cierra la puerta. Para luego sentarse en la cama de la rubia.

Lincoln: Hmm, quería hablar un poco contigo Lily. Respecto a tu disculpa, sobre todo lo que ha ocurrido, en estos últimos años. Y quería saber una cosa. ¿En verdad estás arrepentida?. - dice el peliblanco en un tono serio, mientras veía como la rubia, bajaba un poco su mirada.

Lily: No hay día ni noche, en la que no me arrepienta, de lo que hice. Desde aquella noche, en la que hablamos. Yo me comencé a arrepentir, de lo que pasó. Me sentí muy culpable y apenas pude dormir. Después de días, quise arreglar las cosas contigo. Pero tú me dijiste que debía esforzarme para conseguir tú perdón. Y además, reaccionaste de una forma realmente agresiva. Tus ojos eran amarillos y parecía que estabas a nada, de hacernos algo. Me sentí muy asustada, pensaba que ibas a golpearme. O incluso algo peor. Por eso, hoy cuando te acercaste a mi, me dio mucho miedo. Esos ojos amarillos, no son algo normal. - dice la rubia en un tono de preocupación, mientras agachaba su mirada. - Yo en serio, te suplico por tu perdón. Ya no puedo más con esta culpa. Ya no puedo más hermanito... Ya no puedo.

La pequeña rubia, con lágrimas en sus ojos, se acerca a su hermano y lo abraza con mucha fuerza. Al mismo tiempo, que comenzaba a llorar. Por lo que el albino, con una mirada seria, corresponde el abrazo. Para luego tomar a Bun Bun, el cual mira fijamente, al mismo tiempo que Lily se separa de él.

Lincoln: Toma, puedes quedártelo. Quiero que tú lo tengas y lo cuides mucho. Ya que ahora te pertenece a ti, Lily. Es mi forma de darte las gracias, por haberlo conservado. Y además... Quiero decirte, que te perdonó, hermana. - dice el peliblanco con una leve sonrisa, mientras veía como Lily, comienza a sonreír, para luego abrazarlo aún con más fuerza.

Pero cuando el albino, correspondía al abrazo. Este a una gran velocidad, detiene el brazo de Lisa. La cual se encontraba con una jeringa en sus manos, a punto de inyectar al albino. El cual muestra una cara seria.

Lincoln: Ni se te ocurra, Lisa. No dejaré que analices mi sangre, para alguno de tus locos experimentos. Por qué no pienso dejar, que me hagas, lo mismo que le hiciste a Robert. Y más te vale, que tampoco hagas lo mismo con Lily o con Luna, por qué no dudaré en destruir todo tú laboratorio. - dice el peliblanco en un tono serio, mientras protegía a Lily, con uno de sus brazos.

Lisa: Hmm. Eres hábil hermano mayor. Pero no creo, que te hayas esperado eso. - dice la castaña con una sonrisa, mientras veía una jeringa, la cual se encontraba en el otro brazo del peliblanco. - Eh, pero que pasa. Por qué no sustrae la sangre.

Lincoln: Eso es, por qué ya esta rota y no sirve de nada. - dice el albino en un tono serio, mientras mostraba algunos cables en su mano, para luego tirarlos al suelo. - Ven Lily, vamos a un lugar más seguro. No quiero que te hagan daño.

El peliblanco rápidamente sale del cuarto, junto con su hermana menor. Mientras que Lisa se quedaba bastante sorprendida, ya que está no se esperaba, que el peliblanco hiciera eso. Y mucho menos que protegiera a Lily.

Unos minutos después. En la habitación de nuestro protagonista, este se encontraba sentado en su escritorio. Mientras miraba algo en una computadora. Al mismo tiempo, que Lily jugaba en una consola portátil. Hasta que de pronto, 4 chicas entran a la habitación del albino. Con una miradas de cansancio, para luego caer rendidas a la cama.

Isabella: Este fue el día más agotador de mi vida. No me esperaba que un trabajo costará tanto. Me duele todo. Es incluso peor que la academia. - dice la pelirroja bastante agotada, mientras se sobaba sus brazos.

Julie: Dímelo a mi. Yo tuve que limpiar como 7 veces la misma zona, ya que el mocoso que estaba allí, no paraba de vomitarse. En serio odie eso. - dice la pelinegra algo molesta, mientras se cruzaba de brazos.

Kumiko: Bueno, vean el lado positivo, al menos estamos en nuestra habitación con Lincoln y... - la castaña no termina de hablar, debido a que está se sorprende, al ver a Lily. La cual se encontraba sentada, mientras jugaba en su consola.

Lily: Hmm, eh hola. - dice la rubia en un tono bajo, llamando la atención de todas, las cuales se quedan en completo shock. Mientras que nuestro protagonista, no les prestaba atención para nada. - ¿Pasa algo?.

Ingrid: Si... ¿Qué haces aquí?, pensé que Lincoln no quería estar contigo. Lincoln que ha sucedido, en lo que no estábamos. - dice la pelirrosa algo molesta, mientras se cruzaba de brazos.

Lincoln: Perdone a Lily. Ella y yo, ya nos reconciliamos y por eso, ella ya puede entrar a mi habitación. Así que... Les pido a todas, que por favor la respeten. Y en caso de que yo no esté, les pido que la cuiden, por favor. - dice el peliblanco en un tono serio, mientras terminaba de escribir en su computadora.

Julie: ¿Bromeas, no?, yo pensaba que no les ibas a dar una segunda oportunidad, a estás mocosas. Pero por lo visto, lo estás haciendo. Vaya eso no lo esperaba de usted, Capitán. - dice la pelinegra en un tono serio, mientras veía a Lily de reojo.

Lincoln: Lily es mi hermana menor. Ella es la que se expone a más peligros. Sobre todo con las locas de mis hermanas, así que por eso les digo que la cuiden. Y también... Quiero que se lleven bien con ella. Ya que los problemas que tengo con mi familia, son únicamente míos, entendido. - dice el peliblanco en un tono serio, mientras se levanta del escritorio, para luego caminar a la puerta. - Iré por una bebida. No quieren algo.

Lily: Yo quiero un jugo de manzana, por favor. - dice la rubia en un tono de nervios, a lo que el albino, solo asiente con la cabeza y sale de la habitación. Para que luego, las 4 chicas rodeen a Lily, la cual se pone aún más nerviosa.

Isabella: ¿En verdad te arrepentiste?, o solo estás fingiendo, para hacerle daño a Lincoln. Por qué te juro, que si le haces algo por venganza. No voy a dudar en acabar contigo. - dice la pelirroja en un tono serio, mientras alzaba su puño.

Lily: Yo... Yo... Yo me arrepentí e hice las paces con mi hermano mayor. No estoy fingiendo y mucho menos, planeo una venganza contra él. Al contrario, quiero que recuperemos... Esos 3 años que perdimos, por la tontería que hicimos. - dice la rubia en un tono decidió, mientras alzaba sus puños.

Kumiko: Pues si ya te ganaste la confianza de Lincoln, también te deberás ganar la nuestra. No quiero que el termine aún más afectado, luego de todo lo que ha pasado. De acuerdo. - dice la castaña en un tono serio, al mismo tiempo que Lincoln entraba de nuevo a la habitación.

Lincoln: Ah, ya volví. Aquí tienes tu jugo, Lily. - dice el albino en un tono serio, mientras se sentaba en su silla, para luego comenzar a trabajar. - Isabella, tienes 2 tareas pendientes, Kumiko, debes estudiar para un examen parcial, Julie necesitas hacer 3 resúmenes de 3 tipos de guerras e Ingrid, tú tienes que estudiar lo básico de Química.

Las 4 chicas al escuchar eso. Rápidamente se levantan de la cama y se dirigen a algunos escritorios, para comenzar a trabajar, mientras que Lily comenzaba a tomar su jugo. Para luego seguir jugando, bastante feliz, de tener a su hermano de vuelta.

¿Qué pasará?, ¿Alguna otra hermana se arrepentirá?, ¿Lincoln protegerá a Lily a toda costa?, ¿Qué le depara en el futuro, a nuestros amigos?, descúbranlo pronto.

Continuará... Fin del capítulo 21, si les gusto dejen su voto, comenten y síganme para más y antes de irme les mando un abrazo muy fuerte y un saludo muy especial a:

KarlaOreki
KanaoTsuyuri77
DianaMorales795
Naimar62
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Bueno hasta aquí los saludos, yo me despido por ahora, mi nombre es PinBlack97 y esto es todo por hoy, les mando un abrazo muy fuerte, chao chao.