Desde que te vi, pude ver tu alma. Pero lo que más me atraía de ti, fue que cuando vi tu alma vi la mía.

Un chico de cabello azabache y ojos azules, como el mar, incluso podría decirse que tenía un pedazo de cielo en sus ojos,con una estatura muy promedio, acababa de cumplir los 18, estaba en el Olympo, para poder estudiar en la mejor universidad, para ser un gran dios.

Pero se esto no era lo que hacia...

¿Que hacia ahí?
No, no merecía estar en un lugar así.
El reino de los dioses era demasiado completo, todos ocupaban sus nombres verdaderos, nombres.

Claro que no se parecía en nada al mundo humano, no era así.

Pero Izzy e Jace habían hecho que su madre lo dejara ir, al olimpo lo llamaban, no sabia como agradecer eso, había hecho los votos, de castidad aunque sabia de buena mano que no pensaban mantenerlos, solo lo habían hecho para llevarse a Alexander.

-Disculpen, pero... creo que me veía mejor con mi otra ropa, no quiero decir que no sepan vestir, se que yo soy el que no sabe.... saben que, olvidenlo- ¿qué sucedía con él? Le habían hecho un favor y lo agradecía siendo un grosero.

Regla 1: Persefone, nada de fiestas.

Parecía ser una regla muy seria, la había dicho su madre.

-Vamos incluso tu sabes que te ves genial vestido con transparencias - le dijo Izzy, que vestía un vestido muy corto, con botas altas con las que seguro aplastaba corazones al caminar.

-Debes estar suficientemente atrás en la moda, vamos ahora no está tu madre, encuentra tu propio yo - tuvo que insistir un rubio muy apurado.

-Lo siento, yo...nunca he ido a una fiesta que no sea organizada por humanos.-Entonces los otros dos dioses se le cayeron la boca al suelo.

-¿Hablas en serio? pero siendo tu madre Demeter claro que haz probado el vino.-Dijo la chica más parecido a él, Izzy, entonces se cuando vio negar a Alec, casi cae al suelo- Creo que es mejor no ir.

-¿DE QUÉ HABLAS? SERÁS CONDUCTORA DESIGNADA ISABELLE, HOY HARÉ QUE ESTE JOVEN PIERDA TODA INOCENCIA-
Eso fue proclamación del rubio, cuando salieron de ahí, yéndose a la fiesta.


* * * * * * *

¿Dondé estás? 20:08
¿Vendrás al lof primero? 20:59
Te recogere si es lo que quieres 21:30
Me fui de tu casa, otra vez no estabas. 22:00

Otra vez le había metido a Magnus, que llevaba un traje muy ajustado y con algo de brillo azul para que su aspecto severo no se mostrara, esperaba eso más que nada nada.

Camille, conocida como Menthe en el mundo de los humanos, no había estado lista, no era el primer día que lo dejaba plantado en 500 años, no sabía que decirle, no podía terminar con ella, aunque la familia de él no la quisiera, claro... ¿quién querría a alguien que le había roto el corazón más de 200 veces?

Magnus se paró en secó, en el auto no sabía ni si quiera el porque, estaba apunto de volver a casa de Camille, exigirle una explicación, ¿POR QUÉ CARAJOS SEGUÍA HACIENDOLO SENTIR ASÍ?
Pero claramente sabía la repuesta que le había dicho hace muchisimo tiempo: "Eres el mayor demonio, ¿crees que pasar el tiempo contigo es fácil? No, no lo es."

Así que encendio el automovil, dejando que esas palabras se incrustaran en su alma una vez más, en tal caso deberia agradecer que alguien lo viera, cuando llego claro que dio el impacto, más al llegar solo... cuando todos esperaban ver a la otra diosa.

Se metio, al lugar de la fiesta, estaba casi todo lleno, mientras sus hermanos llegaron a él.

-Aja, ZEUS PAGA LOS TRAGOS HOYYYYYYYYYY- grito Wiil, el hermano poseidón, un chico de cabello azabache con ojos casi como un azul palido, un azul común.

-MIERDA, eso me pasa por confiar en alguien como Camille -entonces Magnus entendio, habían apostado si llegaría solo, pero como siempre, Will lo conocia mejor.

-¿Cuál fue su excusa?¿Qué no la dejariamos en paz?Vamos, quiero saber si es una nueva excusa -Los tragos llegaron a la mesa de los dioses mayores, varios estaban viendo a Poseidon, aunque Zeus, Robert se acostara con más personas, casi siempre Magnus y Will eran quien robaban las miradas

-Hoy no hubo, simplemente no estaba- Bebio un trago, con mucha armagura, Will comenzo a hablar sobre algo del amor propio que le hacia falta al moreno, entonces fue cuando comenzo a ver la pista ¿Y si encontraba a alguien..? pero ese pensamiento se esfumo, porque nadie iba a querer a un demonio, más cuando era...

¿De quién era esos ojos?
Él había vivido miles de años, había pasado por mucho, pero esos ojos despertaron algo en él, algo...que no pudo evitar sentir

-¿Quien es él? Querido hermano dime...-Era Robert, Zeus para los mortales, por lo menos los más comunes. Era él quien volteaba a ver al chico blanco como la nieve.

-Es persefone, Kore, Alexander en realidad, creo que lo llaman Alec, es mi hijo....- pero en eso llamo a su otro hermano, Will Herondale, conocido como poseidón en el mundo mortal- MAGNUS SE INTERESO EN SU SOBRINO, ESTO ES DIGNO DE CELEBRAR.

Pero Magnus solo pudo decirle.

-Él, es más bello que cualquier dios que haya existido.

Esos comentarios llegaron a los oídos equivocados .

Esta historia nació de Lore Olympus, no es una adaptación como tal, solo serán detalles tomados.❤🥺
Saben que mis adaptaciones siempre terminan siendo obras propias.
Es medio corto, pero es que apenas estoy entrando en calor, jajajja.