Jungkook se levantó esa mañana de mejor humor, habían pasado ya varios días desde el incidente con Koko en el zoológico y desde entonces iba todos los días a verlo.

Se disculpó con Jin y habló por teléfono con Somi para pedirle los informes del evento de recaudación, quería comenzar una nueva etapa, ir al cementerio y hablar un poco con Yugyeom fue una buena terapia, aunque no pudo evitar llorar como cada vez que lo recordaba.

Sabía que su esposo estaría furioso por verlo de esa manera y con esa actitud, más por el hecho de que se estaba alejando de su familia, para Yugy siempre fue muy importante está ya que él era huérfano y nunca tuvo la oportunidad de convivir con una. Intentaria cambiar de actitud pero solo con ellos, la gente aún le molestaba.

Cómo cada mañana dejó entrar a Bam para su inspección matutina, se bañó y arregló, este día regresaría a la constructora después de meses, quería ponerse al dia y terminar los proyectos que tenía planificados además de seguir preparando la construcción del nuevo hábitat de los gorilas.

Escuchó ruido en la parte de abajo y supo que su hermano había llegado así que bajó para estar con él. Jin era un omega muy especial, siempre muy hogareño y siendo la mamá gallina de todos, en especial de él y de Somi, no importaba que los alfas eran ellos, él siempre corría a defenderlos y siempre estaba al pendiente.

- Hola Jinnie- saludó el pelinegro entrando en la cocina y se acercó a darle un beso en la mejilla a su hermano.

- Hola cariño, pero que guapo!! Había olvidado cómo te veías con traje y el cabello recién cortado- dijo el omega - Bien!! Debemos desayunar rápido que este cachorro está desesperado por comer-.

Jungkook solto una carcajada - No creo que sea el cachorro el desesperado- dijo el alfa.

- Oye respétame que aún con esta panza puedo golpearte- respondió el omega tomando un sartén. Jungkook volvió a reir.

- Lo sé, eres alguien muy salvaje- el alfa solo reía. Hace mucho que Jin no escuchaba su risa.

- Y no sabes que salvaje- ronroneó el omega. Jungkook dejó de reir para hacer cara de asco, a su mente vino un vago recuerdo de años atrás cuándo era jóven y entró a la habitación de su hermano cuando estaba con Namjoon. Lo que vió ese día jamás lo olvidaria.

- Jin en serio no hablemos más de esto- comentó el alfa sentandose en la barra frente a su hermano.

- Jajajajajajaja!!! Tú empezaste y te aguantas- ahora el omega se moría de risa - ¿Qué quieres desayunar Kook? Puedo preparar un omelette o unos hotcakes-.

- Lo que sea está bien Jinnie- dijo el alfa - Todo lo que preparas siempre es delicioso.

Jin le dió una enorme sonrisa a su hermano y comenzó a preparar el desayuno, siempre habían sido solo ellos tres, sus padres fallecieron en un accidente de avión cuando eran muy pequeños Jin tenia 10, Jungkook 7 y Somi 4 años. Quedaron bajo la tutela de sus abuelos y les costó mucho tiempo adaptarse a su nueva vida.

Por eso Jin tenía miedo, Jungkook había pasado por momentos muy doloros y sabía que intentaba ser fuerte por ellos pero cargaba solo con sus propios demonios. Antes de conocer a Yugyeom vivió una etapa de rebeldía se escapaba de casa, tomaba y se drogaba. Todo comenzó a empeorar hasta que lo encontraron teniendo un coma etílico.

Pensaron que lo iban a perder pero gracias a la Diosa pudo recuperarse, estuvo en rehabilitación y cuando entro en la universidad conoció a ese omega que le dió una vuelta completa a sus pensamientos y a su vida. Desde entonces sólo mejoró y todo aquello quedó en el pasado hasta que Yugyeom murió.

- Esta chiquilla me va a volver loco- dijo el omega - Ayer llegó a casa a media noche furiosa por haberse peleado con Yuqi y ahora resulta que se van a vivir juntas- el omega no podía creer los cambios de su hermana.

Jungkook solo comenzo a reir, así era Somi siempre vivia y hacía lo que queria sin importarle el que dirán, sólo buscando su felicidad y la de sus hermanos. Terminaron de desayunar y salieron juntos de la casa, ambos dirigiéndose a sus respectivos trabajos.

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Jungkook decidió pasar por unos cafés para él y su cuñado, sabía que Namjoon tenía que dividirse entre sus proyectos y los de él, además de estar al pendiente de Jin lo cuál era un trabajo duro ya que su hermano era bastante especial.

Era momento de retomar las riendas de su vida, regresar al trabajo que amaba y dedicarse a la construcción del nuevo hábitat de Koko y los gorilas, así que pasó por los cafés y mientras se dirigía a su auto un torpe omega que iba corriendo le tiró los cafés encima.

Estaba furioso y además de todo le ardía el pecho, cuándo iba a enfrentar a ese omega, se dió cuenta que era el mismo que vió días atrás en el zoológico y que se acercó a Koko.

- ¿¡Acaso estás ciego!?- le gritó al pobre omega.

- Disculpe, no es mi culpa que usted no se fije por dónde corren las personas- le dijo Jimin lo más tranquilo que podía, no tenía tiempo para discutir con ese alfa.

- ¿Quién te crees para hablarme así? No sabes cuál es tu lugar- contestó el alfa.

- ¿Mi lugar? Oh usted no ha querido decir eso alfa de quinta. Mi lugar es exactamente al mismo nivel que el suyo ¿Qué? ¿Acaso piensa que por ser omega soy inferior? En que época cree que vive los 50's- el omega estaba furioso.

- Mira omega..... - el alfa no iba a dejar que ese omega le faltará al respeto. Pero Jimin no lo dejó continuar.

- Mi nombre es Jimin, llámame por mi nombre, no le gustaría que yo me refiera a usted como alfa retrograda ¿Verdad?- el omega se estaba divirtiendo demasiado. Pero iba tarde muy tarde al trabajo. Así que sacó una tarjeta del restaurante de su abuelo y se la entregó al alfa.

-¿Qué es esto?

- Búsqueme en está dirección y le daré los gastos de la tintorería y lo de los cafés, diría que fue un gusto pero no lo fue. Nos vemos- el omega no dió tiempo a que Jungkook respondiera pues cuando reaccionó lo vio correr a la parada de autobuses.

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Mientras conducía Jungkook no podía dejar de pensar en el encuentro que tuvo con ese omega "Jimin" así se llama, si que era extraño.

"Ese omega si que está loco" Que sea hermoso no le quita lo mal educado, aunque huele muy bien, ese olor a vainilla es delicioso.

Recordó entonces la tarjeta que le dió, cuándo se detuvo en un semáforo decidió inspeccionar la tarjeta "Restaurante Magnate". Deliciosa comida coreana. ¡Ven y disfruta de platillos exquisitos! . Y venía anotada la dirección, claro que iría, tenía muchas cosas que decirle a ese pequeño omega respondon.

Continuó su camino a la constructora, pensando en todas las cosas que le diría al omega en cuanto lo viera, pero no se imaginaba que el destino tenía planeado algo muy diferente.

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Uno más 🥰

Ando inspirada!! 💕

Espero publicar otro capítulo más tardecito!! 🌻