Veia todo borroso, su cuerpo dolía intensamente producto de las quemaduras, eso sólo significaba que estaba viva o eso le dijo Simon cuando de pequeña se rompio una pierna y se quejaba llorando por el dolor, sintió a alguien a su lado volteo y la vio, Jocelyn estaba llorando, estiro su mano tratando de tomar la de su madre y lo logró, solo una palabra salió de sus labios.

-  ALEC

En eso entró Simon, gracias a su super audición logró escucharla, el vampiro había estado atrás de la puerta junto a Isabelle, de inmediato se lanzó hacia ella pero no llego a tocarla, algo se enrollo en su cintura y lo jalo hacia atras cayendo de pompas Izzy habia usado su adorado látigo para impedirlo

- Serás idiota sus heridas están expuestas la lastimaras se cuidadoso

- Lo siento no pretendía...

Clary se rio muy bajito cada movimiento por muy pequeño que sea dolía como si le arrancarán la piel

- ¿Donde está? Simon donde esta Alec

- No lo se Clary lo están buscando, él a desaparecido la clave quiere su cabeza y todo el submundo también; los brujos han tratado de rastrearlo pero no han podido es como si se hubiese desvanecido de este mundo.

- Nos necesita tenemos que encontrarlo debe haber alguien que sepa donde está, tal vez Seimei, si él...

- No será posible desaparecieron juntos es más fue él quien se lo llevo.

Isabelle que habia estado callada escuchandolos hablar intervino

- ¿Que tanto sabes Clary? todos creíamos que estabas inconciente, tu los ayudaste

Simon no pudo mas, que desconfiara de él era una cosa pero no podía permitir que Clary fuera envuelta en todo el problema, ella en la condición en la que estaba no resistiría interrogatorios a duras penas pudieron mantenerla viva.

- Isabel ya basta ¿Cómo podría haberlo hecho? a estado en esta cama sin moverse por toda una jodida semana, nos han tenido vigilados, no he podido siquiera ir al baño sin tener a un cazador tras la puerta. Incluso tu, se que has estado vigilandome y lo que más me duele es que no hayas confiado en mi para preguntarme directamente si estoy involucrado en la desaparición de Alec, te lo hubiese dicho, todo lo que quisieras saber, jamás te he ocultado nada

- Tu no entiendes Simon, se llevó al asesino de Max encima grito que era su prometido

- Estuve ahi Isabelle y creo que debe haber una razón para eso, yo vi a Alec, sus ojos eran dorados y ni siquiera reconoció a Magnus

- Tu eres el único que vio eso, nadie más que tu, si fuera cierto Magnus estaría aquí tratando de demostrar que estamos errados con respecto a él,  pero ¿Lo vez por aquí, no verdad? se fue, ¿por qué crees que lo habrá hecho?

- No lo se Izzy, ¿qué quieres que te diga? yo mismo me preguntó eso, en lo único que puedo pensar es que no lo ama lo suficiente, que no le interesa en lo más mínimo...

- Al parecer eres el único que no lo sabe, se fue porque no quería ser objeto de lástima por haberse enredado con ese malnacido engendró de m...

Una fuerte bofetada la tiro al suelo Clary se había levantado pese a sus heridas.

- No vuelvas a insultar a Alec de nuevo o por mucho que te quiera te matare Izzy. Eres mi amiga la única que tengo pero no te perdonare lo ofendas de esa manera, es tu hermano, siempre te protegió, antepuso tu vida por sobre la suya en muchas ocaciones, lo se Izzy, Jace me contó sus aventuras y cada vez que hablaba de él sus ojos brillaban llenos de orgullo, cada vez que lo mencionaba usaba el mismo tono que uso yo al hablar de Simon, habia amor en sus palabras, usaba tal cuidado al mencionar su nombre como no queriendo dañarlo en ninguna de sus letras como si mencionarlo fuera el privilegio más grande del mundo, por eso es que no puedo creer que ahora ustedes lo desprecien; yo no pude tener a mi  hermano, no tuve a nadie que me diera ese calor y esa protección que tu disfrutaste desde que naciste, afortunadamente Simon llego a mi vida y pude conocer un poco de esos sentimientos pero nunca será lo mismo, él tiene una hermana y lo he visto abrazarla y darle un beso en la frente cada vez que ella estaba triste, yo he envidiado eso por años, Simon estuvo a mi lado, sí, pero tenía que esperar a que Rebeca no lo necesitara para disfrutar de su compañía, lo he visto brillar de felicidad por su hermana, tu tienes todo lo que yo siempre he querido Izzy no se que está pasando pero por favor habla con nosotros te ayudaremos.

Algo dentro de Isabelle cambió, se notó en la expresión de su rostro y en sus ojos, ahí estaba la antigua Izzy, sólo un poco más.

- Isabelle Lightwood se la solicita en el Gard de inmediato, es por su madre ella...

Izzy no escucho más sus pies se movieron solos, en la ultima semana vio a su mamá descompuesta como si estuviese enferma, intensos dolores de cabeza, mareos, náuseas y fiebre, en muchas ocaciones intento llevarla con los hermanos silenciosos pero ella se nego dando como excusa los problemas con su padre. Tenía que llegar junto a su madre era lo único que quedaba de su familia ademas de Jace.

Su reciente divorcio y el repudio hacia sus hijos habían descompenzado su salud, ahora estaba siendo atendida por Catarina Loss quien estaba en Alacante en representación de Magnus Bane ocupando temporalmente su puesto como representante de los brujos, fue una suerte que aún estuviera en el Gard pues la reunión a la que asistió habia terminado hacia horas justo cuando estaba por retirarse fue prácticamente secuestrada por un apuesto cazador ya entrado en sus 40, se veía desesperado la tomo del brazo y comenzo a llevarla a la fuerza mientras trataba de explicarle la situación, pero ella se resistía a acompañarlo sin primero saber que estaba pasando, no se fiaba de los nefilim, en su desesperación aquel hombre la tomo en brazos y corrió.

Estaba sorprendida usualmente los cazadores despreciaban a los submundo y no los tocaban asi su vida dependiera de ello, salió de su aturdimiento y cuando estaba a punto de usar su magia para detenerlo se percato que en el pasillo estaba tendida Maryse Lightwood y a su lado estaba su hija llamandola para que no se durmiera, de un salto bajo de los brazos de aquel desconocido y corrió para socorrer a su desde ese momento paciente.

Estaba mareada y su vientre dolía al punto de no poder callar sus gritos, sus dientes rechinaban, sus manos se aferraban a las manos de su hija, tenía miedo, sentía que la vida se le iba, lágrimas fueron derramadas mostrandola vulnerable algo que Izzy jamás había visto.

Todo era culpa de Robert, se informó de la situación nada más llegar, el había acudido al Consejo de Ancianos para pedir borrar el nombre de Alexander de los registros Lightwood, a Izzy le valía lo que pasara con ese maricon como lo llamaba últimamente, pero para su madre era un duro golpe a su corazón, pocos se negaron ahora que lo consideraban un traidor, casi nadie escucho las súplicas de Maryse y en medio de todos esos problemas la amante de Robert hizo su aparición, se acercó a su ex esposo agarrándose a su brazo y lanzándole una mirada burlona a Maryse anunció que estaba embarazada y que pronto se casarian segun las leyes de los nefilim.

Fue ahí cuando no pudiendo aguantar más dolor tanto físico como emocional cayó inconciente.

Catarina usaba su magia para examinar a Maryse cuando se percató de lo que le pasaba y se puso pálida, si no hacía algo pronto la madre de Alec moriría, necesitaba llevarla a la enfermeria a la voz de ya, abrió un portal y con la mirada le pidió al cazador que levantara a Maryse para poder llevarla. 

Una vez aparecieron en la enfermería les pidio que se retiraran, los ahí presentes protestaron no tenían intención de dejarla sola y ella no tenía tiempo para sacarlos, empezó con hechizos para estabilizarla, hermanos silenciosos que estaban en la enfermeria tambien acudieron en su auxilio.

- ¿Qué tiene mi madre?, por favor que alguien me diga - Catarina estaba callada todo era silencio no había más que hacer sólo intentar salvar la vida de Maryse.

- Catarina por favor dime que...

- Estaba embarazada, lo acaba de perder lo siento.

Maryse que acababa de recobrar la conciencia escucho a la enfermera y sollozo muy fuerte, no podía ser cierto, ella embarazada ¿Cómo no se dio cuenta? no, era imposible, una cruel broma de esa bruja azul, iba a reclamar cuando los hermanos silenciosos se lo confirmaron, ¿Por qué el cielo la castigaba de esa manera? primero la perdida del menor de sus hijos, luego su esposo se fue con otra y para rematar odia y desprecia a sus hijos, luego Isabelle que odia a Alexander, Jace postrado en una cama en coma sin saber cuando va a despertar y lo último, Alec, lejos de ella buscado por traidor.

Lloraba desconsoladamente deseando morir en lugar de su hijo no nacido, estaba perdiendo la cordura

- Ire por ese desgraciado y lo traere aquí asi tenga que cortarle las piernas y arrastrarlo

- No detente Kaleth, no lo hagas

- Ese miserable deberia estar aqui y no halla con esa ramera...

- Por favor te lo pido, hazlo por mi, no quiero verlo, no quiero ver la cara de esa mujer, aquí está todo lo que necesito mi Isabelle, me gustaría a mi Alec pero por ahora no puede ser, también estas tú, por favor no me dejes tengo miedo.

- No debes temer estoy aquí a tu lado y está vez para siempre, cuidare de ti mi bella princesa.

Catarina espero paciente unos momentos pero si quería salvarla tenia que actuar ya.

- Maryse tienes que ser fuerte ahora debo sacar el feto de tu vientre debo hacerte una cirugía puesto que estabas de casi 5 meses

En ese momento Maryse protegió su vientre, escuchar eso sólo la alteró más

- Por favor tranquilizate debemos actuar rápido tu vida corre peligro, puedes morir.

Sólo lloraba y luchaba para no permitir que sacarán a su bebé del vientre, la sujetaron con fuerza haciéndole daño, justo cuando Catarina iba a inyectarle la anestesia una luz blanca inundó la habitación.

Las torres de cristal al igual que todo lo hecho a base de Adamas brillaron como el sol, todos los cazadores en el mundo vieron maravillados sus armas.

Magnus estaba en ese momento en su loft alistando maletas cuando lo sintió, una calidez y un brillo intenso proveniente de un cuchillo Serafín olvidado ahí por su nefilim estúpido.

¿Qué estaba pasando? Alec, su Alexander, pensó lo peor por unos segundos pero luego recordó que se había fugado con ese brujo y Sebastián, furioso consigo mismo por preocuparse por él desapareció el cuchillo con un movimiento de su mano. Levantó a presidente que maullaba con desesperación aferrado con sus pequeñas uñas a la alfombra, tuvo que hacer uso de su magia pues parecía que su gato estaba atornillado al suelo, presi no quería irse, no si Alec no iba con ellos. Abrió un portal con destino desconocido, no tenía intención de volver en mínimo 100 años.

Era un caos total cada cazador en alacante estaba en guardia ante un inminente ataque, no sabían de que, pero estaban atemorizados, jamás en la historia se había escrito algo sobre lo que estaba pasando en ese momento.

Muy lejos en algún lugar remoto de  Japón un muy asombrado Sebastián soltaba su espada anonadado ante el brillo que desprendía.

- ¿Que está pasando? porque brilla mi espada

Abe entró en ese momento

- No sólo es tu espada son todas las armas hechas de Adamas, además de Gideon

- ¡Que! - inmediatamente se giró enfocando su vista en Alec y efectivamente su piel estaba brillando como un diamante.

Desesperado corrio hacia él, su instinto decía que debía protegerlo aunque no sabía de que.

- Haz algo eres un brujo ayudalo te lo suplico

- Tranquilizate, no le pasa nada, es sólo que su alma resuena con otra, más bien debemos alistarnos para la batalla, esto no estaba en mis planes, pensé que podíamos quedarnos aquí hasta que Gideon recobrara la conciencia, ahora está vulnerable no puede defenderse así que seremos quien nos enfrentamos a lo que viene.

- Sólo una pregunta Abe, aunque no entiendo nada de lo que parloteas tengo claro una sola cosa y es que matare a quien sea que quiera dañar a Alec, dijiste que su alma resuena con otra alma ¿A que te refieres?

- ¿Es eso lo que realmente quieres preguntar?

Abe estaba muy serio, Sebastián mordió su labio inferior y cambio la pregunta, la verdad es que quería saber otra cosa

- ¿A quien pertenece el alma que resuena con la de Alec?.

Abe lo miro por varios segundos cuando unos gritos de guerra y sonidos de espadas se escucharon, desenfundando su katana contesto

- A un Arcángel.