Y como siempre despierto de forma horrible, no se que pase, pero no es bonito.

Bueno esta vez siento que cruce el límite.

Les explicaré.

Estaba dormido tan pacíficamente, por alguna extraña razón desperté, me sentía preso, tanto que no podía moverme.

Así que cuando abrí mis ojos, les puedo asegurar que me vi a mi mismo sentado en la cama, después vi como me levante y me quedé ahí un buen rato.

Fue tanto el tiempo que se me hacia horas, incluso días.

Después esa cosa que se hacía pasar por mi me voltio a ver, por miedo o no se, cerré mis ojos, no era capaz de verme a mi mismo.

Creo que alguien también lo haría.
Sentía miedo, impotencia al no poder hacer nada.

Mi cuerpo no reaccionaba a mi, por un momento creí que era un sueño, pero... Esa cosa me tocó, agarro mi rostro... No podía abrir mis ojos, temía ver lo que me agarraba.

Sentí como se acercó, a mi oído y escuche un "Shhh" el cual creo que nunca lo olvidaría.

Quería gritar, salir huyendo, empujar a esa cosa y huir de ahí.
Más sin embargo no podía, mi cuerpo no reaccionaba.

Podía asegurar que aquella cosa se burlaba de mi, sentía que moría.
Deje de sentir su agarre, decidí abrir mis ojos... No había nada.

No sabia si era un sueño, no sabia si mi mente jugo conmigo... Vi la hora, las tres de la mañana... No era un sueño, se supone que en los sueños no puedes ver la hora.

¿Qué pasaba aquí?

Tenia miedo de pararme, de saber que aquello seguía aquí... Pero con miedo me pare y prendí la luz... Cada vez me volvía más loco.

Algo me decía que saliera de la habitación, pero también me decía que me quedara.

Salí del cuarto de mi papá, todo estaba oscuro... No prendería las luces ya que no quería despertar a nadie.

Ocupe el celular, pues tenia linterna.

Después de todo alumbra muy bien.

Fui a la sala, ahí prendí las luces de esta.
Me senté en el sillón, mi mente seguía procesando lo ocurrido... Seguía diciendo... Que todo era un sueño, quiero creer eso... Pero no podía engañarme... No había sido un sueño.

Mi mente me decía que tenia que salir de ahí y no regresar, pero no podía hacerlo, mis amigos estaban en este lugar.

¿Qué puedo hacer?
¿Por qué esa cosa me sigue?

Y lo más feo del asunto... Ya puede imitarme.

Necesito pensar, pensar lo que pasará de ahora en adelante.

No dudaba en correr, en desaparecer, pero sabía que aquella cosa me seguiría.

Después de todo el lo dijo.

Tal vez... Solo, tal vez... Me tenga que comunicar con el mediante la ouija.
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Pasaban las horas, bueno... Apenas son las cuatro de la madrugada... No podía conciliar el sueño... Al momento de cerrar mis ojos me sentía en peligro y eso hacia que los abriera rápidamente.

Una vez más voces en mi cabeza me torturaban... Puede que sea esquizofrénico.

Ya no se ni lo que pienso y digo.
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- ¿Eren? - lo mueve-

Eren: Mmm... - Abre poco los ojos y los vuelve a cerrar-

- ¿Oye Eren estas bien? - lo mueve -

Eren: ¿Q-Qué ? - Abre los ojos pesadamente-

Mikasa: ¿Qué haces en el sofá?

Poco a poco empecé a recordar todo... Si hablaba sabia que me tomarían por loco.

Eren: Ah... Es que... Me desperté a las tres, así que me quede aquí... No me di cuenta cuando me gano el sueño.

Mikasa: Supongo que tenias sed, ya que ahí hay un vaso con un poco de agua.

No recordaba haber tomado agua...
Mucho menos recordaba la hora en que me había dormido ahí.

Mi cuerpo estaba frío, pues no había estado tapado con nada.

Eren: Supongo...

Armin: ¿Estas bien Eren? O es que Laughing Jack aun te posee.

Eren: Sí estoy bien... Creo.

Jean: ¿Todavía sigues con tus tonterías?

Eren: Piensa lo que quieras - se levanta del sofá- ¿Quieren desayunar?

Mikasa: Sí, te ayudo a preparar el desayuno.
Eren: De acuerdo.

Así me fui a la cocina junto con Mikasa, empezamos a hacer juntos el desayuno.

Me percaté que en mi brazo había un pequeño rasguño, seguía pensando en lo sucedido.

Tal vez si había sido un sueño.

Quería pensar eso, creer eso.
Pues no le hallaba otra solución a todo.

Al terminar los desayunos los llevamos a donde estaban los demás.

Le dimos a cada quien su desayuno, yo sinceramente no tenia hambre y creo que se me notaba.

Armin: No te veo muy bien Eren.

Eren: ¿Eh? No te preocupes, estoy bien. - sonríe-

Miento, no se que pensar.

Comencé a comer, para así no preocupar a mis amigos.
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A las doce de la mañana se fueron todos, me quedé obviamente yo solo en la casa.

Decidí acomodar y después irme a la otra casa.

Sin dudarlo comencé a dejar todo y como estaba desde ayer que llegamos.
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Al terminar descanse un poco, pues estar ahí me había cansado.

Vi la hora, ya era la una... No podía creer que me había hecho una hora en arreglar todo.

Decidí de una vez irme, además tenia que pensar que iba a comer, podía hacer comida... Pero no tenia muchas ganas de hacer algo.

Podía comprar algo de comida china... Hace mucho que no como... Si, creo que esa era buena opción.
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Después de dos horas, si me tarde comiendo y vagando por ahí.

Llegue a casa y como siempre deshabitada. Solo yo y nadie más.

Tenia pensado hacer algo.

Me dirigí a mi cuarto, todo estaba en perfecto estado.

Me acosté en la cama y como por arte de magia el sueño me invadió, de un momento a otro me encontraba perdido en mis sueños.
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Cuando desperté me encontré perdido, pues mi mente aun pensaba que estaba en casa de mi papá, cuando ni era así.

Me sentía mejor, no sabia que hora era, pero sabía que ya era tarde pues el sol ocultándose me daba idea de más o menos que hora era.

Y mi mente una vez más empieza a recordar todo.

Vi la hora, eran las seis de la tarde.

No tenía ganas de pararme, no tenía ganas de nada.

Ahora que lo pienso, parezco una chica desilusionada...

Ok... Sin comentarios acerca de lo que acabo de decir.

Esta vez haría el juego que quería, debía comunicarme con esa cosa, decirle o hablar acerca de los límites... Tanto yo como el estamos cruzando los límites.

Yo en su mundo y el en el mio.

Sabia que en este juego no correría el riesgo... O eso espero.

Debía hacer el juego a las tres de la madrugada... A la hora que siempre me despierto.

Enserio tenia una flojera de levantarme, aparte no tenia nada que hacer... Podía jugar... No es tan mal idea... O puedo leer.

No Eren, aléjate de ahí... Voy a jugar... Y me acorde de pokemon... Soy un chico tan extraño.
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Y de un momento a otro me encuentro jugando pokemon... Por un momento mi vista se centró en un juego de Zelda que tenia ahí... Recordando al cartucho maldito de Majora's Mark...

Como me gustaría tener ese juego y ver que hay detrás de todo eso.

Es como la canción "maldita" de pueblo lavanda de pokemon.

Y es como si de pronto volviera a ser el mismo... Soy tan raro.
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¿Acaso si estoy bien? Lo digo porque volví a dormirme y me desperté a las dos de la madrugada...

Puede que mis defensas estén bajas y el por ello este débil.

Me levante, me dirigí al baño y me lave la cara.
Salí y después fui abajo, agarre dos velas, los cerillos y el agua bendita.
Regrese a mi habitación, puse las cosas en la cama y después agarre una hoja cortándola por la mitad.

Agarre un plumón, en una de las hojas puse si y en la otra no.

Volví agarrar todo y baje.
Tenia dispuesto hacerlo en la sala ya que ahí había una mesa donde podía poner todo.

Acomode las dos hojas en la mesita, me senté y puse las velas en frente del si y del no.

Obviamente una representaría el sí y la otra el no, el juego consistía en preguntar cosas y supuestamente el ente apagaría las velas depende de la respuesta que el tomará.

Prendí las velas, tenia que esperar hasta que escuchará algún ruido o golpe... Mientras tanto me concentraría.
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Paso un buen rato y no sucedía nada, decidí empezar a preguntar.

Eren: ¿Hay alguien aquí?

Obviamente no hubo respuesta, me sentía tranquilo... Tal vez ahora no pasaría nada.

Volví a insistir, no me daré por vencido tan rápido.

Eren: ¿Estas aquí?

Nada... Como le dije a Jean, no todo sucederá a la primera... Me quedé cayado, pensando... Mi vista se fijo en la velas, me sumí en mis pensamientos.

No sabia que podía pasar... ¿Acaso corría peligro? No se el porque de esa pregunta.

Eren: ¿Estas aquí?

Nada, transcurridos cinco minutos escuche un ligero golpe, no sabia de donde había venido... Pero sabía que era hora de preguntar.

Eren: ¿Hay alguien aquí conmigo?

Y... Nada... Me sentí un poco engañado.

Después de unos tres minutos, los tres minutos más largos de mi vida, se apago la vela del si.

Me quedé en shock... Pues no pensaba que fuera a ocurrir algo... Me relaje, nunca debes estar tenso ante esto.

Eren: - prende otra vez la vez del si- ¿Tu eres la persona que vieron mis amigos?

Pasaron unos segundos.

- - se apaga la vela del si-

Eren: Ok... - vuelve a prender la vela- ¿Eres un adulto?

El ambiente cada vez era más frío y sentía que aquella cosa estaba en frente mio.

- No

Eren: - vuelve a prender la vela del no- ¿Un niño?

Quería saber quien era el o ella... Si era un niño, un adulto, un joven o anciano, si era mujer o hombre.

- No.

Eren: - vuelve a prender la vela- ¿Un joven?... Bueno... ¿Un adolescente igual que yo?

Paso un largo rato y no respondía, creí por un momento que esa cosa ya se había ido y me había dejado hablando solo como un retrasado mental.

- Sí.

Eren: - prende la vela- Ok... Creí que ya te habías ido.

- No.

Eren: Vale - prende la vela- ¿Eren un hombre?

Cada vez el ente respondía rápido o no tardaba mucho.

- Sí.

Eren: - prende la vela- ¿Eres tu quien me sigue?

Por un momento me arrepentí de preguntar eso, es como si hubiese estado en contra mía.

- No.

Eren: - suspira- Bueno... - vuelve a prender la vela- ¿Conoces a la persona que me sigue?

- Sí.

Me quedé ahí, paralizado... Aquel ente conocía al que me seguía... Volví a encender la vela... Podía hacer un mil de preguntas, pero muchas; por desgracia, no podían ser respondidas.

Eren: Aquel ente... ¿quiere lastimarme?

- Sí.

A la vez quería saber todo, pero a la vez nada.

Eren: - prende la vela- ¿Acaso necesita algo de mi?

- Sí.

Ahora sabia que aquella cosa quería algo de mi y no dudaría en decir que de seguro quiere mi alma o a mi muerto.

Eren: - enciende la vela- ¿Te conozco a ti?

- Sí.

Ya tenía dos pistas, la primera... La cosa que me sigue quiere hacerme daño y la otra es... Este ente lo conozco...

Eren: ¿Eres un espíritu burlón?

- Sí.

Lo sabia, algo no me cuadraba.

Eren: - enciende la vela- Tu eres quien me sigue... ¿Verdad?

- Sí.

Era más que obvio que el era, pero ahora sabia que el era un espíritu burlón... Esto no era bueno ya que los espíritus burlones se podían convertir en lo que temes o en lo que deseas...

Eren: - prende la vela- ¿En realidad te conozco?

- Sí.

De donde lo conocía... No tenía ni idea... Por ahora dejaría hasta aquí el juego.

Eren: - prende la vela- ¿Puedo irme?

- No.

Me sentía preso por esa cosa y a la vez sentía que se burlaba de mi... Como si me viera tonto.

Eren: - prende la vela- ¿Te gusta verme sufrir... Verdad?

- Sí.

Ahora no sabia que era peor... Que está cosa estuviera jugando conmigo, o que me veía la cara de estúpido.

Eren: - prende la vela- ¿Me puedo ir?

- No.

Eren: - prende la vela- ¿Quieres algo de mi?

- Sí.

Eren: - prende la vela-

No sabia que mas preguntar... No sabia que quería de mi.

Eren: ¿Quieres que juegue a la ouija para comunicarme contigo?

- No

Aquel no, lo sentí tan sincero... No me sentía como hace rato, siendo burla de el... Es como si en realidad esa cosa quisiera jugar conmigo, pero a la vez cuidarme.

Eren: - prende la vela- ¿Eres tu aquella persona que vi cuando estaba enfermo?

Tardo en contestar en ese colapso recordé que el silencio dice más que mil palabras.

- Sí.

Me sentía un poco aliviado, así que hablaba con la misma persona que vi de pequeño.

Ahí fue cuando mi temor desapareció.

Eren: - prende la vela- Te quiero agradecer por lo que hiciste ese día... Creo que es todo lo que tengo que decirte... ¿Me puedo ir?

- Sí.

Volví a encender la vela, junte los dos papeles y dije "cierro el juego" y con eso último apague las velas, rápidamente prendí la luz, no me fiaba de la oscuridad.

Me quedé pensando... Si es la misma persona, ¿Por qué ahora quiere lastimarme?
¿Había hecho algo mal?

Necesitaba más respuestas... Pero no se como conseguirás.
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~Te has salvado~

~Siempre te he cuidado~

~Al borde de la muerte... Ahí te ayude~

~Ahora... Quiero que me regreses el favor~

~Quiero tu alma~

~Te quiero a ti~

~No quiero que te vayas~

~No te safaraz de mi~

~Jugamos muchas veces~

~Y lo volveremos hacer~

~Eren... ¿Quieres jugar? ~