Capítulo dedicado a: Ladivadeldrama

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Nadie sabe el porque nacemos... El porque morimos.

Nadie sabe nada de esta vida.

¿Qué es vivir?

¿Qué es sentir?

¿Respirar?

¿Desear?

Así es esto... Así es este mundo y es su regla.

Aunque... No todo es fácil.

Si todo fuera fácil, todo mundo lo haría.

Pero cada persona se destaca por algo.

Ellos para ser notado se destacan por algo... Así les cueste su energía entera, ellos lo hacen para atraer la atención... Aunque cuando no quieres, parece como si todo mundo te viera.
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Nadie escoge a quien cuidar, a quien querer, amar, odiar.

Si lo supiéramos, todo sería más sencillo.
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¿Cómo comenzó esto?

¿Por qué el se quedo?

¿Por qué lo cuido?

Preguntas que los dos se hacen... Aunque el, sabiendo que le cuesta la respuesta, es real.

Después de todo... Se conocieron desde que el tenia unos seis años, pero el lo noto más hasta la edad de los ocho.

Sabia que el estaba ahí siempre, siguiéndolo a donde fuera.

Nunca le tuvo miedo, algo extraño; pero cierto, jamás temió por el.

Solo se preguntaba...

¿Por qué me sigue?

¿Quien es?

¿Qué quiere?

Ninguno de los dos sabía que cuando el pequeño creciera, seria capaz de llegar tan lejos; tanto así que una vez más el siente su presencia... Aunque ahora lo tortura.

Algo extraño... Pero muy cierto.

¿Por qué no me ha matado?

Sus preguntas sin duda van aumentando.

Preguntas que tal vez en un futuro o en su pasado se contesten.

Los niños son más susceptibles a estas cosas... Algunos padres no hacen caso y creen que los pequeños han creado amigos imaginarios, pero muchas veces esos amigos imaginaros llegan a ser reales.
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~Nueve años atrás~

- Eren, pequeño... Vamos a dejarte un rato solo en casa, en lo que llevamos a tu primo a la escuela por unos documentos y en lo que vamos por algo de desayunar... ¿Podrás cuidarte solo?

Eren: Sipi, además... Tengo mi zorrito que igual me protege. -sonríe-

- Esta bien, no pensamos tardar.

Siempre lo mismo, se iban por un rato y el estaba ahí; y aunque no se fueran, el aparecía... Lo malo es que el pequeño de seis años sólo podía verlo.

Eren: -sonríe- Creí que no vendrías.

Acaso... ¿Es malo qué lo note? Después de todo es un niño... Una pequeña criatura, la cual aun no sabe de este mundo, ni de lo que le espera; y aunque lo supiera, no lo tendría muy en cuenta.

~Hola mocoso~

Eren: Me llamo Eren, no mocoso... ¿Cuantas veces tengo que repetirlo? -hace un puchero-

~Las veces que sean necesario... Sabes que nunca te diré por tu nombre~

Eren: -le saca la lengua- Eres malo.

~¿Enserio?... Pues creo que me debes mucho, después de todo soy el único que se queda contigo cuando nadie lo hace~

Eren: Pero... ¿Por qué mis tíos y primo dicen que no pueden verte? Yo te veo tan claro, eres como nosotros.

En aquel entonces... Ese joven no ocupaba una capa para tapar su rostro, en aquel tiempo... Sus ojos no eran vistos como la muerte que ahora se le conoce, es más aquel pequeño le decía lo hermoso que eran sus ojos; pero todo inicio tiene un final.

~Porque yo hago lo posible para que no me vean, si lo hacen; me dañaran y no quiero eso~

Eren: ¿Por qué te dañarían? Mis tíos no harían algo como eso. -confuso-

~Mira Eren... Cada cuento que te digan tus abuelos créelo... Así suene tan loco, tan descabellado, debes de escucharlo y creerlo; tal vez no a un cien por ciento, pero escuchalos~

Eren: Entonces... ¿Debería temer?

~Sí y no...~

Eren: No comprendo.

~Algún día lo harás~

Eren: ¿Podemos jugar? -sonríe-

~¿A qué?~

Eren: -le da el zorrito- Escóndelo y yo lo busco.

~Esta bien... Ve a la habitación y cuenta hasta diez... Sin trampas~

Y así el pequeño obedeció al joven, pero cuando iba por el pasillo comenzó a contar.

Eren: Uno... Dos...

~¡Sin trampas!~

Eren: ¡No estoy haciendo trampa! -ríe-

~¡Que te estoy viendo mocoso!... ¡Ve a la habitación!~

Eren: -ríe- ¡Vale! ¡No te enojes!

Y así el pequeño entro a la habitación y comenzó a contar... Pero... ¿Quien dijo que estaba solo?

Eren: -con sus ojos tapados- Uno... Dos... Tres... Cuatro... Cinco... Seis...

Mientras tanto, el joven escondía el zorrito... Se preguntaba... ¿Donde no podía verlo el pequeño? Al menos para tenerlo un buen rato entretenido, porque después de todo era un niño y debía de sacar aquella energía que tenia.

Pero, apenas comenzaría el verdadero terror para el pequeño, el verdadero significado del porque no debía de embarcarse en algo.

Eren: -gritando desde la habitación- ¡No déjame! ¡AYUDA!

~¡Eren!~

Y así fue el, después de todo debía de protegerlo; aunque nunca se lo pagaría, pero por alguna extraña razón lo cuidaba, lo protegía, le hacia que se divirtiera, aunque sabia que al pequeño no le beneficiara que el solo lo viera, ya que su familia creía que solo era un "amigo imaginario".

Al momento de llegar a la habitación una sombra negra acorralaba al pequeño, este no veía nada, sus ojos estaban tapados... Tenia miedo de ver lo que estaba cerca de el, tenia miedo de saber que le haría daño... Después de todo "estaba solo".

~Aléjate del pequeño -serio-~

*-ríe- ¿Por qué debería hacerlo?*

~Porque yo lo ordeno~

*Ja, no eres nadie... No eres alguien especial, ahora solo eres un ente más, un alma más en pena... ¿Te crees capaz de acabarme? ¿Sabes con quien estas tratando? Yo no soy un ente... Soy más que eso -sonríe- Algo que tu nunca llegaras hacer*

~Tch... No me importa lo que seas, los niños no tienen culpa de nuestros actos, ni el de las demás personas... Deja de atormentarlo~

*No me hagas reír... Sabes nuestras reglas, el más débil cae*

~Pero hay algo... Siempre apuesta al más débil~

*-se aleja de Eren- Bien... Veremos si es bueno apostar en ti -empieza acercarse- Veremos que tan bueno eres, veremos de que eres capaz; eres solo un ente*

~-ríe- Soy más que eso... Y si he de mostrar mi verdadero ser, lo haré~

*Estas en contra de nuestras reglas*

~Te equivocas... Las estoy siguiendo~

Lo que no sabia aquella cosa es que el joven consumía su energía, pero si lo hacia del todo, habría una consecuencia... Tal vez... Algo bueno o malo, aunque obviamente seria malo.

*-se percata de todo- ¡Maldito bastardo!*

~¿Sabes? Me gusta jugar con mis víctimas, aunque tu... Tu acabarás con esta vida, hasta luego... -serio- Errante~

Acabando con esa cosa, algo difícil; ya que había ocupado la mayoría de su energía, pero es el precio que uno paga al acabar con sus propios compañeros, el aun no sabía como tomar su alma, su energía.

~-ve a Eren escondido bajo las cobijas- Eren... -se acerca lentamente-~

Podía odiarlo, podía temerle... Pero aquel niño le sorprendía mucho.

Eren: -sigue escondido- Tenia miedo... Demasiado... Creí... Creí que me dañaría, pero llegaste tu a ayudarme... Al igual que siempre... -sale de su escondite-

~No llores -se acerca a el-~

Eren: -le salen una que otra lágrima- Tenia mucho miedo.

~Sshh -abraza a Eren- Todo esta bien... No llores, si no el zorrito se pondrá mal -le muestra al peluche- Y tu no quieres eso ¿verdad?~

Eren: -se tranquiliza un poco- No... Yo no quiero eso -agarra al peluche, lo abraza y después ve al joven- Eres muy bueno conmigo... -sonríe- ¿Siempre estarás conmigo?

Una ilusión... Se reflejaba en su mirada, aunque aquel chico sabia que nunca pasaría, que conforme pasaran las horas, los días, los meses y los años el lo olvidaría; que seria solo su sombra, que no se acordaría de el... Que lo que el había hecho por el se quedaría en blanco, en un recuerdo que nunca existió.

~Sí~

Eren: ¿Y me cuidarás?

~Eren... No siempre podre cuidarte~

Eren: ¿Por qué?

~Porque en algún momento de tu vida ya no me veras~

Era cierto, no lo vería más... Solo los pequeños muchas veces podían verlos... De ahí el que inventaran sus "amigos imaginarios".

Eren: ¿Por qué ya no te veré? ¿Es por eso que mis tíos y primo no pueden verte?

~Así es... Ustedes los niños son especiales... Tienen "poderes", una vez que se crece aquello desaparece~

Eren: ¿Poderes? Es como... ¿La magia?

~Algo así... Hasta incluso me olvidarás~

Eren: Yo nunca te olvidaría, sería terrible hacerlo... No seria bonito... Aparte... Yo te quiero mucho, no quiero olvidarte, nunca lo haré.

Aunque aquel pequeño decía que no lo olvidaría, pasaría... Así es esto, pero era mejor... Y aunque estaban unidos por un lazo, el muy pocas veces lo notaria; pero así era eso... Así es el mundo y sus reglas... Al menos agradecería un poco por haberse divertido con aquel niño, lo seguiría hasta su muerte; y aunque su "amo" le decía que tenia que controlar al pequeño, el se oponía ya que el sabia que el pequeño no tenia culpa de nada... Inclusive de poder verlo.

Había algo que veía en el niño... Algo que aun lo hacia sentir con vida... Tal vez las ilusiones que tenia el pequeño, después de todo... Eran iguales a las de el, querer ver el mundo más haya... Descubrir que hay más haya de lo que nuestros propios ojos ven.

Aunque quería que el niño dejara su curiosidad, pero no dependía de el; sino del pequeño.

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~Seis años después~

Y paso lo que debía, había veces que lo olvidaba y otras veces hablaba con el; al igual a como lo hacia de pequeño.

Su primo le decía que era hora de olvidar a los amigos imaginarios, pero Eren seguía insistiendo en que era real.

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Un día todo dio un giro dramáticamente, haciendo que Eren completamente olvidara la cosa que lo seguía.

Lo que no sabia ese pequeño es que su primo... Había marcado su vida.

Aura: ¿¡Qué hiciste que!?

- Yo... Lo siento -llorando- No creí que eso pasaría.

Hannes: ¿Cuando lo hiciste? Dime que Eren no esta involucrado en esto -enojado-

- N-no... Lo hice cuando el no estaba... Cuando el estaba con mis abuelos.

Aura: Hannes... Puede que eso sea lo que ve Eren. -preocupada-

Hannes: ¿Cómo se te ocurre jugar la ouija? -enojado-

- Yo... No lo se... Fue curiosidad... Lo siento.

Aura: Hannes... Debemos de hacer una limpia, debemos de separar a Eren de esa cosa... Hay que llevarlo otra vez con tus padres.

Hannes: Sí, no tenemos opción... Llamemos a una vidente para que nos diga si en realidad hay algo en esa habitación... Lo peor del caso es donde duerme Eren.

Y así lo hicieron, Eren no entendía el porque tanto escándalo, pero le daba igual.

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Aura: Entonces... ¿Si hay algo? -ve al vidente-

- Por supuesto que si señorita, deben de hacer una limpia rápidamente... Y tu joven... Tu curiosidad no te a llevado a nada bueno.

Hannes: Gracias por todo.

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Eren se encontraba jugando en la bañera con cierto ente que lo seguía.

Eren: Aun no entiendo porque no te ven.

~Ya te lo he dicho~

Eren: Aun así... Es algo extraño. -le lanza agua y comienza a reír- Lo siento, fue inevitable no hacer eso.

~Me doy cuenta mocoso -igual le lanza agua-~

Eren: -ríe- No se vale.

~Claro que si~

Y así Eren comenzó una guerra de agua con aquella cosa, un momento divertido... Un momento que seria arruinado en cualquier momento.

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Aura: ¿Eren? -trata de abrir la puerta de baño, pero no puede-

Hannes: ¿Acaso se esta riendo?

Aura: Así parece... -agarra las llaves del baño y abre la puerta- Eren cariño, ¿con quien ríes? -abre la puerta-

Algo que les impacto a Aura, Hannes y a su hijo fue ver el reflejo en el agua de aquel ente, Eren por su parte veía las caras de sus tíos y primo, pronto el castaño se percato de que veían a su "amigo".

Aura: -susurra- Hannes...

Eren: Acaso... ¿Lo ven?

No hubo respuesta, Aura saco a Eren de la bañera rápidamente; su tío Hannes había salido y regresado, ahora traía con sigo una cruz y agua bendita.

Eren: ¿Qué hacen? -preocupado-

Hannes: -comienza arrojar agua bendita- En el nombre del padre, del hijo y del espíritu santo... Aléjate de aquí.

El agua de la bañera comenzó a moverse bruscamente.

Eren: ¿¡Qué haces!? ¡Tío Hannes, basta!

El pequeño trataba de ir, pero su primo y tía lo detenían... No podía hacer nada, solo pedir que se detuviera.

Eren: ¡Basta! ¡Lo estas lastimado!

Aura: Eren, tranquilizate.

Como pudo aquel ente salio de aquel cuarto, pero no había solo su presencia... Su vista se dirigió al primo de Eren.

~Así que por ti pago consecuencia -serio- Espero que estés feliz por tu destino~

Ahora entiendo el porque muchos llegan a odiar a los humanos... Pero la curiosidad humana es enorme.

Gracias a que el joven reveló su forma, la familia podía saber donde estaba, donde se encontraba y los movimientos que haría.

Por su parte aquel ente no los dañaría o ese era su idea, no dañarlo; pero si se llegaba un gran grado de molestarlo, era hora de contar la vida de aquellas personas.

El ente bajo a la sala de aquella casa, encontrándose con aquel vidente, el cual tenía cara de asombro y miedo al mismo tiempo.

- No iras tan lejos.

~-ríe- Por favor, mueres de miedo~

Hannes había bajado, no sólo el toda la familia, bueno... Solo faltaba el pequeño de ojos azul verdoso, el cual se encontraba en la habitación gritando que dejarán a su amigo, pero obviamente nadie lo escucharía.

Casi comenzó una lucha, una para salir vivo de ahí; después de todo aun no sabia de que era capaz, solo si se lo proponía llegaba al grado de matar a la gente.

Entonces apareció la otra entidad, la que quería aprovechar para acabar con el.

*-ríe- Los humanos son ingenuos, te culpan por algo que no has hecho... Ahora yo me aprovecharé de eso*

~Tch... Maldito... Me las pagaras~

Y así otra lucha se hizo, dos entes.

La familia se sorprendía por lo que pasaba, aunque el joven tenia todas las de perder; pero entonces su vista se dirigió aquel objeto, aquella tabla... De la cual su "compañero" había aparecido, era arriesgar todo... Aunque... El sabia las consecuencias que habría.

Y así en un rápido movimiento agarro la tabla y la aventó en la chimenea que tenia la fama, tenia suerte de que esta estuviera prendida.

Aquella cosa agarro fuertemente al joven, pero su agarre se hacía menos, ya que aquella entidad se iba quemando, iba desapareciendo poco a poco.

Y así, al grado de consumirse.

Por otra parte el se encontraba algo débil, además de que el agua había hecho efecto en el, lo había quemado un poco.

Se acercó al primo de Eren y con un semblante serio le dijo.

~Esto es lo que causas al jugar algo prohibido -enojado- por tu estupidez tendré que pagar muy caro... Regresaré, en ese entonces puede que tu ya no estés... Pero tu primo -ríe- Será el que me de la energía necesaria~

Y así en un rápido movimiento se dirigió a la puerta de aquella casa, dio un último vistazo aquella familia y se marchó.

Ahora debía pagar por lo sucedido... Debía hacerlo.

El pequeño al final pudo salir de la habitación y pregunto por su amigo.

Pero lo único que recibió fue un "El no es tu amigo y por lo tanto se ha ido"

Algo que devastó al pequeño y culpo a sus tíos por hacerle daño a su amigo, después de todo... Aquella cosa era el único que estaba con el... Lo acompañaba, lo cuidaba, le hacía reír siempre, jugaban juntos y sobre todo... El protegía de sus sueños.

Siempre se lo dijo... Aquellas palabras le gustaba oírlas... Escuchar el "Yo protegeré tus sueños mientras pueda"

Pero ahora... Aquello se iría... Y se cumpliría el trato... El... "Ya no me recordaras" seria real.

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Pasaron los años, el pequeño creció; olvido todo recuerdo que tenia con aquel ente.

Mientras que aquel ente aun estaba presente, solo que ahora más fuerte, ahora cubría sus ojos con aquella capa; pues siempre que el era invocado muchas personas decían que cuando veían sus ojos, veían su muerte.

Pago por lo que hizo hace unos años, pero gracias a eso se hizo muy fuerte... Fue capaz de ocultar su presencia al cien por ciento, aprendió a como tomar energía de los humanos y de los entes.

Tanto así que muchos desaparecían por su culpa, aunque le reclamaban, ya no podían hacer nada... Pues el era un rango ya más alto.

Mientras tanto el pequeño dejo de lado todo eso, sus recuerdos que tuvo con aquel ente fueron reemplazados.

Aunque tenían y tienen un lazo que los une, uno muy pequeño; pero uno muy bien visto.

El peluche.

El chico de ojos azul verdoso cuando sepa de este lazo tiene dos opciones...

Cortarlo.

Conservarlo.

Dependerá de el y de nadie más.

Aunque después de todo... Aquel ente podría influir.

Después de todo el tenia razón...

La curiosidad ganaría ante todo y por desgracia lo sigue asiendo.

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Nadie escoge vivir.

Nadie escoge morir.

Si fuera así... Que fácil seria el mundo, ¿no crees?

Tenemos reglas y debemos de cumplirlas.

Mi error fue no escucharlas desde un principio, todo hubiera sido más fácil.

Pero el hubiera no existe y nunca existirá.

Tal vez podamos cambiar algo, tal vez no... También dependerá de cada persona.

Muchas veces involucramos a personas en nuestros propios problemas, cuando no debería de ser así y en esos casos las personas más vulnerables pagan las consecuencias.

Por toda causa hay una consecuencia.

Es un error meterte en terreno prohibido.

¿En realidad sabes lo que hay?

¿Sabes en lo que te estás involucrando?

Y no sólo pienses en ello... No sólo en ti... También en nosotros, acaso te has preguntado, ¿cómo nos sentimos?

Si, nos divertimos... ¿Pero por cuanto tiempo?

Llega un punto en que harta... Y por ello nos enfadamos, porque muchas veces sólo queremos estar en paz... Y otras veces queremos ser recordados.

Tal vez sea suerte el que los niños nos vean, tal vez nos.

¿Qué hay más haya de la muerte?

¿Otra vida?

¿Otro mundo?

No lo sé.

Yo, al igual que muchos; permanecemos aquí, unos vagando tratando de encontrar su camino, otros solo siendo molestados.

Una parte de mi esta cansada, mientras la otra desea más.

Pues al obtener más poder, podre tener algo más.

Dependerá de como influya en la gente, porque después de todo... El no es el único que me atrae.

Ahora debo de conseguir más energía y hacer de muchas personas su mundo un infierno.

La curiosidad humana es enorme, es por ellos que a veces descubrimos cosas que no debían ser.

Muchos dicen que es tu "destino" yo digo que un verdadero destino es la muerte, pero de ahí en adelante nada.

Por algo pasan las cosas, ¿no es así?
No importa lo que suceda, debes de aceptarlo y acoplarte a el.

¿Crees en la buena suerte?

¿En la mala suerte?

Déjame decirte, que eso no existe...

El ser humano debe de creer en esas cosas, si existen días geniales y días de mierda... Pero no se debe a un destino, a un suerte y lo que más quieras decir.

Lo que muchos llaman karma, otros lo llaman "la vida lo cobra todo" y es verdad... Esta vida cobra todo.

Hasta lo más mínimo.

Por ello ten cuidado con lo que quieres, con lo que deseas y anhelas.

Después de todo... Puede que solo haya una vida y no más.

Así que... Piensa en lo que haces.

Porque cuando la muerte este enfrente tuya, no podrás pedir piedad ya que tu no lo hiciste.

Muchos sufren al morir, eso se debe a que no merecían una muerte como esa, debía ser más tranquila... Pero no es así.

Nadie sabe el cuando morirá, ni el como lo hará... Así que anda con mucho cuidado.

Que hasta tu sombra es tu confidente de todo lo que haces.

Las paredes, el suelo, el espejo, tu sombra, la puerta... Todo lo que conozcas tiene oídos.

Porque...

Porque nosotros siempre estamos ahí, esperando a que tu hagas algo más y dañarte.

Aquel frío que solo tu sientes, somos nosotros rondando alrededor tuyo.

Aquel objeto que se ha cambiado de lugar, hemos sido nosotros, tratando de asustarte o tratando de divertirnos.

Tus pensamientos malos, provienen de nosotros y gracias a que vas pensando en más, nos das poder, nos das energía.

Cada vela que enciendas atrae a un alma, ya que muchas creen que es la luz que los llevará a su paz eterna.

Cuando se iba la luz y prendas una vela... ¿Nunca te sentías observado?

¿No tenias miedo?

¿Te sentías con alguien más?

Ahora sabes el porque.

Recuerda...

Que nosotros hacemos de todo para ser notados.

Y una vez que lo conseguimos, es difícil irnos.

Y si alguna vez nos presentamos muy amable... Deberías temer.

Porque muchas veces cuando se presentan amables... Se tratan de lo que tu y muchas personas lo consideran... Un demonio.

¿Quieres seguir a tu curiosidad?

Adelante... Vamos a divertirnos mucho.

Eso sí, no hay vuelta atrás... No hay piedad.

Muchas almas harán de todo para tomar tu lugar en la tierra y una vez logrado... Olvidate de existir.

Te esperamos.

Nuestras puertas están abiertas cuando quieras entrar, adelante.

Solo recuerda... No hay marcha atrás.

Ahora...

Conocerás lo que es el verdadero infierno.

Olvidate de pedir ayuda.

Olvidate de vivir.

Todo depende de un pequeño hilo.

Tan delgado, que puede ser cortado con facilidad.

Cuando tu duermes nosotros te vigilamos, para que en el momento menos preciso... Tu despiertes y veas que estamos ahí.

Y siempre lo estaremos.

Cuidate de todo.

Y nunca veas un espejo en la noche... Porque tu reflejo puede ser hasta tu peor enemigo.

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>Hola...

Bueno creo que algunas dudas han sido aclaradas, aunque de seguro tienen más.

Este capítulo lo he hecho para que entiendan el porque Levi es así.

Que creo que se molestan porque no sabe el sí cuidar de Eren o matarlo de miedo.

Así que tranquilas/los.

Otra cosa... Algunas/nos se molestan porque Levi siempre gana.

Bueno, pues recuerden que el es una energía... Eren es un humano como nosotros, nosotros no podemos deshacernos de eso, solo con limpias; pero siempre algo se quedara.

Levi por su parte consigue energía, no sólo Eren le da esa energía; recuerden el es invocado y es llamado en las sectas, lo cual consigue energía.

Así que yo creo que es justo que siempre gane Levi, hay unas cosas que ustedes no hay puesto atención, y eso a mi me beneficia ya que eso será algo bueno para la historia.

Otra cosa, se confunden con Levi y los demás entes... Levi siempre será escrito ~Así~ Los demás entes son con las **.

¿Alguna otra duda?

Bueno si más que decir nos vemos.

Gracias por leer.

~>Adry<~

Pd: No veas abajo de tu cama... Hay alguien sonriendote... Na mentira... Esta alado tuyo, solo que no puedes verlo.