El masero se retiró de la mesa con la orden de cada uno de los integrantes de esta misma.

--Pareces un buen chico Fred, comienzas a agradarme. ¿Sabes? -- comentaba el padre de Freddy mientras señalaba al azabache con un tenedor --.

Al parecer Fred y el padre de Freddy tenían los mismos gustos en diversas temáticas.
Como lo era la música, ambos eran unos románticos, en cuanto Freddy les menciona que en su declaración Fred cantó

"Te voy a amar de Axel"

El padre de este mismo la reconoció en seguida y comenzó a tararerla. Acto seguido Fred en su sorpresa siguió el juego cantando en voz baja.
Hay surgió una química entre ellos dos que los hizo llevarse bien de inmediato.

Y en cuanto a la madre.
Ella apoyaba, incluso llevaba mas allá la palabra "Apoyar" este tipo de relaciones. Ella estaba muy feliz. En parte de que le agradaba bastante el azabache.

--Usted me agrada también. Es un honor casarme con un hombre que tanga un padre como usted. -- respondió Fred a su suegro--.

--Oh, Fred. Que buen chico eres. -- pronuncio la madre con una sonrisa--, Dime. ¿A que te dedicas? --cuestiono--.

--Soy dueño de una empresa llamada Artistic. Vendemos útiles de papelería y esa clase de productos. De oficina. -- dijo tomando un tragó a la bebida de aquel vaso de cristal --.

--Oh, Freddy debe ser muy feliz al irte a visitar al trabajo, ¿No? - dijo en un tono divertido la mujer de la mesa--.

--Lo soy mamá, me encanta entrar, más por qué no puedo ir al lugar y no comprar algo -- dijo con el mismo tono que su madre --.

--Espera. ¿Las compras? Te he dicho que puedes llevarte lo que quieras sin pagar -- pronunció casi en un puchero el azabache --.

--Solo algunas cosas, como las hojas color pastel. -- río por lo bajo Freddy--.

Los esposos hablaban de como Freddy podría llevarse lo que quisiera de la tienda. Una discusión divertida para los padres del castaño quienes los miraba con una sonrisa en el rostro.

Cierto era que la anunciación de que se pequeño hijo único se iba a casar era una sorpresa. Pero, al conocer a Fred se dieron cuenta que era lo mejor para Freddy.

--Bien bien, tomare lo que quiera sin pagar cada vez que vaya. ¿Ya? -- dijo haciendo un puchero el castaño -- ¡Además.....

El joven ojiazul no pudo terminar la oración que estaba por comenzar, pues sintió un delicado beso podandose en su mejilla.

--Ya. -- dijo el azabache volteando a sonreirle a los padres de su amado--.

Poco después llegó el mesero con los platillos de cada quien.
La tarde paso tranquila.
Las conversaciones fluían entre la mesa numero once del lugar, todo fue bien.
Y la "Bendición" de los padres de ojiazul fue concedida al azabache.