Capitulo 1
—Bueno Cookie aqui inicia tu sueño.-dijo Dylan volteando a ver a su amiga.
—Te voy a extrañar Limocillo.
—Yo igual Cookie... Aunque nunca pensé decir esto, extrañaré tus levantadas a las 2 de la mañana para cenar.
Esmeralda solto una risa y ambos se abrazaron, prácticamente pasaron toda su vida juntos y separarse de un dia para el otro no era muy fácil de asimilar, en especial para Dylan.
La ojiazul le dio un beso en la mejilla a su amigo, tomo su maleta y entro no sin antes mirarlo otra vez dedicandole una sonrisa.
Dylan observo como Esmeralda se daba la vuelta nuevamente y entraba a la sede... eso de cierta forma le dolió. Se dio la vuelta con la mirada baja y comenzó a caminar de nuevo a su departamento.
Sentía un vacío, desde que tiene memoria nunca se había separado de Esmeralda y saber que no estaba ahí con él le dolía. Tenía lagrimas que amenazaban con salir en cualquier momento.
—No jodas.-se dijo a si mismo mientras apretaba los puños– La vamos a ver en la próxima misión... y en las misiones que faltan.
Recordar que ya no la vería tan seguido hizo que una lagrima se escapara y cayera por su mejilla, quería llorar. Se quito aquella lagrima y acelero su paso.
Ya no caminaba, corría para llegar a su departamento; en la calle de vez en cuando veía a hermanos jugando y amigos disfrutando su compañía. Todo eso le hizo recordar a Esmeralda... era una mala pasada.
No entendía por que quería llorar... o tal vez si, solo que no lo quería aceptar.
Aunque no lo quiere admitir, desde que vio la muerte de sus padres, cuando tan solo tenía 6 años, comenzó a tenerle miedo a quedarse solo... tener miedo a la soledad.
Aparentaba ser un hombre fuerte, con un carácter un tanto amargado en algunas ocasiones, pero en realidad tenía miedo a la "humanidad", ya que más de una vez vio morir a sus seres queridos a causa de personas impasibles... ¿Por qué la vida tenía que ser tan dura? Era la pregunta que busca responder desde que vio morir a sus padres.
Ser asesino a sueldo le dio a entender que muchas veces, la vida tiene precio, y no solo eso también entendió que, para sobrevivir muchas veces necesitas intercambiar.
Nunca le gusto quitar vidas para que él sobreviviera... nunca quiso convertirse en los hombres que le arruinaron la vida cuando tenía 6 años... nunca pidió ser un asesino a sueldo... nunca pidió sufrir pobreza y que las personas quisieran taparse los ojos para no ver la realidad... ¿Por qué no ayudan al prójimo? ¿Por qué ignoran a los que no tienen voz para gritar y pedir ayuda? ¿Por qué solo les importa lo material? ¿Por qué hacen estereotipos?
Cuando tan solo tenía 9 años sufría al ver a Esmeralda llorar por que no tenían que comer, llorar por que no tenían donde dormir, llorar por que no tenían un lugar donde refugiarse de la lluvia, llorar por que cada dia se les notaban las costillas... llorar por que estaban solos.
Pasaron un año en pobreza sufriendo por que no tenían nada que comer más que comida que rara vez les daban y a veces que encontraban en la basura... Adrián les ayudo justo cuando sentían que ya no podían seguir.
Desde entonces sabe cual es su mayor miedo, aunque se niega a aceptarlo pero es muy difícil ocultarlo, tanto él como Esmeralda le tienen miedo a la soledad.
Llego corriendo a su departamento y se acostó en su sillón, miro a su alrededor, estaba solo y eso hizo que su cuerpo comenzara a temblar y las lagrimas nuevamente se acumularán en sus ojos.
Ya no tenía con quien amanecer y desayunar, con quien entrenar, con quien bromear y jugar, con quien hablar... con quien convivir.
Ciertamente se aferro a Esmeralda, su único propósito a sido protegerla y no alejarse de ella... ahora estaban separados.
—Ella esta haciendo su sueño realidad.- se decía a si mismo una y otra vez.
Paso un tiempo y finalmente se levanto para ir a su estudio a trabajar, se entretenía dibujando... aunque a veces solo duraba unos cuantos minutos.
No tenía algún pedido urgente asi que se decidió por hacer un cómic, por lo que saco unas cuantas hojas blancas para hacer el boceto de los personajes, quería contar su historia indirectamente. Sin darse cuenta entre trazos y borrones ya habían pasado 4 horas y media.
Estaba diseñando la portada de su cómic hasta que escucho el sonido de una notificación, saco su teléfono y se levanto, se acerco a su laptop la cual estaba en la mesa de la sala de estar.
La prendió esperando ver alguna notificación sin sentido, ya se estaba arrepintiendo de haber vinculado su teléfono con su laptop.
Sin embargo al ver de que se trataba se tenso un poco, alguien intentaba entrar al sistema de datos de Overwatch, así que comenzó a intervenir.
Trato de colocar un tipo Software que seria complicado de hackear pues el código era lo que importaba aunque el Software no duraría por mucho tiempo.
Le gustaba molestar a los demás hackers y no lo iba a negar.
Deshabilito al otro usuario pero tenía cierta curiosidad en saber quien era así que se infiltró para ver de quien se trataba, seria entretenido o eso pensaba.
—¿Sombra?.-cuestiono con cierta sorpresa.
Claro ¿como no lo había pensado?, nadie más tenía la habilidad para desactivar el sistema de seguridad de Athena.
Después de unos segundos se percato como trataron de hackearlo para obtener su información, eso le causo gracia.
¿Buscas algo?>
Espero alguna respuesta mientras hacia una sonrisa burlona y negaba ligeramente.
<No te metas en asuntos que no te importan y no comprendes chico
Soltó una carcajada, si, sin duda alguna seria divertido molestar a la "mejor" hacker.
La verdad es que entiendo más de lo que crees, quiero decir, aprendes demasiado después de ser el asesino a sueldo más buscado ¿No crees, Sombra?>
<Eres hábil, Crow, eso me queda claro desde que me deshabilitaste hace unos años.
Me alegra que aun recuerdes eso, fue un poco divertido verte intentando sacar mi información>
<¿Enserio lo crees? Entonces te divertirás más cuando te persigan al saber tu identidad
Eso no te lo puedo asegurar... pero creo que tu también te divertirás cuando el gobierno de algunos paises sepan donde te encuentras y cual es tu nombre, digo, Zarya Kazanova ya sabe quien eres, que el mundo también lo sepa no seria problema para ti ¿no? Al fin y al cabo, "si tienes la información tienes todas las cartas" así que puedo usar tu información o la información de Talon para mi beneficio ¿no lo crees?>
<Me agradas Crowsito, no te preocupes tratare de tenerte vigilado
Lo mismo digo Sombra>
Sonrió y apago su laptop, no espero hablar con Sombra el mismo dia que Esmeralda se iba... tal vez investigue todo sobre ella, al fin y al cabo es seguro que ella hará lo mismo... solo le deseaba suerte.
Se levanto y fue a la cocina, saco lo necesario para preparar su comida. Tenía una sonrisa burlona, le gustaba sacar de quisio a ciertas personas... aunque prefería evitar conocer a más pues no era alguien muy social y eso se notaba bastante, por algo quiso ser un diseñador independiente.
Cuando se sentó para comenzar a comer volvió a sentir ese vacío, no tenía con quien hablar... comió con lentitud, la verdad apenas tenía apetito.
Al terminar se levanto y fue a lavar los trastes que recién utilizo, pasaron algunos minutos y se fue a entrenar, tal vez así se distraerá más... pero fue todo lo contrario.
Cuando comenzó a golpear un saco de boxeo varias preguntas se formularon en su cabeza
¿Enserio no podía estar solo?
¿Por que tenía que actuar así?
¿Por que tenía ganas de llorar?
Con cada pregunta sus golpes se iban haciendo más fuertes, estaba frustrado.
Dio un ultimo golpe, respiraba algo agitado se quito las vendas de sus manos y las arrojo a un lado, tomo sus cabellos y cerro los ojos.
Trato de hacerse la idea de que Esmeralda estaba bien, que estaba cumpliendo su sueño y que la volvería a ver... aunque no fuera tan seguido.
Se dirigió a su habitación, se quito la playera dejando ver sus tonificados músculos miro por su ventana de reojo percatándose que ya había anochesido, levanto una ceja ¿Ya había pasado tanto tiempo? Miro su alarma, era de madrugada.
Decidió meterse a bañar, el agua caliente lo relajaba bastante.
Una vez seco se coloco su ropa interior y su pijama la cual solo consistía en un pantalón de algodón color gris. Apago la luz, se recosto en su cama y miro su techo, era relajante.
Tomo su teléfono y miro la hora, las 2:02 de la mañana, sonrió de lado y le mando un mensaje a Esmeralda.
Hola Cookie ¿Ya estas cenando?>
Espero su respuesta con ansias, hasta ahora no habían hablado.
<Sabes que si limoncillo
Me alegro... TE EXTRAÑO COOKIE!>
<Yo igual Limoncillo, recuerda que te quiero mucho, eres mi hermanote... cuídate ¿ok?
Sonrió al leer eso y no tardo en contestar.
Y tu eres mi hermanita, yo igual te quiero mucho, espero te la estes pasando genial... ¿y desde cuando me ordenas? Yo me voy a cuidar por que yo quiero cuidarme ¡No! Por que tu me lo digas>
<En serio que a veces eres muy infantil, pero aun así ya te dije que te vas a cuidar, o si no olvidate de los cupcakes rellenos de chocolate blanco ¿Entendido?
Dejo escapar una carcajada, ella siempre supo como chantajearlo... era lo que más extrañaría de ella.
Conozco gente mala, pero tu te pasas... jajaja bueno ya te dejo ir a cenar ¡Te QUIERO!>
<Yo igual TE QUIERO, y ya te dejo irte a dormir, por que tu si te duermes tus 8 horas jajaja.
Sonrió levemente, sin duda seria complicado estar lejos de ella.
Después de pensar un tiempo se quedó dormido, pero tan solo 48 minutos después un mensaje lo despertó, por lo que, algo adormilado tomo su teléfono y entrecerro los ojos. Al adaptar un poco su vista se percato que el mensaje era de Esmeralda.
<¡DYLAN! ¡ME TOPE CON REAPER! ¡ES MI COMANDANTE!
Se sorprendió y abrió los ojos por instinto.
¡¿ENSERIO?! ¿Como paso? ¿Como lo encontraste? ¿Cómo que es tu comandante?>
<Solamente baje a cenar y justamente cuando estaba lavando mis trastes escuche unos pasos me asome y lo vi, sentí un escalofrio, pero me desconcertó verlo en Overwatch y se que es mi comandante por que Mercy y Genji me comentaron que alguien se levantaba a la misma hora que yo
Así que es por eso que ya no ha atacado, no me lo imaginaba ¿pero no se supone que estaba cazando a los agentes de Overwatch?>
<También me pregunte lo mismo
Cualquier cosa, dime todo eso>
<Usted no se preocupe señor que parece mi padre, lo mantendré informado
Soltó una ligera carcajada.
Cuento con usted jovencita>
<Jajaja al rato te hablo, tengo que dormir, mis entrenamientos comienzan a las 6
¿Tu? ¿Irte a dormir? Es más creíble que midas 1.70 a que te vayas a dormir, gremlin>
<Cálmate poste, tengo mis ventajas al medir menos de 1.60... es muy distinto que yo me vea enana por estar a tu lado, no es que yo sea chaparra es que tu eres un poste de luz andante
Jajaja lo que tu digas gremlin>
<Hablamos al rato limoncillo, te quiero, duermete tus 8 horitas
Adiós cookie, TE QUIERO>
Su sonrisa se fue borrando cuando apago el teléfono, no era lo mismo hablar y burlarse de ella por teléfono... se tenía que acostumbrar a que así fuera.
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Bueno, pues aquí el primer capitulo de "mi código preferido" la verdad es que no conozco mucho de informática y espero no haber confundido algunos términos.
Espero les haya gustado el capitulo.
Gracias por leer.
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