POV. Christian

Afortunadamente mis padres nos dejaron aquí en Montesano. Después que mis abuelos, prácticamente, le rogaran que nos dejen aquí. Mi madre nos dejo quedarnos, a cambio que no hablemos ni juguemos con Ana, ella dice que los hijos de los empleados no pueden jugar, con los hijos de los jefes. A mi no me importa de todas maneras, no pienso obedecerla. Me gusta estar con Ana es divertida, hermosa y muy traviesa.

Voy tan sumido en mis pensamientos, que ni cuenta me di que llegue al huerto de manzanas. Opto por volver a casa, iré a buscar a Mía, para que juguemos con Anastasia. Voy llegando cuando, escucho los gritos de Ana, que provienen del jardín. Llego corriendo, con desesperación, y veo al estúpido de Elliot tirándo de su pelo, bueno en realidad su coletita, ya que Ana, lleva siempre una coleta a cada lado.

- ¡ERES UN IMBÉCIL!. - le grito a Elliot, pegándole en el pecho, y obligándole que suelte a Ana

El cae al suelo, y me mira petrificado al ver mi reacción.

- ¡OYE IDIOTA, ELLA TUVO LA CULPA, Y MAMA DIJO QUE NO LE HABLEMOS A ESTA ESTÚPIDA NIÑA! - grita Elliot, levantándose

Yo no puedo contener mi ira, al ver a Ana llorando por lo que Elliot le acaba de decir y me abalanzo sobre el.

- Niños no peleen - dice el señor Steele separándonos, los idiotas de Marcus y Sean no dicen nada.

- Ya veras imbécil - le digo a Elliot

- ¿Que me vas hacer estúpido? -

- Ya basta los dos, el señor Trevelyan se pondrá furioso con ustedes dos. - Nos dice el señor Steele.

- Este idiota empezó - dice Elliot.

- Yo no empecé, fuiste tu quien estaba maltratando a Ana - le respondo furioso.

- ¿Que tu que? - pregunta un perplejo Ray Steele.

- Esta niña estúpida, es una entrometida - contesta el imbécil de mi hermano.

- Christian, podrías llevar a mi hija a mi casa - me dice el señor Steele.

-¿Su....hija?- Tartamudea el estúpido de mi hermano.

- Si, idiota- me burlo porque Ray, lo castigará.

- Llevate a mi hija de aquí Christian- me vuelve decir el señor Steele

- Por supuesto, ven Anastasia - digo, tendiéndole mi mano, ella toma mi mano... no me gustaría estar en el lugar de Elliot. Seguro el señor Steele lo hará pagar por tocarle a su princesita .

-Anastasia, ¿Que sucedió?... ¿Por que Elliot te tiraba el pelo? - pregunto, Elliot puede ser un idiota pero conociendo a Ana seguro le hizo alguna travesura.

- Esta bien te contare - dice con ternura - Yo te andaba buscando para ir a buscar algunas manzanas, por que no quiero que me lleguen a la cabeza duele - sigue diciendo - Pero no te encontraba, entonces escuche unos gritos y fui a ver... Era una niña, un poquito mas grande que yo, estaba llorando por que esos niños, grandes y malos la estaban maltratando.

- ¿Que le hacían?- Le pregunto ansioso, seguro que Elliot y sus amigos maltrataban a Mía.

- Bueno ellos le tenían su muñeca, y no le querían dar, ella solo lloraba yo pregunte que pasaba pero los niños se burlaron de mi y me enoje. Así que tome una varita que había ahí y le pegue. - dice inocentemente.

- ¿Cual varita? - pregunto sorprendido

- La que estaba ahí - contesta Anastasia tiernamente

- ¿Te refieres a la vara que estaba al lado de Elliot?.

- Si esa - dice mirándome.

- Pero esa no era una varita, era una inmensa vara, a mas bien un palo...¿ Y tu le pegaste a Elliot con eso? - pregunto asombrado. Con razón Elliot, le tiraba de sus coletas

- Si, le pegue a los tres - responde haciendome soltar una carcajada.

Esta niña me tiene sorprendido, sera mejor no dejar nada a su alcance, todo lo utiliza para golpear.

- Ana, con razón Elliot te tiro del pelo - le digo de forma burlona.

- ¿Así?... estas de acuerdo entonces que maltrate a las niñas - se detiene bruscamente y se pone sus manos en su cintura.

- Claro que no, solo es, ¿Por que no le dijiste nada al señor Steele?.- No pretendo hacerla enojar...no quiero ser golpeado como el idiota de mi hermano.

- Porque mi papi, de seguro me castiga.- Cada vez me sorprendo mas, inteligente y malintencionada

- ¿Por cierto quien era la niña? - pregunta curiosa.

- Bueno esa niña es mi hermanita, Mía.

- ¿Tienes una hermana? - pregunta frunciendo el ceño.

- Si y gracias por defenderla, y ahora mismo iré a buscarla para que juguemos los tres - le digo.

- ! Siii ¡ - grita entusiasmada y aplaudiendo...

******

Mía y Ana se han llevado excelente, le he pedido a mi hermanita que no le diga nada a nuestra madre, de seguro se pondrá furiosa al saber que hemos estado jugando con Ana.

Por otro lado Elliot tampoco dirá nada, ya que le tiene miedo al señor Steele, después que tuvo que limpiar el jardín con sus manos y ayudar al señor Steele en el huerto de manzana, fue su castigo por tirarle el pelo a Ana.

- ¡Christian!- grita mi padre, no puede ser, se me acabaron las vacaciones, yo llego en compañía de Ana.

- Papa, ¿Que haces aquí? - Pregunto.

- Hola hijo, tu madre y yo hemos venidos por ti y tus hermanos - dice mirando a Ana. - Por cierto, ¿Quien es esta linda niñita? -

- Yo me llamo, Anastasia Steele - dice ella dulcemente. Tendiéndole la mano

- Anastasia que lindo nombre, ¿Cuantos años tienes? - pregunta Carrick. Y toma la manito de Ana.

- Yo tengo cinco años - dice ella mostrando su mano.

- Christian, aquí estas - dice mi madre, interrumpiendo la conversación de Ana y mi padre.

- Madre - le digo.

- Y esta niña, ¿Quien es? - pregunta mi madre, sin siquiera saludar

- Yo me llamo, Anastasia Steele - dice Ana dándole la mano, mi madre solo la mira con desprecio y no le devuelve el saludo.

- Carrick, cariño debes ir a buscar a Elliot - dice - y tu Christian, ve a preparar tus cosas, ya vámonos - dice y se da media vuelta y se va camino a la casa.

- ¡VIEJA MALEDUCADA! - grita Ana furiosa, y otra vez yo me quedo sorprendido

- ¡¿QUE?! - dice mi madre, volviendo donde estamos Ana y yo. - Repite lo que dijiste, mocosa pobretona - dice mi madre.

Estoy en shock.

- Es usted un vieja mal educada, y fea, por no devolverme el saludo - dice Ana furiosa.

- ¡Escuchame niñita, jamás vuelva a faltarme el respeto, porque yo no soy de tu misma clase ¿Me oiste?! - dice mi madre, yo no puedo contener mi furia por las cosas que acaba de decirle a Ana.

- Mama es solo una niña - le digo.

- Christian, creí decirte que entres y arregles tu cosas - su tono de voz es duro

- Ya voy - le digo irritado.

Ella voltea de nuevo y entra a la casa.

De repente veo que Ana va a decirle algo, voy y le tapó la boca, no quiero que se meta en problemas.

- Ana no quiero que te metas en problemas, tu y el señor Steele - le digo, cuando siento que Ana me mordió mi mano.

- Muy madre tuya sera, pero es mala - dice enojada.

- Lo se, pero no debes de hablarle así a los adulto - le digo enojado con ella por morder mi mano.

- Yo solo me defendí...ella es una vieja mala, fea, bruja, tonta... pero ya va a ver cuando encuentre mi vara.

-¡¿Que?!- ¿Está pensando en golpear a mi madre?

- ¡¿Que de que?!- Mejor no le dijo nada mas.

- Vamos a la cocina a tomar jugo - le digo, no quiero seguir peleando con ella.

- Esta bien...

- ¿Desde cuando, esta mocosa se sienta en la misma mesa que mis hijos? - Dice mi madre mirando a la ama de llave de mis abuelos.

- Señora, los señores Trevelyan no tienen problema con eso - responde la ama de llaves.

Ella se dirige donde esta Ana y le quita el vaso de jugo que se estaba tomando.

- ¡Mira mocosa, ya te dije que tu no eres de nuestra clase, así que no te juntes con mis hijos, ellos no son como tu! -

Mía y yo no podemos creer la crueldad de mi madre. Yo miro a Anastasia tiene los ojitos lleno de lágrimas, y sale corriendo humillada por Grace.

- Así entenderá, que no debe aspirar a algo que no es - dice mi madre con arrogancia.

- ¡Yo no aguanto! - le grito - ¡GRACE TE ODIO, ERES MALA!- ella me mira estupefacta.

- ¿Que fue lo que hiciste? - pregunta el abuelo, al escuchar lo que acabo de decirle.

- Mi mama le quito el vaso de jugo a Ana, que se tomaba y la trato mal - dice una furiosa Mía.

- ¡¿QUE?!- grita el abuelo -¡ ¿Como se ocurre hacer eso?, Grace yo no te crié así !- dice mi abuelo,mirándola con decepción.

- Papá, ¿no me digas que tu quiere, que tus nietos compartan la mesa con la hija de tu cuidador?.

- No le veo el problema, son niños Grace - dice mi abuelito.

Yo no puedo seguir escuchando esto, miro a mi madre con rabia y salgo corriendo, haciendo caso omiso a mi madre que me llama.

Llego a la pequeña casa de Ana, golpeo y me encuentro con Ray.

- Señor Steele, ¿Puedo ver a Ana?.

- Christian, por favor no quiero que te metas en problemas por estar aquí, como tampoco quiero que humillen y maltraten a mi hija - dice con tristeza, y me doy cuenta que se le escapa una lágrima.

- Por favor yo quiero verla antes de irme, usted sabe que yo jamas la lastimaría - le digo con tono de suplica.- Déjeme despedirme de ella por favor-

- Jovencito se perfectamente que jamas la lastimarías, pero no puedo decir lo mismo del resto de tu familia - dice resignado.

- Entonces, ¿me deja verla? -

- Esta bien, pasa, esta en su dormitorio.

Cuando entro se me parte el corazón, ver como llora.

- Anastasia no llores, me siento culpable. - le digo, ella me mira tiene los ojos hinchado por llorar.

- Christian, ¿es por que no tengo mamá, que ella me odia? - dice, llorando.

- No Anastasia, ella es así - le digo, a modo de disculpa - Ana eres la niña mas, linda y tierna, aunque un poco traviesa, pero divertida, que conozco. Te prometo que cada vez que pueda, te vendré a ver le digo.

-¡ ¿Es, enserio? !- pregunta ilusionada y secándose las lágrimas, yo asiento con la cabeza. - Te quiero mucho Christian - dice abrazándome, y me da un beso en la mejilla.

- Yo también, te quiero mucho, Anastasia - le digo, por que en poco tiempo se gano mi corazón. Espero seguir siendo su amigo hasta siempre.