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El chocolate favorito del Lobo

Remus Lupin llego de visita a Howards, decidió aprovechar que pronto su sobrino estaria de vacaciones, decidió llegar unos días antes para instalarse.

Mientras tanto el director estaba algo abatido, por que no lograba localizar a Severus, lo cual era muy extraño. Severus nunca solía saliste de su rutina, y siempre avisaba si tenia algún imprevisto.

Remus fue recibido por los elfos, ya que, el director estaba muy ocupado, el nombrado mando sus disculpas por no poder resivirlo el mismo.

El licantropo después de instalarse decidió dar un paseo, estaba recordando sus viejas travesuras.

La noche siguiente seria luna llena, por lo que sus sentidos estaban algo sensibles, y percibió un fuerte olor a chocolate en un viejo almacén que se usaba para vinos, decoraciones y otras cosas para fiestas. Es extraño; ya que, este almacén es antiguo y no muy transitado.

Hay alguien aquí??- pregunto el guapo hombre.

Nadie respondió, decidió entrar a echar un vistazo, al parecer estaba abandonado. Siguió revisando hasta que escucho un moviendo casi imperceptible, se acerco al lugar y se sorprendió mucho con lo que vio
Una parte de el quería reírse de la situación de su antiguo compañero de estudios y de trabajo.

Severus estaba en el piso recostado contra un estante de vinos lleno de polvo y telarañas,tenia una manta cubriéndolo hasta debajo de los hombros. Estaba desperado y muy pálido.

Severus? Que te paso? Que haces aquí?

El no respondió, trataba de decir algo y su rostro estaba lleno de emociones confunsas, hasta que su mirada insinuaba que tuviera cuidado, peligro, y que el tuviera cuidado de algo, estaba asustado de algo.

Que pasa? No puedes hablar ?
Saco su varita mientras se fue acercando, Severus trataba de moverse y se uso mas histérico a medida que se acercaba

De pronto escucho pasos a lo lejos y se agacho rápidamente para esquivar un hechizo, pero se cayó al suelo y así dejo ir a los atacantes, los cuales salieron cellando la puerta. Cuando intento abrirla no se podía, ya que, se reforzaba cada vez. Era un hechizo para bóvedas, si era madera y era forzada se convertía en fierro, luego en bronce y así sucesivamente cada vez que se intentaba abrir.

Maldición!!!- Grito frustrado.

Dándose cuenta del hechizo desistió, y regreso donde el otro mago, gruñendo

Se agacho para ayudar, y al destaparlo se dio cuenta que severus estaba inmóvil y olía a chocolate.

Que te pasó?? Por Merlin!!

Severus trataba de ocultar su vergüenza y humillación al ser vencido por unos niñatos

Al ver que no respondía, Remus lanzo un finiten, para que pudiera hablar

Los voy a matar!!! Juro que los voy a matar, me quitaron mi varita, luego de inmovilizarme, eran varios, luego me lanzaron hechizo muy extraño, no lo he visto antes, y eso es decir mucho, estoy seguro que es una invensión de uno de ellos o de un conocido. Es que mi cuerpo se esta derritiendo.

Como??- respondió confundido

No sienes el chocolate idiota? Me convierto en chocolate, mis pies y mi torso ya están hechos de chocolate, esta avanzando lento, aun así no se desase así le ponga un finite, mesitamos salir de aquí.

No podemos, le pusieron un hechizo candado para bóvedas a la puerta.- respondió.

Llama a un elfo, a mi no me hacen caso.- gruño el pocionista

Tany!! Ayúdame.-pidió el lobo, más no recibió respuesta-.Por que no viene ???

No lo se pulgoso.- pincho el ojinegro

Oye, ese es Sirius, yo no tengo pulgas.- respondió irritado

Aja.- siguió pinchando con ironía.

Remus no respondió, lo fulminó con la mirada.

Severus por el calor que tenía, decidió quitarse su capa, la levita y se desabrochó su camisa blanca. Se podía ver que la maldición le llegaba hasta el ombligo. También se podía apreciar un tatuaje mágico en el pectoral izquierdo .

He, alguien a estado haciendo ejercicio . Se te ve bien.-elogio el mago, sin dejar de mirar su cuerpo como una escaneados

Cálmate si, no eres mi tipo.- dijo algo incomodo, tratando de parecer normal y no ruborizarse.

Como que no? He, que no sabia que fueras mentiroso. Recuerdo perfectamente la vez que te ayude con tus maletas y tuuu me diste un beso en la mejilla, luego te fuiste corriendo.- dijo nostálgico y pensativo, se le veía un brillo en los ojos de felicidad y emoción.

Tenia 12 años Lupin, no te hagas ilusiones. Tu eras el que no me dejaba en paz luego de eso, para mi suerte.- dijo irónicamente.

Es que eres muy adorable, agradece que te respeto, por que sino me aprovecharía de la situación y te arrancaría toda la ropa y te comería lentamente, mmm.- más aun que amo el chocolate.

Severus abrió los ojos como platos, y se sonrojo un poco, si no fuera por que su polla estaba convertida en chocolate ya se abría empalmado, trato de evitarque se notara su emoción.-Dios estas loco, aléjate de mi que no se te ocurra, por que te juró que te vas a arrepentir Lupin.

Pero que me vas a hacer, no traes varita y estas tan indefenso mi adorable omega.- molestó a su amor platónico.

Cállateeeee.- exploto frustrado por su situación.

No.- respondió simplemente, para seguir pinchando, y hacer que se moleste más.

Severus respiró y trató de calmarse, y solo contestó-.Me irritaaas, tantoo.- luego hecho la cabeza hacia atrás y cerro los ojos.

Me encantas.- dijo Lupin, pero esta vez no con la intención de molestar, le salio tan sincero

Sabes Lupin, te estas pareciendo mucho a el perro, deberías de escoger mejor a tus amigos, no se valla a pegar lo idiota.- respondió aun con los ojos cerrados y recostado en el viejo mueble.

Remus se molesto, se sentó sobre sus rodillas,estaba serio, ya cerca al otro profesor lo agarro del cuello de la camisa e hizo que lo mirara.

Deja de meterte con el, sabes que me duele que este muerto. Y tu lo haces apropósito, me duele mucho, hace poco cumplió el año, por eso viene a ver a Harry, por que eres así, sabes que yo te quiero, y lo único que haces es lastimarme siempre que me trato de acercar, tanto miedo le tienes a que te amen, a amar??

Severus no respondió, solo lo miraba fijamente a los ojos sorprendido y conmovido.

Se quedaron viendo hasta que Remus noto que el pelinegro miraba sus labios, se los humedeció y en respuesta el también, decidió dar el paso, valientemente tomó la iniciativa de empezar un beso fabuloso, fabuloso, fabuloso xd.

Para sorpresa de el mismo, Severus le devolvió el beso sin esfuerzos, era la primera vez que lo hacia . Siempre lo rechazaba, es la primera vez que sentía el deseo de corresponder, quería besarlo tanto como el otro.

Estaba besándose en una posición muy incomoda, así que el lobo terminó el beso, ninguno dijo nada, tenia los labios húmedos, el ambiente estaba cargado de pasión.

El lobo ayudo a el otro mago a pararse Aunque se podía mover se le hacia difícil por que el chocolate en su cuerpo parecía que se iba a romper. No dejaron de mirarse ni un instante.

Lupin transformó una de las cajas en un mueble donde acostar a su primer amor, lo ayudo a acostarse, y le coloco un cojín debajo de la cabeza, que también tranfifuro.

Gracias.- dijo cálidamente el pocionista

El lobo no respondió, le sonrío y se sentó a su lado. Lo observó y acaricio su rostro

El pelinegra empezó a sentir mariposas y cosquillas por todos lados, pero también sentía paz y seguridad.- Remus-. Dijo en un susurro, pegando su rostro a la caricia de las fuertes manos de el lobo.

Esto removió algo dentro de su Alfa, cosa que no era normal en el, desde joven siempre tuvo cero contacto con su lobo interno, y luego eran poca las veces que lo sentía cuando se convertía. Su Alfa quería protegerlo, pero también lo quería poseer.

Severus pudo sentir las fuertes feromonas de dominación del Alfa, olía a fuerza y dulsura como la madera y los prados de flores. Sentía la lujuria y la dulzura y sobre todo el olor a hogar. En su mente vino una casita de madera en un prado seria a un lago. Se sonrojo al pensar en eso.

Lupin al notar el sonrojo no pido evitar volver a besarle, sus labios cabian perfectos en los suyos. El tenia de sus labios, nunca sacaría su sed, por que dejar algo que te gusta?

Severus estaba encantado con la rudeza y dulzura de los besos de el lobo, si no fuera por que el se inhibe con susprensores para parecer beta y por el hecho que pronto seria una barra de chocolate, juraría que ya estaria rogando por el nudo del lobo, pero si parte humana aun así estaba delirando y no pudo evitar gemir, aun bajo el lobo lo escucho.

Remus se volvió loco y esta peque melodía entendió su corazón, quería complacer al omega, quería oír más, no pudo evitar ponerse duro con solo pensar en lo que le podía hacer. Se recostó sobre el tratando de no aplastarlo, puso un pierna entra las de el y la otra pegada al respaldar del sillón, aun besándolo, coloco una mano a lado de su cabeza y la otra en su nuca para profundizar el beso.

Severus sentía que el fuego en su corazón derretía el chocolate. Tenia un poco de miedo-. Re..mus mmm.- trato de cortar el beso.- me ... Derrito .. remuus para

Confundido remus dejo de besarlo un poco a regañadientes pero lo dejo.- que pasa amor??

Severus se sonrojo pero no lo ocultó.- cre que me estoy derritiendo, me voy a morir si el chocolate llega a mi corazón-.Severus noto que uno de sus dedos se había convertido.- Merlin voy a morir.- estaba empezando a alterarse

Lupin por miedo que entre en un ataque de pánico, lo trato de tranquilizar, le besó sus manos muchas veces mientras le pedía que se calmara. Casualmente roso con el chocolate. Remus lo miro pidiendo permiso para poder chuparon su dedo y al no revivir negación así lo hizo. Le dio una lamida para probar y era delicioso. Sigo chupando estaba embobado, era muy morbosa la situación. Baloto el dedo con un chasquido .

Cuando se dieron cuenta sus dedos no tenían nada de chocolate. Hizo lo mismo con la otra mano. Sin preguntarle al omega, se lanzo a lamer su pecho de chocolate, lamió los pectorales y los pezones hasta que no tenían nada de chocolate y solo estaban rojos y maltratados. Siguió chupando el torso hasta llegar al ombligo.

Severus se dedicaba a morderse los labios y evitaba los mas que podía gemir, pero no pido evitarlo cuando logro retirar el chocolate de sus pezones y menos cuando el alfa empezó a ronronear por escucharlo. El era un mar de gemidos suaves. Remus lo estaba devorando literalmente.





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