Tal vez las cosas son mejores
Narra Marian
Desperté dispuesta a llevar a cabo la rutina de siempre, levantarme desayunar, entrenar a los niños que se me den, no es que los odie..
No me malinterpreten no me estoy quejando de los deberes, créanme cuando les digo que lo único que evita que pierda la cabeza son estos labores.
Una voz me saco de mis pensamientos de enojo e impotencia
Matilda: Marian!
Marian: si? dije mirando a mi alrededor y al notar donde estaba estaba en la cocina del palacio, tal parece que estaba en modo automático.
Matilda: otra vez en las nubes señorita?
Marian: perdón Matilda en que te ayudo? dije mientras me quitaba los guantes de las manos y me lavaba las manos
Matilda: te estaba diciendo que no tenia los ingredientes ni siquiera para el desayuno los soldados ayer comieron mas de lo que esperaba
Marian: entonces que vamos a hacer?
Matilda: te estaba preguntando que si me podrías acompañar al mercado, después de todo no puedo cargar todo lo que necesito yo sola, y no quiero ir con los soldados, siempre terminan rompiendo la comida
Marian: pero Robin no me deja salir del castillo dije triste
Matilda: tontearías iras conmigo y si te escapas sabes que Robin estés donde estés te va a encontrar , además confió en ti así que mejor vámonos antes que despierten los soldados y enloquezcan con el estomago vacío.
Marian: esta bien dije mientras tomaba mi bolso y me disponía a seguirla, hace bastante tiempo no iba a la aldea, no podía esperar para ver como estaba pero me imagino que con los cuidados de Robin estará devastada.
Nos subimos a un carruaje y sin mas nos fuimos, tardamos en 14 minutos, o algo así cuando al fin llegamos no podía creer lo que estaba viendo, la aldea estaba bien..
Los niños estaban aprendiendo en una pequeña tipo escuela, otros estaban en recreo jugando felices comiendo algunos pastelitos, las mujeres estaban lavando en el rio y los hombres trabajando pero fue como si la escases desapareciera de la nada, no me podía creer que Robin aun siendo una cabeza hueca habia logrado que el pueblo estuviera tan feliz.
Matilda y yo paramos a comprar, y los aldeanos no tardaron en reconocerme, al comparar su situación de la época en que gobernaba mi primo y la de ahora supuse de inmediato que estarían molestos.
Mas sin embargo todos y cada uno me saludaron alegres, sin rencor aparente, desde los aldeanos a los que les compramos la verdura hasta los niños que me veían me abrazaban, tal vez no me odien.
Matilda: algo me dice que temías venir aquí
Marian: en lo absoluto Matilda, quería ver como estaban, pensé que estarían mucho peor
Matilda: pues creo que no, desde que Robin disminuyo los impuestos y mejoro la calidad de vida, el destino les sonríe mejor a la aldea
Marian: estoy feliz por ello
Matilda: si, incluso trajo un pequeño hospital y médicos que dejan de poner remedios caseros a los enfermos, aunque tal vez eso se lo debamos a el pequeño Juan
Marian: ya veo, la verdad creo que debo estar un poco mas agradecida con esa cabeza de tomate. creo que el a cuidado mejor del pueblo que mi familia
Matilda; aunque esto no es tu culpa sabes? de todos modos eran tus primos quienes gobernaban, ayudabas mucho permitiendo que Robie entrara al castillo
Marian: si pero no falta el día que me recuerde que pude haber hecho mas por la aldea
Matilda: esto es lo ultimo dijo mientras subía una bolsa de hierbas
Narrador:
Mientras que las mujeres terminaban de acomodar las cosas en el carruaje cierto pelirrojo desde el castillo estaba mas que angustiado pues no encontraba a su dama aun no declarada por ningún lado
Tut. no esta en los jardines
Scarlett: yo revolví su cuarto no esta ahí
Pequeño Juan: tampoco en la cocina
Robin. sabia que escaparía! sabia que no me soportaría por mucho, rápido llamen a sus aprendices a los hombres que ella entreno rápido! llamen al ejercito! a los sabios! a las brujas!
Mas sin embargo el carruaje paro en frente de la entrada del palacio, donde el pelirrojo estaba gritando a todo pulmón ordenes para encontrar a la chica
Mas todos pararon en seco cuando la vieron bajar con una sonrisa del carruaje
Robin: que están esperando?!
Marian sin saber muy bien lo que estaba pasando bajo corriendo del carruaje y le dio un gran abrazo por la espalda a Robin el cual se quedo atónico al reconocer las manos de la chica
Robin: Ma..Marian?
Marian: gracias por cuidar tan bien de mi pueblo
Tut: Marian te sientes bien?
Marian: como nunca Tut dijo dedicando una dulce sonrisa, Robin seguía callado como si estuviera hablando con una fantasma
Scarlett: donde estabas?
Marian: fui al mercado con Matilda a ayudarle a traer las cosas para el desayuno
Matilda: así es pero que esta pasando aquí
Robin seguía analizando a Marian atónico incluso con la boca abierta
Tut: nada de nada solo estábamos pasando lista soldados todos a sus puestos dijo mientras los miraba con una mirada asesina a lo cual se fueron los soldados algo confundidos sin decir nada
Matilda: bueno ustedes no se crean que son los jefes pueden ser importantes pero sigo siendo su madre y Tía dijo señalando a Robin y Scarlett ayúdenme con el desayuno
Hasta aqui por hoy espero que les haya gustado y hasta la próxima
Extras
Marian tomo algunos ingredientes del carruaje acto que le siguió pequeño Juan y Tut mientras comía una manzana que vio entre las compras.
Matilda: todo a la cocina Tut no te comas las compras y tu Robin cierra la boca que se te meterá una mosca
Luna fuera :3
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