✨ A L I C I A ✨

Me cubro la boca con mi mano al ver lo que Valeria acaba de hacer, incluso pegué un leve sobresalto y enseguida desvío la vista.

No la creí capaz de hacer eso.

No imaginé que ella terminaría así.

Traté de convencerla, ganar tiempo y sobre todo, que ninguno de los tres saliera afectados. Sin embargo, con Valeria fue difícil. No puedo dejar de sentir lástima por ella, por lo que pasó, por lo que sé y por lo último de como la ví actúar. Sabía que miraba a Dylan, ahora a esa chica Coral pero no creía que ella realmente estaba muy mal para llegar a tales extremos de quitarse la vida frente a nosotros.

De nuevo, veo otra muerte frente a mí.

Bajo mi mano lentamente, siento las manos de Axel en mis hombros.

—Tranquila Ali, aquí estoy.

Tomo una profunda respiración y giro a verlo. Me volteo para evitar ver a Valeria en el suelo. No vi más que escuchar el ruido de su cuerpo al caer.

—A–Axel

—Shh, ven aquí

En este momento dejo salir las lágrimas y lloro por todo. Abrazo a Axel, oculto mi rostro en su pecho y rodeo su cintura con mis manos.

Escucho sus palabras que intentan calmarme. Puedo escuchar su acelerada respiración y como tiene miedo al igual que yo.

—¡Por aquí!

No obstante, un grito nos interrumpe. En el momento que me alejo de Axel y giro a ver a la puerta, esta es abierta por un oficial y detrás de él veo a mi padre.

—¡Pa–pá!

—¡Princesa!

Él entra corriendo a la habitación. Apenas doy unos pasos cuando soy sostenida por él. Lo abrazo y cierro los ojos un instante mientras siento su mano en mi cabeza.

—Estas a salvo hija, te llevaré con tu madre.

Asiento sin dejar de llorar.

—Benson, encárgate de mi yerno. —escucho que le ordena a alguien.

—Estoy bien, lo que importa es Alicia

Giro a ver a Axel al escuchar su voz. Limpio con mi mano izquierda mis mejillas y lo observo. Un oficial lo revisa, él asiente y niega cualquier daño.

—La llave la debe tener ella. Revísenla. —les dice Axel y gira a verme. Finge una sonrisa.

—Vamos hija

Mi padre se aleja de mi y me jala con delicadeza a la salida.

—No, Axel —me safo de su agarre y me quedo quieta.

Sin evitar, poso la vista en Valeria que yace en el suelo. Otro oficial cerca de ella le cierra los ojos y busca en sus bolsillos hasta encontrar la llave. Se la entrega a su compañero y este se encarga de liberar a Axel.

Apenas él tiene su libertad, camina a pasos apresurados y llega hasta mí. Evita que vea a Valeria y coloca sus manos en mis mejillas. Veo fijamente sus ojos azules y tomándome por sorpresa, me besa castamente.

—Salgamos de aquí —emite al alejarse.

Me suelta y me hace dar la vuelta. Me dejo guiar por él a la salida.

—Encarguense de la chica —les ordena mi padre y sus pasos suenan detrás de nosotros.

Sin decir una sola palabra, salgo de la casa con Axel a mi lado. Él sin dejar de soltarme.

De pronto me detengo y observo afuera. Un dejá vú me invade, por un momento cierro los ojos y los vuelvo abrir.

>Todo acabó Alicia<

>Al fin terminó todo esto, está pesadilla<

Giro a ver a Axel y le sonrío.

Él me regresa la sonrisa, su rostros se transforma en una mueca y se aleja rápido de mí. Se inclina y vomita.

Enseguida aparto la vista, mi mano lo busca y logro tocar su espalda sin ver nada. Evito las náuseas que me invaden.

—Aqui estoy Axel

—Ali —susurra y vuelve a vomitar.

—¡Rápido, este chico necesita ayuda! —grita un oficial y corre en dirección hasta nosotros.

—Hija, ven conmigo.

Me dejo guiar por mi padre, apenas unos pasos de Axel.

—Ya está mejor, lo van a atender

Asiento

—Mi princesa

—Gracias por venir papá —pronuncio en un hilo de voz y lo abrazo otra vez.

—Necesitas que te revisen hija

—Me siento bien papá —suspiro— me siento mejor ahora.

(...)

Axel se a recuperado. A ambos nos revisaron. Tal vez estoy un poco bajo de mi peso normal, sucia y nuevamente con un trauma. La muerte de Valeria, sus últimas palabras se repiten en mi cabeza una y otra vez.

Me obligo a no pensar en eso mientras estoy dentro del auto de mi padre rumbo a nuestra casa. Con Axel a mi lado.

Él trayecto es silencio, nadie menciona nada. Creo que ambos estamos asimilando y queriendo olvidar lo que pasó.

—¿Estás bien?

Su voz me regresa a la realidad y asiento.

Lo veo de reojo, Axel mueve sus manos nervioso.

—¿Lo estás tú? —le pregunto.

—Estoy mejor, es solo que no esperé ver eso. Me afectó recordar. —dice en voz baja— no había visto a alguien... morir frente a mí.

Giro a verlo y hago una mueca de tristeza.

En todo momento, Axel mantiene la vista al frente.

Bajo la vista en sus manos y dudo un instante en hacerlo. Acerco un poco mi mano y a poca distancia, me detengo.

✨

Cierro el libro que terminé de leer y poso la vista en Axel. Él se mantiene entretenido en su celular.

Tomo una profunda respiración y veo su mano con detenimiento. Quiero llevar acabo lo que leí.

Con disimulo, acerco mi mano a la suya. Apenas roza cuando me detengo al notar su mirada.

—¿Qué intentas hacer? —lo dice con una pizca de diversión.

—Nada —paso saliva. Siento mis mejillas ruborizarse al ser descubierta— no es nada. —obtengo su atención fija en mi— Solo quería unir nuestras manos.

Axel me sonríe y él mismo entrelaza nuestras manos.

Sonrío como boba, sin embargo no es lo que quiero. Me safo de su agarre, a él le sorprende y está vez engancho mi dedo meñique con el suyo causando su sorpresa y confusión.

—Es una promesa de amor, que pase lo que pase, siempre vamos a estár juntos. Luchar contra todos. Superar cada prueba. Nuestro amor va a seguir creciendo y siempre existirá ese hilo rojo  invisible que nos una.

Le sonrío

Una mini Alicia dentro de mi cabeza me aplaude.

>Bien dicho Alicia, lo aprendiste muy bien<

Axel ensancha su sonrisa, mira esa unión de nuestros dedos y posa la vista en mi rostro.

—Me gusta, pero más tú.

Se inclina y me besa con ternura.

—Es una promesa Ali —me dice al alejarse y me vuelve a besar.

✨

Regreso a la realidad y olvido ese recuerdo.

>Vamos Alicia, hazlo<

Tomo una profunda respiración y tomo su mano, la separo un poco de la otra y sin esperar, engancho mi dedo meñique con el suyo.

Axel gira a verme, ve tal acción y después a mí. Enseguida se inclina y me roba un beso aún sin soltarse.

Mientras mi padre, nos observa por el espejo y carraspea.

Me alejo de él, sonrío y recargo mi cabeza en su hombro.

Estoy agotada como física y mentalmente. Solo quiero poder estar con Allison.

—¡Llegaron!

—¡Bro!

—¡Alicia!

—¡Axel!

Los gritos de varías voces nos reciben apenas entramos a la casa. Avanzo varios pasos antes que Axel y enseguida soy recibida por Ana con un fuerte abrazo, incluso la escucho llorar.

—¡Prima, al fin estás aquí!

—Ana —pronuncio su nombre con un hilo de voz sin dejar de soltarla. Realmente necesitaba un abrazo de mi prima favorita.

Sin embargo, un carraspeo nos interrumpe.

—Sigo yo Ana

Enseguida ella se aleja y Alexa ocupada su lugar.

—Bienvenida cuñada

Le sonrío y acepto su abrazo.

Así soy abrazada por todos, me cuesta reconocer a quien abrazo entre tantos. Sofía, Alan, Lucas, Bryan, el pequeño Brandon, los padres de Axel y Max se unen.

Apenas me alejo del último y giro a ver a Axel, Alan se aleja de él y golpea su espalda.

—No debiste actúar así Bro. Al menos me hubieras dicho y te hubiese ayudado.

—Ya no importa hablar de eso Bro —le responde Axel.

—Yerno, encontramos tú celular en esa casa. Estaba en un pasillo cerca de la entrada.

Axel posa la vista en mi padre, le entrega su celular y Axel lo guarda en su bolsillo.

—Lo había olvidado, Valeria me lo debió quitar porque obvio no lo tenía. Gracias casi... mi suegro por completo.

Mi padre asiente y le sonríe.

Entonces, Axel enfoca la vista en mi y se acerca.

—Alli, quiero verla —murmuro.

Él asiente y toma mi mano. Me guía hasta la sala donde veo a mi madre sentada con mi hija en brazos.

A medida que nos acercamos, ella comienza a llorar y se pone de pie.

—Mamá —susurro

—Regresaste hija, mirá aquí está tu niña.

Me entrega a Allison y deposita un casto beso en mi frente.

Muerdo mi labio inferior y sin evitar, dejo salir nuevamente la lágrimas al ver a mi hija entre mis brazos.

—Alli —pronuncio en tono bajo y con delicadeza toco su mejilla— mi hija.

—Hija, regresó mamá —escucho la voz de Axel muy cerca de mí y después siento su mano en mi hombro mientras ambos vemos a nuestra hija— y te prometo que no volveremos a perderla.

Giro a verlo y le sonrío. Sin embargo fallo, mis lágrimas son la causante de darle la mirada que no me gustaría darle.

Sorbo mi nariz y regreso la vista en mi hija.

—Ya no nos van a separar Alli —emito, me acerco un poco y beso su frente.

—Sientate hija

Asiento cuando me alejo de Allison y con ayuda de Axel, me siento en el sillón sin soltar a mi hija, con Axel a mi lado y el resto se acomoda en los otros sillones, algunos se quedan de pie.

—Se acabaron tus vacaciones tía Alicia ¿verdad?

Observo a Lucas, sin poder decirle la verdad, asiento.

—Asi es tocayo, Alicia volverá a estar con nosotros.

Él sonríe ampliamente.

—Campeon, vamos al jardín con tu hermano. Alguien está muy inquieto. —le dice Bryan y tras la respuesta de Lucas, se lo lleva al jardín.

Apenas los pierdo de vista y regreso la vista en el resto.

—¿Qué pasó con Valeria?

—Ana, no preguntes eso

—Lo siento Tía pero quiero saber que pasó con esa loca. Debe pagar. Se la llevaron a prisión ¿verdad?

—Ana, no es momento

—No papá, está bien —emito en voz baja— todos deben saber que pasó.

—Valeria no nos volverá a molestar —habla Axel por mi— se quitó la vida, se disparó frente a nosotros y entenderán que es algo que no queremos hablar, no ahora.

La sala permanente segundos en silencio.

—Tienes todo mi apoyo prima —Ana rompe con el silencio después de un rato.

—Gracias Ana, sé que cuidaste mucho a Alli.

Le sonrío y poso la vista en mi hija. Duerme tranquilamente.

—Aun así, quiero recibir ayuda —digo y regreso la vista en ellos— la necesito. Esto me hizo revivir el pasado con Dylan, con... Valeria. Quiero volver a recibir terapias.

No me causa vergüenza pedir ayuda cuando es necesaria.

—Los dos Ali, te voy a acompañar.

Le sonrío a Axel al escuchar su respuesta.

—Todos la verdad, vamos a olvidar todo lo que sucedió. —inquiere Sofía sin dejar de arrullar a su hija.

—Pero ya será diferente apartir de ahora. Se acabó todo. Ya no existe Valeria. —espeta Alexa.

Ana carraspea

—Bueno, no hablemos más de eso —inquiere mi prima y se pone de pie— Ali está aquí y hay que celebrar.

—Ana, no. Solo quiero descansar y estar con Alli.

—Lo sé prima, por eso solo quiero que veas esto. A falta de tiempo lo hice rápidamente. Es un regalo de bienvenida.

Se acerca a mí y en su tablet me muestra un vídeo. Lo reproduce e inicia. De fondo una bonita y tranquila melodía. Primero se muestra una foto de nosotras juntas. Después cambia cuando estábamos en el instituto. Otra con Sofía. Incluso con Alan y Axel. El tiempo corre y veo varias fotos del pasado. En una salgo con Axel, ambos sentados frente a frente sin dejar de vernos.  Siguen apareciendo muchas fotos de nosotros, de mi con cada uno, con Axel. Siguen más fotos hasta recordar esas fotos el día de mi boda. Muchas, diferentes. Luego una foto donde salimos juntos con Alli en el hospital.

A este punto, siento una lágrima deslizarse por mí mejilla.

—Ana, esto es...

Guardo silencio cuando el nudo en mi garganta me impide continuar.

—Aun me faltan más fotos. —dice y el vídeo termina con fotos diferentes de Alli.

Todo lo que me perdí de ella estando un mes lejos de todos.

El vídeo finaliza y Ana bloquea tú tablet.

—Despues te lo paso

Asiento y limpio mi mejilla rápidamente.

Entonces Alli despierta y comienza a llorar, su llanto se mezclan con el de Estefany y tanto Sofía como yo, arrullamos a cada una.

Axel me ayuda mientras siento un casto beso en mi mejilla. Él le habla con ternura a nuestra hija y poco a poco deja de llorar.

Sonrío y dejo de ver a Allison. Veo a Axel y después a toda mi familia. A todas las personas que quiero y me alegro estár de vuelta.

Plasmo este momento en mi mente.

Porque puede ser una foto, un vídeo, un simple recuerdo importante en nuestra mente que nos ayudará a recordar esos bellos momentos por más pequeños e importantes que sean de la vida.

(...)

—Ven aquí, con cuidado. Te ayudo.

—Puedo sola Axel —le digo mientras me adentro a nuestra habitación.

Me hubiese gustado seguir con mi familia allá abajo pero realmente necesito descansar. Necesito un baño. Al haber probado un poco de comida —poca que mi apetito no es mucho— estoy satisfecha y solo quiero descansar y no soltar a Allison.

Axel cierra la puerta, a pasos rápidos se coloca frente a mí.

—Yo la cargo, tú ve a darte un baño.

Me detengo con Alli aún en brazos y veo sus manos extendidas en mi dirección.

Desde el momento que llegué, no dejé que nadie cargara a Alli solo yo. Ni Axel. No quiero que me la vuelvan a quitar o que cualquier descuido, la pierda.

—No, yo no...

—Ali, estará bien conmigo

Lo veo fijamente y suspiro.

—Esta bien, regresaré enseguida

Dicho esto y le entrega a Allison a Axel. Sonrío al verla entre sus brazos y como él la arrulla.

—No tardo —emito y me dirijo al baño.

Mi cuerpo me pide un baño con urgencia.

Enseguida entro y cierro la puerta. Comienzo a quitarme la ropa y me dirijo a la regadera.

No me demoro mucho en bañarme, lo que más quiero es regresar con Alli y mí chico.

Así que apenas termino de bañarme, me coloco una toalla cubriendo mi cuerpo y otra la rodeo en mi cabello.

Giro a verme al espejo y suspiro.

Aparto la vista y me dirijo a la salida. Apenas cierro la puerta y enfoco la vista en la cama donde veo a Axel acostado con Alli a su lado.

—Mira hija, ya viene mamá —le dice y besa su mejilla cuando ella se queja.

Sonrío y me acerco. Enseguida me abrazo a mi misma y toco el nudo del lazo de la toalla.

Sé que estoy más delgada que antes y no me gusta que Axel me vea así. De nuevo regresó esa inseguridad en mi.

—Te ves hermosa Ali

Axel se acomoda y recarga su mano en su cabeza.

—No lo estoy Axel —me encojo de hombros y tomo asiento en la orilla de la cama. Ni siquiera me atrevo a verlo— ya no queda nada de la antigua Alicia.

—Ey, no digas eso. —Axel se incorpora en la cama y me obliga a verlo— sé lo que pasaste pero ya no será así, todo acabó Ali. Te voy a ayudar a superar esto, todos lo haremos. Todo va a volver a la normalidad. No más peligro o miedos. —me sonríe— tendremos la vida de antes, esos bonitos momentos. Vas a regresar a la librería si decides seguir trabajando. Te ayudaré a cuidar a Alli. Vamos a pasar muchos momentos con Alan, Sofía, Ana, Max y mi hermana incluso mi cuñado y mis sobrinos.

Una sonrisa se plasma en mi rostro.

—Todo será como antes Ali, mucho mejor ahora. Vas a poder seguir leyendo esos libros que tanto te gustan. Vamos a leer juntos esos libros pendientes. —agrega ante mi silencio.

Suelto una leve risita

Alli se queja a falta de atención.

—Y por supuesto, vamos a pasar tiempo con nuestra hija.

Axel gira a verla

—Tienes razón Axel.

Él regresa acostarse a un lado de Alli mientras la llena de besos por toda su carita y ella parece gustarle.

Nadie se resiste a los besos de Axel Navarro.

Dejo de verlos y me pongo de pie. Me quito la toalla de mi cabeza y muevo mi cabello este cayendo muy despeinado a los lados. Tomo un cepillo y lo peino sin dejar de ver a Axel y a mi hija.

—Ali, quiero que veas algo —me dice y sin cambiar de posición, saca su celular de su bolsillo —ven

Asiento y avanzo hasta la cama. Dejo el cepillo en la orilla, lejos de Alli y imito su acción, con cuidado me acuesto en la cama a un lado de Allison, ella quedando en el centro de ambos. Me acomodo la toalla de mi cuerpo que se sube un poco de mis piernas y giro a ver a Alli.

—Son fotos de nuestra hija —me dice Axel y me entrega su celular. Comienzo a ver cada una, deslizo mi dedo por la pantalla. Ensancho mi sonrisa al ver diferentes fotos de Allison y una de Axel con ella —faltas tú.

Giro a verlo y le entrego su celular.

—No sé si...

—Por favor Ali

Lo dudo

Entonces, Alli comienza a querer llorar.

—Esta bien, lo acepto —digo rápidamente mientras la calmo con leves palmaditas.

—¡Sonrian! —exclama Axel y coloca la cámara. Me acerco más a Alli y captura este momento.

En la foto, los tres salimos con Alli en el centro y cada uno abrazándola.

Axel guarda la foto sin antes ver que la coloca como fondo de pantalla.

Dejo de prestarle atención al sentir la manita de Alli tomar mi meñique en el intento de querer llevárselo a la boca.

—No Alli, no le hagas eso a mamá —le dice Axel al soltar su celular.

Alli aleja mi mano sin embargo no me suelta. Su otra manita atrapa la mano de Axel y sujeta su meñique.

—Axel, ella... —digo sorprendida.

—Es quién nos une Alicia.

Sonrío ampliamente, las ganas de llorar me invaden.

Alli no nos suelta mientras sigue en el centro.

—Asi es Axel —espeto y sin dejar de verla, añado— nuestra hija. Allison nos une a ambos. Nuestro hilo rojo es más fuerte y creo que Alli forma parte de él. Nunca se romperá.

Finalizo y río al ver a Allison.

Veo de ella para terminar en Axel donde veo con detenimiento a mí amor ideal.

                                    ~ F I N ~

+Nos vemos en el epílogo 🤧😭❤️✨
Les dejo esto y me voy lentamente a llorar... 👇👌❤️ Soy fan/creyente de los hilos rojos que supuestamente te unen a la persona Ideal y correcta. Si no hay hilo que los una, no lo es 🤷 lastima que sea invisible jajaja.