
Capítulo 25 ♡
• A L I C I A •
—Te lo voy a explicar todo —repito mientras nerviosa avanzo más hasta él. Axel no borra esa mirada seria al verme con atención. —lo siento, sé que debí decirte esto antes —confieso y me detengo. No evito mover mis manos nerviosa. Incluso, no soy capaz de verlo a la cara así que agacho la vista. —Estaba esperando el mejor momento, quería que fuera especial y no de está forma. Por esto estaba muy rara estos días, porque no sabía como decirte, pensé tantas formas pero ninguna me atreví a decirte por miedo.
Hago una corta pausa y alzo la vista.
—Hoy quería decirte cuando estuvieramos en la piscina. De verdad Axel, mi intención no era ocultarte esto mucho tiempo, es solo que tenía miedo —digo lo último con voz baja.
Prosigo a contarle con detalle en momento en que sospeché, como Ana fue la primera en saberlo. La dichosa prueba. Todo le cuento sin recibir ninguna interrupción o palabras de él.
—... Ana me lo advirtió, pero por tímida no me atreví y ya es demasiado tarde. —suspiro, de una forma me siento un poco mejor al haberle dicho esta noticia— tenía miedo de tu reacción.
Muerdo mi labio inferior.
Axel asiente y baja la vista.
—No me lo esperaba —emite y lo veo dejar la prueba de embarazo sobre la cama a un lado de él— me cuesta asimilarlo, ya sospechaba que estabas rara pero me siento estúpido por no darme cuenta de esto. —lame sus labios y estira su mano en mi dirección— acércate Ali.
Tímida y nerviosa lo hago hasta tomar su mano y llegar hasta él.
—Estoy feliz Alicia, es la mejor noticia que he recibido, bueno segunda o tercera. La primera fue cuando aceptaste ser mi novia, después mi esposa y luego esto —Axel bufa y coloca sus manos en mi cintura— aún tengo que asimilar que seré papá —medio sonrío— estás embarazada —me acerca más a él— ¡Un bebé nuestro Ali! ¡Seré papá! —emite con felicidad y me abraza.
Ante la diferencia de altura desde esa posición, Axel recarga su cabeza en mi estómago.
—Axel, no vayas a llorar que si lo haces, siento que lo haré y ... —muerdo mi labio inferior.
Él se aleja un poco y levanta un poco la cabeza y me sonríe.
—Estoy apunto de hacerlo —sonrie ampliamente— gracias a Alicia, te amo. —posa la vista en mi estómago— los amo —coloca su mano en mi estómago— no sé que decirle.
—Apenas se está formando, tengo muy poco tiempo.
—Aun así amor, debemos estar seguros. Mañana mismo iremos al hospital, necesito saber cuánto tiempo tienes.
Asiento de acuerdo.
—Deben ser semanas.
Axel me observa fijamente.
—Debemos comprar la cuna, arreglar una habitación para el bebé, buscar un nombre si es niña o niño...
—Axel —lo interrumpo— aún falta meses, son nueve meses.
—Lo sé pero no puedo evitar esta felicidades. Estoy ansioso Ali.
Suelto una leve risa. Axel me hace sentar en una de sus piernas y rodea mi cintura con sus manos.
—Te amo —me obliga a verlo y me besa con ternura.
Enseguida me alejo y recargo mi frente en la suya.
—¿Quién más lo sabe?
—Solo Ana y ahora tú.
—Claro, debí suponerlo. Las primas Mendes cómplices como siempre.
—Axel —me quejo aunque sé que es cierto. Me alejo un poco de él sin embargo, no me levanto y tampoco quiero hacerlo.
—Debemos decirles a todos, a mis padres y mis suegros. Estoy seguro que mi suegro querrá matarme.
—No exageres Axel.
—Ali, eres su princesa. Tú padre me va a matar por embarazarte.
Quisiera repetirle que no es así, que mi padre no reaccionará así cuando existe una posibilidad. Cuando él miedo me invade al tener que darles la noticia. Si con Axel era difícil, con todos será peor.
Paso saliva
—Ey, ahí estaré. Tomaré toda la culpa.
—No lo es del todo —murmuro y le sonrío.
Axel se inclina y besa mi mejilla castamente.
—Alexa se pondrá muy feliz, su primer sobrino o sobrina. No sé a quién tuvo que rezarle pero su deseo se cumplió —Axel hace una corta pausa— Alan, ya me imagino su reacción. A todos les va a emocionar esta noticia no tanto como yo. Hay que invitarlos hoy mismo a la casa ¿Te parece?
Asiento, lo que más quiero es dejar de ocultar esto y compartir mi felicidad y embarazo con aquellos que aprecio.
Lo veo directo a los ojos, dudo en decirle sin embargo, finalmente salen las palabras de mi boca.
—Me asustó tu reacción. Crei que te habías molestado.
—Lo siento, es solo que me sorprendió mucho. Sé que no debí reaccionar así pero me hubiera gustado que tú me dieras la noticia.
—Soy una tonta, quería que fuera especial. No de está forma, vaya manera. Al menos hubiera ocultado la prueba en otro lugar mejor no ahí. Que vergonzoso. —digo mientras siento el rubor apoderarse de mis mejillas.
—Ali, lo es fue porque estás aquí. Créeme que esté día jamás voy a olvidar —lo veo fingiendo molestia. Axel ríe, una leve sonrisa se plasma en mi rostro y lo abrazo— Aún puedes decirlo. Fingiré que no lo sé.
Me alejo enseguida dejando mis manos en sus hombros.
—Axel Navarro, estoy embarazada ¡Seras papá!
—¡Es la mejor noticia Ali!
Ambos reímos y terminamos por besarnos con pasión. Siento sus mano deslizarse por mí cintura, sin embargo está vez la guía a mi estómago y acaricia dicha zona.
—Una mini Alicia aquí —dice al alejarse— o puede ser un mini yo —lame sus labios— ¿Crees que sea rubio?
Dudo en responder.
De hecho, desdé que me enteré de mi embarazo, ni siquiera me había imaginado a nuestro bebé.
—No lo sé, solo sé que será hermoso como su padre.
—Como su madre, dirás
Sonrío y lo beso. Enseguida me alejo y borro mi sonrisa.
—No más secretos entre nosotros Ali .
Escucharlo decir eso, me hace pensar en eso que le he ocultado a todos y solo yo lo sé.
—Axel, quiero que sepas que tengo miedo. Sé que no lo planeamos este embarazo porque ninguno creía el mejor momento al estar Valeria libre. Pero, esto no se puede evitar, aunque tengo miedo a que ella se entere y....
—Alicia, ni lo pienses —me interrumpe— no dejaré que les haga daño. A ninguno de los dos. Los voy a proteger.
Axel besa mi frente y se aleja.
Lo veo con atención.
—Hay algo que debo decirte —paso saliva y coloco un cadejo de mi cabello detrás de mí oreja— hace días, pasó algo raro que me dejó preocupada y muy pensativa.
—¿Qué sucede Ali?
—En la librería, había una chica castaña muy extraña que no compró nada pero le preguntó por mi a Tatiana. Ella no le dió información y cuando me acerque a ella, huyó. —hago una corta pausa al recordar ese día— también en el hospital, el día del nacimiento de Estefany, esa enfermera me pareció extraña.
—¿Crees que tiene que ver con Valeria?
Asiento al haber pensado también esa posibilidad.
—Tal vez contrató a alguien para que nos vigile. —digo recordando que esa chica era castaña y por más que recuerdo, no la reconozco bien.
—Ali, debiste decirme. Valeria no puede estar cerca de ti o mandar a alguien a que te haga daño.
—Lo siento Axel, pensar en mi embarazo y como decirte, se me pasó decirte. —espeto apenada.
Axel suspira y niega.
—Hay que estar alertas, debemos regresar de nuevo a tener seguridad y más a ti ¿De acuerdo?
Asiento
—No quiero que le haga daño a nuestro bebé, ni a ti, ni a nadie.
Axel se inclina y me besa.
—No pienses en eso —me dice al alejarse y recarga su cabeza en la mía.
Nos invade el silencio en la habitación hasta que se me ocurre una idea y me alejo de él.
—Oye, me gustaría aún así, ir a la piscina contigo.
—Aun podemos hacerlo.
Enseguida Axel me libera y me pongo de pie.
—Ire a cambiarme.
—Te espero abajo.
Y dicho esto, tomo el traje de baño y me encierro en el baño mientras me cambio con rapidez.
...
Camino en dirección a mi chico con la toalla cubriendo mi cuerpo. Me detengo detrás de él y lo llamo captando su atención. Axel luce sin camisa solo con un shorts de baño puesto. Descalzo.
—Estoy lista —le sonrío.
Axel se voltea y obtengo esa amplia sonrísa.
Asiente y sin mencionar palabra, se voltea hasta correr, da un clavado y entra al agua hasta que pocos segundos, sale empapado.
—Ven aquí Ali —peina su rubio cabello hacia atrás mientras nada a la orilla.
Me acerco, me quito las sandalias y me deshago de la toalla hasta dejarla caer en el suelo.
—Que hermosa, mi favorito.
Siento el rubor crecer en mis mejillas mientras camino a la orilla de la piscina. Luciendo ante él, mi traje de baño color rosa.
—No me veré tan hermosa cuando esté embarazada, tú viste a Sofía.
—Ali, por supuesto que sí. Sofía se miraba bien y Alan la siguió amando más. Este embarazo no cambiará el amor que siento por ti.
Sin responder, comienzo a entrar al agua mientras bajo por las escaleras con cuidado. Axel me sostiene de la cintura.
—Despacio, no hagas esfuerzos.
Río ante sus ocurrencias.
—Axel, solo estoy embarazada y apenas debo llevar pocas semanas.
—Ali, hay que se cuidadoso en un embarazo de principio a fin y yo me encargaré de eso.
Ruedo los ojos y el agua logra cubrirme por completo dejando mi cabeza libre. Abrazo a Axel. Paso mis manos por sus hombros, siento sus manos deslizarse por mí cintura y en segundos y con facilidad me carga hasta rodear mis piernas en su cintura. Río y termino por besarlo siendo este momento, especial para ambos.
Horas después...
Sin duda, revelar un embarazo frente a todos es un caos o al menos en mi familia.
Todos fueron puntuales, muy curiosos por repentina invitación y más sin decirles nada. Ana siendo la única que lo sabe, sospecha y guarda el secreto.
En el momento que todos fueron reunidos, Axel fui quién les dió la noticia causando su silencio, sorpresa y después el caos al hablar todos a la vez justo como este momento:
—¡Tendré un primo mami! —grita Lucas.
—¡Felicidades Ali, no pensé que siguieras mi consejo tan pronto!
—¡Bro hay que celebrar!
—Es una broma ¿verdad? —espeta la madre de Axel.
—¡Hija, que emoción! ¡Muchas felicidades cariño!
Ana es la única se se encuentra en silencio sin dejar de sonreírme.
—¡Felicidades cuñado!
—¡Suficiente! —mi padre los hace callar y se pone de pie— ¿Es una broma o no?
—No lo es papá
Entrelazo mi mano con la de Axel.
—Alicia está embarazada, suegro.
—¿Cómo te atreves? ¡Es mi princesa! —mi madre logra detenerlo— debería meterte preso.
—Cielo, basta. Asustas a Axel.
—Ya estoy acostumbrado suegra.
—Cielo, dejá de comportarte así. Sabíamos que esto iba a pasar. Debemos estar felices por nuestra hija. Seremos abuelos cielo.
Mi padre me observa, suspira y se tranquiliza.
—No creí que tan pronto, apenas llevan pocos meses casados —se acerca a nosotros— mi princesa, de corazón, felicidades.
—Papá —emito con las lágrimas apunto de salir de mis ojos. Me suelto de Axel y termino por abrazarlo —gracias, los quiero.
—Esto merita un brindis ¿no? Realmente lo necesito —espeta Alan causando que nos alejamos y lo vea. Él carga a Estefany entre sus brazos, ella dormida.
—Tienes razón Bro.
Sonrío y giro a ver a Axel.
Él me guiña el ojo. Regreso la vista en muestras familias y amigos.
Las mejores noticias son mejores cuando se comparten con los tuyos.
(...)
Recibí muchas felicitaciones de todos. Preguntas al punto de quedar solos nuestros amigos y amigas. Nuestros respectivos padres, después de un interrogatorio y advertencia para Axel de parte de mi padre, terminaron por marcharse.
En este momento, la casa a sido divida. Axel junto a sus amigos, Alan, Max y Bryan se encuentran en la cocina, posiblemente bebiendo. Y en la sala, nos encontramos nosotras mientras estoy sentada en el centro del sillón y de cada lado tengo a Ana y a Sofía con su hija en brazos y Alexa frente a nosotras.
Lucas duerme en el otro sillón ajeno a estás conversaciones adultas.
—Exijo detalles prima.
—Yo también, soy tu amiga.
—Vamos cuñada, como le dijiste a mi hermano está noticia.
Veo a cada una sin saber a quien primero responderle.
—¡Alicia!
—¡Es vergonzoso! —espeto en voz alta logrando su silencio. Por suerte, ellos están muy ocupados en la cocina para escucharnos, pues se escuchan sus risas y voces mezcladas.
Tomo una profunda respiración y coloco mis manos en mis rodillas.
—Les contaré pero no sé burlen.
Entonces, les cuento mi fracaso de dar mejores noticias de embarazo a mi chico ideal.
—...fue un fracaso lo sé. No era la forma que quería que él se enterará. Lo hice todo mal.
—No digas eso prima, vendrán noticias o embarazados mejores.
Giro a ver a mi prima con una mala mirada.
—Ana, no me ayudas diciendo eso, de verdad.
—Lo siento —emite y bebe de su copa. De las cuatro, es la única que consume alcohol.
—Ali, deja de atormentarme. La cuestión es que le diste la noticia o Axel se enteró. Créeme que lo veo feliz.
—Asi es cuñada, realmente no importa el momento especial.
Sus palabras me hacen sentir menos mal.
—Mi prima es fanática de tener todo controlado y no acepta cuando él destino arruina sus planes y tiene que improvisar.
—Ana —digo su nombre con molestia— esto no pasa en los libros.
—Prima, aterriza en la realidad.
Evito responderle.
Ana ya está muy tomada para soltar verdades.
—Yo solo quería que fuera especial —regreso la vista al frente y suspiro.
—Lo es, creeme que Axel no olvidará está noticia y más de esa forma. —se burla Ana.
Tomo un cojín del sillón y se lo lanzo. Ana esta por regresarmelo cuando Alexa se lo arrebata.
—Ya basta, dejen de pelear como primas. Ana no ataques a mi cuñada, le hará mal al bebé.
>Ahora me doy cuenta que los hermanos Navarro son exagerados<
Sin embargo, debo agradecerle a Alexa.
Entonces, Ana como niña infantil, me saca la lengua y aparta la vista. Hago justamente eso, le devuelvo el gesto.
—Ali, no le des tanta importancia. Lo que importa ahora es que disfrutes tu embarazo y cualquier duda, nos puedes preguntar. No tengo mucha experiencia pero mejor que tú, sí —alardea Sofía.
—Cuenta con nosotras cuñada.
Les sonrío a ambas.
—Gracias —dudo en preguntar— y ustedes ¿Cómo les dieron la noticia de su embarazo a Alan y Bryan?
Ella se ven de una a la otra.
Sofía carraspea.
—Bueno, ya sabes bien ese momento. Fue planeado Ali hasta Alan se desmayó. Me alegra que Axel no lo haya hecho.
Río al recordar ese día.
—Yo, pues fue una cena romántica. En el restaurante donde trabaja Bryan.
Veo a cada una.
—En todo caso, la mía es la peor.
—Ali, no es así
—Axel encontró la prueba de embarazo en mi ropa interior Sofía ¡Claro que lo es! Y por su cuenta.
Hago puchero.
—Vendran mejores Ali —Sofia trata de hacerme sentir mejor.
Resoplo.
—Oigan, falta Ana, la de ella será un poco peor.
—Disculpa Alexa pero yo no pienso embarazarme ahora.
Río y suspiro.
—No se diga más, este día jamás lo olvidaré.
A hasta alturas, evito enojarme conmigo misma y solo me burlo de está noticia.
Vaya forma de dar noticias Alicia.
✨
• A X E L •
—Salud Bro, por ser el tercer padre del grupo.
Choco mi cerveza con todos y les doy un trago.
—Gracias a todos —digo sin evitar la felicidad.
—Yo que tú André, te cuidabas. Solo faltas tú.
Todos reímos ante la expresión de pánico de Max.
—Eso no pasará, no ahora. De hecho estoy pensando en buscarme nuevos amigos ya que los tres ya son padres. Es como una maldición que comenzó con Alan, le siguió Bryan y debe terminar en Axel.
Niego varias veces.
Max recibe un golpe en la cabeza por Alan.
—¡Ey!
—¡No digas estupideces André Maximiliano!
Alan niega y regresa la vista en frente.
—Pero ya que lo dices, es cierto ¿quién iba a imaginar que de este grupo, los tres terminariamos siendo padres?
—Nos ganaste Alan, de aquí tienes mayor experiencia —le dice Bryan mientras se cruza de brazos.
—¡Es cierto! Cualquier duda, doy clases a un bajo costo.
Río antes las palabras de Alan.
—No te luzcas Bro pero si voy a necesitarlas. Eres el primero en tener a Estefany entre sus brazos y cuidarla.
—Y dentro de meses, yo tendré a mi bebé. —espeta Bryan con la misma emoción que yo.
—Sere el último —digo mientras veo a Max y él niega. Río y le doy un trago a mí cerveza.
Me sorprendió la noticia y más enterarme de esa forma que jamás olvidaré y pienso molestar a Alicia y contarles a nuestro bebé cuándo crezca. Sin embargo, estoy emocionado, tal vez no lo expresé en su momento pero lo estaba asimilando para a estás alturas, sentirme feliz de tal noticia.
Aún así, me causa preocupación por lo que me contó Alicia, lo que le prometí es cierto. La protegeré de Valeria, de todos. A ella y nuestro bebé.
Seré el mejor padre para ese bebé.
Dejo mis pensamientos a un lado y dejo la cerveza sobre la mesa.
—No le voy a mentir, tengo miedo no ser un buen padre para ese bebé. Fallarle y más a Alicia cuando ella es la chica que amo y la única con la que quiero tener hijos.
Causo su silencio.
—Lo será Bro —habla Alan después de un rato— te entiendo porque cada día me siento igual. Tal vez ahora es diferente al tener a nuestros padres pero antes, crecimos sin ellos. Ambos no tuvimos su atención tantos años cuando más los necesitamos —Alan se acerca a mí— pero recuerda esto. Que la historia no se repita con tú bebé. Nosotros no seremos padres, ausentes. Seremos mejores que ellos.
Alan golpea mi espalda débilmente y sonríe.
Asiento tan acuerdo de sus palabras.
—Asi será Bro, lo daré todo por Alicia y por ese bebé.
✨
• V A L E R I A •
—¡Lo está Coral! ¡La estúpida de Alicia, está embarazada! —le grito a Coral al estar alterada y muy molesta con lo que descubrí.
Se supone que la idea era vigilarlos, más a Axel y a la nerds. Sin embargo, no creí descubrir eso.
Por un momento, me asusté cuando ella estuvo apunto de descubrime en esa librería. Por eso me fuí y fue peor en ese hospital. Desde hace días, semanas los he vigilado para terminar en ese hospital al enterarme del nacimiento de la hija de Sofía y el idiota de Alan.
Estuve por atacar contra ella sin embargo, cambie mis planes. No perderé mi tiempo en querer vengarme de Sofía, no cuando no es tan importante y antes debo enfocarme en recuperar a Axel.
Pensé que Alicia me reconocería en el hospital y no fue así. Por eso huí aunque no me bastaron ver a Axel solos unos segundos. Estar tan cerca de él sin Axel notar mi presencia o sospechar. Sin embargo, fueron necesarios.
El caso es que terminé por descubrir que Alicia está esperando un bebé de MI Axel. Él motivo del porque estoy así.
—Val, sabías que verlos juntos te afectaría.
—Una cosa es eso y otra muy distanta saber esto. —resoplo y tomo siento en la silla de Valentín— Las escuché Coral, a ella y a su prima —hago una rabieta— no es justo ¿por qué ella si puede ser feliz? ¿Por qué ella si puede darle y tener un hijo con mi Axel?
Guardo silencio mientras veo a Coral frente al escritorio, sentada nada elegante. Los pies arriba de la silla mientras lee esa revista. Revista que tanto le gusta admirar su contenido y tal vez fantasear con todo lo que se muestra ahí.
—Sabes que —digo acabando con el silencio— me olvidaré de perjudicar a Alexa cuando ya lo hice con su hijo. Me olvidaré de ella y de su bebé. Debo enfocarme en Alicia y Axel ahora que ella arruinó mis planes y se adelantó con esto. —hago mis manos puños— no hay tiempo Coral. Debo evitar a como de lugar, que ese bebé nazca. No lo voy a permitir.
—Tendras que hacer algo inteligente Val. —emite ella sin apartar la vista de la revista mientras pasa a la siguiente página y se asombra— woo, algún día seré modelo como ella y lucire así.
—Concentrate Coral —le pido de mala gana logrando su atención— debo actúar ya. Debo hacer algo para lograr por separarlos. Si Axel se aleja de Alicia, será más fácil atacarla y hacer que ella pierda a su bebé. Pasará lo mismo que yo.
Guardo silencio al sentir el nudo en mi garganta formarse.
Veo con atención la revista.
—¡Damela! ¡Préstame tu revista Coral!
—¿Por qué sí esto no te importa?
—¡Coral!
Me levanto y se la arrebato. Enseguida regreso a mi lugar y busco con rapidez esa hoja. Coral está muy desactualizada, puede ver la misma revista por mucho tiempo sin embargo lo que me interesa es volver a ver esa noticia en el periódico que hace tiempo, ella me mostró.
—Aqui está —digo al leer la nota. Sonrío ampliamente al ver a Axel en una hoja tan guapo con ese rubio cabello peinado hacías atrás. Vestido de traje por completo. Releo el título: Empresas Navarro, el joven empresario Axel Navarro nos cuenta todo sobre él.
Sin embargo, lo que más me interesa es quién escribió esa nota.
Enseguida me pongo de pie y avanzo a la salida con la revista en dicha página entre mis manos.
—¿A dónde vas?
—Con Valentín, necesito pedirle algo importante.
—Esta ocupado matando a sus enemigos. No lo molestes ahora.
—Es urgente Coral.
Llego a la puerta y la abro.
—¡Oye, mi revista Val!
—Ahora te la entrego, de hecho te voy a conseguir muchas más recientes.
Dicho esto y salgo de la oficina mientras azoto la puerta con fuerza.
(...)
Espero noticias de Valentín cuando después de convencerlo, aceptó por ayudarme. Claro, dándole detalles de lo que planeo hacer, aún recuerdo sus palabras.
Impaciente me encuentro en su despacho, sentada en su silla esperando a que regrese.
De pronto, la puerta es abierta por sus hombres y entra esa chica con Black detrás de ella.
—¿Qué me van a hacer? No me hagan daño por favor
—Guarda silencio
Ella acata su orden sin embargo se nota asustada.
Sus hombres abandonan la habitación.
—Aqui la tienes muñeca ¿contenta?
—Muy satisfecha Black
Le sonrío y ordeno que le quiten esa bolsa de tela de su cabeza.
Enseguida logro verla y no evito verla con superioridad al ver lo linda que es pero no tanto como yo.
—Sientate
—¿Qué me van a hacer?
Black la obliga a sentarse en la silla quedando frente a mí. Ella me observa y frunce el ceño.
—¡¿Valeria Olson?!
—Sabes de mi —me recargo en la silla.
—Por supuesto, soy...
—Periodista, la famosa Lía Ross.
Ella asiente
—¿Qué quieren de mi?
—Tu ayuda muñeca.
Valentín se deja ver, ella asombrada lo reconoce y se remueve en su lugar cuando él acaricia su mejilla.
—Basta Valentín, yo me encargo. —se detiene y se endereza. Capto la atención de ella— escucha, hace tiempo hiciste una nota del empresario Axel Navarro ¿cierto? —ella asiente— sé que te interesa saber de él y que estás al tanto de mi caso.
—De hecho, esto sería una excelente nota. Usted aliada del temido Valentín Black.
—Yo tengo una mejor nota, periodista muere en manos del temido Valentín Black.
Él saca su arma y le apunta en la sien con ella.
—No me haga nada... Haré lo que sea
—Valentin ya basta —me inclino un poco— Lía Ross ¿qué tanto serías capaz de hacer por tu vida?
—Lo que sea
Sonrío ampliamente
—¡Excelente! Comenzamos que nos va ayudar y de esto con nadie lo vas a comentar. Te vas a olvidar de nosotros y te vas a concentrar solo en lo que te voy a pedir.
—Me disculpe señorita Olson pero de esto vivo. Entiendo que ser periodista siempre estaré arriesgando mi vida como todos mis compañeros y más al hablar de personas como ustedes. —emite lo último en voz baja.
—Te voy a pagar una fuerte fortuna ¿aceptas? —deslizo un pequeño fajo de billetes por el escritorio hasta ella —la siguente parte te la pago cuando hagas un buen trabajo.
—O de otra forma, lo harás por las malas —Valentin le vuelve a apuntar con el arma— te vamos a vigilar, ya eres nuestra aliada por las malas y créeme Lía que sabré encontrarte. Nadie se le escapa a Valentín Black.
—Los voy a ayudar.
Ella ignora el arma, su vista se concentra en el dinero. Incluso se inclina para tomarlo.
—No diré nada de esto. Jamás los ví —posa la visten mi— ¿Qué tengo que hacer?
—¿Qué piensas de Axel Navarro?
—Es muy atractivo
—Asi es —finjo una sonrisa— tu trabajo será seducirlo. No sé cómo pero tienes que lograr que Alicia Mendes se aleje de él. Eres periodista, creo inteligente. Saca una nota o unas fotografías comprometedoras donde lo... beses. Que ella crea que Axel la engañó.
—No será fácil, él la ama mucho. Se nota que no le interesa nadie más...
—¡No te pregunté eso! —me pongo de pie— harás eso ¿bien?
Ella asiente y se pone de pie.
—De acuerdo, Alicia Mendes tendrá esas fotos se lo juro.
Valentín deja de apuntarle y baja su arma.
—No falles Lía Ross.
Ambas ignoramos su amenaza.
—En ese caso, tenemos un trato señorita Olson.
Me tiende su mano, lo dudo y la acepto fingiendo una sonrisa.
—Pero le recuerdo que Axel es solo mío. No se pase —le advierto y la suelto.
Me cruzo de brazos al repasar el plan en mi cabeza. Todo saldrá perfecto sin fallas así tenga que soportar que otra se involucre con el chico que amo.
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