«Cuando nos casemos...»
Cuando era una niña siempre soñé con casarme, era como que lo que más quería en el mundo.
Cuando me di cuenta de que me gustaban las chicas, dije que nunca iba a casarme con una, más que nada porque me daba miedito el qué pasaría después. Pero mi niña colombiana cambió ese pensamiento, y después me dio igual si me casaba con hombre o una mujer. Realmente quería casarme con ella, pero obviamente eso no sucedió, pero tampoco me morí por eso.
Luego conocí a más hombres y me asqueé totalmente xd no quería saber nada de hombres durante un tiempo, así que supuse que terminaría casándome con una mujer, supuse que no iba a haber más hombres en mi vida; incluso al entrar a la prepa, tenía ganas de que una niña fuera mi novia.
Y entonces lo conocí a él.
La verdad es que me caía muy mal cuando recién empezamos a interactuar, lo detestaba, no me agradaba y tampoco lo quería cerca de mí, pero poco a poco supo ganarse mi corazón hasta que estuvimos juntos. Hemos pasado por tanto y hemos logrado muchas cosas, nos hemos antepuesto a las adversidades y hemos salido adelante. Nos amamos, nos volvimos uno.
Y empezamos a fantasear con el «cuando no casemos...»
Suelo ser yo la que lo dice «cuando nos casemos, haremos esto», «cuando nos casemos, tú vas a hacer tal», «cuando nos casemos, quiero esto», y aunque él siempre me hacía segunda o me respondía de forma positiva a lo que le decía, no solía decirme esa clase de cosas.
Ante ayer nos bañamos juntitos en su casa, mientras platicábamos de cualquier estupidez y escuchábamos la música que había puesto en el estéreo, y fue entonces cuando sentí que mi corazón brincó de alegría al escucharle decir: «cuando nos casemos, vamos a comprar una regadera más grande para que quepamos los dos». Y puede sonar como una nimiedad, pero para mí, fue un mundo entero.
Quiero casarme, quiero hijos, quiero una casita muy linda en un lugar tranquilo, y claro, lo quiero a él a mi lado siempre y cuando Dios y la vida me lo permitan.
«Cuando nos casemos, quiero que estemos juntos para siempre...»
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro