Dedicado a: DianaGomez705 muchas gracias por leer esta historia y haberle dado una oportunidad!! 💕💕 Espero te guste el cap.

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Saliendo de la universidad me fui directo a la casa, no tenía ganas de entrenar ni estar obedeciendo las ordenes de Matt. El chico del día de ayer ya le había entregado su dinero a primera hora así que yo ya no tenía nada que hacer al respecto.

En cuento entre a casa supe que Jessica estaba ahí, simplemente porque esa chica siempre llega antes que yo y Aaron se iba a entrenar después de dejarla aquí. Al parecer estaba en su habitación porque todo se encontraba  demasiado silencioso. Pensé en poner un videojuego para distraerme pero justo antes de que yo bajara a mi habitación para ir por mis juegos alguien tocó la puerta. La puerta tenía una pequeña ventana de cristal opaca así que yo ya sabía quién se encontraba del otro lado.

— ¿¡Qué!? — dije en cuanto abrí la puerta pues en serio odiaba que Matt vinera por aquí.

— A mí también me alegra verte, William. — dijo sarcásticamente y yo lo ignoré.

— Solo dime a qué viniste.

— Que bueno que sabes que no es por una visita casual. — Me hizo a un lado y entró pero no se detuvo ahí, él siguió caminando hasta la cocina.

— Oye, idiota, sabes que a Aaron no le gusta que estés aquí...

— ¿Y qué? ¿Ahora eres su novia y lo obedeces? ¿O él es la novia y tú el novio? — Sacó una cerveza del refrigerador y la abrió.

— No seas un hijo de puta, si lo digo es porque si te ve me puede echar y tú me cagarías el plan.

— Ah, cierto, tu jodido plan ¿Y cómo vas con eso?

— Bien hasta que te apareciste por aquí.

— ¿Por qué? ¿Te planeabas coger a su hermana?

— Cállate.

— Que de hecho esa idea no está mal...

— No salgas con estupideces...

— NO, no, no, no. Lo digo en serio.— Rápidamente dejó su cerveza sobre la mesa y noté como se le iluminaban los ojos, eso solo ocurría cuando tenía una idea realmente desquiciada. — ¿Tu idea era asustarla para que no se metiera en el plan y después acusarla de ser cómplice de Aaron? — solo asentí. — Pues podrías "enamorarla" — hizo comillas con los dedos.

— Eres un pendejo, Matt. — me di la vuelta y estaba por marcharme pero él se puso justo enfrente.

— No, mira.— me crucé de brazos, Matt es más pequeño y menos fuerte que yo, fácil lo podría quitar de mi camino pero una parte de mí quería escuchar su idea, e hice caso a esa parte.  — Esto ayudaría porque si solo la asustas puede ser que cuando la manden a declarar se arme de valor y diga todo sobre ti. — Eso ya lo había pensado antes pues aunque Jessica parezca frágil se nota que haría cualquier cosa por su hermano. — Pero si la enamoras puede que no diga nada, pues no querrá perjudicarte. — Lo pensé unos segundos.

— ¿Qué pasa si de todas formas dice algo en mi contra?

— De eso no te puedo garantizar nada, pero mínimo tus posibilidades se volverían 50 y 50 y no 99 y 1. — En eso tenía razón.

— ¿Enamorarla dices? — él sonrió como un niño apunto de hacer una travesura.

— A sí es. — Lo seguí pensando.

— Lo tendré en cuanta. — sonrió más.

— Me parece bien.

Matt ya se había marchado hace como medía hora y yo estaba en mi habitación terminado de editar unas fotos. Después de un par de minutos todo estaba listo y las mandé.

Después eso volví a mi plan original de jugar algún videojuego, tomé el primero que vi sobre el escritorio y me encaminé directo a la sala.

Al llegar me asomé por el pasillo que conectaba la sala, el comedor y la cocina, en esta última había un gran ventanal de cristal que dejaba ver la terraza y el patio. Y justo en las escaleras de la terraza estaba sentada una figura femenina, por el cabello supe que se trataba de la panda.

No le dí mucha importancia a lo que hacia y yo me puse a jugar.

Un par de minutos u horas después escuché que abrían el ventanal, pero yo estaba tan concentrado en matar a mi contrincante que nuevamente no me importó.

Me metí tanto en el juego que no noté cuando Jessica me comenzó a gritar.

— ¡HEY! ¡TE ESTOY HABLANDO! — Sonaba molesta, tal parecía que llevaba rato hablándome.

— ¿¡Qué!? — mis ojos no se despegaron de la pantalla.

— ¡¿Dónde está Aaron?! — su voz me distraía hasta el punto que estaba por perder.

— ¡Entrenando! ¡Ahora largo! — grité molesto porque me estaban por matar.

Intenté jugar lo más que pude hasta que finalmente me asesinaron. Molesto arrojé mi control lejos, después de todo podía comprar otro. Fui directo a la cocina, abrí el refrigerador y saqué una cerveza. Honestamente yo no era muy fan de cualquier bebida alcohólica, solo tomaba cuando estaba molesto, como ahora.

Caminé hacia la ventana para ver que estaba haciendo esa chica pues no se encontraba dónde la había visto la última vez. Cuando la encontré deseé no haberla visto, estaba con Hook, pero eso no era lo peor, lo peor es que lo estaba acariciando. Rápidamente salí de la casa para impedir que ella siguiera con eso.

— ¡HOOK! — Él reconoció mi voz e inmediatamente regresó a su casa. Jessica giró para mirarme y yo me dirigí a ella. — ¡¿Quién mierda te dijo que lo podías tocar?! — me acerqué demasiado a ella pero lo hice con el objetivo de lograr intimidarla y que dejara de metérse en donde no la llaman.

— Lo...siento.— no me miró y su voz sonaba asustada.

— ¡Vete de aquí! — sin decir nada más se marchó.

Miré la jaula y vi que Hook me observaba asustado pues él sabía lo que le esperaba.

Cuando hacía algo mal había dos cosas que se hacían, la primera, golpearlo. Esa nunca me había gustado y de hecho yo nunca lo había realizado pero sí Matt, el creé que la forma más efectiva de que un perro entienda quién es el que manda es golpeándolos.

Cuando Matt me fue metiéndo en todo esto de las peleas de perros yo no les quería hacer nada, así que Matt siempre se ha encargado de entrenarlos y castigarlos y yo solo soy el que los alimenta. Pero cuando un perro se porta mal mi castigo es dejarlos sin comer, pues son órdenes de él "si reciben cariño, si no obedecen órdenes o te atacaban les tienes que dar el castigo" eso dice Matt y eso es exacto lo que hago pues al fin de cuentas, los perros no son míos y yo no tengo poder sobre ellos.

Así que eso hice, gracias a que Jessica se le acercó para acariciarlo (darle cariño) Saqué su plato de comida de la jaula.

— Lo siento, Hook, pero sabes la reglas. — Él solo me miró triste, yo me di la media vuelta y me marché. En cosas así en serio odiaba mi trabajo.

Tal parecía que Jessica era su cómplice para ayudarlo y yo era cómplice de Matt para torturarlo.

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Hola!!!

Creo que con todo esto ya nos estábamos dando cuenta que la única razón por la Will es tan horrible persona es por una razón llamada Matt. Aunque bueno, Will ya está grande para tomar sus propias decisiones 😑

En fin, espero les haya gustado el cap a pesar de ser algo corto pero creo que es claro. Bueno, muchas gracias por su apoyo y nos seguimos leyendo!!!

Mehhh!! 🐑🐏🐑🐏

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