Hola a todosss! Regalo de miércoles porque me lo han pedido muchooo..

La chica de la foto es Julia Adamenko. Asi me imagino a Blanca..

Disfruten del capítulo!!

😊😊😊😊

《Savannah》

Desperté en la mañana, con un dolor de cabeza importante, lo adjudico a esa mezcla que hice de tequila y wisky, que evidentemente no debí hacer. Si hubiera tomado una sola bebida en la noche no me encontraría en este estado hoy. Lo apunto para mi próxima salida con Blanca.

Miro el reloj 11:40 am. ¡Diablos! Deberia estar trabajando, no le avisé a Yolanda que vino mi amiga y decidí salir en plena semana, aunque era jueves, casi fin de semana. ¿Estaba permitido eso no?

Llamé a Yolanda y me atiende en el segundo tono.

—Hija, ¿qué necesitas? duerme. Ya me ha llamado tu madre hoy temprano. Es muy amorosa.

—He, hola Yoli, ¿mi madre? Pero ¿qué has dicho? —rio a carcajadas.

—Ya niña, descansa, nos veremos aqui el lunes, ¿con que ahora sales de rumba y te emborrachas eh?

Mi cara estoy segura está roja en estos instantes.

—Hee.. ¡Yoliiiiiiii! —exclamé totalmente avergonzada— no volverá a pasar lo juro. Y es la primera y última vez que falto a mi trabajo.

—Niña, ni siquiera cobras un centavo por trabajar aqui, no es necesario que vengas todos los días, relájate, tomalo con calma. Me agrada verte corretear por estos pasillos pero debes prepararte para la universidad, empiezas el lunes —dijo mi hermosa Yoli.

—No cobro porque sabes que tengo la vida resuelta, no necesito dinero, lo que necesito es hacer lo que me hace bien al alma, y eso es estar alli, contigo mi viejita linda.

—¡Cuidado con tus palabras mocosita!, tengo apenas 76 años. Me queda mucho por delante —sonreí ante aquello. Mi Yoli tenia más vitalidad que yo y Blanca junta. Si hasta habiamos salido a rumbear como lo llama ella hace unas semanas.

—Era broma mi Yoli, y en cuanto a la universidad lo tengo más que presente. Ya tengo todo listo para comenzar, y no sabes la ilusión que me hace.

—Lo se hija, y te veré recibida en unos años, estoy más que segura de ello —me despedí de ella y me dispuse a bañarme. Olía y me veía faltal.

El baño de inmersión que decidí tomarme me sentó de maravilla. 2 pm estaba bajando a la cocina a comer algo, mi estómago lo pedía a gritos. Ya sentada en la mesa pregunto por mi madre, estaba trabajando, claro ¡si era viernes!

Revisé mi móvil mientras comía, desde anoche no lo habia tocado siquiera. Tenía 7 llamadas perdidas de Tahiel y 2 de Blanca y 11! Siii, ¡11! mensajes de Tahiel. Me dispuse a leerlos:

—Savannah, contestame, ¿estás bien?

—¿Llegaste a tu casa? ¡Me dijeron mis hombres que te llevaron unos guaruras! —ajjj que fastidio Tahiel.

—Atiende el móvil Savannah.

—Se que estás enojada conmigo, pues piensas que no quiero verte por las razones equivacadas...

—Atiendeme..

—Contesta Savannah.

—¿Son tus guaruras?, ¿los ha puesto tu madre por protección?

—Constéstame Sav.. —que tierno, llamandome Sav. Aunque... ¡sin mi permiso!

—De verdad estoy preocupándome, si no se nada de ti en unas horas iré a buscarte al mismísimo infierno de ser necesario —solté unas cuantas carcajadas. Era obvio que no iba a venir, el muy cabrón no iba a dar la cara, pero mandó a su hombre de confianza, lo supe en cuánto vi el siguiente mensaje y se escuchaba el timbre, por la cámara intercomunicadora vi al tipo de anoche, el que sacó a Jonh o Josue o quien sea que estaba conmigo anoche de mi. El mensaje decia:

—Savannah, Renzo va a tu casa, a averiguar si estas bien, si llegaste sana y salva, si necesitas algo. Atiendelo si es que estas alli.

Otro mensaje: —Por favor.

Decidí atender a Renzo, le mandaría un claro mensaje a Tahiel con él.

Mi nana le avisó a Renzo que pase, lo esperé en la sala de estar. Tardo unos 10 minutos en llegar, pues el camino desde el portón principal y la mansión es largo, por seguridad.

Al entrar me miró serio y asintió con la cabeza a modo de saludo. En su mano tenía su móvil y me lo tendió, me dijo con ojos suplicantes:

—Atiéndelo por favor. No sabes cómo se ha preocupado por ti —lo tomé por pura pena por Renzo, que tuvo que ayudarme anoche "según Tahiel", que aguantó toda la noche a un muy mal humorado amigo y que tuvo que tomarse las molestias de venir hasta aquí.

—¿Qué quieres? —espeté y suspiró cansado. Pobre, ya me comenzaba a dar pena él también.

—¿Te encuentras bien Sav? -dijo con precaución.

—Si Tahiel. ¿Por qué debería no estarlo?

—Pues porque no me has contestado un puto mensaje desde anoche ¡joder! —exclamó— disculpame por tratarte asi, perdí los papeles. Es solo que... me preocupaste demasiado anoche. ¡Creí que te habían secuestrado! Te busqué por cielo y tierra y no lograba dar con tu casa —oh no, aqui vamos otra vez con lo mismo de siempre— no me lo creo que vives en semejante mansión.

Hice lo que mejor sabía hacer, cambiar de tema, para evitar ver si tenia o no codicia en su ser.

—No tendrías que haberte preocupado tanto por mi. Si ya demostraste ayer que no te importo, que problema hay con que me secuestren o sean mis guardaespaldas —dije dolida y me lamenté enseguida de haberle soltado lo que pensaba.

—¿Acaso no fue suficiente con lo que hice anoche para demostrarte que me importas Savannah? —reí incrédula.

—¿Tu crees?, ¿por qué no quieres verme Tahiel?, ¿eres bajo, flaco y feo?, ¿robusto grandulón?, ¿colorado, morocho, rubio quizás? No me importa como seas. Solo me entristeció enormemente que no quisieras conocerme. Creí que eramos amigos —dije furiosa, soltando todo lo que necesitaba sacar de mi interior— ¿y si yo te pedia vernos porque necesitaba un abrazo, un consuelo, me hubieras rechazado Tahiel? —dije reteniendo mis lágrimas.

—Savannah, —dijo despacio, intentando calmarme— no tienes una idea la de idioteces que dices —eso me enfureció aún más y antes de que lo corte prosiguio— muero por verte, joder, si me lo pedirias asi y no tendrías a Blanca contigo iría. Pero de verdad si no nos vemos es porque sencillamente no te convengo Sav, lo hago por tu bien y nada más que por tu bien. —suspiré ya muy cansada, eso ya me lo habia dicho antes.

—Tahiel... —iba a comenzar a hablar y nuevamente me interrumpió.

—Se que debo alejarme de ti, pero no puedo Savannah, muero por conocerte, saber más de ti, saberte feliz, bien. Te propongo algo, escuchame, piensalo y luego me contestas. No necesita ser ahora —le dije que lo escuchaba y prosiguió— seamos amigos por ahora, conozcamosno, hablemos horas enteras por teléfono, cuentame de tus gustos literarios horribles y yo te contaré de los mios. Dame tiempo nena... tiempo para salir de esta mierda que me rodea y que si tu te acercas te arrepentiras.. dame tiempo y si todo sale como lo imagino entonces pronto, muy pronto, podremos conocernos personalmente y ser más que amigos, por Savannah, tu me gustas.

Quedé helada al escuchar su discurso. Me sentía segura a su lado e insegura a la vez. ¿Quién era que era tan peligroso acercarme?, ¿con quién se rodeaba? Mi curiosidad pudo más y le pregunté.

—¿Vendes droga?, ¿robas?, ¿trabajas reclutando chicas para explotación o trata? —y el comenzó a reir a carcajadas.

—Absolutamente no nena. —no puedo explicar lo que sentí al escuchar ese apodo, simplemente se me erizo por completo la piel— Es.. complicado. No puedo decirtelo, pero si quiero que sepas que también muero por conocerte.

Y reí —También, si claro.

—Vamos Sav, se que mueres por mi —comenzó a burlarse.

—Basta, déjame pensarlo ¿si?

—De acuerdo.

—Y Tahiel... no vuelvas loco a Renzo, me da pena ver su rostro de trasnochado y cansancio —se carcajeo otro poco más.

—Ok Sav, prometo no torturarlo tanto.

—Oí eso Tahiel —dijo el aludido— lo anotaré en la heladera.

—¿En serio?, ¿en la heladera? —y me reí.

—Te devuelvo el móvil Renzo, es un gusto verte de nuevo —vi que tomó el móvil pero no colgó, el muy descarado tenía ordenes de Tahiel de no colgar la llamada para escuchar todo lo que hablaramos, que celoso— y gracias por lo de anoche.

—No fue nada señorita, estoy para servirle —sonreí y lo acompañé a la puerta principal.

—Descansa Renzo.

—Lo haré señorita, ahora que la bestia está calmada al fin lo haré —me reí y escuche una puteada desde el móvil, luego dije:

—Adiós —y cerré la puerta.

Más calmada por lo ocurrido me decidí a leer el libro que había dejado a medias hace dos días: el último de Aarón Soler. Sonreí al recordar cómo conocí a Tahiel y me dispuse a leer muy feliz y tranquila.

Eran las 6 pm cuando recibo una llamada de Blanca, ¡cierto! No le envíe ningún mensaje a ella. Atiendo y me dice:

—Sav, perdón por dejarte sola, yo juro que te perdí de vista unos segundos en lo que iba al baño a hacer cositas chanchas con Samuel y al volver ya no te encontré. Solo nos encontramos con Jonas y nos dijo que te estaba besando y unos tipos lo sacaron de encima y lo golpearon, ¿qué onda Sav?, ¿desde cuando te besuqueas con buenorros que ni conoces? Si eres virgen, joder y te has dejado manosear —reí ante lo que decia mi loca amiga. Presentía que con mi respuesta la iba a dejar knockout.

—Primero no soy virgen, segundo no tiene nada de malo que me bese con Jonas —al fin sabia bien su nombre.

—¿Qué has dicho Savannah? ¿QUÉ, QUÉ, QUÉ, QUÉ? —dijo sonriendo ampliamente, pareciendo al guasón— ¿con quiem fue?, ¿cuando?, ¿dónde?, ¿cómo? ¿¡por qué!? —y yo no pude más que morirme de risa con las locuras de Blanqui.

—No te daré detalles, solo diré que fue bonito, pero no lo que imaginé.

—Ya, ¿la tenía chiquita verdad? Todos dicen que el tamaño no importa pero oh si que importa.

—¡Blanca! Eres una lora. No era el problema el tamaño... —me cortó y siguió preguntando.

—¿Entonces la duración? Si que es importante eso. Una vez estuve con un tipo 35 segundos. Fue el polvazo más corto de mi vida, tarde más en quitarme la ropa que en lo que duró —reí a carcajadas de lo que me habia contado.

—No es esoooooo.. pero que mala experiencia esa tuya. Es solo que en mi caso, no me encendió lo suficiente. Estuvo bueno si, pero no saltaron chispas en mi.

—Ya entendi, el muy hijo de su madre no te dio un orgasmo, se ocupó de él y adiós.

—No lo hubiera dicho mejor.

—¡Pero que poco hombre! Dime ya quien es asi lo pongo en su sitio.

—Ja ja y ja. Seguro piensas que caeré en esas pero noooooo.. no te diré con quien fue Blanca.

–Debia intentarlo —dijo muy divertida.

Hablamos un rato más, con mi amiga el tiempo vuela. Y a las 8 pm cortamos la llamada, quedamos en vernos en Stringe, el pub de Nicolás, un amigo de Blanca. Hoy pasaba de tomar, creo que es demasiado para mi que recién salgo tan seguido. Pero si saldría, creo que mi vida universitaria de ahora en más estará rodeada de estas salidas y Blanca me acompañará.

El pub era cálido, con buena música, reservados muy cool. Nos sentamos en unos puf y mi amiga conversó unos minutos con Nicolás, me di cuenta cómo me comía con la mirada, hablaba con Blanca y a la vez me observava disimuladamente. En cuanto se fue nos sirvieron champagne, invitaba la casa y mi amiga dijo:

—Creo que hoy beberemos gratis. Haz flechado a Nicolás. Ni me ha mirado, lástima, el folla rico.

—Joder contigo Blanca, no me follaré a nadie que haya estado antes contigo.

—Claro que si Sav, esto es vivir. Debes salir con gente del sexo opuesto, follar con quien te apetesca, siempre cuidandote, tu salud es lo más importante siempre, lo sabes ¿verdad?

—Pues claro que lo se.

—Ok, dicho esto proseguimos, debes pasartelo rico con Nicolás en su oficina, no sabes el buen sexo que tendrás con él. Te cuidará y se preocupará por ti, con un hombre asi tendrias que haberte desflorado.

—Hay basta Blanca, solo paso vergüenzas contigo.

—No te avergüences, son temas que las amigas debemos hablar y creeme Sav, me preocupaba que no los hablaramos.

—Déjate de tonterías, vamos a bailar.

Disfrutamos la pista solo nosotras, yo me pedí un agua y la tenía en mis manos mientras bailaba sola pero junto a Blanca, en un momento llega Nicolás y me invita a bailar, mi loca amiga aprovecha y se agarra a un moreno que le bailaba detrás. Nicolás toma mi cintura y bailamos muy rico. Mi móvil vibra entre mis senos y maldigo entre mí.

NO

PUEDE

SER

OTRA

VEZ

NO

Comienzo a pensar en la posibilidad de pasarlo bien con Nicolás como me aconsejó mi amiga. Si lo hace asi como baila mama mia.

Decido no ver mi móvil hasta después de tres canciones más, cuando nos sentamos en el reservado Nicolás va en busca de bebidas y leo el... no espera, los mensajes de obviamente Tahiel.

—¿Qué haces bailando con ese imbécil?

—Acaso quieres matarme de un disgusto Savannah.

—Yo esperando tu respuesta y tu de regalada con ese tio.

No aguanté más que me hable así y le contesté rápido porque vi que venía Nicolás.

—Mira Tahiel, deja de seguirme, deja de actuar como mi novio celoso cuando ni te conozco. Cuando decidas dar la cara, ahi me reprochas lo que quieras. Ahora déjame follar rico con Nicolás.

Ok, me habia pasado de la raya, pero Tahiel me enfurece a niveles inimaginables. Recibo mensajes al instante, pero ya Nicolás está conmigo, me tiende una bebida sin alcohol. Decido apagar mi móvil para concentrarme en él.

Charlamos muy animadamente toda la noche, en un momento me pregunta:

—¿Quieres ir conmigo a mi oficina? —esa pregunta tenia doble sentido. No sabia que hacer. Mi loca amiga llegó al reservado en ese momento y sacó de esta encrucijada.

—¿Que tal la estan pasando? ¿A que no es hermosa mi amiga Nico?

—Muy hermosa —afirmó penetrándome con su mirada oscura.

—Que guay, amiga ¿te comeras este caramelito? —me preguntó bajito.

—No lo se. Tal vez —dije dudosa. Lo haria gustosa de no haber recibido ese mensaje de Tahiel. Maldito. No queria verme ni conocerme y tampoco me dejaba conocer a nadie.

Siguieron hablando y yo de puro masoquismo prendí mi móvil y empecé a leer los mensajes.

—Por favor dime que no harás eso esta noche. No con él. No con ese tipo.

—Sav, ¿no has pensado en lo que te dije?, ¿no quieres conocerme?

—No salgas de ese reservado con él Sav, no me hagas enloquecer. No me hagas tener que matarlo —eso me alarmó, no sabia si sería capaz o lo decia en sentido figurativo. ¿Y si ya mató antes? Diablos, no sabia nada de él. Nada.

Decidí contestarle —Dame una sola razón por la que una mujer joven como yo no pueda disfrutar de un hombre como Nicolás esta noche.

—Me tienes a mi Sav, quieres verme, vamos a vernos pero ya. Quieres sexo lo tendrás conmigo, solo conmigo, no con él. Por favor nena.

Quedé fuera de juego con ese mensaje. Lo vería, por fin conocería a Tahiel. La piel me cosquilleaba de pura anticipación. Esta noche no podía ir mejor.

...

Niñas hasta aqui el capitulo extra de la semana.. regalo solo para ustedesssss, espero que lo hayan disfrutado, el próximo martes veremos que sucede en el encuentro entre estos dos tontoooos 😊🙆‍♀️🥰😘😘

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ainhoa.vw

Alli subo spoiler de las tres historias, los espero alli ♡ :D