Narra Camus.
Siento mi cuerpo pesado y débil ... no sé qué paso, pero hasta mis parpados siento pesados...acaso esas son ¿voces? No...pero perdí la vida y no recuerdo nada supongo que de hay ya no hubo nada en mi...pero como es que puedo escuchar una voz acaso es la de... ¿Afrodita? .... ¿esta llorando? ¿Por qué?, trato de mover una mano y lo logro, entonces estoy vivo, pero... me da miedo abrir los ojos...ahg vamos Camus no seas cobarde, pero ... si al abrir los ojos me encuentro con el rostro de Milo... ¿Qué hare? ¿Qué diré?, ¿si me pregunta algo que contestare?, Estaba a punto de decirle que aún lo amo...pese todo el dolor y lágrimas que derrame por él, sí aun lo amo... con todas mis fuerzas... no ha disminuido en nada en la manera de quererlo pero...el ama a alguien más... Camus debes de entender que si Milo vuelve es por los niños y no por ti él ama a Shina y su corazón le pertenece a ella aunque diga que no y sea mentira eso lo dirá para callar su remordimiento ya que ...yo...no soy el dueño de su corazón... no del amor de Milo. Estoy seguro que intentara decirme cosas lindas para que caiga y me crea eso para que todo sea como si nada hubiera pasado, pero...me es tan difícil hacerle caso a la razón cuando el corazón me grita que le diga cuanto lo quiero, cuanto lo amo, cuanto lo necesito y cuanto lo extrañe si lo tengo tan cercas y mas que ahora Kardia nació quedra estar cercas...pero...es verdad ¿y mi bebé? ¿y Kardia?, ¡vamos Camus abre los ojos y afronta las cosas! ¡acepta la realidad!. Abrí mis ojos parpadeando poco a poco llamando a mi bebé.

Camus:...Ka....Kardia... -hablo débil abriendo sus zafiros turquesas- ¿Dónde están mis pequeños?.

Afrodita: ¿¡ah!? ¡Camus! -abrazo fuerte al galo del cuello- amigo al fin despertaste Camus -su voz se rompió en llanto- Camus.

Camus: ¿Ah? ¿Dita? -puso su mano en el hombro de su amigo-estoy bien dita -trataba de calmar a su amigo-.

Mu: nos alegra mucho el oír eso Camus-hablo el peli lila mirando a su amigo con una sonrisa al ver que su compañero estaba al fin con ellos mientras sus ojos se humedecían- jmjm.

Camus: ¿ah? Mu no llores por favor -el lemuriano se limpió las lágrimas y sonrió- ... ¿Dónde están mis bebés?

Mu: están debajo de tu sabana y Milo esta cuidando de Kardia, tranquilo está bien después de todo Kardia está bajo el cuidado de Milo-dijo tranquilo- dita déjalo respirar esta débil aún.

Afrodita: ¡no, no pienso soltar a mi amigo! -dijo entre lágrimas- estuve asustado, todos Camus.

Aioria: Afrodita pareces magdalena compórtate -hablo el león separando a dita- deja que vea a sus hijos.

Afrodita: shifff Aioria shifff -miro a su compañero mientras se limpiaba las lágrimas con la manga de su camisa-.

Camus: hmjmjm -sonrió tranquilo, levanto las cobijas y efectivamente ahí estaban tres pares de orejitas abrazando a su mami- oh mis pequeños -tomo a Isaac y lo puso en su pecho- jmjmjm

Isaac: ¿hm? ¿mami? -abrió sus ojitos y al ver a su mamá al fin despierta este tiro en llanto- mami! ¡Pensé que no despertarías mamá! -escondió su cabecita en el pecho del galo- ¡Degel tuvo que ser fuerte por nosotros, pero teníamos miedo de que no despertaras mamá! Shiff shiff

Camus: shh shh shh calma mamá está aquí, ya todo está bien -consolaba a su hijo acariciando sus orejitas- todo está bien.

Degel: -escucho los llantos de su hermano y se despertó tanto como el Y Hyoga- ¡MAMÁ!.

Hyoga: ¡DESPERTASTE MAMI! -sus tres gatitos frotaban sus cabecitas en el pecho de su mamá- ¿mami por que dormiste tanto estabas muy fría? -preguntaba entre lágrimas- tenía miedo mami.

Camus: mis niños -los abrazo a los tres- perdónenme por asustarlos... -sus lágrimas brotaron de sus zafiros y escurrieron conmocionado- ya todo paso ahora estoy aquí para cuidarlos a mis gatitos -besos sus frentes-.

Degel: mamá, tuve miedo shifff de ya no escucharte...te..te.. shiff shiff ni estar entre tus brazos mami -dijo abrazando fuerte a su mamá- shifff shifff

Camus: Degel... mi pequeño Degel -miro a sus niños entre lágrimas- gracias a los dioses están bien... es mi mejor alivio y noticia -dijo en susurro manteniendo a sus pequeños en brazos- prometo no dejarlos solos jamás -sus pequeños levantaron la mirada a ver al galo-.

Isaac: no llores mamá -limpio las lágrimas de su mamá con su semita-.

Degel: estaremos juntos mami -su pequeño dejo caer la cabecita en el pecho de su mamá *que cálido es su abrazo es tan tierno y suave como una mañana donde apenas los rayos del sol y me abrazaran de una manera frágil y cuidadosa sin duda ese es el calor de mi mamá, puedo escuchar su corazón latir con normalidad y suavidad*-.

Hyoga: Mamá ¿verdad que siempre estarás con nosotros? -miro a su mamá-.

Camus: si mi pequeñito -sonrió mientras juntaban sus naricitas y las frotaban- jmjmjm.

Mu: parecen que ya vienen los demás a verte Camus, saldremos para que puedas estar con ellos, vamos chicos.

Aioria: si, vamos dita -su amigo asintió y se marcharon dejando a los demás-.

Narra Aioros.
Todos visitamos a Camus, Shaka, Mu, Saga hasta Kanon y eso me tomo por sorpresa pero me da gusto que tome más interés por sus compañeros o al menos para mí eso es algo bueno en lo que me respecta ver que estamos todos más unidos, tengo que hablar con mi hermano para saber si fue a figuración o realidad lo que Shura me comento aunque me preocupa que en las palabras de Saga haya verdad en lo de Lyfia que el piensa pero aun así tengo que saber es mi hermano y no quiero que sufra lo mismo o peor lo de Camus la señorita Athena y el Patriarca ya han tenido suficiente como para que vengan mas problemas, camine buscando a mi hermano y estaba con Lyfia diría que la distancia que había entre los dos era de 5 a 6 centímetros una parte de mi me dice que no le dé la razón a Saga pero las acciones me dicen otra cosa, así que decidí interrumpir.

Aioros: ¿se puede? -pregunte normal-.

Aioria: jajajajaja ¿ah? Hermano, claro pasa, ¿Qué sucede? -pegunto normal al felino-.

Lyfia: Señor Aioros, buen día -saludo algo tímida la chica de cabellos azules- ¿Cómo esta?.

Aioros: bien gracias Lyfia, hermano podemos hablar solos acerca de algo que me tiene en duda-hablé de la manera más sutil posible, a lo que mi hermano asintió- con su permiso señorita Lyfia-nos retiramos del lugar y caminamos al escritorio del patriarca donde sabia que nadie mas podía pasar solo yo y Saga que éramos los únicos que teníamos el acceso al lugar, me senté en el escritorio - ¿No te imaginas... el porque te pedí hablar?.

Aioria: la verdad no -contesto sincero-.

Aioros: se trata de Shura y Cid -hable, pude notar como le cambio la mirada a una de desconformidad antes de que pudiera hablar yo lo detuve- antes que todas tus palabras quiero que sepas que Shura no me lo conto yo mismo me acerque al ver que Shura regresaba con unas vendas y pomadas.

Aioria: ¿así? ¿y que te dijo? -desvió la mirada-.

Aioros: me dijo lo del accidente y quería saber si es verdad dos cosas ¿fue un accidente? Y ¿defendiste a Lyfia y no atendiste a mi sobrino? -pregunté severo en su mirada pude ver que ya sabía para que rumbo iba mis palabras- bien te escucho Aioria.

Aioria; ¿ah? -el felino sabia que cuando su hermano lo llamaba por su nombre era porque para su hermano era algo serio y no debía de ser tratado con ligereza, sin voltearme a ver el me contesto- ahg -suspiro- sé que fue un accidente y por eso la defendí, Lyfia es incapaz de causar daño y menos a mis crías, aunque claro ella no lo sabe, pero no pensé que...Cid ... si terminaría herido Aioros -hablo desanimado- y mas Shura molesto conmigo por a ver defendido a Lyfia y no hablar con él.

Aioros: hmmg -pensé mis palabras por un momento analizando la repuesta que me dio mi hermano como hermano mayor mi deber es apoyarlo pero también hacerlo ver donde el esta actuando mal- Aioria seré honesto hermano -el volteo a verme pero por ratos miraba el suelo se que cuando hace eso... siente su culpa, desde niño hacia eso para mi Aioria es un libro abierto- Shura no quería decírmelo supongo que fue para que no discutiera o tuviera que intervenir y eso se lo respeto pero esta alguien de por medio y ese es mi sobrino Cid así como también Regulus -el solo me asintió y fue agachando sus orejitas circulares- por lo que como hermano mayor tengo que ver el bien tuyo y el de ellos.

Aioria: pero Aioros.. -no lo deje hablar-.

Aioros: aun no he terminado Aioria -hable serio- entiendo que no quisieras ver a SHURA pero Cid esa por encima de sus problemas y discusiones que es tu hijo, tu cría y cachorro, fue muy grosero y desconsiderado eso que hiciste quieras o no eso lastimo a Cid , todos ustedes son para mi un libro abierto porque Saga y yo cuidamos de todos ustedes con su ilustrísima, así que Cid es el reflejo de Shura y Regulus del tuyo se que Cid le dolió eso , ver como sus padres discutieron, hiciste hacerlo sentir culpable ¿y quien lo atendió? Solo Shura ¿y que hay de ti? ¿Dónde estuviste cuando tu cachorro te necesito? Ahora, contéstame Aioria.

Aioria: Aioros...hermano yo... -no tenía palabras para contestar ante las palabras de regaño de su hermano mayor solo miraba el suelo- ... fue un accidente -dijo en voz baja- ... no era mi intención lastimar a mi hijo y mucho menos hacerlo sentirse culpable.

Aioros: no me gusta comparar a las personas y lo sabes Aioria -dije en voz dura- pero hasta Camus supo reaccionar poniendo a sus hijos primero antes que sus emociones y Milo acepto la culpa no me gustaría que nada de eso pasara contigo.

Aioria: hmg...lo se ...hermano -hablo triste- pero ...se que aunque fuera con Shura no me hablaría es distante cuando está molesto.

Aioros: pues comienza por tu hijo, reconoce tu error y pide perdón, antes de que pierdas el cariño de tu hijo y la confianza de Shura.

Aioria: si....

Aioros: -me levanté y puse mi mano en su hombro- hermano mírame... -el lo hizo- no quiero verte sufrir y menos con algo que amas tanto que es el amor de Shura y el de tus crías se que en el fondo también deseas que esto se arregle, pero tienes que dar el primer paso tu y si haces ganaras más -hice un giño- ¿entiendes a lo que me refiero Aioria.

Aioria: ¡ah! -sus ojos fueron nuevamente los de mi hermano pequeño de hace años y su sonrisa apareció- Si hermano.

Aioros: bien, anda volvamos -ambos salimos del despacho y caminamos fuera yo me retire hacia ver a mi pequeño Sísifo-.

Narración.
Camus estaba platicando con Afrodita acerca de todo lo que paso durante su trágica ausencia en el santuario Afrodita le conto de como Milo se comporto en el santuario de las palabras de Athena como amenazo a Milo y mando a buscarlo, pero no sabía por dónde empezar el griego hasta que Apros le dio la idea de por donde buscarlo y dar con el lugar donde estaba sus pequeños gatitos.

Afrodita: Cam... Milo estuvo muy decaído de cuando te fuiste no solo yo sino Aioria y Kanon lo hallaron tomando hasta totalmente perderse de el mismo, no es porque lo quiera defender, pero se vio que él estaba muy mal.

Camus: ¿de verdad Dita? -pregunto-.

Afrodita: si por lo que me dijo Kanon, Milo te llamaba cuando estaba dormido y le escurrían lagrimas y cuando despertaba no salía del templo para nada tuvieron que ir Saga y Aioria ir a buscarlo, pero lo veían fatal.

Camus: Afrodita... ya no se en que creer, no puedo borrar esas imágenes de mi cabeza de como Milo y Shina tenían relaciones enfrente de mis pequeños -cerro los ojos negando con la cabeza- no, no es fácil, es algo con lo que no puedo y no creo en que Milo este arrepentido...aunque yo.. -agacho la mirada el galo-.

Afrodita: ¿Camus.., aun lo quieres verdad? -el no contesto solo apretó las sabanas con fuerza- Camus....

Camus: Dita...te puedo confesar ¿un secreto? -el sueco asintió- aun con todo eso... mi corazón se negó a creer que Milo hiciera eso pero hice caso a mi cabeza...aun así...con todo eso...yo... -miro sus gatitos- yo lo llamaba ...incluso cuando Shina me ataco mi mente solo gritaba que Milo llegara rápido...pero eso...nunca paso...aun así... -su voz se fue asiendo temblorosa y quebradiza-...yo ...yo...yo lo amo -se tapo el rostro mientras sus lagrimas rodaban por sus mejillas, volteo a ver a su amigo mientras sus lágrimas escurrian por sus mejillas-Afrodita...lo amo...pero ya no puedo creer en el...no puedo.

Afrodita: Camus... *estoy seguro que se dolor que sientes atormenta a Milo de la misma manera* -acaricio la espalda de su amigo dándole consuelo.

Camus: que tonto de mi parte pensaba decirle cuando di a luz que mi amor hacia él no ha desaparecido, y ...al imaginar que él...que mi vida...que esto...seria feliz como antes...que tonto e ingenuo de mi parte -se limpiaba las lagrimas con brutalidad- solo quiero que mi pequeño Kardia este bien Dita, pero nada me funciono...nada...incluso...Surt...él me demostró que estaría conmigo...y que de verdad le importaban los niños... y sentí que...en él. Tendría el amor que tanto soñaba, pero mi corazón me gritaba ¿acaso Milo estará buscándote? ¿Milo también te extraña de la misma manera que yo lo hago? ...

Afrodita: Camus... -miraba a su amigo con dolor-.

Camus: incluso llegue a pensar que si...si...si todo esto... era un estúpido sueño que despertara ya, pero ¡NO! ¡cada día que abría los ojos con la esperanza de despertar y ver a lado a Milo o que estuviera en sus brazos nunca fue así! .... ¡soy...un...idiota!... -su corazón era quien hablaba en esos momentos de todo el resentimiento que sentía incluso con él mismo-... quiero ver a Surt...

Afrodita: ¡pero Camus! -hablo asombrado-.

Camus: con el tiempo llegare a amarlo ¿no es así? ¿acaso no es verdad? -dijo débil-.

Afrodita: calla Camus -tomo las manos del francés mirándose a los ojos ambos- calla eso no es verdad, eso es mentirte a ti mismo, no lo hagas, no puedes amar a una persona cuando no hay amor ... no por cuando solo uno ama y no los dos... no lo hagas Camus, como tu amigo te lo digo es destrozarte a ti mismo y quitarte la felicidad.

Camus: Dita... -sus ojos se mantenían en el- ...pero...Shina ella...intentara hacerles daños a mis bebés.

Afrodita: Shina puede decir y gritar vente mil cosas, pero yo se lo que te digo, no arruines tu felicidad Camus entiende, Milo te ama, lo sé, estoy seguro...pero hasta que no hablen los dos no podrán estar juntos.

Camus: no quiero escucharlo... me dirá solo palabras Dita sin pruebas ¿de qué me sirve eso? Si, así como dice también puede mentir... yo ya no quiero salir herido y menos mis hijos no Dita-bajo sus manos-... no se ni que...hacer...

Afrodita: ¿te darás por vencido en su amor Milo y tú? -pregunto-.

Camus:...-asintió- es lo mejor...

Milo: pues yo no -hablo el griego, volteando bruscamente el peli aguamarina a verlo-.

Continuara... espero que le guste esta cap y el siguiente ouo.

¿Milo escucho la confesión de Camus?

¿Camus que le contestara?

¿Habrá una esperanza para el heleno?.