Nota: hola mis niñ@s hermos@s, quería decirles que gracias por leer la historia.

Pues mis niñ@s, como pudieron ver Emily murió ahorcada.

Fin.

Naaaaaaahhhhhhhhh.

Mentira.

Era broma.

Santa Biblia Reina Valera 1960 - Rut 1
1
Aconteció en los días que gobernaban los jueces, que hubo hambre en la tierra. Y un varón de Belén de Judá fue a morar en los campos de Moab, él y su mujer, y dos hijos suyos.

—hija, hija —me llaman y me sacuden —cariño por favor despierta.

Abro mis ojos de golpe, mientras respiro de manera agitada, siento como si el corazón se me fuera a salir del pecho. Estoy muy asustada, las lágrimas comienzan a salir de mis ojos.

—ya cariño —dice mi mamá acariciando mi cabello —ya pasó, solo era un sueño.

La miró a los ojos.

—No mamá, no era un sueño, fue algo muy real —le digo llorosiando —yo lo sentí.

Me mando las manos a mi cuello.

—hay sueños que parecen muy reales mi niña —dice tratando de calmarme.

La miró frustrada, yo sé que ella no cree que fue real, tal vez crea que estoy loca, pero yo estoy segura de lo que sentí, además puedo diferenciar la realidad de los sueños.

—el estaba sentado justo en donde lo estás ahora —le explico, en un intento porque me crea.

Ella se queda pensativa observándome y mirando la habitación, yo comienzo a darle las descripciones del rostro de ese chico, que desde que lo vi en los cumpleaños de Deimond no lo he podido olvidar.

Cuando terminó de dar sus características faciales, ella comienza a palidecer.

—pasa algo mamá? —le pregunto.

Ahora ya me siento un poco calmada, aunque el susto no se me ha terminado de pasar.

—tenemos que salir de aquí ahora —dice mamá de repente, poniéndose de pie.

Yo la miró confundida, no se que es lo que está pasando.

—que bueno que aún no has desempacando tu maleta —vuelve a hablar mi madre dirigiéndose hacia la puerta —si quieres llevar algo más, por favor empacalo.

Termina de salir y yo quedo en shock.

«como es que nos vamos?»

Miro todo lo que está en la habitación, todo luce en orden perfecto, nada fuera de lugar, la ventana está perfectamente cerrada, me acerco al espejo y miro mi cuello, luce normal, no parece haber sido apretado.

Entonces es cuando caigo en cuenta de que en verdad todo ha sido un sueño, o mejor una horrenda pesadilla. Aunque no entiendo porque soñé con aquel chico.

Salgo de mi habitación y me dirijo a la de mamá.

Al entrar veo que ella está terminando de empacar y lo hace de manera apurada, puedo ver como sus manos están temblorosas.

—solo fue un sueño mamá —le digo, dándole la razón.

—ya empacaste todo lo que necesitas? —dice ignorando lo que dije antes.

Comienza a sacar su maleta hacia fuera, yo la sigo y pude percibir un ambiente bastante pesado.

—no podemos irnos —le digo.

—tenemos que hacerlo querida —dice mi madre deteniéndose y volteando a verme —y no es porque crea que tú sueño fue real. —me explica.

Yo la miró, ella se ve muy nerviosa y yo ni siquiera se como realmente me siento, no quiero dejar esta casa, aquí he pasado casi la mayor parte de mi vida, no puedo salir y irme así como si nada.

—pero porque —le digo con tristeza.

—porque la casa está embargada cariño —dice acariciando mi mejilla.

«No puede ser, nuestra casa embargada?».

«En qué momento pasó eso?»

La miró sin entender nada de lo que me dice, recuerdo que papá trabajo muy duro para que pudiéramos tener esta casa, no es posible que ahora esté embargada.

—tuve que hacerlo —me dice mientras lágrimas ruedan por sus mejillas —los gastos del hospital cada vez eran más costosos, no tuve de otra.

Niego con la cabeza.

—debiste de habérmelo dicho antes —le digo tratando de contenerme —no podemos permitir que nos quiten la casa, por la cual mi padre tanto lucho.

Ella me mira frustrada.

—no tenemos de otra —me dice —ya he tomado una decisión y la decisión, es que nos vamos.

Comencé a negar con la cabeza, estaba reacia ante tal situación, no quería marcharme de esta casa.

Ella siguió insistiendo, pero yo me resistía a tal cosa.

Aún así, mi mamá terminó ganando, ella quedó con la última palabra, y ahora nos encontramos en un carro viajando a yo no sé dónde, con las pocas cosas que pudimos llevar.

Esto era demasiado para mi, ni siquiera terminó de recuperarme por la muerte de mi padre, y ahora tengo que dejar sus recuerdos atrás, incluido mi casa de infancia.

—estas bien? —pregunta Matías.

Olvide decirles que él es el que está ayudando a mamá con todo lo del trasteo.

Por cierto se está portando muy amable.

Demasiado amable para mi gusto.

Se que debería estar agradecida por toda su ayuda, el fue la mano derecha de papá y la de mamá también, aún así no se como hacerlo.

O tal vez estoy tan mal, con la muerte de mi padre, que reaccionó mal por todo.

—me siento fatal —le digo sin despegar mi mirada de la carretera.

Ni siquiera ha amanecido, no entiendo porque mi mamá insistió en que nos fuéramos a esta hora, incluso sin despedirnos de nadie, como si fuéramos unas prófugas o algo así.

—el tiempo sanará tus heridas —me dice —luego te acordarás de esto como aguas que pasaron.

Me giro a verlo, el también me está mirando, le doy una sonrisa sincera.

—gracias por todo Matías —le digo —no tengo como pagarte por la ayuda que le has dado a mi padre y por la que nos das a nosotras.

El tambié me sonríe y responde.

—no tienes porque preocuparte por ello, por ti, por ustedes haría lo que fuera, incluso daría mi vida si fuere necesario.

Me da una mirada que no logro describir.

Río sin ganas.

—no exageres Matías —le digo antes de volver mi vista a la carretera.

Mientras que observo la carretera desolada, llena de árboles secos, puedo sentir la mirada de Matías sobre.

Hubiera deseado que mamá se hubiera hecho a mi lado, pero ella prefiero irse adelante con el chófer.

Saco mi teléfono para distraerme, lo prendo y comienzo a ver los mensajes.

Veo primero los de los J5 y comienzo a responder.

J2: como estas?

J2:aún no he llegado a los Ángeles California, y ya te extraño.

Emily: estoy un poco mejor y también los extraño mucho.

J3: se que lo de tu padre es algo muy duro, pero por favor no vayas a dejarlo todo tirado, la vida sigue.

Emily: gracias por tu consejo, y no sé preocupen ya muy pronto estaré por allá, solo quiero compartir tiempo con mamá.

J4: pase lo que pase Emi, no olvides que te has ganado un lugar en mi corazón y que siempre puedes contar con mi ayuda de manera desinteresada y lo digo en verdad.

Ese mensaje me saco un suspiro.

Emily:🥰🥰🥰🥰.

—con quien hablas? —pregunta Matías acercándose un poco más a mi.

Bloqueo el teléfono para que no mire, no porque este escribiendo algo malo, es solo que no me gusta que miren mi wapsat, eso es todo.

—con mis amigos —le respondo un poco incómoda.

—te refieres a esos ricachones que vinieron al entierro?

No me gustó para nada esa descripción.

—si, por? —dije tratando de no sonar molesta.

—porque a leguas se nota que ellos quieren todo de ti, menos tu amistad.

—a que te refieres con eso? —le dije exasperada.

No se porque pero esos chicos los aprecio mucho y no consiento nada con ellos.

—me refiero a que son chicos mujeriegos, llenos de malas intenciones, en especial aquel que no dejaba de abrazarte. —me dijo sin ocultar su molestia.

Suspiré con cansancio.

—sabes Matías —le digo en voz baja para no llamar la atención de mi madre —no quiero sonar grosera ni nada por el estilo, pero tú no sabes nada de esos chicos para que los juzgues de esa manera, es más te prohíbo hablar de ellos nuevamente.

El me miró sorprendido, al parecer no se esperaba eso de mi.

—sabes Emily —me dijo con decepción —has cambiado mucho desde que te fuiste, ya no eres la misma chica noble de antes, supongo que esos chicos tuvieron mucho que ver, hubiera sido mejor que nunca te hubieras marchado.

Esas palabras me dejaron pensativa.

«Acaso yo ya no era noble?»

«Habia cambiado mi forma de ser?»

Acaso está diciendo que los chicos son mala influencia para mi.

En ese momento llegó a mi mente un texto de la palabra de Dios.

Jeremías 15
19 Por tanto, así dijo Jehová: Si te convirtieres, yo te restauraré, y delante de mí estarás; y si entresacares lo precioso de lo vil, serás como mi boca. Conviértanse ellos a ti, y tú no te conviertas a ellos.

«me había convertido a ellos?»

Eso no puede ser, yo jamás apoyé sus fechorías.

No que yo recuerde, siempre trate de dejarles algo bueno.

Decidí no responderle a Matías y seguir respondiendo los mensajes de los J5, sin dejarlos ver de el.

J5: vuelve pronto Emily, la vida es aburrida sin ti.

Ese mensaje me hizo sonreír ya que Jason la mayor parte del tiempo es indiferente ante todo.

Emily: por supuesto, que harían sin mi?.

Salgo del grupo de wapsat los J5 y entro al chat de Jak.

Jak: Emily, como estas?

Jak: perdoname por no ir, ya tenía todo listo para viajar y justo en ese momento me avisaron de que mi abuela esta enferma.

Jak: apenas leas estos mensajes, por favor responde, necesito saber de ti.

Jak: me imagino que tienes el teléfono apagado y por eso no respondes, al menos cuando lo prendas contestame.

Jak:por favor, cuando leas estos mensajes, no vuelvas a apagar tu teléfono, me haces sufrir mucho 😭😭😭.

Jak: no olvides que siempre estaré para ti, no quiero ser exasperante, pero anhelo pronto volver a verte.

Cada mensaje de Jak hace que sonría y suspiré como una chica terriblemente enamorada, y no lo voy a negar porque de verdad estoy muy enamorada de él.

Comencé a responder sus mensajes un poco nerviosa.

Emily:hola, Dios te bendiga, estoy más o menos bien.

Emily: no te preocupes por no haber podido venir, si yo hubiera estado en tu lugar, también me había ido ponde mi abuela.

Espero por su respuesta, pero no llega, ni siquiera está en línea.

«ahora el que tiene apagado el teléfono es otro»

Me acomodo en el asiento y trato de dormir un poco.