Alerta spoilers. No me ODIEN bfsnnsns

Bueno, antes que empiecen a leer les quiero contar algo...

Llevo 4 historias publicadas y entonces quiero que también le den amor a las otras o si no me doy de baja.

Digan BKDK Canon, para no perder la costumbre.

Ahhh, se viene lo más esperado por todos y compren condones.

No sean furros

Cuídense, Nic-sama los ama mucho!

Ochaco reconocía ese tono de llamada. Su cara se puso pálida, pero bien que lo disimuló. Llegó hasta donde Izuku y gentilmente pidió el celular, el pecoso no tardó en darlo a su dueña. Pero se sintió traicionado cuando su "novia" se alejó a una distancia profente y hablaba emocionada con el desconocido por el celular. Todos notaron el ambiente tenso, y Kirishima decidió cortarlo.

- Eh, Mido-bro. También puedes tener mi celular y tomarnos fotos de allí, yo mañana temprano prometo enviarlas.- Izuku asintió triste y sonrió forzado cuando los demás chicos también se vieron tan escena.

Después de ese incómodo momento, todos estaban divirtiéndose y hablando tonterías. Llegaron 3 chicas más. Momo, Kyoka y Mina. Todos estaban emparejados dentro de lo que cabe. Momo estaba hablando animada con Tenya, hasta bebían té mientras su charla se hacía más extensa. Mina se le subió en la espalda a Kirishima, eran mejores amigos desde la secundaria y se llevaban muy bien, comían helado, que por muy extraño que parezca, el pecoso terminó comprando. Kyoka estaba con Denki, ellos dos eran novios desde hace un par de meses atrás, su química era muy alta y coincidían en todo. Hablaban de un cierto show que iba a ver en otra ciudad y Kyoka sería partícipe si lograba ganar un concurso.
Todo estaba bien entre todos. Hasta que por segunda vez, la castaña recibió otra llamada. Sero volteó la mirada hacia Midoriya, mientras los otros chicos se mantenían en silencio sin incomodar a alguien ahí. Dentro de tanto rodeos, la de mejillas rosadas atendió la llamada hablando bajito y nerviosa. Todos miraban expectantes esperando alguna mala noticia. Lo era, pero nada grave. Era Ochaco pidiendo permiso para retirarse porque era muy tarde, y su madre ya le esperaba en casa. Todos se despidieron, incluso el pecoso. Después de que Ochaco saliera del establecimiento, Mina se dio cuenta que afuera estaba un carro azul, muy costoso para el gusto de ella. Se sorprendió cuando vio a su compañera de aula entrar a la puerta de copiloto.

La pelirrosa no diría nada. Hablaría con Ochaco después. Todos se quedaron ahí comiendo y disfrutando más de la noche oscura y fría.

...

Eran las dos de la mañana. Izuku había gastado todo su dinero. Era un idiota. Hizo prometer a Kirishima que él podía irse adelante porque el mismo resolvería su pasaje en taxi. Así, quedó sólo en medio del establecimiento, y con el alcohol recorriendo sus venas, llamó a su profesor en busca de ayuda.

- ¿Uhhhmm?, ¿Qué demonios?.- el adulto estaba enojado, hablaba más ronco de lo usual, pues, estaba durmiendo.

- Perghdón, pero.. nechesito que me oyude.- Su voz se enredaba con su misma saliva, no se entendía nada.

- ¿Aaahhh?.- Había despertado de golpe.- No te entiendo una mierda jodido Deku. ¿Dónde carajos estás?

Izuku hizo un ruido como un bostezo, y procedió a enviarle la dirección actual al rubio por un mensaje.

- Aquí. Apurate, tengo sueño.

- Tú no me mandas, pedazo de mierda. - así, salió corriendo en pijama y pantuflas a su garage para sacar su auto e ir en busca de su irresponsable alumno.

Llegó a tiempo, a Izuku no le dio tiempo de reaccionar cuando ya estaba sentado en la parte trasera del coche con un cinturón de seguridad amarrado a su cintura.

-¿Kacchan?.- llamó bajito.

- ¿Uhm?

- L-Lo siento, le había prestado dinero a ..

- No seas tan jodidamente un Deku, Deku.

- Imposible si Kacchan lo dice así!

El rubio bufó divertido.

- ¿Estás muy borracho?.

- No. Sólo un poco.

- Bien, te llevaré a tu casa.

- N-NOO!.- el rubio por una milésima de segundo abrió sus ojos a la par.

- ¿Cómo qué no?.

- Le he dicho a mamá que volvería mañana.

- Dormirás en un jodido hotel, entonces.

- ¿Tienes novia? ¿Por qué simplemente no me dejas dormir en tu tonto departamento?.- el pecoso habló con un tono de voz más alto y firme.

- No seas idiota, no se trata de eso.

- ¿Entonces?

- Haré lo que pidas, pedazo de niño. Sólo deja de joder.

- Bien.- sonrío feliz y embobado.

...

Ochaco había llegado a la casa de Shoto algo entonada por los tragos de alcohol que ingirió. Fue directo al baño a vaciar su estómago, pues, vomitar era lo que su cuerpo pedía. Después de tomar un baño, y cambiar sus ropas por pijama, se acostó en la cama con Shoto. Quien estaba molesto, pero sabía fingirlo muy bien.

- Amor, ¿quiénes eran ellos?.- habló suavemente en su oído.

- Mis compañeros de estudio. Estábamos festejando nuestro inicio de vacaciones.

Shoto pareció entender y beso el puente de la nariz de su castaña.

Así ambos durmieron tranquilamente, deseando un día más juntos.

...

Izuku ya había tomando un baño, y se había cambiado de ropa, usando así una camisa del rubio manga corta que le llegaba por las rodillas. No era problema para él dormir así, era más cómodo. Pero en caso contrario, para Katsuki era una perdición. No podía caer ante eso. No debía. Se colocó sus audífonos dispuesto a oír música mientras conciliaba el sueño. Pero era imposible, imposible si dormía con el chico al lado.

- Kacchan~, abrázame. Tengo frío.

- No lo haré.

- Por favor ~ , necesito que me toques.- Katsuki se estremeció en su lugar y tragó grueso. Quiso colocarse sus audífonos nuevamente pero la mano contraria no se lo permitió. Izuku se metió entre sus brazos y se recostó en su pecho buscando calor.

- Deku, bastardo!. Bájate de encima!.

- N-no. Abrázame, Kacchan ~.- su tono de voz se hacía más agudo y necesitado. Bakugo se mordió el labio cuando su polla empezó a reaccionar.

- Bájate, imbecil. Quiero dormir cómodo.- hacía un esfuerzo descomunal para no tomar al chico y hacerlo suyo de una vez. Sintió la pierna de Izuku pasar descaradamente por toda su entrepierna, el rubio gimió ronco ante el tacto. El pecoso chilló ante esa voz tan gruesa, y por lo visto, no solo su voz.

- ¿Kacchan?.- su voz en un susurros se acercaba peligrosamente a los labios del rubio. Katsuki tomó del cabello a Izuku mientras gruñía como un León esperando comer a su presa. Izuku emitió un gritito cuando su cabello fue jalado, y en el proceso su lengua salió de su boca para luego ser devorada por la del mayor. Bakugo besaba ferozmente al chico, sin dejarle respiro. Sus ojos verdosos pronto se inundaron de lágrimas al no tener aire. La saliva de ambos escurría por las comisuras de sus labios. Bakugo no aguantó más y tomó la ropa del chico y se la quitó. Lo dejó completamente desnudo, y a su merced. Empezó besando su cuello y clavículas mientras el más joven sólo suspiraba y jalaba el cabello rubio de su amante. Después de morderlo y besarlo, procedió a chupar sus pezones ya erectos. Izuku gimió cuando sintió la caliente lengua del mayor en sus tetillas. Se sentía muy bien para él, era demasiado, su erección ya estaba presente y quería atenderla. En pleno acto, Bakugo bajó hasta la pelvis, dejando besos en todo su abdomen. Sacó la formada erección de su amante, y empezó a bombearla con cuidado.

- Kacchan.. no pares, no pares, po- ohhhh.. ah.. fa.. ah..

Su respiración era irregular, y su voz salía rota en leves gemidos. Sentía que en el cualquier momento se vendría, y avisó. Pero para su sorpresa, Katsuki había metido su miembro en la boca. Izuku ante la vista no pudo evitar gemir sonoramente. El rubio estaba haciéndole una felación. El pecoso sentía que subía y bajaba del cielo. No pasó mucho tiempo cuando se vino en la boca del mayor.

- Ahhhh. L-Lo siento. No avisé nada. P-Perdón.

Katsuki no le prestó atención al chico y bajó un poco más allá de los testículos. Quería llegar a su ano. Levantó sus caderas con sus manos. Y empezó a lamer y chupar ese lugar sin escuchar las claras reclamaciones del muchacho.

- Kacchan, está sucio, detente!

Bakugo le comía el culo mientras el menor sólo gemía como perra en celo, se sentía muy bien. Después de eso. Katsuki subió su rostro para besarle en los labios. El menor no discutió. Hasta que sintió un dedo invadir su esfínter. Gimió de sorpresa entre el beso. A Izuku la sensación le parecía extraña, pero sin embargo, no le dolía. Su entrada se contraía intentando expulsar al invasor. Sin éxito. Katsuki al no ver dolor ni rastro de resistencia por parte del peliverde, introdujo un segundo dedo, provocando así, que el menor gimiera de incomodidad y dolor. Mientras tanto, Bakugo metía y sacaba sus dedos desenfrenadamente, hasta que llegó a su deseada próstata. Los ojos de Izuku se abrieron cuando sintió un electrizante choque en todo su cuerpo, gimió gustoso cuando volvió a sentir esos dedos tocar su punto dulce sin descanso. Pero no era suficiente. Quería algo más grande. Quería ser llenado por su polla, y no por dedos.

- Mhmm, Ka.. cchan.. f-follame.- su voz salía temblorosa y necesitada.

El rubio al ver al menor hecho un desastre de sudor y gemidos, sintió como su ya erecto pene empezaba a palpitar en su molesto bóxer. No espero tanto cuando ya se encontraba completamente desnudo.

- Date la vuelta.- la voz ronca del rubio hizo que el peliverde acatara de inmediato, gimiendo en el proceso.

Bakugo al ver el trasero pecoso de su amante, vio la gloria para el sólo. Su polla palpitaba necesitada y su boca se hacía agua. Subió hasta quedar inclinado arriba de Izuku y empezó a repartir besos por toda su espalda hasta llegar a sus glúteos. Estando allí, mordió levemente y el peliverde gritó gustoso, se sintió bien para él. Volvió a pasar su lengua por la cavidad anal hasta dejarla resbalosa y totalmente mojada. Izuku pedía suavemente que le follara, y Katsuki no se quiso hacer de rogar.

- Hey, Deku.. voy a meterla.

- Está bien, Kacchan. Ha-hazlo.

El rubio alineó la punta de su polla en la entrada y la hundía lentamente para que su amante viviera su experiencia detalladamente. Izuku sentia como su recto se expandía a paso que el rubio empujaba su miembro dentro. Izuku sentía que sería partido a la mitad, y lloriqueo por ello. Mientras tanto, Katsuki había empezado a besar su espalda y cuello, diciéndole que se relajara y respirara pausadamente. Hasta que sintió todo dentro. Hizo un leve movimiento de cabeza para que el mayor empezara con su labor. Katsuki bajo el deseo de dominar empezó a embestirlo lentamente, pero su cordura se fue al caño cuando el menor bajo de él empezó a gemir gustoso ante el movimiento. Hasta que escuchó un grito, pero de placer. Encontró su punto dulce otra vez. El rubio empezó un vaivén desenfrenado arremetiendo contra el pobre chico mientras que el menor jadeaba gritando por más.

- ¡Ahh!, ¡Kacchan!.. Ka.. ah.. ¡uhg!

- ¿Te gusta? .. ¿Uhm? Dímelo.. ah..

- No.... No me... preguntes.. eso, Kacchan! ¡Ah! ¡Ah!.- Izuku sentía como el rubio aumentaba la velocidad y sus gemidos se hacían más altos y roncos así que mordió la almohada mientras sus piernas temblaban casi dormidas.

Katsuki siguió embistiendo al menor con fiereza mientras sentía que se iba a derretir ahí. Se sentía tan caliente y resbaloso. Como ese bonito culo le succionaba la polla. Sintió un escalofrío recorrerle, el pecoso le apretaba más, supuso entonces que estaba cerca de venirse. Tomó la polla de su amante llena de presemen y la bombeó hasta que el líquido caliente y blanquecino manchó su mano con su esencia. Katsuki aún no se venía y arremetía más rápido. Izuku se estaba recuperando de su reciente orgasmo cuando sintió una leve sensación de dolor en su ano, giró su rostro a ver a Kacchan. Pero el rubio tenía sus ojos cerrados, como si estuviera concentrándose. Su boca en una línea recta y su entrecejo fuertemente fruncido. Izuku vio como los ojos rubíes se abrieron. Su corazón saltó. Sintió un dolor pero más que eso excitación, Kacchan enterró sus uñas en sus caderas. Era claro el rubio se iba a venir. Sintió como su interior se contraía al ser llenado por el semen caliente del rubio. Su interior estaba todo pegajoso. Izuku se desplomó en la cama con el rubio encima, en señal de cansancio. Katsuki suspiró sonoramente cuando terminó de eyacular. Besó suavemente la oreja del chico, mientras acariciaba su espalda.

- Lo voy a sacar.

- No, aún no Kacchan. Es vergonzoso!

- Tenemos que hacerlo ahora porque después será peor.

Izuku asintió mientras sentía como Katsuki salía despacio de su interior, seguido así, también sintió el esperma salir de su entrada resbalando por sus piernas. Quería morir ahí mismo. El rubio notó su incomodidad, y con toallas de papel procedió a limpiarlo para después darse una merecida ducha. Izuku bajo su ingenuidad quiso levantarse de la cama, pero sus piernas estaban dormidas y las caderas le empezaban a doler.

- Ayúdame, Kacchan.- su voz salió como un niño regañado.

Katsuki rió ante la imagen tan infantil que le daba su amante, y procedió a llevarlo cargado en modo nupcial a la bañera.

Después de un maravilloso y caliente baño ambos se acostaron a dormir desnudos y sintiendo el calor del contrario. Ya eran las 5 a.m. y ellos apenas intentaban recobrar energías.

Joder, estoy agotada de ser la mejor autora para ser mi primera historia 🥵 besos en el ano.