Capítulo 24
No podía concentrarse en lo que escribía. Miraba con insistencia a la ventana y luego miró al segundo piso.
Deseó algo...
Me vio dormida profundamente en su cama y observó la extraña posición en la que yo dormía. Estaba de lado, con una almohada en mi espalda y otra entre medio de mis piernas, además tenía la ovejita de peluche conmigo.
Cauteloso, se acercó, y deseoso, se acostó junto a mí. Sacó con cuidado la almohada de mi espalda y se aferró a mí. Me observó deslumbrado frente a mi avanzado embarazo.
Me susurró.
_ Me haces el hombre más feliz de todos, mi Stephanie. El que estés esperando un hijo mío llena mi alegría y me provoca que te amé y te deseé mucho más que antes.
Acarició mi barriga y me miró perdidamente enamorado.
_Estás demasiado bella, mi Stephanie. Te amo tanto.
Besó mi cuello y acarició mi pierna.
_ Te deseo.
Me susurró al oído y acarició uno de mis pechos.
Excitada por sus apasionadas caricias, tuve deseos de estar con él y comenzó a dolerme la espalda. Solté un gemido.
Joey hizo un sonido con sus labios para tranquilizarme y yo abrí los ojos. Lo vi detrás de mí y le sonreí.
Me pareció extraño que estuviera acostado conmigo, cuando tenía que estar trabajando en su sala de estudio.
_ Mi amor ¿Qué sucede? Creí que estabas trabajando. – me sonrió.
_ Siento haberte despertado, es que quería estar contigo. - me miró apasionado y yo volví a sonreírle.
Preferí recostarme de espaldas; me di vuelta y sentí más dolor. Joey me miró.
_ ¿Estás bien, mi amor?
_ Si... - toqué a nuestro hijo y esbocé una sonrisa.
Me miró acariciar a nuestro bebe y sonrió apasionado.
_ ¿Puedo preguntarte algo, mi niña?
_ Si ¿Qué me quieres preguntar?
_ ¿Por qué tenías esa almohada entre tus piernas y la otra en tu espalda?
_ Es que es la única manera en la que puedo dormir cómoda y tranquila.
_ ¿Cómo? No entiendo.
_ Es que el peso ya me incomoda demasiado. Me siento tan pesada, que no puedo dormir tranquila y las almohadas son para darme comodidad. Evitan que tome una mala posición al dormir.
_ Oh. Ahora entiendo. – me sonrió y acarició mi mejilla.
Le miré sus ojos con detenimiento y Joey me miró intenso. Sentí los acelerados latidos de mi corazón.
Amándolo mientras me observaba, no pude contenerme y mi corazón latió más fuerte y rápido que antes, entonces, tomé su mano y la coloqué en mi pecho. Joey lo miró.
_ ¿Sientes esto, Joey? – lo miré perdidamente.
_ Si, es tú corazón, que está latiendo muy rápido. – me miró seductor y sus ojos le brillaron de amor y de deseos.
_ Este es mi corazón que late del inmenso y profundo amor, que siento por ti, Joey. Te amo demasiado.
_ Y yo a ti, Stephanie. Solo quiero amarte.
Se acercó más a mí y me miró cautivado.
Un poco nerviosa, me sentí también atraída por él y Joey acarició otra vez mi pecho. Me gustó que lo hiciera y cerré los ojos. Tuve deseos otra vez de estar con él.
_ Quiero hacerte el amor.
Me susurró, yo respiré excitada y nos besamos sin parar.
_ Me colocaré del otro lado para que estés cómoda. – me susurró y yo lo esperé deseosa. Solo quería que hiciéramos el amor
Se apegó a mi espalda; lo sentí detrás de mí y respiré ardiente. Él sonrió fogoso y enamorado.
Traté de darme vuelta y le desabroché su camisa azul. Le vi los vellos de sus pectorales y ese sexy lunar.
Nos miramos perdidamente y él me llenó de caricias, muy apasionadas en mis partes
Íntimas. Me observó, respiró excitado, e hizo que yo tuviera más deseos de que él me hiciera suya.
Haciendo el amor en su cama y sin cubrirnos, quería que Joey me viera toda desnuda, así embarazada. Él me observaba con ternura y me hacía suya lento, dulcemente y con todo su amor, debido a mi estado.
Llena de deseos, lo sentía detrás de mí y Joey me amaba y me hacía, una vez más, suya. Tendí a dar unos pequeños gritos de placer y él me observó y sonrió. Acarició más excitado mis sensibles pezones y yo más gemí. Me fascinaba que él me los acariciara.
Tanto placer sentí, que más lo amaba. Él siempre observando mi cuerpo, acarició mi cintura; yo lo miré, él me miró apasionado y nos besamos.
Oímos el sonido apasionado de nuestro beso y Joey aun besándome, tocó otra vez uno de mis senos.
Deseé que acariciara otra parte de mi cuerpo y tomé su mano y la coloqué en mi entrepierna. Nos besamos y él me la acarició.
Nos miramos, respiramos excitados y vi que él estaba transpirando...
_ Te amo. – me jadeó y besó mi cabeza.
Se acostó junto a mí y respiró agitado.
Yo también muy cansada, quise acostarme como él, me di vuelta y volvió a dolerme la espalda. Joey me miró preocupado.
_ ¿Qué te pasa? ¿Estás bien, cariño?
_...Me duele un poco la espalda...
_ Trata de recostarte de lado, mi vida.
_... No puedo...
_ Déjame ayudarte. A ver...
Lo miré agobiada y él, tierno y atento, me tomó del brazo y me ayudó a recostarme de lado, para que tanto mi bebe y yo pudiéramos descansar mejor.
_ Oh.
_ ¿Estás bien así?
_... Sí, eso creo. - me sonrió y miró todo mi cuerpo.
Yo le sonreí y él acarició mi hombro.
_ Estuvo tan magnífico, niña mía. – le acaricié su cuello transpirado.
_ Si. A mí también me gustó mucho, pero debo confesarte que sentí un poco de vergüenza. – rio.
_ Nunca te había visto tan plena y erótica, como ahora y la vez anterior, que lo hicimos.
_ ¿En serio? Bueno, yo tampoco entiendo lo que me pasa, pero sentí mucho más deseo y placer estas últimas veces, que lo hemos hecho, y en verdad no sé por qué.
_ Tranquila, no tienes por qué avergonzarte. Me encantó mucho como estuviste. –ahora yo me reí.
_ Estoy tan feliz de que volviéramos hacerlo, mi amor. No sé, de pronto me dieron tantas ganas...
_ Yo también tenía deseos de que estuviéramos así de juntos en esta cama. Me encanta observar tu cuerpo desnudo y tocarlo una y otra vez. Además, me llama más la atención al verte así en tu estado.
_ Joey. - solo exclamé risueña y él me sonrió enamorado.
_ Me encantó mucho haberte vuelto hacer el amor, niña mía.
_ A mí también. Me encanta ver tu cuerpo desnudo ante mí. Te amo demasiado, mi dulce vocalista.
_ Y yo a ti, vida mía.
Me miró con detenimiento y yo me reí con pudor.
Me coloqué mi pijama maternal y seguí acostada a su lado. Aproveché de disfrutar todo ese rico y dulce momento de amor.
_ ¿Has pensado como se va a llamar? - sonreí al pensar en nuestro adorado hijo y Joey miró mi barriga y sonrió con ilusión.
De pronto lo sentí moverse y tomé su mano. Él me miró y yo la coloqué en mi barriga. Nos miramos y él sonrió.
_ Se mueve.
_ Si y mucho. – me miró con destellos.
_ Yo si he pensado en un nombre para él. - me dijo ilusionado.
_ ¿En cuál? – me miró y colocó su cabeza en mi barriga y me hizo cariño. Yo feliz, le acaricié su cabello con todo mi amor.
Sentí otra patadita y me reí de dicha. Miré a Joey perdidamente, quien acariciaba con todo su amor a nuestro bebe.
_ Me gustaría que se llamara James.
_ James, es un bonito nombre...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro