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32 EL DESEO

Ansias. Mi respiración y mi cuerpo sienten esos deseos de él, nuestro camino va hacia su cuarto. Un poco silenciosa la conversación, pero en nuestras cabezas sabemos lo que pasara, este deseo y esta lujuria se apodera de mí. Quiero a Alex ahora mismo, lo deseo con tanta desesperación, nunca me he sentido tan mojada como ahora. ¿Todo lo que sucedió hoy te moja mucho Natalia? Tal vez la adrenalina combinada con los nervios toma mucho de mi ser.

Alex rosa mi piel con la yema de sus dedos, eso pone mi piel de gallina. Llegando a su habitación él toma la puerta y la abre. Paso silenciosamente, pero de reojo miro como sus ganas vienen hacia mí, el sonido de la puerta cerrándose lo escucho detrás de mí. Alzo mi mirada y veo su cuarto. Siempre tan organizado. Sus manos suben por mi espalda llegando a las tiras de mi vestido, sus labios van a mi oído. Mis hombros intentan esquivar el rose de sus labios a mi oído.

- ~Creo que me debes algo. ~ - Alex.

(Mierda. ¡Natalia que grandes ideas tienes!)

El susurra en mi oído despacio, siento como me estoy mojando cada vez más, mi sonrisa va a mi rostro y Alex la nota. Sus manos juegan con el vestido de abajo hacia arriba, pasa por mi muslo jugando con sus dedos. Quiero que me toque y me encienda aún más de lo que estoy. Al parecer quiere provocarme y lo está logrando. Relamo mis labios y voy a su cuello. Mis besos despacio van de su mejilla hasta su clavícula, creo que sería una gran idea si lo provoco ahora. ¿No?

- Pienso que tú también me debes algo. - Natalia.

Su mano pasa por las tiras del vestido jugando con ellas.

- ¿Así? ¿Y que le debería a esta sumisa? - Alex.

- Me debes la cogida que me deje temblando ahora. ~ Amo.~ - Natalia.

- Valla. Y pensar que con tu carita de ángel no matas a una mosca. ~ Diablita.~ - Alex.

Okey podemos decir que yo no soy tan santa como pretendo. Su mano va a mi cabello y una fuerte jalada me hace quejar. Es tan perfecto verlo en esta posición, sus venas se marcan de la fuerza que hace y dios esto es lo más excitante del mundo. Juego con mi lengua relamiendo mis labios, su otra mano baja por mi vestido llegando a mi zona intima, su expresión de su rostro lo dice todo. Una sonrisa pervertida y placentera llega a él. Un gemido suave viene a mis labios.

- Estas muy mojada. ¿Así es como te traigo? Natalia. - Alex.

Sus dedos rosan en mi ropa interior y eso me hace gemir. Deseo sus dedos dentro de mí, él juega con la tela que está cubriendo mi intimidad, como le gusta los juegos previos a Alex. Sus dedos van de arrida a abajo.

- ¿Esto es que lo que deseas? - Alex.

El moviendo de sus dedos viene cada vez con fuerza, quiero sentir sus dedos dentro de mí. Me está volviendo loca Alex.

- Deseas mis dedos dentro de ti y que gimas por mi sin parar. - Alex.

Quita la ropa interior que cubre mi zona húmeda. Sus dedos se deslizan muy fácil por ella de lo mojada que estoy, no puedo parar de gemir y verlo a los ojos, el sigue sosteniendo mi cabello. Susurra en mi oído con cada tocada en mi ser.

- Dime. Natalia nadie te moja tanto como yo. - Alex.

Comienza a hacer círculos en mi intimidad. Eso me pone cada vez más caliente y mojada para él, quiero sentir sus dedos dentro de mí. Esto es una tortura placentera que está haciendo.

- Dilo, deséame con desesperación. Suplica que quieres que mis dedos estén dentro de ti. Para mojarte más por mí. - Alex.

(No puedo contenerme. Alex me está llevando al borde del placer.)

- Alex. Mete tus dedos dentro de mí por favor, no aguanto mas no sentirte dentro de mi ser. - Natalia.

De un solo golpe sus dos dedos están dentro de mí. Un jadeo fuerte se escucha hacia mí y su mirada y la mía se fijan por un momento, mueve despacio sus dedos dentro de mí. Entra, sale, entra, sale es tan excitante sentir sus dedos. Solo son los dos dedos, no me imagino su miembro. El sigue con sus movimientos y cada vez con mas fuerza. Mis gemidos toman parte de esta habitación y mis mordidas van a su cuello, no puedo soportarlo más. Quiero subirme encima de él.

- Así me gusta. Estas toda mojada para mí. - Alex.

- Sabes que me gustaría más. - Natalia.

- ¿Que? - Alex.

- Estar encima tuyo amo. - Natalia.

- Creo que los dos pensamos lo mismo sumisa. - Alex.

Nuestras miradas se observan por unos segundos. Esos deseos y ese placer que los dos tenemos no se pueden aguantar, un beso apasionado llega a la boca de los dos. Alex me ayuda a quitarme mi vestido y yo desapuntando su ropa. Un gemido mío nos separa y él se quita su camisa, sus abdominales y v marcada me hacen desearlo con más desesperación. Juego con mi cabello provocándolo, nuestros besos siguen él juego con mis senos quitando mi sostén y besando despacio mi cuello.

You're on my mind.

Been there all night.

I've been missing seeing my midnight queen.

Come have a drink.

Or maybe three.

And Darling I'll make you my next victim.

Sus besos bajan a mis senos y muerde un poco con su boca mi pezón. Jala despacio con sus dientes, un fuerte gemido viene a mí, su lengua juega con mis senos. Yo rasguño su espalda, el sigue haciendo un recorrido por mi abdomen hasta llega a mi intimidad. Sus ojos vienen a mí, esos dulce ojos color negros están inclinados hacia mí. Lambe sus labios y una lambida rápida va a mi zona mojada haciéndome estremecer.

It's been too long to spend this night alone.

Sus lamidas van por toda mi zona húmeda haciéndome gemir con fuerza y placer. Es tan excitante que él esté utilizando su lengua de una forma tan placentera para mi ser. Chupadas suaves recorriendo mi intimidad, mis manos presionan las sábanas. Alex sabe cómo ponerme tan excitada, chupa con delicadez mi zona haciéndome gemir como una loca. Mis jadeos son la música en esta habitación, quiero más. Quiero sentirlo dentro de mí. Mis manos presionan su cabeza en mi zona intima.

I need to hear the sweet sound of your moans.

Una fuerte chupada va hacia mí y elevo un poco mis caderas, unos grandes jadeos van a mi ser. Mi respiración y mi deseos se extienden con desesperación, el levanta su mirada y me mira con una sonrisa pícara. Sin pensarlo dos veces me lanzo hacia el hundiendo mis gemidos en sus labios. Toco su gran erección. Así que él también me desea con desesperación, mis manos juegan con su pantalón quitándole, mientras nuestros besos encendidos continúan. Su expresión de sorpresa y placer siguen nuestro juego.

Come have a ride, baby don't be so shy.

El me separa un poco de su boca para apreciar lo excitada que estoy. Toma mi mentó y me besa con más fuerza, sus manos bajan por su erección y se quita su bóxer. Los dos caemos a la cama tocándolos con deseo y anhelo. Me levanto un poco y mi cabello rebelde ayuda con verme más sexy ante sus ojos. Juego con mis caderas y eso le encanta a él, con mi lengua bajo por sus abdominales y chupan un poco sus pectorales. Me siento encima de su regazo. Valla su gran amigo me desea.

- Natalia. Por favor. - Alex.

- Te haré venir las veces que a mí se me antoje. - Natalia.

I prefer girls who're not afraid to cry.

Agarro su miembro y juego con las manos. Me monto encima de él, un gran gemido de Alex y mío se escuchan, empiezo a mover mis caderas en circulo y el me agarra de ellas. Es tan placentero verlo encima de mí, como se arquea y gime sin control. Nuestros gemidos se extienden y doy saltos sin parar. Alex se arquea y con sus manos en mi caderas lo hace con más fuerza. Salto sin parar encima de él y Alex gime sin control.

Sigo con más rapidez, siento como voy a alcanza el clímax y el también. Quiero sentir como se viene dentro de mí. Sin control nuestro ritmo sigue, cada gemido, cada placer y la conexión es única en los dos. Con más fuerza sigo moviéndome hasta llegar al clímax ambos.

- Eres jodidamente hermosa Natalia. - Alex.

- Te amo Alex. - Natalia.

- Yo te amo más Natalia. - Alex.

Un gran suspiro viene hacia los dos, caigo al lado de Alex. Mi respiración agitada y mi sudor se nota, él también está igual, sus manos vienen a mi cuerpo desnudo, un gran abrazo viene a mí. Levanto mi mirada y mi rostro queda frente de él. Una sonrisa tonta viene a los dos, es lindo estar así después de nuestra gran cogida. Ahora solo somos él y yo entre las sábanas, desnudos. Sin que nadie nos joda y sin que él tenga ordenes o algo por el estilo.

- Sabes que te ves sexy así. - Alex.

- Eres un tonto jaja. - Natalia.

- Nunca me había sucedido esto. - Alex.

Me acomodo en sus brazos y mi cabello desorganizado por todo mi rostro. Alex con su mano me acomoda mi cabello. Sonrió cálidamente y sonrojada.

- ¿Nunca te sucedió qué? - Natalia.

(¿Qué quieres decir Alex?)

- Es decir esto. Después de tener sexo solo deseaban que se fueran las mujeres. Pero tú no, después que cada vez que terminábamos, deseaba con ansiedad que te quedaras así como estamos. - Alex.

- Yo nunca tuve sexo. Bueno solo contigo y eso es lindo tenerte aquí. - Natalia.

(¡Ahh es que tan lindo! ¡Natalia llamando a tierra!)

- Eres mi hogar Natalia. - Alex.

Sus brazos me envuelven pegándome a su pecho siento su corazón palpitar, beso sus brazos y restriego mi cabello en su mentó.

- Y tú el mío Alex. - Natalia.

Nunca pensé que sucediera algo como esto. Alex paso de ser un tipo arrogante e intimidante a un hombre tierno y amoroso. Nos acomodos y siento como el sueño cae en mis ojos, me acomodo con él en la cama y el acaricia mi cabello. Cuanto me encanta que me acaricien mi pelo. Entre dormida Alex me mima hasta quedarme dormida en su pecho.

**************************

Sentir su respiración en mis hombros es cálido, es lindo ver su rostro durmiendo. Parece una bebe tierna, una niña pequeña en mis brazos, me despierto y trato de no estirarme tanto para no despertarla. Sus ojos cerrados y su carita la hacen ver como un angelito, aunque sea una diablita por completa. Intento sacar mis hombro de la cabeza de ella y lo logro. Me levanto y me estiro, busco mi camisa y me la coloco. Acomodo a Natalia y la dejo con unas cobijas.

(¿La dejaras aquí sola? No iré por comida y volveré. Aunque le dejare una nota por si se despierta.)

Busco las llaves del cuarto y salgo. Hora perfecta para ir por comida para ella y para mí. Pediré para ambos, caminando por los pasillos recuerdo lo que acabo de pasar hace unas horas. Mierda. Natalia es tan jodidamente excitante y hermosa que no lo puedo describir. Es como sentirme en un lugar aliviado y tranquilo, en mi camino veo a alguien acercándose y es Raquel.

(¿Ahora que quiere? No seas mala gente Alex.)

- Pero si ahí estas, mi amor. - Raquel.

- No me llames así. ¿Qué quieres? - Alex.

- Vamos a comer los dos, no te veía e iba a tu. - Raquel.

- Lo siento, comeré solo. - Alex.

Me corro a un lado y ella empieza a pelearme. Cuando ya retomo mi camino veo sus brazos con marcas. ¿Acaso le sucedió algo a ella? Observo con más fijación y parece unas marcas de azotes. Tomo su brazo con cuidado.

- ¿Que te paso en los brazos? - Alex.

- Ahh. Nada. Auch. - Raquel.

(¿Ahora que te paso Raquel?)

- ¿Que te sucedió Raquel? - Alex.

- Ya te dije que nada Alex. - Raquel.

- ¿Acaso por fin te preocupas por tu novia? - Raquel.

- No. Solo se me hizo raro que tengas marcas de azotes. - Alex.

- Ese no es el punto. - Raquel.

- ¿Ya cojiste con alguien más? Por fin supis. - Alex.

- Cállate idiota. No cogería con nadie más que no seas tu. Porque te amo. - Raquel.

- Raquel entiende que no somos nada tú y yo. - Alex.

- ¿Ja seguro? Quieres que le diga a Fabio, no creo que le guste mucho tu respuesta. - Raquel.

- ¿Que le vas a decir? ¿Ah? ¿Dime esos azotes te lo hizo el para un favor como siempre necesitas? - Alex.

- ¿Que dices imbécil? - Raquel.

- ¿Crees que no me he dado cuenta de los favores que tienen entre los dos para algo Raquel? - Alex.

- Claro que nunca tenemos fa. Favores entre él y yo. - Raquel.

- ¿Y me crees idiota? Dime ¿Cuantas veces has tenido sexo con él? Para unos putos favores. - Alex.

- Mira Alex cállate. Nunca a pasado eso entre Fabio y yo. ¿O quieres que Fabio sepa lo de Natalia? - Raquel.

(¿¡Ella sabe algo de Natalia y yo!?)

- ¿Y qué vas a decir? ¿Qué es mi sumisa? Sabes perfectamente que ella es mi sumisa y eso Fabio lo sabe. He incluso es la que más utilizo. - Alex.

- Pero no creo que quieras terminar en la cárcel por hacer eso Alex. - Raquel.

- ¿De qué mierdas hablas? - Alex.

- Mira Alex. Tú y yo somos novios así te guste o no, sabes perfectamente que estas aquí por qué. ¡TU! - Raquel.

- ¡NI TE ATREVAS RAQUEL! - Alex.

- Ten cuidado con las cosas que hagas Alex. - Raquel.

- ¿Que harás? ¿Andas celosa porque Natalia es primero que tú? - Alex.

- ¡Eres un hijo de puta! - Raquel.

- ¿Ah? ¿Dime que harás? No puedes hacer nada, por que por más favores que hagas. No te hará caso Fabio. - Alex.

- ¿Y tú qué vas a saber de eso? Mira yo estoy aquí ahora contigo porque Fabio me ayudo desde un principio y pase por muchas cosas para estar aquí a tu lado como tu novia. No dejare que una mocosa como ella se interponga en mi camino. - Raquel.

- No lograras nada Raquel. - Alex.

- Alex solo te diré una cosa. Ten cuidado con las acciones que hagas, te pueden constar en un futuro. - Raquel.

Sus palabras abren mis ojos como platos y mi rostro levanta un poco mi ceño. Trago grueso y me acerco a ella.

- Ni te atrevas a tocarla a ella Raquel. No dejare que le sucede nada, ni lo pienses. - Alex.

- Jajaja no me hagas reír Alex. En un futuro podría acabar como Amarilis. - Raquel.

Mis manos toman forma de puño de un solo golpe la acorralo y golpeo al lado de ella la pared con fuerza.

- ¡TU NO TIENES NINGÚN DERECHO DE HABLAR DE ELLA! - Alex.

Su rostro toma un poco de miedo por mi acción. Solo sale de mis brazos y sigue su camino.

- Solo te digo ten cuidado Alex. Siempre serás mío. - Raquel.

Se aleja de mi caminando. También sigo mi camino, estoy pensativo con las palabras de Raquel. "Ten cuidado con las acciones que hagas, te pueden constar en un futuro." ¿Porque lo dice? Algo sucede entre esos dos. Fabio y Raquel siempre son unidos, me di cuenta desde el primer día que conocí a Raquel. Sé que esos dos siempre son con favores para ambos.

~ - ¡No Amarilis! ¡No! ¡Por favor! ¡No por favor! ¡AMARILIS! -~

Un recuerdo del pasado llega hacia mí.

(Deja de pensar eso.)

No pasara lo que sucedió. No quiero vivir de nuevo eso con ella. No dejare que nadie le haga daño, no permitiré que pase lo mismo que en mi pasado. No va a suceder eso.

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