Miranda observó otra nota caer de su cuaderno:
"Que linda estabas ayer Miranda, lastima que tiraste mi nota sin saber quien era. No soy Ian. No me confundas con el. Te amo, soy aquel que no notas pero que con solo verte es feliz. Soy aquel que con escuchar tu voz o verte reír sonríe. Soy aquel que con saber que estas bien, ese día, es un muy buen día para el. Soy aquel que no importa lo que pase, si me dejas, siempre estaré para ti y si nosotros habláramos esto es lo que yo te diría si me preguntaras 'y si...?':
-¿Y si soy fea?-
~Eres hermosa como yo te veo.~
-¿Y si estoy triste?-
~Seré un payaso.~
-¿Y si envejezco?-
~Envejeceré contigo.~
-¿Y si no quiero hablar?-
~No te molestaré.~
-¿Y si ya no te amo?-
~Voy a conquistarte todos los días.~

Se que del dicho al hecho hay mucho trecho, pero, soy demasiado cobarde para demostrame hasta ti. No te preocupes princesa, algún día me conocerás, cuando me atreva. Sonríe mucho más princesa, que nos haces feliz a todos con esas perlas que tienes en tu boca.
Con cariño: Tuyo, y solo tuyo, TU amigo invisible."