[Narrada por Jimin]

Tengo el presentimiento de que voy a colapsar un día, espero que no sea justo hoy en medio del jodido tráfico del medio día en el que me encuentro, cuando se que voy vários minutos tarde a la reunión de negocios que mi padre tanto ha esperado.

Joder va a matarme.

Y mientras veo el tiempo pasar por mis ojos, rodeado de autos que parecen no moverse, pienso en mi vida y en lo cansado que estoy de la rutina.

Me gradué de arquitecto hace algunos años, soy el orgullo de mi papá, el cerebro de la constructora, "El gran hijo de Park Jiuh" Y mientras mas lo pienso, más angustia siento en mi pecho.

Es que los años han pasado y aún siento que no he vivido nada.

Ni siquiera por aquel pequeño trabajo secreto, no es suficiente, me siento vacío.

He planificado  los sueños y hogares de otras personas, pero ni siquiera he pensado en mis verdaderos anhelos.

Ni siquiera se lo que quiero para mí vida y estoy tan jodido que sigo creyendo  que el tiempo me dara la respuesta, pero ya tengo veinticinco años.

Estoy en la edad de casarme, de tener siquiera un noviazgo pero nadie es lo suficientemente bueno para mí.

¿En qué jodidos estoy pensando? No soy un puto trofeo.

Aúnque cuando trabajas y ganas tu propio dinero, no es como que quieras a un hombre que no aporte nada a tu vida.

Ni siquiera tengo tiempo para ello, entre los planos, mi vida nocturna y mi padre el único tiempo que tengo es para dormír y continuar al día siguiente.

Si definitivamente estoy jodido.

¡Pero al menos he salido del tráfico!

Me preparo para el regaño de mi padre, que a pesar de los años aún tiene esa voz autoritaria que me deja helado y temblando como un niño de cuatro años que se ha comido la comida del perro.

Y ese no fui yo.

Si lo fuí.

Al estacionar miro a Jisoo con sus papeles en sus manos, saltando nerviosa y con sus ojos tan grandes como se puede permitir abrirlos.

— Oh Dios, oh Dios ¡Por fin llega! El jefe estaba a nada de arrancarme la cabeza y echarla a los gatos que rondan por aquí en las noches.

Rio ante sus ocurrencias, es realmente una chica fantástica. Es una lastimas que mis inclinaciones sexuales se vayan hacia otro lado.

Revuelvo su cabello una vez bajo y camino a su lado al interior de la empresa.

— ¿Llegó?

— Lo esperan desde hace quince minutos.— Trago grueso y asiento tomando camino hacía la sala de reuniones.

— Deséame suerte, si no entonces guárdame un gato para que también se coma mi cabeza.

Escucho su risa antes de respirar y tomar la manilla de la gran puerta de madera.

Puedo escuchar sus risas y espero que no haya sido una espera incómoda, porque mi padre es muy intenso y sus chistes son realmente malos.

Ni siquiera se cómo llegamos a esto, ¿Un hotel con estilo italiano? Jamás he hecho algo así, Pero mi padre confía en mí y ese hombre ha sido específico al pedir mi entera disposición.

Debería rechazar tal trabajo, es demasiado agotador estructurar un proyecto de esa magnitud.

Pero en medio de mi monótona y desgraciada vida...

— È un piacere conoscerti dolcezza, soy Jeon Jungkook.

Lo conocí a el.

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