Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 12

Y los días han seguido su curso, la construcción ha empezado, mi trabajo ha fluido de manera tranquila.

He salido con Kai, mi viejo amigo de la universidad. También he seguido yendo a bailar pero hay algo terriblemente agobiante al terminar el día.

No saber nada de el.

Me jode tanto la cabeza que incluso estando en otro país no salga de mi jodida consciencia, ¿Qué tanto puede hacer alguien en tan poco tiempo? Es como si una corriente eléctrica albergara ni cuerpo y me dejara preso de esa atracción.

Me veo en el espejo, no hay nada emocionante, ni siquiera la noche de discoteca lo es y me cabrea aún más estar en este estado tan deplorable.

Necesito sacarlo, muy muy fuera de mi.

Está será mi noche, después de casi dos semanas de arduo trabajo.

Me pongo perfume, un lindo collar y estoy listo para mí noche, quiero beber tantas botellas de whisky hasta que mi cabeza reviente, quiero bailar y que mi estrés salga por mis poros sin regresar nunca más.

Escucho la bocina del auto de Kai, suspiro tomó mis cosas y salgo del lugar.

Olvide la última vez que he salido a divertirme con un hombre, o mejor dicho, la última vez que le pertenecí a uno.

Estoy tan ocupado con mi vida laboral que a penas puedo pensar en relaciones amorosas, pero aún soy joven y puedo tener una vida tranquila. Definitivamente me daré unas vacaciones después de ese hotel.

Salgo de casa, el auto de Kai me espera. No es un auto último modelo, tampoco es un caliente italiano elegante y sexy el que me espera.

Joder Jimin ya basta.

Sacudo mi cabeza y camino hacia el, abre la puerta del auto e ingreso al asiento del copiloto, me pongo el cinturón mientras el rodea el vehículo y sube también.

- ¿Listo?

- Listo.

Mi corazón está  angustiado, es como si pudiera presentir cosas que yo no, decido borrar esos presentimientos y miró por la ventana. El auto no está lleno de un olor varonil, caro, embriagante y nuevamente las comparaciones me vuelan la cabeza, debo estar enloqueciendo.

Los minutos siguen avanzando frente a mi con una velocidad increíble, siento que me pierdo y cuando caigo en la realidad estoy dentro de la discoteca, la música retumba y las personas beben y bailan con entusiasmo a mi alrededor.

- Si no te conociera desde antes, diría que tienes la mete jodida.- Miro a mi lado, Kai sostiene aún vaso de whisky y el mío está intacto en la mesa frente a nosotros.

Tomo el vaso y bebo el licor caliente sin dudar, necesito vaciar mi mente y comenzar desde cero. ¿Tanto jode ser rechazado? ¡El no es nadie! Debería desaparecer por completo, pero no lo hace y eso me cabrea aún más.

— ¡Otra ronda! - Mi ánimo repentino anima a Kai y verlo levantarse tomándose su trago, pidiendo más con una sonrisa, es todo lo que necesito para que mi noche marche tal cual lo necesito.

Tragos van y vienen, mi cuerpo se enciende, empiezo a bailar en medio de la pista, siento las manos de Kai en mi cintura, me muevo al ritmo de la música frotando mi culo de su entrepierna. Se que no pasara ningún límite porque me considera su amigo o eso me hace creer.

Realmente no me importa porque ya no me estoy moliendo la mente con ninguna mierda.

Mis manos van a la parte inferior de su nuca, su boca queda en la curvatura de mi cuello mientras seguimos restregandonos. Cierro mis ojos dejando caer mi cabeza en su hombro, las luces en el techo son realmente increíbles y molestas para una persona con el grado de alcohol en su cuerpo completamente elevado.

Pero lo peor no es eso, definitivamente no. Lo peor es que al bajar lentamente la mirada lo veo recargado de los barandales de la planta vip que está arriba.

Pestañeo, trato de enfocar mi vista y esos dos pozos oscuros están ahí mirándome intensamente, puedo ver sus nudillos tornarse blancos por la presion y esa mandibula apretada.

¿Es realmente el o estoy demasiado borracho?

No puedo dejar que influya en mi mente incluso cuando estoy lleno de los efectos del alcohol, por amor a Dios parezco obsesionado con Don arrogante italiano.

Me doy la vuelta, frente a Kai este me toma más fuerte y sus manos van a mis nalgas, siento que las aprieta y mis brazos rodean su cuello acercándome a su cara.

— Eres una joya Park Jimin, una preciosa joya.- Estoy perdido, sus ojos negros me persiguen y siento que todo a mi alrededor pesa toneladas.- Quisiera saber cómo se siente estar dentro de ese culito.

Pero mis sentidos vuelven a mi al oír esas palabras, me separó de su cuerpo y miro su cara, está completamente borracho y ha pasado una gruesa línea.

El se ríe y se que no es consciente de las cosas que dice o hace y joder yo tampoco debería serlo, pero se me ha bajado la borrachera varios tonos con aquel hombre, por inercia lo busco en el mismo lugar pero no está. El ambiente empieza a atormentar mi mente, las personas bailando y alcoholizandose, no quiero estar aquí.

Me alejo de Kai, este sonríe y sigue bailando y gritando alto, intenta tomar mis manos una vez más pero me voy hacia atrás, necesito aire, un taxi y volver a casa.

Camino entre tropezones pero consigo salir de la discoteca, mi cabeza da vueltas y de repente siento el vomito subir por mi garganta.

Corro al container de basura más cercano y lo dejo salir, ¡Dios! ¿Cuánto bebi? Estoy completamente jodido.

Siento su mano acariciar mi espalda, se que es el, su olor me inunda, su presencia es fuerte mi cuerpo se eriza y las arcadas abandonan mi cuerpo. Estoy hecho un desastre, borracho, lleno de vómito y herido por su jodido rechazo.

Me doy vuelta dando un paso hacia atrás aunque mi mundo esté dando vueltas justo ahora, está tan imponente como siempre, me dobla la altura y posiblemente la edad, las bolsitas bajo sus ojos no pasan desapercibidas por mi y tampoco la poca barba que empieza a crecer, se ve un poco descuidado pero su mirada se nota afligida mientras detalla mi rostro y estoy peor aún.

— ¿Qué haces aquí?- Intenta acercarse a mi pero sigo retrocediendo.- No te acerques a mi, fui muy claro.

— Deja de decir tonterías, te llevaré al hotel, ven.

— ¡Que no iré contigo a ningún lugar rufián! Eres un hijo de puta italiano de mierda.

— ¡Chiudi la bocca, maleducato! - Abro mi boca pero no puedo responder cuando no tengo ni idea de lo que me ha dicho. ¡Odio cuando me habla en italiano!

Ni siquiera pierde tiempo, se acerca toma mis muñecas y con fuerza me carga sobre sus hombros, no dejo de luchar contra el, golpeó su espalda y doy patadas al aire, pero no se detiene y nadie me ayuda.

Lo único que siento es el duro asiento y como me asegura con con el jodido cinturon que se me dificulta desabrochar cuando todo se mueve a mi alrededor. Cuando soy consciente de lo que sucede lo veo subir y asegurar las puertas.

— ¡Esto es un secuestro!

— Estoy salvandote de una posible desgracia, me lo agradeceras después.

— ¿Agradecerte? No seas hijo de pu...

— ¡Deja de insultar a mi madre, no seas grosero Jimin! - Me callo con los ojos muy abiertos, pues lo siento por la señora.- Solo intenta descansar, voy a cuidar de tí por el resto de la noche.

Debería gritarle, decirle que se vaya a la mierda, pero sus palabras de alguna manera me dan tranquilidad, mientras conduce con su ceño fruncido y sus manos apretadas al rededor del volante.

Me dejó ir en el asiento, envuelto por su aroma, por su presencia, por el.

De alguna manera siento paz y duermo en cuestión de nada.




Lamento cualquier error.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro