Narra Rubius

-Si tu me quieres dame una sonrisa si no me quieres no me hagas caso pero si...- Fargan llevaba cantando esa canción casi 2 horas, sin exagerar

-¡Por dios Fargan! ¡No es tan difícil mantener la boca cerrada!- Willy ya le había pedido que parará pero el mayor lo había ignorado

-Eres un aguafiestas- El mayor de todos bajo la cabeza y se quedó callado

Avanzamos unos metros más pero finalmente nos detuvimos porque ya había anochecido, montamos una fogata y pusimos las tiendas, Fargan seguía callado y no miraba a nadie. Vi como abría la boca y la volvía a cerrar al instante, dio un suspiro y se alejo, sentándose algo lejos en un tronco.

-Iré a hablar con él- Dije suave y me levante del tronco donde estaba sentado con Vegetta

-Ya se le pasará Rubius, tranquilo- Willy parecía despreocupado, pero es que me ponía de nervios no escuchar a Fargan

Me acerque al búho y toqué su hombro con suavidad, no quería asustarlo.

-¿Estás bien?- Hable bajo y me senté a su lado

-Yo... Si, lo estoy, tranquilo- Me miró y me dio una sonrisa desganada

-No mientas hombre, se cuando alguien me miente- Pique su mejilla con mi dedo

-Joder... Es solo que pensé que yo hacía más ameno el viaje, pero al parecer es todo lo contrario- Suspiro y sonrió triste -Creo que será mejor que vuelva a casa- Se quedó mirando un punto fijo en el suelo

-¿Planeas abandonarme con el loco de la simetría y el oso fiestero? Que poco me amas- Willy se puso frente a nosotros y se cruzo de brazos

Sentí unos musculosos brazos rodear mi cintura y jalarme hacia él, Vegetta me alejo del albino y el pelinegro. Me volvió a sentar en el tronco donde antes estabamos y dejo un beso en mi cabeza.

-Dejemos que arreglen sus problemas- Susurro y me dio un palo con un pescado ya cocinado

-Dioses, tu los hiciste, ¿Verdad?- Olí el pescado, hasta esto olía bien

-¿Porque lo dices?- Preguntó sonriendo y él también tomo uno

-El olor, huele delicioso y tu cocinas delicioso- Dije sonriendo y comencé a comer tranquilo

-Pues si, Willy los ha pescado y yo los he cocinado- Tambien comenzó a comer

Mientras masticaba mire la luna, algo dentro de mi se movió, sentí mis colmillos picar y una sed increíble.

-V~Vegetta...- El chico me miró y abrí mi boca para que viera mis colmillos

-Oh... Intenta pensar en otra cosa, no te dejes llevar- Se acerco a mi y acaricio mis mejillas -No dejes que ese deseo te domine- Susurro aún cerca de mis labios

Cerré mis ojos y termine besándolo, sus labios me distraían de esos extraños pensamientos de sed, luego de unos segundos nos separamos, mis colmillos estaban normales otra vez.

-Esta solución me gusta, me gusta mucho- Susurró el y acarició mi mejilla

-L~lo siento... Es que estabas tan cerca de mi que me puse nervioso- Baje la mirada nervioso y mordí suavemente mi labio

-No tengo ningún problema con que hagas eso, tranquilo- Tomó mis manos y levante mi mirada para verlo

Yo sonreí y deje otro pequeño beso en sus labios, el término dando una risita y me abrazó. Luego de unos minutos se separó de mi al escuchar un ruido en los arbustos, de donde salieron Willy y Fargan tomados de la mano.

-Será mejor que terminemos de comer y vayamos a dormir, mañana tenemos que seguir viajando- Willy se sentó en el tronco que estaba del otro lado de la fogata, frente a nosotros

-Si... Además, creo que será más pesado si no seguimos pronto... La luna de sangre saldrá cualquiera de estas noches- Vegetta miró al cielo, la luna estaba casi por llegar al centro

Continuamos comiendo entre pequeños chistes y risas bobas, los pescados habían estado deliciosos y yo estaba satisfecho.

-Hasta mañana chicos- Fargan entró a su tienda, Willy ya estaba dormido

-Hasta mañana- Respondimos Vegetta y yo al unísono y terminamos entrando a nuestra tienda

Él me abrazó, acariciando mi cabello y beso mi frente.

-Descansa cariño- Cerró sus ojos

Puse mi cabeza en su pecho y cerré mis ojos, a pesar de haber dormido antes me sentía algo cansado, así que casi al instante caí dormido.