Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

|~°Mi Amado Vampiro°~|

Narra Vegetta

-Cuando desperté, estaba aquí en casa... No se como, no entiendo como llegué aquí, pero Ricardo estaba conmigo- Miró al cachorro que dormía plácidamente con los otros 3 lobos

-Chiqui... Entonces, ¿Eres un vampiro?- Me separe de él

Me miró, sus ojos desprendían miedo, abrazo sus rodillas y escondió su rostro. Su espalda comenzó a subir y bajar, estaba llorando.

-Soy un monstruo... Soy un jodido monstruo- Su voz salió completamente rota -Por favor... Vete, no quiero que me veas así- Se levanto rápidamente y corrió hacia su habitación

Me apresure a tomar su muñeca y jalarlo hacia mi, lo pegué a mi pecho y abrace su cintura.

-Te jure que no te iba a dejar- Susurre en su oido -No eres un monstruo, osito... Fue un accidente- Sentí sus lágrimas sobre mi pecho

-No puedo ir al banquete hoy, todos van a correr de mi- Dijo y se aferro a los bordes de mis pantalones

-Vamos nene, no te pongas así- Recosté mi barbilla en su cabeza -Hagamos esto, vayamos a disfrutar de la cena y te prometo que estaré a tu lado toda la noche- Deje besitos en su cabeza

-¿Estás seguro? No quiero arruinarte la noche- Se separó un poco de mi para mirarme

Solté suavemente su cintura y con mis pulgares limpie sus lágrimas, tomé sus mejillas y deje un beso en su frente. Él sonrió y se puso de puntas para alcanzar mis labios y dejar un beso en ellos, cerré mis ojos y le seguí el beso con lentitud, quería transmitirle mis sentimientos.

Al separarnos sonreí y deje un corto beso en sus labios otra vez.

-Ponte más lindo bebé, vendré por ti antes de que caiga el sol- Él asintió

Nos separamos ambos y camine a la puerta, Rubius venía detrás de mi, me abrió la puerta y salí, sentí su mano tomando mi guante.

-¿U~un último be~beso?- Su carita sonrojada me mataba de ternura

-Todos los que tu quieras, nene- Sonreí y me acerque para volver a besar sus labios

Abrazó mi cuello con delicadeza, este beso duró más que los anteriores. Cuando nos separamos, ambos sonreímos y esta vez si me aleje de su casa, tenía que correr a darme una ducha y arreglarme para el evento

[...]

Estaba en mi amada muralla, había tomado un baño, me había puesto un pantalón ajustado blanco, una camisa morada y un chaleco blanco, obviamente con mis botas. Arregle mi cabello y suspiré, debía irme ya o llegaría tarde con Rubius.

Cambie la silla de Vicente por una impecable y lo monte, de inmediato salimos de casa rumbo a la de Rubius, desde la muralla se veían las luces del pueblo y se escuchaba algo de música.
Llegue a la casa del osito en unos minutos y baje de mi caballo, camine hacia la puerta y toque suavemente.

-¡Ya voy!- Se escucho el gritillo del chico en la casa

-No tardes nene, nos esperan- Dije fuerte para que me escuchara

Los 4 cachorros corrieron a la puerta.

-Hola Ricardo, hola Ricardo Jr., hola J.J., y hola Coringa- Dije mirando a los 4 lobos

-¡Estoy listo! Vamonos- Salió de su casa. Dios de mi vida... Estaba hermoso

Un traje igual al mío, pero negro, con la camisa y corbata verdes. Su gorro no estaba, en lugar de ello tenía su cabello peinado.

-Woow... Te ves... Hermoso- Susurre y tomé sus manos

-Tu también te ves muy guapo- Dijo sonriendo y me besó

Cerré mis ojos y disfrute del beso al máximo.

-Vamonos ya, o se nos hará tarde- Dijo cuando nos separamos

Aún tomando sus manos lo jale conmigo hacia donde estaba Vicente, lo ayude a subir con cuidado y luego subí yo. Andamos hasta el pueblo y al llegar bajamos, él tomó mi brazo y yo sonreí, caminamos juntos hacia nuestros amigos.

-¡Han llegado! ¡Vegetta y Rubius llegaron!- Grito uno de los aldeanos y todos se giraron a vernos

-Buenas noches, ¿Que tal?- Salude yo con una enorme sonrisa

Rubius apreto suavemente mi brazo, a lo que le regale una sonrisa intentando relajarlo.

Chicos! Pensamos que ya no vendrían- Dijo Alex con diversión

-Que mala gente- Dije yo y le di un golpe juguetón

-Rubiuh, que guapo que vienes hoy- Habló Mangel mirando a mi acompañante

-Te me calmas, mi niña, que prometiste estar a ladisimo mío- Habló Lolito

-Por dios, señor Vegetta, que Sexy está usted- Se me acercó Fargan jugando

-Pero mirate, pequeño búho, tú no vienes nada mal- Dije jugando

Era una especie de juego entre él y yo, así era desde que nos empezamos a llevar bien. Rubius sólo les sonrió a todos sin despegar sus labios y saludo con su mano.

-Pero madre mía, me voy de viaje y ustedes ya están juntos, me siento excluido- Habló Willy, mi mejor amigo

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro