El sirviente no podía dormir no dejaba de pensar en su querido amo Jasper cada vez que trataba de conciliar el sueño no podía no se relajaba, daba constantes vueltas en la cama mientras mantenía las cuencas cerradas con fuerza arto de no poder descansar se levantó algo desorientado prendió una vela para poder ver a su alrededor tomo una camisa blanca para colocársela sin abotonar que cubría un poco la parte inferior de su cuerpo se dirigió a la puerta de la habitación y salió con pasos cautelosos alumbrando tenuemente los pasillos tenebrosos del castillo con la diminuta iluminación que desprendía la vela, el solamente quería dar un paseo para despejar su mente, sin ningún rumbo aparente siguió paseándose por los pasillos algo desorientado es decir sabia a la perfección todas las direcciones del castillo pero hasta el más experimentado podría perderse en la espesa oscuridad que portaba todo el lugar, sin darse cuenta llego afuera de una habitación empezó a oír unos ruidos muy extraños se acercó más para poder escuchar mejor.

-P-Pero que... acaso son... ¡Gemidos!-

Cuando Suave aclaro su vista se dio cuenta de algo, él estaba afuera de la habitación de Jasper de inmediato se alteró al escuchar esos sonidos húmedos y eróticos que en cierta parte provocaban una lujuria excesiva en todo el cuerpo del mayor, quiso retirarse pero por alguna razón no lo hiso se detuvo en frente de la única barrera que impedía ver las expresiones tan exquisitas que de seguro su amado vampiro portaba en su rostro en una fracción de segundo mando todo al diablo, necesitaba unirse íntimamente con el vampiro que tanto amaba no le importaba si rompía las reglas hace mucho tiempo quería arrebatarle esa preciosa inocencia que tanto anhelaba con deseo, quería entrar de una vez por todas para hacer sentir a su amo la mejor experiencia posible.

-No debería entrar... ¡ah!... al diablo con las reglas... entrare-

Abrió la puerta con cuidado no quería despertar a Jasper, cuando entro vio como un cuerpo frágil y delicado movía las piernas de manera traviesa estas desmarañaban las suaves sabanas de la cama para él sirviente era algo muy satisfactorio a la vista sin vacilación se acercó quería apreciar todos los detalles posibles del ser que tanto amaba, ahí estaba encima de la cama casi desnudo con esos deliciosos y apetitosos huesos que lo hacían sentir en otro mundo Suave amaba ver ese lindo sonrojo color rosado mientras gemía el nombre de él, después de esto Suave no resistió más y se colocó con delicadeza arriba de Jasper para poder apreciarlo mejor.

Suave empezó a besar a su amado con delicadeza, unos besos que implicaban dulzura pero con el paso del tiempo fue subiendo de tono empezando por meter su lengua en la boca de Jasper al mismo tiempo que abría las piernas huesudas que tanto deseaba tocar, luego fue bajando con delicadas lamidas hasta las costillas ajenas pero había un problema la pijama de Jasper estorbaba así que el sirviente decidió arrancársela. Rasgo la pijama con sus manos luego prosiguió por lamer sus costillas y siguió bajando hasta la pelvis de Jasper, estaba ansioso y emocionado ya que desde que tenía memoria nunca pudo satisfacerse como deseaba lamia con pasión y deseo esa linda cadera los gemidos del vampiro eran cada vez más sonoros, hasta que en el momento justo ese delicado ser despertó de golpe algo confundido por sentir mucho placer.

-Ahhhh ¿q-que? Ahhh...- miro hacia abajo encontrándose con su sirviente haciendo cosas que nunca pensó verlo hacer -S-Suave que estas ahh haciendo-

-Mmmm...- con lentitud se separó lentamente, dejando un hilo de saliva que juntaba brevemente su boca con esa bella intimidad -Sabe muy bien me gusta mi amor-

-Qué... p-pero cuando e-entraste- pregunto realmente nervioso por ver una lujuria intensa en las cuencas del contrario.

-Eso no importa Jasper... voy a hacerte mío y no cambiare de opinión- dijo con una voz muy decidida para así comenzar a deleitarse con ese cuerpo frágil y caliente.

Sin importarle nada de las palabras de su sumiso que querían detener esa acción por lo rápido que lo hacían el sirviente empezó de nuevo con sus caricias y lamidas agarrando al vampiro desde las caderas acercándolas a las suyas, Jasper al sentir la pelvis del sirviente noto que se había excitado notaba un bulto algo grande debajo de la ropa interior del mayor estaba erecto y duro, con algo de nerviosismo empezó a frotar sus caderas contra aquel bulto que se formó debajo de la ropa interior, unos segundos después comenzó a excitarse por los movimientos sutiles que realizaba inconscientemente soltó varios gemidos tenues, el sirviente solo sonrió de forma pervertida ya que sabía que había convencido al menor.

-Estas muy impaciente... con justo te daré más de esto...-

-¿Qué?... a q-que te r-refieres- coloco sus manos sobre el pecho del mayor para así seguir el juego del contrario.

-Ya verás, te are sentir bien- con cuidado y lentitud se despojaba de su ropa interior.

-S-Suave no...- por la vergüenza que sentía tapo sus cuencas por ver al contrario desnudo -Es muy grande no v-va a entrar-

-...- ese comentario lo hizo sonrojar levemente luego de unos segundos se pudo apreciar una pequeña risa- No te preocupes, si lo hará te voy a preparar, solo relájate y abre tus piernas-

-B-Bien pero se g-gentil... por favor...- una mirada realmente tierna se posó en el rostro del contrario como amaba ver a su precioso señor de esa forma tan sumisa.

Jasper hizo lo pedido abrió sus piernas temblorosas ya que no sabía que haría su sirviente la respiración del vampiro era nerviosa colocaba sus manos muy juntas arriba de su pecho, Suave al ver como al vampiro que tanto deseaba en esos momentos temblaba por las acciones que tomaba lo hacía sentir cierto deseo en todo el cuerpo, antes de introducirse en la entrada de Jasper empezó con un calentamiento para asegurarse que no le doliera tanto, con mucho justo comenzó a lamer la entrada del contrario con la lengua lo hacía lento y deseoso algo demasiado tentador para ambos amantes, luego de eso se separó un poco para poder ver la expresión de su amado era único pero aun así quería mas con tentación lamio y metió sus dedos en esa pequeña entrada, tres falanges se movían traviesas en el interior del sumiso esos gemidos que se desencadenaban hacían que el mayor empezara a dar pequeñas embestidas neutrales en el interior de su pareja.

-Ahhh...- se sentía muy extraño pero a la vez se dejaba llevar por lo exquisito que podía llegar a ser- Suave...- susurraba entre gemidos delicados -S-Se siente r-raro... ahhh-

-Mmmm... creo que ya estás listo- saco con lentitud sus dedos luego beso lujurioso a su lindo vampiro –Necesito entrar en ti... mi señor con su permiso...- susurraba seductor cerca del cráneo del menor.

-Hazlo...- el vampiro sabía perfectamente que todo esto iba enserio –Entra en mi lentamente por favor...- con delicadeza tomo el rostro del contrario para darle un beso francés uno en el que sus lenguas jugaban traviesas y húmedas.

Esas palabras lascivas junto con ese beso pecador provocaron que un gran deseo creciera en el interior del sirviente, sin pena acariciaba con mucho celo el pequeño cuerpo que se encontraba debajo del suyo luego de unos minutos los gemidos aumentaban sin detención, ya desesperado por introducirse se colocó de nuevo encima de Jasper para iniciar con un roce que los deleitaba la entrada del vampiro se sentía muy suave y el miembro del contrario estaba demasiado duro debía calmar ese dolor que sentía asi que con cuidado se introdujo lentamente en la entrada estrecha tan deliciosa y ansiosa de poder complacer cada placer carnal, Jasper gimió fuerte ya que era demasiado aunque sabía que aún faltaba mucho comenzó a respirar profundo para calmarse un poco.

-¡A-Ahhh! S-Suave- su cara portaba un sonrojo muy fuerte y también portaba algunas lágrimas de dolor.

-Ngh Jasper... ahhh d-dime cuando me pueda mover ¿o-ok?- besaba la boca del contrario para calmarlo un poco.

-S-Si...- apretaba las sabanas de la cama con mucha fuerza mientras cerraba las cuencas -Está bien....-

Pasaron unos cuantos minutos hasta que el sumiso se sentía listo y empezó a mover sus caderas con delicadeza cosa para frotarse y acostumbrarse al miembro que estaba en su interior que Suave noto de inmediato las acciones del contrario, abrazo de forma dominante al vampiro para empezar a moverse lento necesitaba excitar al pequeño amante que tenía a merced salía y entraba delicadamente de la entrada de su amado inconscientemente algunos gruñidos junto con suspiros se escuchaban por parte del sirviente pero por parte del sumiso eran gemidos ya muy audibles, esto le daba al ambiente sensualidad e intimidad ambos se estaban complacido de una manera demasiado exquisita, sus cuerpos se encontraba cada vez más calientes y ardientes.

-Ahhh Jasper...- embestía sin pudor amaba poder corromper ese pequeño cuerpo -Se siente tan bien estar dentro de ti ahhh-

-Ahhh...- lloraba de placer era demasiado exquisito no podía parar -Ahhh Suave... ahhh mas... q-quiero más...- en esos momentos no era consciente de sus acciones simplemente estaba segado por la lujuria.

-S-si mi señor-

No podía desobedecer a su amo tendría que complacerlo en todos los aspectos posibles las embestidas seguían lentas pero cada vez más profundas, Suave amaba escuchar los sonoros gemidos del vampiro sin previo aviso aumento la velocidad y dureza de los movimientos sensuales con las caderas, el sirviente anhelaba encontrar ese punto tan sensible en el vampiro, ambos pasaron en ese estado durante unos minutos hasta que por fin el mayor llego al punto que tanto deseaba, hacia gemir al pequeño vampiro sin parar alzo una pierna del contrario para llegar más adentro, siguió con estocadas firmes y enérgicas dentro de poco llegaría a ese segundo donde acabaría en el interior del sumiso... después de unos segundos Suave no lo soporto más soltó un líquido tibio y espeso dentro de Jasper, el vampiro respondió con un grito de placer al mismo tiempo que se corrió manchando los cuerpos de ambos estaban cansados y exhaustos pero muy complacidos por tener esa noche inolvidable, el sirviente salió lentamente del interior del sumiso su líquido salió paulatinamente de la entrada del vampiro, acomodo al azabache sobre su pecho acostándose en esa cama desordenada por el juego que realizaron hace unos minutos.

-Eso fue increíble...- acariciaba con dulzura la espalda e Jasper como amaba tenerlo de esa forma

-Te amo... Suave quiero que siempre estés a mi lado...- decía abrazando al mayor tiernamente.

-...- esas palabras enternecieron el corazón del mayordomo – Nuca te dejare solo mi vampirito de azúcar... yo te amo también y siempre te protegeré de todo dulzura- besaba la boca del vampiro mientras lo acariciaba con amor.

-Gracias... por todo...- decía muy somnoliento mientras se acomodaba en el pecho de su sirviente.

Cansados pero aun consientes se decían palabras bonitas mientras acariciaban sus cuerpos desnudos después de tener una actividad muy entretenida pero amorosa estaban abrazados y muy enamorados nunca pensaron que en una noche todo su amor se revelara, se miraban tiernamente y se daban muchos besitos cortos como amaban estar de esa forma tan única Suave sentía que toda esa experiencia era demasiado relajante tener a su lindo vampirito entre brazos dándole calor combinado con amor le daba mucha paz a su alma luego de unos minutos un lindo choque de dientes se hizo presente ese sonido resonó por toda la habitación, luego Jasper quedo profundamente dormido en los brazos de su amante, Suave seguía despierto para poder ver esa carita angelical que tanto lo enamoraba estuvo así por unos minutos, acariciaba el cráneo del azabache con delicadeza hasta que decidió cubrir a ambos con las sabanas para también quedar dormido abrazando tiernamente a su joven amo.