( Capítulo 10)

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Holis gente linda, acabo de meter doble actualización, ni yo me la creo jeje 😁 pero bueno solo espero que lo disfruten ❤️

Les mando un abrazo de oso🐻 a ustedes y la página de Es Sesshome por las portadas que me hace  y por apoyar a mi fic ❤️🙏🙌

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La mandíbula de Yuka caía hasta al suelo atónita ante el relato de la Azabache.
En donde claramente, había obviado que su ex-cuñado era un temido y legendario demonio, pero el resto de lo acontecido, la había impactado de igual manera.

__ Dime algo, Yuka! __ le arrojó, una almohada.

__ Lo hace bien?__ preguntó, pícaramente haciéndole ojitos.

Kagome rodó sus ojos, no podía decir que estaba felíz, no lo estaba, por todo lo que había acontecido después, sin contar la culpa que podía llegar a sentir por el hecho de haberse enredado en las sábanas de Sesshomaru por tres largos días y quizás si el no la hubiese botado, aún seguiría allí, aunque sabía que meramente había sido con "Yako" y no con él con quién había compartido tan delicioso encuentro.

__ No estoy bromeando, Yuka __ se sentó sobre el suelo y se cubrió el rostro con sus manos dejando su taza vacía de lado.

__ Oye.. __ se acercó pasando su brazo por su espalda y la dejó que se recueste sobre su hombro. __ solo bromeo, sé como debes sentirte, te conozco bien. __

Kagome suspiró y cerró sus ojos dejando que una lágrima se escape de ellos, eran muchas emociones juntas y a decir verdad cada vez que recordaba al platinado y lo mal que la había tratado, su corazon dolía y ni siquiera sabía el porque, después de todo, conocía a Sesshomaru y sabía como era, ni los siglos lo habían cambiando, seguía siendo él, camuflado en trajes Armanis.

Solo había sido sexo, uno muy bueno a decir verdad pero no se explicaba porque sentía la necesidad de verlo nuevamente, aunque sea, solo por unos segundos para asegurarse que no había sido todo producto de su imaginación y de la soledad en la cual se sentía algunas veces.

__ Le he faltado el respeto a Inu. __

Kagome no miraba el rostro de su amiga, simplemente permanecía con los ojos cerrados.

__ No, claro que no. Tú nunca has hecho algo así.
Si es verdad que es su hermano pero...
Inuyasha ya no está aquí y tú, has sido una excelente pareja y lo has amado demasiado mientras compartieron su vida juntos. __

La Azabache recordó todos los momentos felices vividos y una pequeña sonrisa se formó en su rostro, añorando aquello..

__ Se que lo extrañas pero él, hubiese querido lo mejor para ti. Debes seguir adelante con todo lo que te propongas. Disfrutar de tu vida, viene incluido en ello.__

Kagome solo asintió, su amiga tenía razón.

__ Hay algo más que te tenga así de angustiada?
Además, de.. ya sabes... de todo lo pecaminoso que hiciste con ese galán..

Él.. te ha vuelto a hablar? __

( eso no va a suceder)

Está vez negó.

__ Bien, al menos .. mira. __ trató de brindarle ánimos y le señaló su cuello. __ En estado de embriagues te has hecho un muy bonito tatuaje. __

Kagome acarició su cuello.

( no es un tatuaje)

__ Tienes razón. __ Sonrió amablemente. __ Es bonito, no?__

Yuka sonrió.

Pese a saber que sus amigas lo eran todo, en esta situación la ojiazul se sentia incomprendida.

__ Te haré más chocolate caliente, si?.__

Solo asintió y la vió alejarse.

__ Yuka... __

__ Mn?__

__ Gracias.. __

__ Por qué?__

__ Por ser mí amiga. __

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__ Y? Qué tal? __

El platinado miró el enorme plano, perfectamente ejecutado de lo que sería uno de sus nuevos hoteles.

Sus dorados se clavaron en los marrones.

__ Están correctos, puedes llamar al contratista para comenzar el día de mañana. __

El hombre se fue con el plano en mano, muy contento, por los resultados dejando a su amigo-jefe más que complacido.

__ Tadashi. __

El nombrado se giró.

__ Puedes decirle a Natsuki que cancele todas las reuniones que tengo en el día de hoy?.__

__ Claro. __

__ Gracias. __

Sesshomaru al oír la puerta cerrar, recostó su cabeza contra su cómodo sillón y sus parpados se cerraron.

Sentía una opresión en su pecho, sabía bien lo que era..

" Angustia"..

__ Hmph. __

Masajeó su cien, sentía un fuerte dolor de cabeza, había sido la peor semana de su vida.

Yako se había encargado de hacerlo padecer hasta el punto de vomitar, de las náuseas, que le producía ver las imágenes reproducidas en su mente
No podía borrarse aquel perfecto rostro cubierto por lágrimas luego de sus crueles palabras. Una semana había transcurrido de ello y no sabía cuánto más tiempo podría estar así.

No lograba dormir, no comía, se sentía vacío y su pecho le dolía incluso aveces cortándole el aire.
Necesitaba descanso pese a ser un demonio y salir un poco del trabajo para ir a su hogar, que llevaba rato no regresaba porque desde el día que no la volvió a ver, regresó cada tarde al pent
-house de uno de sus hoteles en donde cayó ante la tentación de hacerla suya, se había vuelto su refugio porque aunque jamás lo admitiera, la extrañaba y luchar contra el mismo, lo agotaba.

( no puedes dejar a tu lady luego del ritual )

-- Cállate!--

( eres un maldito!)

-- Tanto te cuesta mantener tu boca cerrada?--

( Y a ti tanto te cuesta admitir que la amas, que la extrañas y que estás muy feliz de volverla a ver? Es mía! Porque debo desistir de ella? Liberame! La iré a buscar le diré que la amo y que tu no tienes que ver en esto pero déjame poder verla, porfavor, sede a esta bestia a cualquier demonio para poder enamorarla)

-- Qué has dicho? --

( Que me liberes para poder amarla libremente.. Ya no quiero que seas Mi amo, me odias y odias a mí hembra, no entiendo porque no puedes darme mí libertad? )

Sesshomaru quedó inmóvil..

Yako.. yako.. quería abandonarlo?

-- Eso es imposible --

( Nada es imposible, averigüemos la manera, me das mí libertad y ya nunca sabrás de nosotros. )

Algo en el empresario se removió, nunca había oído algo así. Todas su bestias guardaban sumo respeto ante su amo pero Yako..

Yako quería su libertad?

Él era el demonio más poderoso de todos los tiempos incluso con su apariencia humana era uno de los " hombres" más respetados de todo el mundo y su bestia luego de dormir por 500 años quería botarlo y ya?...

Aunque si lo pensaba bien...

No era mala idea..

-- Bien..--

Luego de haberle servido por tantos siglos fue un golpe duro escuchar la firmeza de la voz de su Amo, pero era lo mejor para ambos.

Él quería ser felíz junto a ella y no le importaba tener que reencarnar en alguien más, sabía que su lady había alcanzado la inmortalidad tras ser mordida por él.
Y su Amo, también podría ser felíz con quién el quisiera después, averiguarían el modo, ya no iba a ser benévolo con Sesshomaru, ya no era un cachorro, luego aprendería a manejar las consecuencias de sus actos pero él, ya no iba a pagar las consecuencias de ellos.

( tomará tiempo averiguar algo de tal magnitud pero tengo esperanza de algún día seré feliz junto con ella. )

Sesshomaru iba a responder a Yako pero unos intensos golpes en su puerta lo sacaron de su conversación.

__ Adelante. __

El joven venía casi trastabillando llegando al escritorio con una revista que colocó sobre el escritorio señalando esta, tembloroso.

__ S.. señor, Nishimura, no.. no se que ha sucedido para que una noticia así sea publicada. __

Sesshomaru tomó esta, viendo varias imágenes de él junto a su tormento.
Algunas muy comprometedoras en donde la cubría con su cuerpo y ella se aferraban a él, por un extraño motivo sonrió de lado, ante el titular.

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  " El Poderoso Empresario Nishimura junto a Su prometida "

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--De dónde sacan esas cosas?--

Se preguntó, dando vuelta la página y grande fue su sorpresa cuando en una primera plana una enorme foto de la Azabache resplandecía.

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" La dama más hermosa "

Se trata de la prometida del reconocido empresario, Nishimura quien no solo es poseedora de los ojos más bellos que se han visto alguna vez, sino que también destaca por su inteligencia, es una prestigiosa profesora de Arte y música en una reconocida escuela de renombre.
Con tan solo 28 años de edad, ya en estos momentos ha sido catalogada como la mujer más hermosa, hasta el momento desconocida para el mundo.

Afortunado el empresario que no solo le va bien en el mundo financiero sino también en el amor ..

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Sus ojos se abrieron desmesuradamente.

-- Pero, cómo se atreven?--

Una ira enorme surgió en él, quería decapitar a quien se haya atrevido a seguirla para tomar una foto de ella y poner tanta información de su persona en una revista de dominio público.
Sobretodo con tal titular de " prometida" eso era sumamente peligroso para la Azabache estar tan expuesta.

Estaría al tanto? Se preguntó, preocupado aunque no sabía el porque pero si le daba una comezón mental.

-- La habrán hostigado mucho?--

__ Y.. ya mismo puedo comunicarme con esa revista y también iniciaré una demanda si así me lo ordena. Y.. __

__ No. Solo que retiren su foto junto a la información de ella, el resto que lo dejen, en caso contrario, si iniciaré acciones legales. __

Su asistente se sorprendió incluso estaba en pánico temiendo por el enfado de su jefe así que solo asintió, retirándose con la revista y con algo atragantando en su garganta.

Su jefe tenía prometida?

__ Detente. __

El joven se giró tembloroso.

__ Quiero la revista. __

Sesshomaru se quedó mirando la foto de la Azabache durante una hora, Yako solo se mantenía en silencio sintiendo las emociones de Su amo, en silencio.

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( un día antes)

__Vamos Kag! __

Decían las jóvenes insistiendo para que salieran a merendar fuera, el clima había mejorado y el sol había salido, la verdad, es que querían conocer aquel bar nuevo que habían abierto en pleno centro, tan popular y concurrido.

__ Bien, ustedes ganan. __ dijo, sin ánimos haciendose un medio chongo despeinado dejando el resto de su cabello suelto sin haberse tomado el trabajo de plancharlo, dejando a este, rebelde como siempre había solido ser, colocándose así, un suéter de mangas caídas y un jean en un tono azul junto a unas botas, casual, pero hermosa.

Sus amigas casi a rastras la sacaron y se dirigieron al lugar.

Luego del corto viaje de 20 minutos, llegaron al ostentoso bar, que de lejos nomás, ya se percibía el delicioso aroma a café.

__ Wooahh__

Exclamaron las cuatros al unísono, admirando la belleza del lugar así que chillando, como las colegialas que alguna vez fueron, se sentaron en una mesa, tomando la carta para ver todo lo que había allí y así hacer su pedido.

La ojiazul optó por elegir un batido de Kiwi junto a un pastel con arándanos, sus amigas hicieron sus respectivos pedidos y todas disfrutaban de un rato ameno charlando y deleitandose ante lo espetacular que sabía todo.

__ Oye.. Kag.. __

__ Mnn?__ preguntó, con el sorbete a punto de metérselo en la boca.

__ Esos hombres __ Señaló el ventanal que daba frente a ella. __ Te están tomando fotos?__

Kagome abrió sus ojos por la sorpresa y sintió los flashes cegarla cuando miró en esa dirección.

__ Pero que Demonios?__ Exclamó, Eri.

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Las mujeres salían empujando a los paparazzis que no paraban ni un minuto, de tomar fotos.

__ Desde cuando está saliendo con el Sr. Nishimura?__

__ Es verdad que están por casarse? Para cuando tienen fecha? Será una boda grande?__

Kagome no hablaba solo cubría su rostro con su mano con temor a ser golpeada nuevamente mientras Ayumi la abrazaba, Eri y Yuka empujaban a los reporteros.
Rápidamente ingresaron a un auto que las condujo nuevamente hacía su hogar.

Todas sorprendidas a excepto por Yuka.

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( Adónde nos dirigimos? Tienes a alguien en mente, quien nos pueda ayudar?)

__ Hmph __

-- Luego veremos ello, Yako --

( Dijiste que me ayudarías)

-- Lo haré, ahora debo encontrar a tu humana --

( Te molesta lo que has visto en aquellos pergaminos?)

-- Se llama revista y no, eso me tiene sin cuidado pero ella puede llegar a estar en riesgo. A caso no te das cuenta que soy un hombre poderoso? La han expuesto, no lo entiendes --

( Quieres decir que mí lady está en peligro?)

-- No lo sé pero existe la posibilidad. Este mundo gira en torno al dinero y la gente por ello puede hacer cosas aberrantes de las cuales, ni te imaginas-

( Grrr )

-- Tranquilo, ya encontré su dirección pronto le advertiré así que, luego veremos lo otro--

( Bien, date prisa)

Sesshomaru aceleró su auto, no sabía con exactitud, que es lo que estaba experimentado, pero él también necesitaba poder verla, no lo iba a decir pero sabía que con lo que habían puesto en aquella revista era lo suficiente para que más de alguna persona quisiera atentar en contra de ella, solo para hacerle daño directo a él.

No era su problema claro que no, pero tampoco quisiera que Yako sufriera de tal modo, o al menos quería auto-convencerse de ese modo.

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( Un día después...)

Kagome se había visto envuelta en un torbellino de preguntas a las cuales, debió responder una por una, a sus amigas, estaban con miles de inquietudes todo por culpa de lo acontecido en el día de ayer.

Y para peor, justo en el día de hoy, mientras se dirigía a su trabajo en una tienda no muy lejos, reconoció un rostro muy familiar en una revista..

Si, el de ella..

Rápidamente la compró y se puso a leer todo lo que había en esa página de chimentos.

--No puede ser cierto!--

-- Su prometida? De dónde sacan eso?--

-- Vaya al menos no me veo tan mal --

Pensó, viendo su imágen pero luego al leer todo lo seguido simplemente bufó por lo bajo, se veía que Sesshomaru se había adaptado más que bien a la modernidad, era alguien muy importante y seguro rumores así, se les inventaban todos los días.

-- De asesino demonio a Poderoso empresario, gran transición..--

Enrrolló la revista y la metió dentro de su bolso.

Dirigiéndose a su trabajo.

( ellos no saben nada)

Y no pudo evitar acariciar su cuello.

( debe de estar furioso)

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Había llegado a una residencia bastante pintoresca.

( este es su hogar)

-- Así parece --

Por qué, no quería apoyar el dedo sobre el timbre? Llevaba bastante fuera.
Estaba claro, y remontaba a lo que le había dicho hace una semana.

--Por qué estoy actuando de una manera tan idiota?

Debería dejar que la secuestren, me pidan dinero, yo no lo de absolutamente nada y la maten. Ni siquiera me ensuciaría las manos en una escoria como ella.--

Observó su reloj marcaban las 7:15 pm, notó en la baja cerca un humano salir y sentarse en su porche, no sabía porque este, le había dirigido una mirada retadora.

-- Quién se cree ese inmundo y feo humano?--

Seguía pensando si tocar o marcharse de allí, hasta que vió ponerse en pie y caminar al hombre hacía la entrada de aparentemente su hogar, iba a seguir mirando su actuar, pero a sus fosas nasales, llegó aquel aroma tan conocido y fascinante.

Su fragancia estaba mezclada con la de él, su corazón latió rápidamente pero lo disimuló como de costumbre.

__ Buenas tardes, Señorita. Higurashi. __ dijo, aquel hombre de castaña cabellera sacándolo de sus pensamientos.

Kagome lo primero que vió fue a su vecino el Sr. Izumi quien se había apresurado a saludarla como todas las tardes cuando solía llegar de su trabajo.

__ Buenas Tardes Sr. Izumi. __ giró, levemente su rostro y vió que solo a pasos suyo se econtraba, Sesshomaru observándola.

-- Qué rayos hace aquí, luego de todo lo que me ha dicho o será que es Yako?--

La Azabache se emocionó ante tal pensamiento no quería admitirlo pero se le aceleraba el corazón oir hablar o saber de Yako.

__ Veo que ha venido a visitarla su prometido, debo decir que es, muy afortunado. __

( grr ese maldito tiene interés en mí hembra.)

El platinado escuchó a Yako y al hombre.

__ Él no..

__ Si, la verdad, es que lo soy. __ respondió, calmadamente, se acercó a ella tomando sus pequeñas manos entre las suyas elevandolas hacía su rostro, depositando un tierno beso en ellas.

Sonrió en su interior al oler la furia en el castaño.

-- Pero, qué?--

No sabía en que momento Sesshomaru la había llevado de la mano alejada de su vecino porque en el instante que la boca del demonio, tocó la piel de sus manos, había perdido la noción del espacio y del tiempo.

__ Q.. que hacés aquí y cómo es eso de tu prometida?__

__ Hmph.. __

La soltó bruscamente y miró hacía al lado en donde ya no había ni mira del hombre, por un extraño motivo, se sintió tranquilo, quizás.. se debía a Yako.

__ Solo digo lo que dicen los medios . __

__ Sabes que eso es una vil mentira y quiero decirte que yo, no he tenido nada que ver con ello. __

__ Lo sé. __

__ Entonces?.__

__ Te acuestas con tu vecino?__

( Grrr!)

Yako ni por un momento desconfiaría de su hembra, entonces, por qué, era que su demonio decía tales cosas? Qué le importaba a él?..

Los ojos de kagome casi se salieron de sus cuencas, su boca quedó en una enorme O.

Primero aparecía como si nada, luego de una semana, después de haberla tratado aberrantemente, incluso humillandola hasta estrujar su corazón y ahora decía que dormía con el Sr. Izumy?.

-- Cómo se atreve?--

Estaba enfurecida pero las palabras no le salían de su boca, así que, simplemente hizo lo que su corazón le dictó y estampó su mano contra el varonil rostro.

( mi lady)

Sesshomaru quedó estupefacto, con su mano en el rostro viendo como sus azules estaban amenazando en cualquier momento con estallar en llanto.

__ Vete, largo de mi hogar!. __

( Te ordeno que me liberes!)

-- Hmph --

El platinado estaba nublado de ira y nada tenía que ver el golpe de la mujer, sino más bien, lo que su cabeza creía, por el solo hecho de oler deseo en aquel hombre.

Pero.. por qué?

Quizás ese instinto de sentirte su dueño estaba arraigado a él, si, seguramente era la marca, después de todo..

Si era suya...

__ No. __

Kagome se acercó aún más a él, abriendo torpemente su bolso, tomando la revista que había guardado y se la colocó en su pecho, se giró para dejarlo solo, pero él la sujetó, por el brazo y la volvió a colocar en frente mientras ella luchaba contra él pero era en vano, porque la sujetó por la cintura con fuerza, sus golpes parecían simples piquetes.

-- Que mujer más caprichosa--

No sabía porque pero se estaba divirtiendo mientras la sostenía, entre sus brazos, pegada a él. Kagome soltaba muchas obscenidades en susurros porque estaba claro, no quería que nadie la escuchara.

( Debes de tranquilizarla maldito!)

__ Quieta. __

__ No! Sueltame o grito.. __

El platinado divertido arqueó una de sus cejas, entendía que se encontrase molesta pero no que se comportara como una niña.

-- Que bien huele --

__ Tú me has dicho que no querías que me acerque más a ti, que te daba asco. Qué haces aquí?. __

La Azabache se sacudía pero parecía no hacerlo porque sesshomaru no tenía intenciones de soltarla, su rostro apacible sin ningún tipo de gesto o articulaciones pero su estado de ánimo había mejorado bastante con el solo hecho de olerla.

(Pov Sesshomaru )

No podía mentirle a Yako, me estaba divirtiendo, con su infantil actuar aunque ella realmente estaba molesta y entendía perfectamente el porque, no podía no sentirme complacido.

Aparentemente había visto la noticia y su rostro plasmado en esta, no era su culpa, claro que no, pero tampoco la mía, sino de los periodistas que buscan historias imaginarias en donde no las hay.

Quizás no debí haber dicho lo que dije hace unos momentos atrás pero mí boca habla por si sola cuando estoy en presencia de ella.
Y el olor a deseo, ira y algo más que olí en aquel detestable humano me inhibió por un momento y me bloqueó mí lado racional haciendo que mi instinto salga a flote diciendo cosas que no debí decir.

Si la he marcado, por ende, soy Su Amo y aunque no quiera nada con ella, es Mía, espero que le haya quedado claro a aquel hombre que tiene por vecino.

No le dejaré las cosas tan fácil y a libre elección, ni siquiera haré lo que Yako me pide.

Qué me largue? Ja.. pero, quién se cree esta bulliciosa mujer?

Incluso puedo oler nuevamente esa esencia sagrada en ella más fuerte que nunca, que solo me hace aborrecerla por lo que  naturalmente es, pero a la misma vez, es mí sangre quien clama de una manera bestial, su aroma junto el mío es algo condenadamente delicioso a lo cual, no puedo resistirme.

A caso, no puede darse cuenta?.

La sujeté con fuerza pegando su pequeño cuerpo contra el mío haciendo que suelte su bolso torpemente y con mí mano jalé levemente de su cabello para que incline su cuello y me de libre acceso a ver mi marca.

__ S..sesshomaru.. __

Vergüenza, inquietud, asombro y algo que quería ocultar pero que me fascinaba " deseo" si " deseo por mí..

Por qué, luchaba entonces?

La mordí con fuerza y gimió contra mí, tratando de contenerse sentí como su cuerpo se relajó y le regalé alguna que otra caricia.

__ Tranquila. __, Susurré.

Lamí su delicioso cuello, levemente, para que menguara el dolor, la necesitaba tranquila para poder hablar calmos, sabía que los machos antiguamente hacían esto cuando sus hembras se enojaban con ellos para así poder dominarlas y creo que funciona muy bien, ventajas de ser un Yokai, pensé.

La solté más tranquilo me dedicó una mirada perdida, luego sacudió su cabeza y me mostró su dedo de en medio.

__ Pudrete! __ ,Exclamó.

Bien, me retracto, quizás solo funciona en demonias y no, en humanas mal educadas.

Vi como se alejaba con su hermoso contoneo y sonreí maliciosamente.

-- Si así lo deseas pues... Serán por las malas--

Me apresuré y la tomé por las piernas echándola hacía mis espaldas como si fuera un costal, su peso me estremecía, asíque debía ser cuidadoso.

Me golpeaba mientras movía sus piernas.

Y si le muerdo una nalga?

No mejor no, estamos en las vías públicas.

No dejaba de gritar, lo cual tampoco me importó, tomé su bolso del suelo y caminé con ella mientras escuchaba sus reclamos.

Pasé por la vereda de la casa del nefasto humano quien parecía haber visto una especie de espectro y le dediqué un saludo con la mano, victorioso llevándome a la mujer que deseaba, a la hembra de mí Bestia..

Yako me debía una..

Aunque la vista no estaba nada mal incluso podría ser un comodo almohadón en mis noches eso era otro tema..

Ahora solo debía velar por su seguridad y quizás por otra que pronto vendría y debía hablar con ella pero en ese estado...

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